Foro Los hombres de Paco
Frases el empezar capitulos
#0

12/07/2009 16:02
Alguien puede poner esas frases que dicen los protagonistas al inicio de cada capitulo?
Me refiero a las de Sara,Aitor, etc
Me refiero a las de Sara,Aitor, etc
Vídeos FormulaTV
#21

13/07/2009 17:24
De nada!
Tengo más:
Sara: Héroes
Mi padre no es un héroe, lleva 23 años en el cuerpo y nunca le han dado una medalla, ni le han encajado un tiro, ni ha salido su foto en los periódicos, y no es por falta de méritos ni de valor, es porque mi padre es un fajador, un tipo que trabaja en la sombra. Él es un remorcador, y desde que llegamos a San Antonio se echó la comisaría a la espalda y la convirtió en su familia, una familia de la que tira con uñas y dientes. Porque su familia, los que somos de sangre y los que no, somos su vida, la vida de Paco Miranda, mi padre, mi héroe.
Lo primero que nos enseñaron en la Academia es que un héroe es un tipo que tiene todos los números para terminar en una caja de madera. Lo que no nos explicaron es en qué consiste ser un héroe.
Y es que yo creo que hay muchos tipos de héroes.
Los héroes del código en la mano y el miedo en el bolsillo: aquellos que forman parte de un todo, de un engranaje perfecto que trabaja para el bien común.
Los héroes de lo cotidiano: de las pequeñas cosas, capaces de lo peor y lo mejor, hasta el punto de sacrificar todo aquello que quieren para que otros dejen de sufrir.
Los héroes de lo oscuro: los que caminan por el otro lado de la línea, haciendo un trabajo sucio, convencido de que sus despreciables acciones son un mal menor que nadie tendría el valor de hacer.
Y finalmente están los que nunca quisieron ser héroes: esos a los que nadie tuvo el valor de contarles en la Academia si está bien o mal matar un asesino para salvar la vida de trece inocentes.
Elegir entre la luz y la oscuridad, elegir entre querer o no querer, y en ese instante que puede cambiarlo todo, tomar la decisión correcta, es lo que te convierte para siempre en un héroe.
Lucas: El setter cojo
Hola Sara.
¿Te acuerdas de esto? Me lo regalaste tú. Me dijiste que todo tiene una cara y una cruz, que a veces sale mal… A veces sale bien. Cara. Y tenías razón, y como la moneda pues todos tenemos dos lados. Yo también.
La primera lección que aprendí cuando entre en el cuerpo fue que con un sueldo de 1500 euros al mes.. pues, nunca iba a veranear en la Costa Azul... Nunca iba a vestir de camisa de Oscar de la Renta...
La segunda lección me la enseño mi padre, la noche antes de fingir su muerte, me dijo que conocía todas las moquetas y todas las alfombras de los bancos a los que entraba, tenia tantas deudas, créditos, aplazamientos de embargos... Que cada vez que entraba en un banco tenía que agachar la mirada, humillado… Cuando jure mi cargo, me prometí a mí mismo que a mí no me iba a pasar eso, no, yo iba a entrar en los bancos con la cabeza bien alta, con los ojos clavados en el techo. La unica forma de entar así en un banco es teniendo en la cuenta 10 millones de euros, mi padre lo aprendió muy tarde, pero yo lo aprendí muy pronto.
10 Millones de auros, eso es lo que me prometieron Salazar y el Kaiser. Para un tipo como el Kaiser, 10 millones de euros es calderilla, pero para un madero de San Antonio, 10 millones es el puto euromillón.
Sara, te engañé, te usé… ¿Quién iba a sospechar de ti?
Eras la nieta del comisario, eras la socia perfecta… Ya no me sirves, es así de fácil. Y, si he hecho este vídeo es porque no gano nada con que tú estés en la cárcel.
Así que, Sara, salva tu culo… Yo ya he salvado el mío.
Y, por favor, no me guardes rencor...
Y, ya sabes, todos tenemos dos caras...
Curtis: (No me acuerdo del capítulo)
En 1924, un médico llamado François Boisent enumeró una a una todas las anormalías físicas y mentales que se producen cuando una persona se enamora. Al principio, afirmaba Boisent, el enamoramiento tiene numerosas similitudes con procesos gripales, estado febril, dilatación de pupilas, palpitaciones, sudoración, temperatura alta y dismuinución de pensamiento periférico. El mal de amores cursa los primeros días como un catarro, pero a lo bestia, hasta que el paciente se habitúa a la presencia de la persona amada. Después, los síntomas en lugar de remitir como sucede en los procesos gripales, se multiplican, el enamorado pierde el apetito, pasa las noches en vela con gran ansiedad, y se entrega al aislamiento y a la soledad, y aunque el paciente sabe lo que le está pasando, no hay antibiótico ni antigripal que le alibie. La vida sin la persona amada se convierte entonces en un infierno, en función del organismo afectado, su período de recuperación puede ser de unos días, o convertirse en una enfermedad crónica. Un desasosiego para toda la vida.
