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LHDP - ROL Capítulo 16

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Sauker
Sauker
31/01/2010 16:35
Y con este episodio arranca la 4ª temporada de LHDP - ROL.
La tercera temporada ha sido la más exitosa hasta el momento, cosechando gran número de páginas en los cinco capítulos que la componen y siendo el caso Z-105 y las tramas planteadas éxito en la crítica de roleros y el público.
Ahora inicia el C16, el primer capítulo de la nueva tanda de episodios, que será, sin duda alguna, la más impresionante que se vivirá en el ROL. Las tramas principales de este capítulo han permanecido encerradas bajo llave durante un mes, y es el capítulo con los secretos mejor guardados hasta la fecha.
Tienen a su disposición dos páginas extra además de este post principal y el anuncio.

•Resúmenes
•El Despacho de Don Lorenzo

•REGLAS•

- No interrumpir el juego con comentarios que deban ser tratados en el anuncio. De interrumpirlo, habrá de editar inmediatamente.
-Para adquirir un secundario, se ha de elevar una petición a la cúpula directiva. Sin embargo, obtener un secundario es muy complicado, ya que por lo general suelen estar vinculados al caso que se trata salvo alguna excepción.
- No se pueden alterar bruscamente las tramas generales de la historia ni aquellas que incumben a determinados personajes sin la aprobación de su propietario.

- ELENCO -

• (Paco Miranda) >>Mayyy
• (Lola Castro)>>Martinyfelix
• (Mariano Moreno)>>Bryan-Derek
• (Lucas Fernández)>>Lukesita
• (Sara Miranda)>>Beuka
• (Gonzalo Montoya)>>Sara_93
• (Silvia Castro)>>Meli-esdm
• (Aitor Carrasco)>>Rubén16
• (Félix Montejo)>>Avataryl
• (Monsieur De Gaulle)>>Sauker
• (Marina Salgado)>>Meli-esdm
• (Blackman)>>Lyonel_19
• (Doña Concha)>>Lukesita
• (José Luis Povedilla)>>Martinyfelix
• (Rita Peláez)>>Sara_93
• (Kike Gallardo)>>Bryan-Derek
• (Nelson Amadú)>>Scarface
• (Carlota Fernández)>>Xispi_lhdp
• (Don Lorenzo Castro)>>Avataryl

- CON LA COLABORACIÓN ESPECIAL DE -

• (Rasputín Verenguer)>>Sauker
• (Álvaro D´Alvade)>>Avataryl
• (Agostino Baladamenti)>>Martinyfelix
• (Antonio Decoco)>>Rubén16
• (Camilla Margaretti)>>Meli-esdm
• (Sr. Crisantos)>>Bryan-Derek

- INTERVIENEN -

• (Los Guiñoles)>>Sauker
-Sandra/El ente
-Fructuoso "Fiti" Bragueta
• (Bruce Willis)>>Avataryl
• (El Químico)>>Bryan-Derek
• (Claude & Charlotte)>>Sauker
• (Felipa)>>Martinyfelix
• (Patricia)>>Sara_93
• (Arcadio Claus)>>Sauker

1er anuncio, realizado por Sauker:


2º anuncio, realizado por Avataryl.

3er anuncio, realizado por Sauker:


4º anuncio, realizado por Avataryl:




SINOPSIS
Ha transcurrido una semana desde el fatídico desenlace del caso Z-105, y los agentes de San Antonio se preparan con cierta reticencia para una ceremonia que preferirían que no se celebrase. Desearían olvidar lo antes posible todo el daño que los Sombrereros les han causado.

Don Lorenzo Castro, definitivamente recuperado de su enajenación mental, volverá a San Antonio para tomar las riendas de la comisaría.

Paco se ha desprendido de la responsabilidad del comisariato, pero aún tiene muchas cosas en las que pensar. La escena del bosque aún le atormenta, y la experiencia tan cercana a la muerte que ha vivido le obligará a replantearse su vida. Para empezar, intentará recuperar a Lola.

Félix también se reconcome por dentro. Algo que sucedió durante el operativo en los laboratorios le ha perseguido desde entonces y le impide conciliar el sueño. Lola, que ya se ha recuperado de la gripe A, retomará los planes de la boda, que cada vez está más cerca. Y el psicólogo pronto recibirá una visita inesperada...

De Gaulle y Salgado viven con pasión los primeros días de su vida conyugal. Pero la felicidad se esfumará súbitamente cuando vuelvan a San Antonio, donde los padres del francés estarán esperando para incordiar todo lo posible a la pareja.

Silvia permanece conmocionada por lo que le sucedió a Aitor. Sus sentimientos hacia el becario por fin han aflorado, pero parece que es demasiado tarde. Para más inri, Montoya reaparecerá en comisaría tras un tiempo ausente.

Por otra parte, el terror seguirá floreciendo en la casa de Rasputín. El doctor y Fiti tomarán todas las medidas necesarias para evitar ser atacados por Sandra, cuya posesión diabólica parece haber llegado a su cénit, y, por supuesto, intentarán que vuelva en sí. A ratos, Sandra es muy recatada, pero el espíritu que en ella alberga ha resultado ser un temible acosador y, cuando se manifiesta, las inhibiciones de la chica se desvanecen y despierta la lascivia que esconde bajo sus encajes.

El periódico El Observador se hace eco de una impactante noticia. Han amenazado de muerte a Álvaro D'Alvade, el famoso tenor italiano que se halla de gira y próximamente actuará en la ópera de París...

#841
Sauker
Sauker
26/04/2010 17:50
Realmente, el comentario de Félix haciendo mención a Lola y a su atractivo le sedujo y repelió... a la vez.
Le dio un golpe en la espalda, y asintió con decisión.
Ambos entraron en la sala y caminaban a pies juntos, cargados de nerviosismo.


Monsieur De Gaulle

Desde lueggo que sí, estás que te gompes.
Miga como gecoggen tu cuegpo con migagdas lassigvas...
Al iggual que Fegnándes-pronuncia para sí mismo por lo bajo.
Togdos dagían la vigda pog hasegte el segxo...
Migagme y contemplag el hombgre que jagmás conseguiguéis, meglusos del demognio...

Una limpiadora de avanzada edad le miraba con los ojos como platos a unos centímetros de él, ya que había escuchado sus palabras.

Y usteg que miga...-la intimidó rechinando los dientes continuando su andadura junto con su amigo Félix.
#842
Avataryl
Avataryl
26/04/2010 18:07
FÉLIX:

-Ja-ja -Dijo el psicólogo, que no entendía muy bien las sutileza de De Gaulle. Después, se volvió hacia la limpiadora que les contemplaba fijamente- ¡Eso, eso! ¿Qué... mira, eh? -Le reprochó, tras lo cual se acercó a ella y la empujó, obligándola a rodar trepidantemente escaleras abajo- ¡¡¡Ja-ja!!! -Se rio, ahora con mucho más entusiasmo. Acto seguido se sentía muy culpable, por lo que descendió atropelladamente entre las butacas y corrió a socorrer a la señora, ayudándola a levantarse y disculpándose. Después, volvió junto al francés, observando con tristeza y un poco de expectación cómo la señora se alejaba difícilmente- ¿Has... visto cómo... rodaba? -Le preguntó a su amigo, a caballo entre la preocupación y la diversión, que se manifestaba en una media y temblorosa sonrisa en la cara del psicólogo.
#843
Sauker
Sauker
26/04/2010 18:15
Monsieur De Gaulle

Clago que lo he vissto.
Estas fgransegsas tan madugas debegían llevagse de vez en cuangdo un empugjón, van pgrovocangdo a las pegsonas desengtes cogmo nosotgros-se llevó una mano al pecho lleno de orgullo.
Miga mi madgre, que se muegde y se envenegna la higja de la ggran pugta-dio un codazo al psicólogo.

¡¡¡Aaaaaaaaaaaaaahhhhh JAJAJAJAJAJAJAJAJA!!!-reía con la cara totalmente desencajada, echando la cabeza hacia atrás pero entornando los ojos hacia Félix, consciente de que su frase desataría una carcajada del psiquiatra.

Cuando se dio cuenta de que todos le miraban, carraspeó la garganta, y llegaron al final de las escaleras.
#844
Avataryl
Avataryl
26/04/2010 18:27
FÉLIX:

-¡Ja-ja! -Exclamó Félix, a quien le resultaba más graciosa la contagiosa risa de De Gaulle que el comentario del francés- Toma asiento, enseguida... vuelvo. Voy a... esperar a Lola -Confesó el psicólogo, un tanto avergonzado, a su amigo. Félix viró rápidamente, incapaz de mantenerle la mirada a De Gaulle y descubrir cuál sería su reacción, y comenzó a ascender atropelladamente las escaleras. Al llegar a la cumbre, se disponía a abandonar la sala y dirigirse a la cafetería en pos de su pareja, pero al pasar junto a la última hilera de butacas un advirtió un movimiento que reclamó su atención. Agazapado tras el mismo escondite que el día anterior, don Lorenzo acechaba a todos con avidez. Risueño, al menos hasta que recordó su conversación con el comisario la noche anterior, Félix se acercó hacia él- ¡Vaya! ¡Lorenzo!, ¿qué está haciendo ahí? ¿Se ha resbalado en la ducha? -Inquirió, mientras el comisario sacudía todos los músculos de su cuerpo y adoptaba todas las muecas imaginables en su dirección, suplicándole que se callara para no revelar su posición- Ah.
#845
Sauker
Sauker
26/04/2010 20:41
Rasputín, Fiti, Claude y Charlotte observaban desde lo lejos la Iglesia en la que Sandra acababa de entrar.
Los cuatro estaban sin habla, y ninguno había gritado para alertar al sacerdote que había abierto el portón de la posesión de Sandra, si es que no se había dado cuenta ya debido al mal que destilaba el rostro de la jóven.


Rasputín Verenguer

Ha pasado más de media hora...
Creo que deberíamos aligerarnos y correr a por ella, ahora que sabemos donde está...

Los cuatro se movían lentamente, con pasos a pies puntillas, de modo que tardaron unos quince minutos en llegar a la Iglesia.
Al llegar a la puerta, el doctor llamó cargado de temor, y esperó impaciente a que el cura les abriera la puerta.


Tenemos que... pedirle a Sandra que reine la cordura-tragó saliva tiritando.

Fructuoso "Fiti" Bragueta


Y te preguntará que si te la pone dura...
No servirá de nada, Rasputín.
Nada podemos hacer por ella ya-miraba su reloj.
Venga, vamos a casa y recemos por su alma-balbuceó a sabiendas de que ya habría acabado el primer tiempo del partido.

Claude


¡Y un cuegno!-se negó el padre de De Gaulle.
Tenegmos que salvagla...
¿A quién me fogll...?
Quiego desig...-miró de reojo a Charlotte.
Es la aleggría de la cagsa...

Rasputín Verenguer

Sandrita...
Yo te protegeré...

Dicho esto, abrió la puerta.
Una bandada de cuervos sobrevolaron al grupo.
Uno de ellos defecó en el acto y los restos fueron a parar sobre la cabeza de Rasputín, quien tras resoplar un par de veces, asqueado, se limpió con sus propias manos el rostro.


¡Uy, qué horror!
¡Coño, qué asco!-gritó sin parar de toser, sin que Fiti y los De Gaulle dijeran palabra.
Un momento...
Quietos...
QUIETOS TODOS-alzó los brazos.
¿Qué es diferente aquí?

Todos los crucifijos de las paredes estaban boca abajo.

Ah, sí.
Han colocado un ventilador sobre el altar-señaló la pared del fondo con una sonrisa.
Pues a lo tonto aquí se echa fresquita la tarde, ¿verdad?-sonrió a Fiti, quien asintió introdujendo las manos en sus bolsillos.

Fiti y los De Gaulle se percataron de un líquido rojizo que rodeaba al altar.

Charlotte


Doctog, migge eso...-señaló las manchas agarrando de la cintura a Fiti, esperando que pudiera protegerle.

Rasputín Verenguer


¡Zumo de remolacha!
Manda huevos con la Iglesia, después dicen que si los negros del tercer mundo pasan hambre.
Vaya derroche...

Charlotte

¡No, es usteg un imbésil!
¡Asómegse!-se tapaba la boca contemplando lo que había tras el altar.

Rasputín se puso las gafas de cerca y subió encogido las escaleras al altar.
Tras acercarse a Charlotte y sujetar sus lentes mientras miró durante varios segundos sus pechos, bajó la mirada.


SPOILER (puntero encima para mostrar)

El sacerdote de la parroquia yacía tumbado boca arriba, con los ojos blancos y los brazos extendidos.
Cuando descendió la mirada, descubrió que le faltaba las dos piernas y parte de la cintura.
Fiti vomitó sobre el cadáver, al igual que el propio Rasputín, seguido de Claude y Charlotte.
Tras varios minutos, asumieron que Sandra, había cometido un crimen atroz y que nada volvería a ser como antes.



Rasputín Verenguer

No es posible...
Sandra...
Hija mía-comenzó a llorar desconsolado, observando el cuerpo del cura, dándose cuenta de que incluso Sandra le había dejado en mejor estado que ellos.

Fiti seguía consultando el reloj, y Claude, excitado ante el riesgo que él mismo había corrido manteniendo con ella relaciones sexuales, desvió la mirada hacia Charlotte.
La madre de De Gaulle, asqueada, examinaba el suelo minuciosamente.

Charlotte


Migag esto...
Hay un mengsaje...
Escgrigto con sanggre...-se echó hacia atrás mirando a todas partes, muerta de miedo.

Rasputín sacó una lupa de su bata de médico, que cubría el habitual vestido rojo de su difunta.
Guiñó un ojo, y contempló el mensaje él mismo.
No conseguía ver nada.
Tras indicarle Fiti que debía mirar por el ojo abierto, comprendió a que se enfrentaban.

Rasputín Verenguer


Es un código...
#846
SaRa_93
SaRa_93
26/04/2010 21:42
Gonzalo Montoya:

Éstos últimos dias habian sido bastante para no decir muy movidos, no había parado quieto, y como es de esperar esa mañana no le había sonado el despertador y se había quedado dormido, calculando más o menos unas 16 horas durmiendo. Estaba teniendo un sueño maravilloso, estaba en una calle de estilo Londinense besándose con Patricia, y esque mientras estaba de operativo, no paraba de pensar en ella, y en vez de verla como una hermana ya veía como algo más, ¿Ella pensaría lo mismo? De golpe oye como llaman al teléfono de su habitación, medio dormido consigue cojerlo

-¿Sí? ¿Quien llama?

Patricia:
-Quien va a ser Maria Teresa de Calcuta no te jode, soy yo Patri, Buenos dias bella durmiente. He llamado varias veces a tu puerta y como no contestabas he supuesto que estarías durmiendo, porqué he visto por ahí a tus compañeros y a ti no te he visto. ¿Puedo venir a tu habitación? Es que quiero darte una cosa...

Gonzalo Montoya:
Su corazón le dió un pequeño vuelco al escuchar su voz, enseguida abrió bien los ojos y respondió contento

-¡Buenos dias guapa! ¿Como? ¿Qué hora es? Mira la hora y se queda parado Joder... Se rasca los ojos y mira su habitación, estaba echa un desastre Vale, pero ven dentro de 5 minutos que me tengo que arreglar.

Patricia
-Vale Victoria Beckham, 5 minutos y vengo. Cuelga el telefono

Gonzalo Montoya:
Cuelga el teléfono y se queda un poco embobado, pasados unos segundos reacciona y empieza a recojer un poco su habitación, a los 3 minutos llaman a la puerta, abre y entra Patricia, le da un beso en la mejilla y se sientan en su cama, él se la queda mirando y ve como ella no para de reir

-¿Qué tengo?

Patricia:
Se levanta de la cama y va al baño, allí coje un peine y hace que Gonzalo se levante y se acerca a él para peinarle, que mono está así, venga Patricia, atrévete, Diselo

-Pues que pareces songoku, todos los pelos de punta.

Gonzalo Montoya:
Se queda mirando como Patricia le peinaba, se la veía contenta, y para arreglarle el pelo, se pegaba a él restregando su cuerpo contra el suyo, y notó una sensación extraña, alguna parte de su cuerpo se levantaba, y lo estaba haciendo en un mal momento, intentó que bajase disimuladamente imaginándose cosas asquerosas, peró no fué lo bastante rápido, Patricia se había dado cuenta, lo notó porqué miraba hacia abajo y estaba un poco nerviosa


Patricia:
Paró de peinarle y dejó el peine en el baño y se fué hacia la puerta, era incapaz de decirselo, aún que tenía un tanto por ciento de posibilidades de que el le correspondiese, vease el caso, pero eso le había sacado de sus casillas porqué no se lo esperaba

-C.. c... creo que me voy a ir, n..nos.. nos vemos, adiós. Se fué

Gonzalo Montoya:
Se queda mirando hacia abajo

-¿Y porqué coño me haces esto ahora eh?
#847
Avataryl
Avataryl
26/04/2010 21:59

Los ensayos comenzaron una vez más. Bajo la dirección ilícita de Álvaro D'Alvade, Aitor, Mariano, Camilla Maragaretti, Paco y el propio tenor italiano procedieron a repetir las cuatro escenas del primer acto que ya se habían preparado el día anterior.
De nuevo, la ejecución de dichas escenas, siempre que estaban implicados en ellas alguno de los agentes de San Antonio, se caracterizó por toda suerte de incidentes y actuaciones bochornosas, aunque en conjunto fue más correcta que la de la víspera.
Cuando alguno de los policías compartía escena con Álvaro D'Alvade, el escenario destilaba tensión...

#848
BryanDeReK
BryanDeReK
27/04/2010 13:09

TIN TON TIN ... TIN TON TIN... El avión con destino a Barajas a llegado a su destino, por favor, desabrochense el cinturon, recojan sus pertenencias, mantenga lo más limpio posible el asiento y diriganse a la puerta, gracias, esperamos que hayan tenido un buen viaje con nosotros y haya sido de su agrado, para cualquier reclamación, por favor, diriganse a directorio técnico, o si lo desean pueden hacerlo a través de internet, en www.iberia.com, o bien llamando al 4 815 162 342, gracias... TIN TON TIN ... TIN TON TIN



Bajando las escaleras enfrente del aeropuerto, una hilera de taxis hacian su presencia, tomo uno, puso sus maletas en el maletero, y de dispuso a decirle su destino...

Kike:

-A la comisaría de San antonio por favor

Finalmente, llegó y se apeó, le pago al taxista y se fue directo a el garage por el sotano sin pasar siquiera dentro de la comisaría, abajo estaba su coche, salió sin llamar la atención, por suerte paso desapercibido y nadie pudo verle, su destino... el lo tenía claro... su única meta en ese tiempo era encontrarle a el, ha aquella persona por la que perdio la cabeza tanto en la ida como en la vuelta en el avión, todo estaba claro para el agente en funciones...tenía que encontrarlo fuera como fuera, no importaba el como...ni cuando... ni el por que de la situación que le sumergía, nisiquiera le importaba ahora Aitor... ni ninguno de sus compañeros, su meta era clara y concisa...

Daba vueltas sin saber muy bien por donde... no quería reconocerlo pero...¡necesitaba ayuda!...entonces... a lo lejos... pudo ver lo que puede ser su remedio...o quizás...la única persona en este mundo que quizás le quedara... que podría ayudarle... a pesar de que Kike no era una persona muy religiosa, en ese momento estaba dispuesto a lo que sea, así que aparcó en la acera de enfrente, y allí fue directo, a la iglesia de San Bernardo Petinero, enfrente de la puerta tenía a un hombre mendigando, pidiendo una lismona, le dejo 1€ y se quedó mirando la puerta de la iglesia... aun si entrar
#849
Avataryl
Avataryl
27/04/2010 15:14
DON LORENZO:

-¡Agáchese, ganso! -Masculló el comisario, aferrando a Félix y tirando de él hacia abajo, obligándole a sentarse junto a él tras la última fila de butacas- ¡Está entorpeciendo la labor policial! ¡Casi hace que me descubran! -Siseaba don Lorenzo, furibundo. Después, se puso de cuclillas y asomó la vista sobre las butacas. Venturosamente, nadie le había detectado; y en el escenario, Angelotti (Aitor) ya estaba cobijándose en la iglesia.


FÉLIX:

-¡Suélteme, mentecato! -Se quejó el psicólogo, zafándose y retorciéndose en el suelo, a pesar de que el comisario ya había retirado su zarpa segundos atrás. Sin embargo, Félix prefirió pensar que había conseguido liberarse por méritos propios, aunque esa sensación de victoria se desvaneció al percibir un cosquilleo en la nariz, producido por los pelos del bigote. Carraspeando, el psicólogo cambió de posición, pues se encontraba incómodo, e imitó la postura de don Lorenzo- Qué buenas vistas -Observó, y no añadió nada más.
Permaneció así, expectante, aguardando pacientemente a que el comisario comenzara a hablar.
#850
Avataryl
Avataryl
27/04/2010 16:30
DON LORENZO:

Un denso silencio se había interpuesto entre don Lorenzo y Félix, pero al psicólogo, que atendía desinteresadamente el desarrollo de los ensayos, bostezando de vez en cuando y profiriendo una risita otras veces, no parecía incomodarle; al comisario, por su parte, la situación le violentaba en exceso, y habría agradecido que Félix estuviese parloteando o incordiándole de alguna manera. Sin embargo, el susodicho no estaba dispuesto a articular palabra si el comisario no lo hacía primero.
Y cuando dio comienzo la segunda escena del primer acto, en la que Álvaro D'Alvade intervenía por primera vez, don Lorenzo agachó la mirada, bufó y cedió.


-Montejo... -Murmuró con voz ronca, prolongando la vocal final- He estado pensando en... ya sabe, lo que hablamos ayer. En lo que me dijo. Que... usted y yo éramos iguales. ¿Y... sabe qué? Que me he dado cuenta de que tiene razón. Y lo peor es que... creo que ya lo sabía antes de que me lo dijera. Tal vez por eso le detesto, Félix..., porque me recuerda a lo que me he convertido, y odio en lo que me he convertido. Usted tenía razón, y mi comportamiento estuvo totalmente fuera de lugar. Quiero... -Empezó, pero se interrumpió de pronto, llevándose un puño a la boca para comenzar a toser y carraspear; cuando se dio cuenta de que con este método no podría posponer eternamente el resto de la frase, se aclaró la garganta una última vez y continuó- disculparme.


FÉLIX:

El psicólogo agradeció que don Lorenzo comenzara a hablar finalmente, pues le sirvió de pretexto para dejar de fingir interés por la ópera, y se volvió hacia el comisario con la punta de la lengua asomando por una de las comisuras de sus labios. Apoyó la barbilla sobre un puño y escuchó con una mezcla de emoción e interés profesional las palabras del comisario, que se le antojaron sinceras y difíciles. Cuando éste concluyó, Félix devolvió la vista hacia delante y comenzó a asentir con una sonrisa tenue y torcida.

-Y yo le... perdono, Lorenzo, claro -Aseveró, devolviéndole la mirada-. Y si le... sirve de consuelo..., permítame decirle que... ser como yo no es algo tan horrible. Pasé la mayor parte de mi vida... reprimiéndome, y ahora que eso ha... cambiado, soy perfectamente consciente de que tengo un problema, comisario -Afirmó Félix, ya sin ninguna sonrisa, en un momento de inesperada lucidez-. Pero gracias a ese problema estoy viviendo los mejores años de mi existencia, así que nunca he... intentado hacer nada para arreglarlo.
#851
Sauker
Sauker
27/04/2010 17:21
Era muy tarde, y el padre Arcadio Claus estaba a punto de cerrar la Iglesia.
Había sido un día más del calendario, pero además de haber dado la correspondiente misa, había confesado a numerosos cristianos.
"Parece que es tiempo de pecadores", se dijo a sí mismo mientras se acariciaba el alzacuellos y guardaba sus defectos personales en un maletín de cuero marrón la mar de rasgado.
Una de las vecinas del barrio le había traído aquella tarde una caja repleta de pastas y bollos, ya que sabía que volvía a casa a altas horas de la noche y que el hambre podía con él de camino a su humilde hogar.
No la había abierto aún, pero no tardaría en hacerlo...
Pulsó un interruptor en su despacho, apagando todas las luces de la Iglesia, colocadas a derecha e izquierda, y después, casi en la total oscuridad, comenzó a apagar velas.
La última de ellas, una de las colocadas junto al altar, se había consumido casi por completo.
"Como yo".
Con la dificultad al andar propia de un hombre de su edad, rondando los 75 años (la edad en que le tocaba retirarse a cualquier sacerdote), caminó hacia la puerta, a oscuras, reflejándose en su cabellera plateada la luz de la luna que se fliltraba por las cristaleras.
No podía evitar pensar que pocas veces más volvería a cerrar aquella Iglesia en mitad de la noche.
Su labor en la Iglesia Católica terminaría muy pronto, y no dejaba de sentirse decepcionado, preguntándose cuántos años les haría falta a todos los sacerdotes del mundo para abrir los ojos a todos aquellos que pecaban día a día sin remedio.
Cansado y con ganas de dormir, caminó entre la multitud de bancos sujetando su maletín y la caja de dulces que le habían regalado.

Llegó a la puerta, la cual abrió con lentitud, despertando al mendigo que dormía en el umbral, quien se volvió hacia el otro lado, y continuó durmiendo.
Arcadio Claus cerró la Iglesia con candado, e introdujo la llave en uno de los bolsillos del hábito negro.
Como siempre, volvía a casa por la acera, y abrió la caja de dulces, deseando dar el primer bocado.
De repente, se giró.
"Por supuesto", se dijo a sí mismo volviendo al umbral de la parroquia.


Arcadio Claus

Quédeselo, hijo.
Usted lo necesita más que yo-entregó la caja al mendigo, quien sin cruzar palabra con el cura, la abrió y comenzó a engullir uno de los bollos.

Cuando Arcadio se giró, se topó con un hombre pelirrojo, que observaba la parroquia en silencio.


Buenas noches...
¿Puedo ayudarle en algo?-se cambió de mano el maletín, esperando respuesta por parte de aquel desconocido.
#852
Avataryl
Avataryl
27/04/2010 18:43
DON LORENZO:

El comisario frunción el ceño y estudió a Félix con la mirada. ¿Había juzgado mal al psicólogo? ¿Era posible que no estuviera demente y que estuviera fingiendo una locutra por motivos desconocidos? Don Lorenzo dudaba que pudiera ser así; el propio Félix acababa de admitir que padecía algún problema, y don Lorenzo, que había convivido con él varios días en una institución mental, podía confirmarlo. Al comisario seguía preocupándole la seguridad de Lola, que correría un gran riesgo estando casado con semejante chiflado, pero finalmente había asimilado que él no era el indicado para juzgar a Félix Montejo. Desde que se infiltrara en el mencionada manicomio y, entre otras muchas cosas, le arrebataran un riñón, el comisario también había sufrido una enajenación mental, bajo los efectos de la cual había tomado decisiones tan disparatadas como nombrar a Félix comisario de San Antonio. Un año en las mejores clínias del país había requerido don Lorenzo para sanarse y recuperar la consciencia, sólo para avergonzarse de acciones como esa y descubrir que su antigua vida era imposible de retomar.

-No sé, Montejo... Me dijeron que estaba curado y me tiraron a la calle, pero desde que he vuelto a San Antonio he estado sometido a mucha presión. Ayer, sin ir más lejos... agredí a Fernández y Carrasco, ¡dos de mis agentes!, y por una nimiedad. Antes, me habría limitado a decirles alguna grosería, pero habría sabido controlarme. Creo que es cierto que me he recuperado, pero... también pienso que sigo necesitando ayuda -Confesó con dificultad, con la mirada extraviada-. Voy a pedirle algo, Félix, y le ruego que sea discreto: cuando volvamos a San Antonio, me gustaría... me gustaría que usted fuera... ya sabe... que fuera mi loquero.


FÉLIX:

El psicólogo volvió la cabeza hacia el comisario y comenzó a pestañear aceleradamente. Cuando los párpados comenzaron a escocerle, se detuvo.

-Vale -Aceptó, encogiéndose de hombros. Sin embargo, lejos de esta aparente indiferencia, en su fuero interno Félix celebraba inocentemente que, después de alrededor de 3 años, por fin había conquistado la aprobación de su futuro suegro-. Sin embargo, Lorenzo, y... tengo que preguntárselo, y le... ruego que sea totalmente sincero conmigo, ¿por qué me... pide esto ahora? ¿Es porque finalmente me ha... aceptado en su familia, o por mi bigote? -Inquirió el psicólogo, cruzándose de brazos y entrecerrando un ojo tembloroso en dirección del comisario.
#853
ruben16
ruben16
27/04/2010 20:39
Aitor Carrasco:

El becario comenzó a actuar sobre el escenario , su actitud era seria , pues compartir tarima con un pedofilo no le hacía ninguna gracia y alguna vez que otra tenía que resistirse para no abalanzarse contra el tenor o gritarle 4 cosas en la cara , sin embargo actuaba ciñendose al plan e intentando no alterarlo , pues su placa estaba en juego y ya se habian encargado dos de sus superiores en recordarselo...
#854
BryanDeReK
BryanDeReK
27/04/2010 22:14
De repente, la puerta se abria, un hombre mayor salia de la penumbra oscura, era un sacerdote, bastante mayor, le dejo la caja de dulces al mendigo que minutos antes le había dejado 1€ y se dió la vuelta mirandole fijamente

Kike:

-Ho...hola... pues verá...yo...verá...

Empezo a titubear y ponerse nervioso, no sabía muy bien como decirle a aquella persona que tenía enfrente, todo lo que tenía en su cabeza, ya que por ella pasaban muchísimas cosas, desde Blackman, hasta Aitor, finalmente hizo gala de su dialecto, se relajo un poco y le contesto firmemente y serio, sin tapujos

-Padre, necesito que me confiese, esta semana he tenido muchos contratiempos y problemas que... no me gustaría seguir ocultando, hay dentro de mi una serie de sentimientos y incertidumbres muy importantes que necesito aliviar como sea, o me temo, que me volvere loco padre... por favor...ayúdame... usted es el unico que puede hacerlo.. confieseme, le pagaré si es necesario...

En los ojos del agente Gallardo se veían ternura y sosiego, aparte de desesperación, empapados en lágrimas, como si se tratase de algo muy personal, ya que llevava días consumiendole y lo que es aun peor... aguantandolo solo, dejandolo crecer
#855
Sauker
Sauker
27/04/2010 22:25
Arcadio le mira de arriba abajo, intentando ver a través de él e intentar dar con los problemas que tanto atormentaban a aquel hombre.
Estaba desesperado por recibir confesión, pero él ya había cerrado la Iglesia, era muy tarde, y ambos debían descansar.


Arcadio Claus

Hijo mío, es tan tarde que casi ya es temprano-balbuceó sujetando al maletín con firmeza.
Sea lo que sea estoy seguro de que puede esperar a mañana por la mañana.
Si quiere, puedo esperarle a primera hora y será el primero en recibir confesión.
¿Por qué no se va a casa y descansa?-le puso una mano en el hombro caminando junto a Kike, esperando que asintiera y volviera a su hogar.
Seguro que aquello que te preocupa-le tuteó con media sonrisa- no es nada que no tenga arreglo...
#856
BryanDeReK
BryanDeReK
27/04/2010 22:38
Empezo a caminar junto con el sacerdote, medio arrastrandole, pidiendo que le cojería el primero mañana, en ese momento Kike empezó a agarrarle por la solapa... y suplicarle mirandole con ojos de cordero degollado

Kike:

¡NO! ¡tiene que ser ahora!, ¡Se lo suplico Señor...! ¡Por favor!...otra...otra noche más así...y yo...yo no podría...por favor....no me aga suplicarlo más...por favor...
#857
Sauker
Sauker
27/04/2010 22:48
El sacerdote puso los ojos como platos cuando Kike empezó a empujarle.
En un principio, no sabía como reaccionar, e intentaba pensar lo antes posible en una respuesta contundente que hiciera desistir a aquel hombre.
Sin embargo, cuando uno de los empujones le hizo daño, se paró en seco.


Arcadio Claus

De acuerdo, ¡de acuerdo!
¿No se va a detener ante nada, verdad?-preguntó escrutándole con la mirada.
Vamos, vamos dentro-señaló la puerta de camino al umbral.
No se preocupe, estoy seguro de que ambos podremos dar con una solución a sus problemas y lograremos que esta noche duerma más tranquilo-concluyó sin mencionar a Dios.
¿Señor...?

Kike dio su nombre.

Muy bien, Enrique.
Pase y tenga cuidado, la Iglesia está muy oscura-dejó el portón abierto caminando a ciegas pero correctamente hacia el final de la alfombra.
Voy a encender unas luces y al estudio...
Hoy duerme en la Iglesia un compañero de Oviedo, el padre Juan.
Más nos vale no despertarle, ¿eh?
Espéreme en el confesionario, Enrique.

Kike obedeció, y a oscuras, se dirigió hacia el mismo.
La puerta de la Iglesia se cerró de golpe.
Extraño, no corría ni una mota de aire...
#858
BryanDeReK
BryanDeReK
27/04/2010 23:06
Finalmente el sacerdote fue convencido por el agente y entraron a oscuras, tras avisarle de que iria un segundo, las puertas de la entrada se cerraron de golpe, Kike se asustó, pero se quedo allí perplejo esperando...

Kike

-Gra...gracias señor... mu...muchisimas gracias...no...no tarde eh...
#859
Avataryl
Avataryl
28/04/2010 15:14
DON LORENZO:

El comisario titubeó cuando Félix le preguntó por qué motivo le había solicitado que le tratara psicológicamente, si debido a que finalmente le había aceptado en su familia o bien por su bigote. Don Lorenzo frunció el ceño y retrocedió, un poco divertido.

-Hombre, por su bigote, claramente -Bromeó por motivos prácticos, ya que reconocer lo contrario le habría resultado muy difícil; y abogar por una tercera explicación que no hubiese sido planteada de antemano por su interlocutor podría ofender al psicólogo.
Sin embargo, Félix no advirtió el tono jocoso de la respuesta de don Lorenzo, y al oírle creyó que el comisario hablaba en serio. Un destello sombrío surcó la mirada del psicólogo, que chasqueó la lengua con nerviosismo.
Don Lorenzo, que no advirtió esto, había devuelto su atención al escenario. En mitad de este, Álvaro D'Alvade ejecutaba una interpretación ejemplar, que eclipsaba sin ninguna dificultad el trabajo de Aitor, Mariano y Paco, y el tenor se regodeaba de ello; la única que conseguía hacerle frente era Camilla Margaretti, y tal vez este era el motivo por el que el tenor italiano la fulminaba con miradas rebosantes de odio cada dos por tres; y la actriz, en un derroche de elegancia, fingía no ser consciente de ello
-. No puedo soportarlo -Murmuró el comisario, negando lentamente con una mueca de repugnancia-. Ahora que sé lo que es D'Alvade, me resulta asqueroso ver esto. Y me odio a mí mismo por haberle... reverenciado durante décadas, como una quinceañera atolondrada; y por haberme comportado como un ganso, babeando... detrás de él todo el día y suplicándole una firma -Explicó el comisario, con un nudo en el estómago y la mirada caída, fija en el respaldo de la butaca tras la que se ocultaba.


FÉLIX:

Sentado junto a don Lorenzo, el psicólogo había adoptado un porte melancólico, que se esforzaba en ocultar fingiendo interés por el ensayo.
Finalmente, alguien había tenido valor para confirmarle que sólo era un hombre a un bigote pegado; y aunque el comisario, su futuro suegro, lo hubiera hecho sin ninguna delicadeza, Félix no tenía nada que recriminarle. Muy triste, mientras se preguntaba cuántas serían las hazañas de las que se había sentido orgulloso a lo largo de su vida, y de las que en realidad era responsable su mostacho y no él, escuchó las palabras de don Lorenzo.


-No... deja de ser un tenor exquisito, ¿sabe? -Musitó, ya que sus años de asistencia a la ópera le habían instruido en la materia- Usted le... reverenciaba por su trabajo, no por los quehaceres de su vida privada. Puede que... haya cometido cosas horribles, pero lo que... hace, lo que... está haciendo ahora mismo, sigue siendo arte -Concluyó el psicólogo en un tono taciturno.
Don Lorenzo le observó extrañado durante algunos segundos, pero no dijo nada.
Se cruzó de brazos y apoyó la espalda sobre la pared, reflexionando sobre lo que Félix acababa de decir. Dudoso, el comisario le dirigió una mirada a Álvaro D'Alvade, que en ese momento hacía temblar a las paredes del teatro con su poderosa voz.
#860
Sauker
Sauker
28/04/2010 16:05
El golpe de la puerta hizo temblar hasta los cimientos de la parroquia.
Kike permanecía inmóvil, de rodillas junto al confesionario.
Alrededor de él se sucedían susurros sin parar, uno tras otro, cada uno más inquietante que el anterior.
Algo se movía en las tinieblas de la Iglesia, y Kike lo sabía.
Tras varios minutos desalentadores, se escuchó con ruido.
Un objeto metálico parecía estar moviéndose en la oscuridad, y Kike contempló gracias a la luz de la luna leves movimientos en la profunda oscuridad.
Los susurros se acentuaron, y parecían estar cada vez más cerca.

La Iglesia se oscureció aún más, parecía que unas nubes estaban cubriendo la luna, de modo que la visibilidad del agente era totalmente nula.
Ahora se podían escuchar pasos, y una voz aterradora:


Si te opones... sólo servirá para unirnos...

Y Kike se giró.
Se emitió un chasquido, y una cerilla se encendió en la oscuridad, encendiendo la vela de un candelabro, que se alzó iluminando el rostro del intruso en la casa de Dios.


SPOILER (puntero encima para mostrar)

Era el mismísimo demonio, disfrazado de una rechoncha jóven que le miraba con los ojos descompuestos.

Sandra

Es hora de cenar...-murmuró con una voz rasgada y profunda que por poco no apagó la vela.

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