Tengo más:
Sara: Héroes
Mi padre no es un héroe, lleva 23 años en el cuerpo y nunca le han dado una medalla, ni le han encajado un tiro, ni ha salido su foto en los periódicos, y no es por falta de méritos ni de valor, es porque mi padre es un fajador, un tipo que trabaja en la sombra. Él es un remorcador, y desde que llegamos a San Antonio se echó la comisaría a la espalda y la convirtió en su familia, una familia de la que tira con uñas y dientes. Porque su familia, los que somos de sangre y los que no, somos su vida, la vida de Paco Miranda, mi padre, mi héroe.
Lo primero que nos enseñaron en la Academia es que un héroe es un tipo que tiene todos los números para terminar en una caja de madera. Lo que no nos explicaron es en qué consiste ser un héroe.
Y es que yo creo que hay muchos tipos de héroes.
Los héroes del código en la mano y el miedo en el bolsillo: aquellos que forman parte de un todo, de un engranaje perfecto que trabaja para el bien común.
Los héroes de lo cotidiano: de las pequeñas cosas, capaces de lo peor y lo mejor, hasta el punto de sacrificar todo aquello que quieren para que otros dejen de sufrir.
Los héroes de lo oscuro: los que caminan por el otro lado de la línea, haciendo un trabajo sucio, convencido de que sus despreciables acciones son un mal menor que nadie tendría el valor de hacer.
Y finalmente están los que nunca quisieron ser héroes: esos a los que nadie tuvo el valor de contarles en la Academia si está bien o mal matar un asesino para salvar la vida de trece inocentes.
Elegir entre la luz y la oscuridad, elegir entre querer o no querer, y en ese instante que puede cambiarlo todo, tomar la decisión correcta, es lo que te convierte para siempre en un héroe.
Lucas: El setter cojo
Hola Sara.
¿Te acuerdas de esto? Me lo regalaste tú. Me dijiste que todo tiene una cara y una cruz, que a veces sale mal… A veces sale bien. Cara. Y tenías razón, y como la moneda pues todos tenemos dos lados. Yo también.
La primera lección que aprendí cuando entre en el cuerpo fue que con un sueldo de 1500 euros al mes.. pues, nunca iba a veranear en la Costa Azul... Nunca iba a vestir de camisa de Oscar de la Renta...
La segunda lección me la enseño mi padre, la noche antes de fingir su muerte, me dijo que conocía todas las moquetas y todas las alfombras de los bancos a los que entraba, tenia tantas deudas, créditos, aplazamientos de embargos... Que cada vez que entraba en un banco tenía que agachar la mirada, humillado… Cuando jure mi cargo, me prometí a mí mismo que a mí no me iba a pasar eso, no, yo iba a entrar en los bancos con la cabeza bien alta, con los ojos clavados en el techo. La unica forma de entar así en un banco es teniendo en la cuenta 10 millones de euros, mi padre lo aprendió muy tarde, pero yo lo aprendí muy pronto.
10 Millones de auros, eso es lo que me prometieron Salazar y el Kaiser. Para un tipo como el Kaiser, 10 millones de euros es calderilla, pero para un madero de San Antonio, 10 millones es el puto euromillón.
Sara, te engañé, te usé… ¿Quién iba a sospechar de ti?
Eras la nieta del comisario, eras la socia perfecta… Ya no me sirves, es así de fácil. Y, si he hecho este vídeo es porque no gano nada con que tú estés en la cárcel.
Así que, Sara, salva tu culo… Yo ya he salvado el mío.
Y, por favor, no me guardes rencor...
Y, ya sabes, todos tenemos dos caras...
Curtis: (No me acuerdo del capítulo)
En 1924, un médico llamado François Boisent enumeró una a una todas las anormalías físicas y mentales que se producen cuando una persona se enamora. Al principio, afirmaba Boisent, el enamoramiento tiene numerosas similitudes con procesos gripales, estado febril, dilatación de pupilas, palpitaciones, sudoración, temperatura alta y dismuinución de pensamiento periférico. El mal de amores cursa los primeros días como un catarro, pero a lo bestia, hasta que el paciente se habitúa a la presencia de la persona amada. Después, los síntomas en lugar de remitir como sucede en los procesos gripales, se multiplican, el enamorado pierde el apetito, pasa las noches en vela con gran ansiedad, y se entrega al aislamiento y a la soledad, y aunque el paciente sabe lo que le está pasando, no hay antibiótico ni antigripal que le alibie. La vida sin la persona amada se convierte entonces en un infierno, en función del organismo afectado, su período de recuperación puede ser de unos días, o convertirse en una enfermedad crónica. Un desasosiego para toda la vida.
#22

13/07/2009 20:35
Que no caiga el post (: