LHDP - ROL Capítulo 17
#0
15/05/2010 16:52
Y con este episodio arranca el segundo capítulo de la 4ª temporada de LHDP - ROL.
La tercera temporada ha sido la más exitosa hasta el momento, cosechando gran número de páginas en los cinco capítulos que la componen y siendo el caso Z-105 y las tramas planteadas éxito en la crítica de roleros y el público.
Ahora inicia el C17, que lógicamente continúa el C16, el cual obtuvo unas muy buenas críticas.
Tienen a su disposición dos páginas extra además de este post principal y el anuncio.
•Resúmenes
•El Despacho de Don Lorenzo
•REGLAS•
- No interrumpir el juego con comentarios que deban ser tratados en el anuncio. De interrumpirlo, habrá de editar inmediatamente.
-Para adquirir un secundario, se ha de elevar una petición a la cúpula directiva. Sin embargo, obtener un secundario es muy complicado, ya que por lo general suelen estar vinculados al caso que se trata salvo alguna excepción.
- No se pueden alterar bruscamente las tramas generales de la historia ni aquellas que incumben a determinados personajes sin la aprobación de su propietario.
- ELENCO -
• (Paco Miranda) >>?
• (Lola Castro)>>Martinyfelix
• (Mariano Moreno)>>Bryan-Derek
• (Lucas Fernández)>>Lukesita
• (Sara Miranda)>>Lukiando
• (Gonzalo Montoya)>>Sara_93
• (Silvia Castro)>>Meli-esdm
• (Aitor Carrasco)>>Rubén16
• (Félix Montejo)>>Avataryl
• (Monsieur De Gaulle)>>Sauker
• (Marina Salgado)>>Meli-esdm
• (Lis Peñuelas)>>Dain
• (Goyo)>>Dain
• (Blackman)>>Lyonel_19
• (Doña Concha)>>Lukesita
• (José Luis Povedilla)>>Martinyfelix
• (Rita Peláez)>>Sara_93
• (Nelson Amadú)>>Scarface
• (Carlota Fernández)>>Xispi_lhdp
• (Don Lorenzo Castro)>>Avataryl
- CON LA COLABORACIÓN ESPECIAL DE -
• (Ciriaco Delgado)>>Bryan-Derek
• (Manuel Delgado)>>Rubén16
• (Lázaro Orozco)>>Avataryl
• (Toro Encerrado)>>Martinyfelix
• (Virtulinda)>>Avataryl
• (Adonis Angulo)>>Sauker
- INTERVIENEN -
• (Arcadio Claus)>>Sauker
• (Bruce Willis)>>Avataryl
• (El Químico)>>BryanDerek
• (Serafín)>>Meli-esdm
- CASA DEL DR. RASPUTÍN VERENGUER - (Sauker: Creador)
• Rasputín Verenguer
• Los Guiñoles:
-Sandra/El ente
-Fructuoso "Fiti" Bragueta
• `Papá & Mamá´ De Gaulle:
-Claude
-Charlotte
Cortinilla, realizada por Avataryl:
2ª cortinilla, realizada por Sauker:
1er anuncio, elaborado por Avataryl:
3ª cortinilla, realizada por Sauker:
La tercera temporada ha sido la más exitosa hasta el momento, cosechando gran número de páginas en los cinco capítulos que la componen y siendo el caso Z-105 y las tramas planteadas éxito en la crítica de roleros y el público.
Ahora inicia el C17, que lógicamente continúa el C16, el cual obtuvo unas muy buenas críticas.
Tienen a su disposición dos páginas extra además de este post principal y el anuncio.
•Resúmenes
•El Despacho de Don Lorenzo
•REGLAS•
- No interrumpir el juego con comentarios que deban ser tratados en el anuncio. De interrumpirlo, habrá de editar inmediatamente.
-Para adquirir un secundario, se ha de elevar una petición a la cúpula directiva. Sin embargo, obtener un secundario es muy complicado, ya que por lo general suelen estar vinculados al caso que se trata salvo alguna excepción.
- No se pueden alterar bruscamente las tramas generales de la historia ni aquellas que incumben a determinados personajes sin la aprobación de su propietario.
- ELENCO -
• (Paco Miranda) >>?
• (Lola Castro)>>Martinyfelix
• (Mariano Moreno)>>Bryan-Derek
• (Lucas Fernández)>>Lukesita
• (Sara Miranda)>>Lukiando
• (Gonzalo Montoya)>>Sara_93
• (Silvia Castro)>>Meli-esdm
• (Aitor Carrasco)>>Rubén16
• (Félix Montejo)>>Avataryl
• (Monsieur De Gaulle)>>Sauker
• (Marina Salgado)>>Meli-esdm
• (Lis Peñuelas)>>Dain
• (Goyo)>>Dain
• (Blackman)>>Lyonel_19
• (Doña Concha)>>Lukesita
• (José Luis Povedilla)>>Martinyfelix
• (Rita Peláez)>>Sara_93
• (Nelson Amadú)>>Scarface
• (Carlota Fernández)>>Xispi_lhdp
• (Don Lorenzo Castro)>>Avataryl
- CON LA COLABORACIÓN ESPECIAL DE -
• (Ciriaco Delgado)>>Bryan-Derek
• (Manuel Delgado)>>Rubén16
• (Lázaro Orozco)>>Avataryl
• (Toro Encerrado)>>Martinyfelix
• (Virtulinda)>>Avataryl
• (Adonis Angulo)>>Sauker
- INTERVIENEN -
• (Arcadio Claus)>>Sauker
• (Bruce Willis)>>Avataryl
• (El Químico)>>BryanDerek
• (Serafín)>>Meli-esdm
- CASA DEL DR. RASPUTÍN VERENGUER - (Sauker: Creador)
• Rasputín Verenguer
• Los Guiñoles:
-Sandra/El ente
-Fructuoso "Fiti" Bragueta
• `Papá & Mamá´ De Gaulle:
-Claude
-Charlotte
Cortinilla, realizada por Avataryl:
2ª cortinilla, realizada por Sauker:
1er anuncio, elaborado por Avataryl:
3ª cortinilla, realizada por Sauker:
SINOPSIS
Los agentes de San Antonio regresan a su país dispuestos a celebrar el triunfo del operativo en París, pero un truculento descubrimiento empañará su felicidad: Kike Gallardo ha muerto en un fatídico accidente de coche. Desolados, sus amigos acudirán al entierro del agente para despedirle.
Tal como le prometió don Lorenzo, Aitor Carrasco recibirá finalmente la placa. Aunque el becario está entusiasmado con esta perspectiva, también deberá lidiar contra la muerte de Kike, de la que probablemente se sentirá responsable. Pero estos factores sólo aumentarán aún más su determinación, y Aitor intentará conquistar a Silvia de una vez por todas.
Mariano tiene una cuenta pendiente en San Antonio: "El Químico", el traficante de drogas responsable de su adicción y al que encarceló unas semanas antes, continúa en los calabozos. Y pronto recibirá una visita del subinspector, que por fin está dispuesto a hacerle frente...
Después de ser detenido en París, Félix será deportado de vuelta a España. A pesar de que su boda con Lola podría oficiarse en cualquier momento, el psicólogo se sumirá en un estado depresivo, atormentado por las dos muertes de las que ha sido responsable en las últimas semanas: la de la señorita Dafrosia B. y la de Álvaro D'Alvade.
Por otra parte, en la morada del doctor Rasputín Verenguer los inquilinos de la casa respirarán con alivio por primera vez en mucho tiempo, convencidos de que el diabólico mal que les acechó durante los últimos meses había expirado. Los problemas volverán cuando Claude quiera mantener relaciones sexuales con Charlotte, quien no lo tolerará, ya que su relación con Fiti sigue adelante. Pronto se formará un triángulo amoroso entre los tres, que se convertirá en cuadrado cuando se sume Rasputín, quien no deja de desaprobar tal relación y además estará muy preocupado porque Sandra no ha vuelto a ser la misma. Mientras tanto, El Ente que habita en la joven continuará el paripé según el cual Sandra se ha despojado de la posesión, aguardando el mejor momento para volver a la carga, que parece no estar muy lejos...
A pesar del éxito de los agentes en sus últimos casos, Asuntos Internos no aprueba los ortodoxos métodos de la comisaría, y con y el fin de corregirlos y el pretexto de sustituir el puesto de Kike ha decidido trasladar a un grupo de agentes y becarios a San Antonio. El Alto Mando de la comisaría (don Lorenzo, De Gaulle y Salgado), descontento con esta medida y con la intención de demostrar que no es necesaria, se vengará obstaculizando y saboteando el trabajo de los novatos y sometiéndoles a toda suerte de vejaciones.
Coincidiendo con todo esto, la comisaría recibirá un chivatazo: Ciriaco y Fernando Delgado, padre e hijo, regentan unas prestigiosas bodegas de vino a nivel nacional. Sin embargo, la fuente afirma que se trata de dos narcotraficantes que tienen la tapadera en un viñedo.
Los agentes se embarcarán en una nueva investigación...
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#1081
27/06/2010 12:21
Rasputín se abrió paso entre los muebles, es decir, tirando todas las mesas bajas a su paso y empujando las sillas hasta llegar al sofá en que se encontraban Claude y Charlotte, ya casi lamentando la muerte de su hijo.
Rasputín arrastraba consigo la máquina de carga de los desfibriladores, y cuando llegó hasta De Gaulle, los alzó sobre su cabeza, y se los estampó en el pecho.
El francés se elevó varios metros sobre el suelo, y Rasputín continuó con su trabajo.
A Charlotte le sonó el móvil.
Charlotte
¡¡¡¿Sí?!!!-preguntó alterada.
Claude
¿¡Siii...!?-la imitó Claude, divertido, sin prestar la menor atención a su hijo.
Charlotte
¿¡Quién cogño es!?-alzó la voz tras dar una colleja a Claude.
¡Digme, Figti!
¿¡Qué, ya!?
¡Demognios, essto se avigsa!
¡Cogge, sújegtagla estúpigdo!-dio la orden para después colgar el teléfono.
El plan se ha puesto en magcha, ¡pego Sandgra se está escapangdo!
Claude se empezó a reír, y entre carcajadas, corrió hacia la puerta seguido de Charlotte.
Rasputín siguió intentando revivir a De Gaulle.
Ya en el pasillo, ambos miraron a un lado y al otro.
Un caballo corría por la estancia, y se preguntaron si estaban en un capítulo de "Lost".
Sin saber que pertenecía a Toro Encerrado y que se había escapado de su establo, montaron en él, temerosos.
Y comenzó a galopar.
Mientras tanto, en la planta de abajo, Fiti seguía a Sandra, atosigado, sujetando una maza.
Fructuoso "Fiti" Bragueta
¡Venga, coño, que juega España!
¡Sandra, mira que echamos el candado a la nevera!
Claude y Charlotte se contenían las ganas de vomitar, el caballo corría desbocado ante las miradas atónitas de los pacientes que se cruzaban por los pasillos o que tenían que esquivarles.
Claude
Madgre mía, si es que a ugno no le degjan seg felis.
Desde que me he jubilago sóglo he hegcho aguantag gilipogllas en el club de campo, y ahoga que encuentgro a algguien que me llegna togdo este vasío, intengtan matagla y que no me asegque a eglla...
Charlotte
¡Claude, pog favog, estás hablangdo sóglo...!
El señor De Gaulle se giró sin soltar las riendas del caballo, y con los ojos entreabiertos, asintió.
Claude
Llegvo cuagengta agños... hablangdo sóglo...
Fiti seguía corriendo detrás de Sandra, la cual, entre aterradoras frases pronunciadas en latín y en arameo le hacía cortes de manga, y cada vez le sacaba más ventaja.
Alzó la maza cuando la vio cruzar una esquina, y mareado, caminó con sigilo por el pasillo.
Todo le daba vueltas, se posicionó junto a una puerta creyendo que era la indicada, y esperando a que se abriera, volvió a levantar la maza, dispuesto a dejarla K.O.
Escuchó unos tremendos golpes tras la puerta, parecían zancadas de un gigante, no cabía duda de que era Sandra.
Cuando debía estar a escasos metros de la puerta, Fiti la abrió, y segundos después, asestó dos mazazos brutales.
Lo que pasó por delante no era Sandra, sino un caballo con la silla vacía.
Claude y Charlotte yacían al otro lado de la muerta, lamentándose en el suelo y llamándole gilipollas.
Sandra
¡Conspiráis contra mí... HIJOS DE PUTA!-gritó con los brazos en alto.
¡¡¡OSTIA...!!!-los bajó para cubrirse al ver como un caballo corría en su dirección.
Fiti y los De Gaulle se encogieron y mostraron muecas de dolor, mientras se hacían eco en el pasillo los gritos de Sandra y el relinchar del caballo, quien la atropelló y comenzó a bailar violentamente sobre ella hasta que el Ente guardó silencio...
Rasputín arrastraba consigo la máquina de carga de los desfibriladores, y cuando llegó hasta De Gaulle, los alzó sobre su cabeza, y se los estampó en el pecho.
El francés se elevó varios metros sobre el suelo, y Rasputín continuó con su trabajo.
A Charlotte le sonó el móvil.
Charlotte
¡¡¡¿Sí?!!!-preguntó alterada.
Claude
¿¡Siii...!?-la imitó Claude, divertido, sin prestar la menor atención a su hijo.
Charlotte
¿¡Quién cogño es!?-alzó la voz tras dar una colleja a Claude.
¡Digme, Figti!
¿¡Qué, ya!?
¡Demognios, essto se avigsa!
¡Cogge, sújegtagla estúpigdo!-dio la orden para después colgar el teléfono.
El plan se ha puesto en magcha, ¡pego Sandgra se está escapangdo!
Claude se empezó a reír, y entre carcajadas, corrió hacia la puerta seguido de Charlotte.
Rasputín siguió intentando revivir a De Gaulle.
Ya en el pasillo, ambos miraron a un lado y al otro.
Un caballo corría por la estancia, y se preguntaron si estaban en un capítulo de "Lost".
Sin saber que pertenecía a Toro Encerrado y que se había escapado de su establo, montaron en él, temerosos.
Y comenzó a galopar.
Mientras tanto, en la planta de abajo, Fiti seguía a Sandra, atosigado, sujetando una maza.
Fructuoso "Fiti" Bragueta
¡Venga, coño, que juega España!
¡Sandra, mira que echamos el candado a la nevera!
Claude y Charlotte se contenían las ganas de vomitar, el caballo corría desbocado ante las miradas atónitas de los pacientes que se cruzaban por los pasillos o que tenían que esquivarles.
Claude
Madgre mía, si es que a ugno no le degjan seg felis.
Desde que me he jubilago sóglo he hegcho aguantag gilipogllas en el club de campo, y ahoga que encuentgro a algguien que me llegna togdo este vasío, intengtan matagla y que no me asegque a eglla...
Charlotte
¡Claude, pog favog, estás hablangdo sóglo...!
El señor De Gaulle se giró sin soltar las riendas del caballo, y con los ojos entreabiertos, asintió.
Claude
Llegvo cuagengta agños... hablangdo sóglo...
Fiti seguía corriendo detrás de Sandra, la cual, entre aterradoras frases pronunciadas en latín y en arameo le hacía cortes de manga, y cada vez le sacaba más ventaja.
Alzó la maza cuando la vio cruzar una esquina, y mareado, caminó con sigilo por el pasillo.
Todo le daba vueltas, se posicionó junto a una puerta creyendo que era la indicada, y esperando a que se abriera, volvió a levantar la maza, dispuesto a dejarla K.O.
Escuchó unos tremendos golpes tras la puerta, parecían zancadas de un gigante, no cabía duda de que era Sandra.
Cuando debía estar a escasos metros de la puerta, Fiti la abrió, y segundos después, asestó dos mazazos brutales.
Lo que pasó por delante no era Sandra, sino un caballo con la silla vacía.
Claude y Charlotte yacían al otro lado de la muerta, lamentándose en el suelo y llamándole gilipollas.
Sandra
¡Conspiráis contra mí... HIJOS DE PUTA!-gritó con los brazos en alto.
¡¡¡OSTIA...!!!-los bajó para cubrirse al ver como un caballo corría en su dirección.
Fiti y los De Gaulle se encogieron y mostraron muecas de dolor, mientras se hacían eco en el pasillo los gritos de Sandra y el relinchar del caballo, quien la atropelló y comenzó a bailar violentamente sobre ella hasta que el Ente guardó silencio...
#1082
27/06/2010 13:02
LÁZARO OROZCO:
Después de recorrer los pasillos de la clínica velozmente pero sin perder la compostura, el director se personó en la sala común con el cadáver de Adolphe entre las manos. Un vistazo general a través de sus lentes fue suficiente para localizar al dueño del animal, a quien había conocido el día anterior. Sin embargo, el paciente estaba tumbado en el suelo y junto a él Rasputín le aplicaba descargas eléctricas. Alarmado, Lázaro se dirigió hacia allí.
-Doctor Verenguer, ¿qué ha ocurrido? -preguntó, inquiriéndose al mismo tiempo a sí mismo si la indisposición de De Gaulle retrasaría la entrega del gato y cuánto tiempo le robaría.
Después de recorrer los pasillos de la clínica velozmente pero sin perder la compostura, el director se personó en la sala común con el cadáver de Adolphe entre las manos. Un vistazo general a través de sus lentes fue suficiente para localizar al dueño del animal, a quien había conocido el día anterior. Sin embargo, el paciente estaba tumbado en el suelo y junto a él Rasputín le aplicaba descargas eléctricas. Alarmado, Lázaro se dirigió hacia allí.
-Doctor Verenguer, ¿qué ha ocurrido? -preguntó, inquiriéndose al mismo tiempo a sí mismo si la indisposición de De Gaulle retrasaría la entrega del gato y cuánto tiempo le robaría.
#1083
27/06/2010 13:50
Rasputín se colgó los desfibriladores sobre los hombros, y abrió la puerta.
Allí estaba Lázaro Orozco, y estuvo a punto de tragarse su propia lengua.
Esa hubiera sido la mejor solución, no quería decir ni una sola palabra en la presencia del director de la clínica, aquel hombre era un detector de mentiras.
Rasputín Verenguer
Coña, Orozco...
Qué bien le veo-sonrió intentando ser amable.
Nada, el señor De Gaulle, que le ha estado dando al alpiste y se le ha atrofiado el hígado, digo yo...
¿Le pincho algo?-sacó una jeringuilla de su bata blanca.
Es que los cacharros estos... mira, le voy a cambiar las pilas-negó con la cabeza, seguro de que algo hacía mal.
Y entonces, se puso los dos desfibriladores en una misma mano, juntándolos para hurgar con la otra mano en el bolsillo de la bata.
Rasputín salió disparado hacia atrás.
Monsieur De Gaulle
¿Qué ocugge?
¡¡¡OH!!!-le tumbó el doctor, quien gritó de forma ensordecedora durante su vuelo.
Poco después, Rasputín dejó a De Gaulle inconsciente, en la misma posición, y volvió a la puerta para atender a Lázaro.
Rasputín Verenguer
Bueno, parece que se ha recuperado, ahora está reposando la ostia...
¿Qué quería, señor director?-se quitó los tacones molesto, quedando una cabeza por debajo de los ojos de Orozco.
Allí estaba Lázaro Orozco, y estuvo a punto de tragarse su propia lengua.
Esa hubiera sido la mejor solución, no quería decir ni una sola palabra en la presencia del director de la clínica, aquel hombre era un detector de mentiras.
Rasputín Verenguer
Coña, Orozco...
Qué bien le veo-sonrió intentando ser amable.
Nada, el señor De Gaulle, que le ha estado dando al alpiste y se le ha atrofiado el hígado, digo yo...
¿Le pincho algo?-sacó una jeringuilla de su bata blanca.
Es que los cacharros estos... mira, le voy a cambiar las pilas-negó con la cabeza, seguro de que algo hacía mal.
Y entonces, se puso los dos desfibriladores en una misma mano, juntándolos para hurgar con la otra mano en el bolsillo de la bata.
Rasputín salió disparado hacia atrás.
Monsieur De Gaulle
¿Qué ocugge?
¡¡¡OH!!!-le tumbó el doctor, quien gritó de forma ensordecedora durante su vuelo.
Poco después, Rasputín dejó a De Gaulle inconsciente, en la misma posición, y volvió a la puerta para atender a Lázaro.
Rasputín Verenguer
Bueno, parece que se ha recuperado, ahora está reposando la ostia...
¿Qué quería, señor director?-se quitó los tacones molesto, quedando una cabeza por debajo de los ojos de Orozco.
#1084
27/06/2010 14:02
LÁZARO OROZCO:
El director de la clínica caminó hacia Rasputín y le escudriñó con la misma indiferencia con que lo haría a cualquier otro miembro del equipo médico, a pesar de que las maneras del doctor fueran mucho más llamativas que las de cualquier otro. Sin mover más partes del cuerpo que las imprescindibles, Lázaro Orozco alzó las manos y elevó el cuerpo inanimado de Adolphe. Después, señaló con la mirada a De Gaulle.
-La mascota de este residente ha aparecido muerta en el aparcamiento. ¿Tiene idea de qué ha podido pasar?
El director de la clínica caminó hacia Rasputín y le escudriñó con la misma indiferencia con que lo haría a cualquier otro miembro del equipo médico, a pesar de que las maneras del doctor fueran mucho más llamativas que las de cualquier otro. Sin mover más partes del cuerpo que las imprescindibles, Lázaro Orozco alzó las manos y elevó el cuerpo inanimado de Adolphe. Después, señaló con la mirada a De Gaulle.
-La mascota de este residente ha aparecido muerta en el aparcamiento. ¿Tiene idea de qué ha podido pasar?
#1085
27/06/2010 14:14
Rasputín observa a Adolphe, el gato de De Gaulle, al que había atropellado y abandonado en el garaje.
Se frotó las manos, y rechinando los dientes, con cara de susto, miró a De Gaulle, quien seguía inconsciente.
Cogió al gato por el pellejo del cuello, alejándolo de su cuerpo, y asintió a Orozco.
Rasputín Verenguer
Gracias, señor Orozco.
Pero no tenía que haberse molestado, tiene usted mejores cosas que hacer-miraba asqueado al gato.
Osea, que no quiero decir que esté perdiendo el tiempo, que usted un gran profesional, pero que esto lo podría haber limpiado cualquiera...
Vamos, que no quiero decir que usted sea cualquiera, que es el director y todo eso, pero que hay mucho alcohólico y drogadicto en esos pasillos que necesita su ayuda, ¿no?-Orozco permanecía en silencio.
Resumiendo, que ha sido usted muy amable, gracias por preocuparse, yo mismo le entregaré el bicho al paciente en cuanto se recupere.
Viva usté-zarandeó el gato como si fuera un pañuelo a modo de saludo.
Después, cerró la puerta.
¡¡¡Ay, ay mi señor...!!!-se despegó del gato lanzándolo contra el suelo, en tensión además por la conversación con Orozco, que le había provocado un cortocircuito cerebral.
Tomó sus dos gamuzas y se las llevó a la entrepierna, se había orinado y lo iba a poner todo perdido.
Se frotó las manos, y rechinando los dientes, con cara de susto, miró a De Gaulle, quien seguía inconsciente.
Cogió al gato por el pellejo del cuello, alejándolo de su cuerpo, y asintió a Orozco.
Rasputín Verenguer
Gracias, señor Orozco.
Pero no tenía que haberse molestado, tiene usted mejores cosas que hacer-miraba asqueado al gato.
Osea, que no quiero decir que esté perdiendo el tiempo, que usted un gran profesional, pero que esto lo podría haber limpiado cualquiera...
Vamos, que no quiero decir que usted sea cualquiera, que es el director y todo eso, pero que hay mucho alcohólico y drogadicto en esos pasillos que necesita su ayuda, ¿no?-Orozco permanecía en silencio.
Resumiendo, que ha sido usted muy amable, gracias por preocuparse, yo mismo le entregaré el bicho al paciente en cuanto se recupere.
Viva usté-zarandeó el gato como si fuera un pañuelo a modo de saludo.
Después, cerró la puerta.
¡¡¡Ay, ay mi señor...!!!-se despegó del gato lanzándolo contra el suelo, en tensión además por la conversación con Orozco, que le había provocado un cortocircuito cerebral.
Tomó sus dos gamuzas y se las llevó a la entrepierna, se había orinado y lo iba a poner todo perdido.
#1086
27/06/2010 14:36
LÁZARO OROZCO:
El director escuchó a Rasputín, exasperándose y asintiendo cansinamente para urgirle a hablar de forma más rápida y lineal. Cuando el doctor se responsabilizó del gato y empujó a Lázaro hasta la salida, este se resistió un instante para comunicarle algo más a Rasputín, en un tono robótico que no se vio alterado por los empellones:
-No olvide decirle que en esta clínica están prohibidos los animales -ordenó, y en su mente afloró de nuevo el recuerdo de Toro Encerrado. Una vez fuera, consultó el reloj y frunció el ceño: había desperdiciado unos minutos más de los que a priori esperaba. Ladeó la mirada hacia un lado del pasillo, y después hacia el otro y, tras constatar que no había nadie cerca... rompió a correr hacia su despacho.
Cuando finalmente llegó hasta él y se detuvo, sintió que la nicotina le retorcía las entrañas. Esforzándose en conservar su velocidad respiratoria habitual, se acercó hasta la placa de su despacho y, como siempre, la contempló:
<<Dir. Lázaro D. Orozco>>
Nostálgico pero complacido, asintió y se adentró en su oficina.
Alzó la mirada para observar el cuadro de figuras abstractas que colgaba de la pared tras el escritorio, y sintió un mal presentimiento. Al igual que la enmarañada planta con la que Félix se había restregado el día antes, el cuadro también era el regalo de otro paciente al que en el pasado había curado. De no ser así, el director se habría deshecho de tan innecesarios adornos mucho tiempo atrás.
Lázaro Orozco se sentó a esperar una llamada que tardaba en producirse; mientras aguardaba, necesitado de invertir ese tiempo en algo productivo, comenzó a ordenar los cajones de su escritorio. Al introducir la mano en el segundo y palpar algo, sintió un escalofrío.
El director escuchó a Rasputín, exasperándose y asintiendo cansinamente para urgirle a hablar de forma más rápida y lineal. Cuando el doctor se responsabilizó del gato y empujó a Lázaro hasta la salida, este se resistió un instante para comunicarle algo más a Rasputín, en un tono robótico que no se vio alterado por los empellones:
-No olvide decirle que en esta clínica están prohibidos los animales -ordenó, y en su mente afloró de nuevo el recuerdo de Toro Encerrado. Una vez fuera, consultó el reloj y frunció el ceño: había desperdiciado unos minutos más de los que a priori esperaba. Ladeó la mirada hacia un lado del pasillo, y después hacia el otro y, tras constatar que no había nadie cerca... rompió a correr hacia su despacho.
Cuando finalmente llegó hasta él y se detuvo, sintió que la nicotina le retorcía las entrañas. Esforzándose en conservar su velocidad respiratoria habitual, se acercó hasta la placa de su despacho y, como siempre, la contempló:
<<Dir. Lázaro D. Orozco>>
Nostálgico pero complacido, asintió y se adentró en su oficina.
Alzó la mirada para observar el cuadro de figuras abstractas que colgaba de la pared tras el escritorio, y sintió un mal presentimiento. Al igual que la enmarañada planta con la que Félix se había restregado el día antes, el cuadro también era el regalo de otro paciente al que en el pasado había curado. De no ser así, el director se habría deshecho de tan innecesarios adornos mucho tiempo atrás.
Lázaro Orozco se sentó a esperar una llamada que tardaba en producirse; mientras aguardaba, necesitado de invertir ese tiempo en algo productivo, comenzó a ordenar los cajones de su escritorio. Al introducir la mano en el segundo y palpar algo, sintió un escalofrío.
#1087
27/06/2010 15:56
Aitor Carrasco:
El comedor comenzaba a quedarse vacio , pues las horas puntas ya habían pasado , simplemente quedaban allí los más rezagados , el agente se sienta en la mesa , junto al comisario y a Mariano , pega un suspiro y niega con la cabeza - Todavía estoy a cuadros con eso que me has dicho Mariano , no me... , no me cabe en la cabeza... , porque esque sinceramente no lo veo posible... , una de dos , o esa persona ya estaba recluida aquí y se escapó con el único afán de matar a Kike o... después le metieron aquí por cualquier tipo de problema que tuviera en la cabeza... - Inquiere agachando la cabeza momentaneamente - A no ser que... , haya entrado a la misma vez que nosotros y nos esté vigilando , lo mismo Kike es el primero de un circulo... - Dice alternando miradas entre ambos , seguidamente pega un sorbo al vaso de agua que tenía junto a el - Pero bueno , a lo que interesa , que coño hacemos ahora? , nos hemos quedado sin hilo del que tirar , sin pistas y esta puta planta la hemos mirado ya de arriba abajo sin encontrar nada... , asique... , algo tendremos que ingeniar no? , joder , que este sitio es inmenso y no salimos de la sección 3...
El comedor comenzaba a quedarse vacio , pues las horas puntas ya habían pasado , simplemente quedaban allí los más rezagados , el agente se sienta en la mesa , junto al comisario y a Mariano , pega un suspiro y niega con la cabeza - Todavía estoy a cuadros con eso que me has dicho Mariano , no me... , no me cabe en la cabeza... , porque esque sinceramente no lo veo posible... , una de dos , o esa persona ya estaba recluida aquí y se escapó con el único afán de matar a Kike o... después le metieron aquí por cualquier tipo de problema que tuviera en la cabeza... - Inquiere agachando la cabeza momentaneamente - A no ser que... , haya entrado a la misma vez que nosotros y nos esté vigilando , lo mismo Kike es el primero de un circulo... - Dice alternando miradas entre ambos , seguidamente pega un sorbo al vaso de agua que tenía junto a el - Pero bueno , a lo que interesa , que coño hacemos ahora? , nos hemos quedado sin hilo del que tirar , sin pistas y esta puta planta la hemos mirado ya de arriba abajo sin encontrar nada... , asique... , algo tendremos que ingeniar no? , joder , que este sitio es inmenso y no salimos de la sección 3...
#1088
27/06/2010 15:59
Mira ensimismado a Aitor y suspira
Mariano:
-Pues tienes toda la razón Aitor... quizás deveriamos ir a otra ala de la clínica no sé... ¿Te acuerdas del ascensor de la sala 3?, tenía una llave... en uno de los numeros de arriba, allí solo pueden ir los celadores... y creo que estan los pacientes más peligrosos... ¿Y si esta allí todo el pastel?...
Intercambiaba miradas para saber que opinaban el resto
Mariano:
-Pues tienes toda la razón Aitor... quizás deveriamos ir a otra ala de la clínica no sé... ¿Te acuerdas del ascensor de la sala 3?, tenía una llave... en uno de los numeros de arriba, allí solo pueden ir los celadores... y creo que estan los pacientes más peligrosos... ¿Y si esta allí todo el pastel?...
Intercambiaba miradas para saber que opinaban el resto
#1089
27/06/2010 16:43
FÉLIX:
El psicólogo deambulaba por los pasillos y se distraía contemplándolo todo con aviesa pero vaga curiosidad y, al caminar junto a una silla desamparada, se detuvo y decidió satisfacer con ella su desbocado apetito sexual.
Tras un tiempo rodando por el suelo abrazado a la madera, se paró y resopló; por mucho que intentara inculcárselo a sí mismo, él no era ningún adicto al sexo, y ahora lo sabía con total claridad.
Como tampoco estaba recorriendo la clínica con el objeto de encontrar y proteger a Lola, sino, en su defecto, con el de rehuirla: el acicate se había retorcido en su mente, y Félix había olvidado que de quien debía proteger a su futura esposa era de él mismo, el asesino de Dafrosia B. y Álvaro D'Alvade; sin embargo, ahora le invadía una amarga comprensión.
¿Por qué la había perseguido entonces a la clínica? Porque estaba loco, y su demencia se alimentaba de la cordura de Lola.
El psicólogo se incorporó, y observó con repugnancia a la silla, que yacía tumbada en el suelo. Asqueado, le propinó una patada que la envió un poco lejos de allí. Se arrepintió al instante, y la pena le acongojó.
Confuso, asomó la lengua para deslizarla por la zona comprendida entre el labio superior y la nariz, y la detuvo en pleno movimiento: había apreciado un pelo pegajoso. Su bigote estaba volviendo a crecer. Mareado, Félix parpadeó y absorbió la lengua. Después, enfadado, alzó una mano para pellizcar dicha hebra y arrancársela. Apretó los labios para no emitir un chillido y, con los ojos empañados, dirigió una mirada solemne hacia el final del pasillo, donde sólo había una severa pared blanca.
El psicólogo deambulaba por los pasillos y se distraía contemplándolo todo con aviesa pero vaga curiosidad y, al caminar junto a una silla desamparada, se detuvo y decidió satisfacer con ella su desbocado apetito sexual.
Tras un tiempo rodando por el suelo abrazado a la madera, se paró y resopló; por mucho que intentara inculcárselo a sí mismo, él no era ningún adicto al sexo, y ahora lo sabía con total claridad.
Como tampoco estaba recorriendo la clínica con el objeto de encontrar y proteger a Lola, sino, en su defecto, con el de rehuirla: el acicate se había retorcido en su mente, y Félix había olvidado que de quien debía proteger a su futura esposa era de él mismo, el asesino de Dafrosia B. y Álvaro D'Alvade; sin embargo, ahora le invadía una amarga comprensión.
¿Por qué la había perseguido entonces a la clínica? Porque estaba loco, y su demencia se alimentaba de la cordura de Lola.
El psicólogo se incorporó, y observó con repugnancia a la silla, que yacía tumbada en el suelo. Asqueado, le propinó una patada que la envió un poco lejos de allí. Se arrepintió al instante, y la pena le acongojó.
Confuso, asomó la lengua para deslizarla por la zona comprendida entre el labio superior y la nariz, y la detuvo en pleno movimiento: había apreciado un pelo pegajoso. Su bigote estaba volviendo a crecer. Mareado, Félix parpadeó y absorbió la lengua. Después, enfadado, alzó una mano para pellizcar dicha hebra y arrancársela. Apretó los labios para no emitir un chillido y, con los ojos empañados, dirigió una mirada solemne hacia el final del pasillo, donde sólo había una severa pared blanca.
#1090
27/06/2010 17:15
Aitor Carrasco:
Escucha a Mariano y duda unos momentos - Y... y donde coño sacamos la llave? - Pregunta con interes apoyando los brazos en la mesa - Que , vamos y narcotizamos a otro celador? , porque en menos de un día entre chloroformo y pistolas... , estamos dejando el lugar limpio de encargados... - Exclama esbozando media sonrisa - Vamos que no se como no se extrañan de que el número de personas con bata blanca a disminuido en estos últimos dias , no me jodas , que parecemos los cazafantasmas
Escucha a Mariano y duda unos momentos - Y... y donde coño sacamos la llave? - Pregunta con interes apoyando los brazos en la mesa - Que , vamos y narcotizamos a otro celador? , porque en menos de un día entre chloroformo y pistolas... , estamos dejando el lugar limpio de encargados... - Exclama esbozando media sonrisa - Vamos que no se como no se extrañan de que el número de personas con bata blanca a disminuido en estos últimos dias , no me jodas , que parecemos los cazafantasmas
#1091
27/06/2010 17:22
Baja la mirada y se echa en sollozos
Mariano:
-Jeje... si... yo... yo creo que lo mejor que puedo hacer es quedarme aquí sabeis... no... no creo que deba irme sabes... yo... demasiado he hecho por hoy ya... me quedaré aquí... con Don Lorenzo... se que podrás solo con todo Aitor... eres un fuera de serie... jeje... (snif)
Bajaba su mirada y apenas podía hablar... no tenía formar de contenerse... miraba de evz en cuando a Don Lorenzo pero este parecia mas bien preocupado por recuperarse de su estado anterior que estar pendiente de la conversación, finalmente, suspiró fuertemente y se hecho al sofá boca abajo... sollozando
-Vete Aitor...
Mariano:
-Jeje... si... yo... yo creo que lo mejor que puedo hacer es quedarme aquí sabeis... no... no creo que deba irme sabes... yo... demasiado he hecho por hoy ya... me quedaré aquí... con Don Lorenzo... se que podrás solo con todo Aitor... eres un fuera de serie... jeje... (snif)
Bajaba su mirada y apenas podía hablar... no tenía formar de contenerse... miraba de evz en cuando a Don Lorenzo pero este parecia mas bien preocupado por recuperarse de su estado anterior que estar pendiente de la conversación, finalmente, suspiró fuertemente y se hecho al sofá boca abajo... sollozando
-Vete Aitor...
#1092
27/06/2010 17:23
Adonis Angulo se encontraba en el gimnasio de la clínica, tomando una bebida isotónica.
Era un hombre joven, entre los 30 y 40 años, que se pasaba el día haciendo de su cuerpo una máquina de combate.
Para él no se trataba de ejercicio o entrenamiento, sino de algo aún más profundo, el culto al cuerpo, a su propio cuerpo, el más perfecto que había visto y conocido en su vida.
Se colocó la toalla alrededor del cuello, acalorado.
Los cercos de sudor le rodeaban las axilas y el cuello, y cada vez sentía más húmeda la estrecha camiseta que vestía su poderoso torso.
Se colocó frente al espejo, y comenzó a hacer poses para observarse desde toda perspectiva.
Necesitaba una ducha.
Se preguntaba si alguna de aquellas golfas disfrazadas de enfermera le visitarían en breve para recordarle que tenía cita con Lázaro Orozco.
Aquel tipo se le antojaba insufrible, pero sería capaz de soportar la sesión diaria si le acompañaba una enfermera, que junto con el deporte, eran su mayor afición (y perdición).
No hacía mucho le sorprendieron manteniendo relaciones sexuales con una de ellas en los baños, y Orozco se encargó de endurecer su tratamiento.
Dejar la droga no era fácil...
Durante años había pertenecido al crimen organizado, y en un principio, cuando tan sólo era el chico de los recados, le pagaban con cocaína.
Él, novato e ingenuo, siempre la había aceptado.
Fueron muchos los años que así pasaron, de modo que cuando comenzaron a pagarle como Dios manda y recibía cantidades portentosas, él mismo se costeaba la cocaína, comprándosela cada viernes a un compañero de billares.
Necesitaba su dósis, y malhumorado, esperó a su contacto sentado junto a las pesas, tras cambiarse la sudada camiseta.
Adonis Angulo
¿Dónde coño se han metido esas enfermeras?-se enrojeció tras mirar el reloj, comprobando como la cocaína se demoraba un minuto tras otro.
Era un hombre joven, entre los 30 y 40 años, que se pasaba el día haciendo de su cuerpo una máquina de combate.
Para él no se trataba de ejercicio o entrenamiento, sino de algo aún más profundo, el culto al cuerpo, a su propio cuerpo, el más perfecto que había visto y conocido en su vida.
Se colocó la toalla alrededor del cuello, acalorado.
Los cercos de sudor le rodeaban las axilas y el cuello, y cada vez sentía más húmeda la estrecha camiseta que vestía su poderoso torso.
Se colocó frente al espejo, y comenzó a hacer poses para observarse desde toda perspectiva.
Necesitaba una ducha.
Se preguntaba si alguna de aquellas golfas disfrazadas de enfermera le visitarían en breve para recordarle que tenía cita con Lázaro Orozco.
Aquel tipo se le antojaba insufrible, pero sería capaz de soportar la sesión diaria si le acompañaba una enfermera, que junto con el deporte, eran su mayor afición (y perdición).
No hacía mucho le sorprendieron manteniendo relaciones sexuales con una de ellas en los baños, y Orozco se encargó de endurecer su tratamiento.
Dejar la droga no era fácil...
Durante años había pertenecido al crimen organizado, y en un principio, cuando tan sólo era el chico de los recados, le pagaban con cocaína.
Él, novato e ingenuo, siempre la había aceptado.
Fueron muchos los años que así pasaron, de modo que cuando comenzaron a pagarle como Dios manda y recibía cantidades portentosas, él mismo se costeaba la cocaína, comprándosela cada viernes a un compañero de billares.
Necesitaba su dósis, y malhumorado, esperó a su contacto sentado junto a las pesas, tras cambiarse la sudada camiseta.
Adonis Angulo
¿Dónde coño se han metido esas enfermeras?-se enrojeció tras mirar el reloj, comprobando como la cocaína se demoraba un minuto tras otro.
#1093
27/06/2010 17:38
Aitor Carrasco:
Observa al Sub.Inspector arqueando una ceja y tras varios segundos de silencio , el agente se levanta de su sitio - A que te pego? - Dice claramente sin dejar de mirar a Mariano - Tu , te vas a venir conmigo y te vas a dejar de gilipolleces , vamos a coger la llave , vamos a subir al sector 5 y vamos a meternos con la puta creme , de la creme en asesinos , estamos?? - Informa el agente mirando fijamente a su superior - Asique venga - Apura Aitor dandose la vuelta y abandonando el comedor , poniendo dirección al ascensor
Observa al Sub.Inspector arqueando una ceja y tras varios segundos de silencio , el agente se levanta de su sitio - A que te pego? - Dice claramente sin dejar de mirar a Mariano - Tu , te vas a venir conmigo y te vas a dejar de gilipolleces , vamos a coger la llave , vamos a subir al sector 5 y vamos a meternos con la puta creme , de la creme en asesinos , estamos?? - Informa el agente mirando fijamente a su superior - Asique venga - Apura Aitor dandose la vuelta y abandonando el comedor , poniendo dirección al ascensor
#1094
27/06/2010 17:48
Su compañero medio lo anima pero aun así le costaba un mundo levantarse...
Mariano:
-Bueno bueno... no nos pongamos agresivos... reconócelo Aitor... soy un peligro... mato a dos celadores... golpeo a pacientes... viejos chocheando por meterme cerveza.... ¿Qué será lo siguiente?... ¿Meterme de culo en el trasero de uno de esos condenados caballos?... buaf...
Seguía sollozando pero poco a poco caminaba detrás de Aitor
-Bueno... te... te voy a acompañar pero lleva la iniciativa tu por favor... lo último que quiero es matar a nadie más...
Saca su arma y estira el brazo para que aitor la cojiera, pero estaba lejillos y no podía alcanzarla, y algunos pacientes salian disparados gritando socorro
-Ui... corre... corre joder....
Mariano:
-Bueno bueno... no nos pongamos agresivos... reconócelo Aitor... soy un peligro... mato a dos celadores... golpeo a pacientes... viejos chocheando por meterme cerveza.... ¿Qué será lo siguiente?... ¿Meterme de culo en el trasero de uno de esos condenados caballos?... buaf...
Seguía sollozando pero poco a poco caminaba detrás de Aitor
-Bueno... te... te voy a acompañar pero lleva la iniciativa tu por favor... lo último que quiero es matar a nadie más...
Saca su arma y estira el brazo para que aitor la cojiera, pero estaba lejillos y no podía alcanzarla, y algunos pacientes salian disparados gritando socorro
-Ui... corre... corre joder....
#1095
27/06/2010 17:53
FÉLIX:
El psicólogo, a caballo entre el desconcierto y la expectación, continuaba contemplando la austera pared en la que el pasillo en el que se encontraba se bifurcaba en otros dos, cuando de repente Aitor y Mariano pasaron frente a ella.
-¡Mira! -chilló el psicólogo, abriendo los ojos y la boca e izando una mano para señalarles con el dedo índice, pero los agentes ya habían desaparecido. Intrigado, Félix solapó los brazos al cuerpo y corrió hacia allí, meneando los hombros con cada zancada. Al alcanzar la esquina, la dobló con la cabeza para espiar a Aitor y Mariano, que se alejaban en dirección a un ascensor. El psicólogo retrocedió diestramente, y se mesó la barbilla, pensativo- ¡Mariano... ha escapado, Montejo! ¡Y... es un perfecto psicópata! -exclamó espontáneamente, para después asumir el contenido de sus frases: ya no sólo tenía que proteger a Lola de sí mismo, sino ahora también de Mariano.
Félix Montejo había matado a dos personas, y había resuelto renunciar a la violencia y vivir pacíficamente... pero primero, tenía una última misión que cumplir.
Histérico, el psicólogo brincó hacia delante, abandonando su escondite, y corrió indignamente, chillando y aspavientando, hacia los agentes, hasta que finalmente les alcanzó y, jadeando, paseó junto a ellos durante algunos segundos- ¡Oh! ¡Qué casualidad! ¡Ustedes... son ustedes, y yo... soy yo, y aun así nos... hemos encontrado! ¡Hola! -exclamó de repente, fingiendo que el encuentro había sido casual y agitando la palma de la mano para saludar a Aitor y Mariano.
El psicólogo, a caballo entre el desconcierto y la expectación, continuaba contemplando la austera pared en la que el pasillo en el que se encontraba se bifurcaba en otros dos, cuando de repente Aitor y Mariano pasaron frente a ella.
-¡Mira! -chilló el psicólogo, abriendo los ojos y la boca e izando una mano para señalarles con el dedo índice, pero los agentes ya habían desaparecido. Intrigado, Félix solapó los brazos al cuerpo y corrió hacia allí, meneando los hombros con cada zancada. Al alcanzar la esquina, la dobló con la cabeza para espiar a Aitor y Mariano, que se alejaban en dirección a un ascensor. El psicólogo retrocedió diestramente, y se mesó la barbilla, pensativo- ¡Mariano... ha escapado, Montejo! ¡Y... es un perfecto psicópata! -exclamó espontáneamente, para después asumir el contenido de sus frases: ya no sólo tenía que proteger a Lola de sí mismo, sino ahora también de Mariano.
Félix Montejo había matado a dos personas, y había resuelto renunciar a la violencia y vivir pacíficamente... pero primero, tenía una última misión que cumplir.
Histérico, el psicólogo brincó hacia delante, abandonando su escondite, y corrió indignamente, chillando y aspavientando, hacia los agentes, hasta que finalmente les alcanzó y, jadeando, paseó junto a ellos durante algunos segundos- ¡Oh! ¡Qué casualidad! ¡Ustedes... son ustedes, y yo... soy yo, y aun así nos... hemos encontrado! ¡Hola! -exclamó de repente, fingiendo que el encuentro había sido casual y agitando la palma de la mano para saludar a Aitor y Mariano.
#1096
27/06/2010 18:10
Aitor Carrasco:
Caminaban hacia el cúbiculo dispuestos a inspeccionar lo que prometía ser el sector mas siniestro de aquella clínica , al llegar a las puertas del elevador , ambos escuchan una voz a su espalda , y al volverse descubren al psicólogo - Hola Felix - Saluda mirandole momentaneamente , pues luego vuelve la cabeza a la pareja de puertas metálicas que limitaban el paso - Que , te unes a nosotros en la travesía para entrar en... el lugar donde residen los psicópatas maaaas peligrosos...? - Anuncia poniendo una voz macabra en la parte final de la frase - Al... al fin y al cabo nos has seguido para eso , no? - Exclama dejando por los suelos los esfuerzos de Felix por aparentar que su encuentro había sido pura casualidad - En fin... , lo que haremos es sencillo , esperar a que las puerta se ab... - En ese momento una campana procedente del ascensor resuena al lado de ellos , el numero 3 se ilumina en rojo y las puerta se abren , al otro lado un celador está apoyado en la pared del ascensor , Aitor no se lo piensa dos veces y al instante arremete contra el hombre llevando su brazo al cuello del individuo y apretando para evitar que grite - Venga , venga coño , no os quedeis ahí plantados , entrar! - Exige el agente sin dejar de asfixiar al celador - Mariano , pillale la llave , estará en su cinturón , la necesitamos para ir al sector 5 - Informa señalando con la cabeza la fila de números que reposaban en una chapa del ascensor , todos estaban provistos de botones normales , salvo el 5 , cual poseía una hendidura metálica...
Caminaban hacia el cúbiculo dispuestos a inspeccionar lo que prometía ser el sector mas siniestro de aquella clínica , al llegar a las puertas del elevador , ambos escuchan una voz a su espalda , y al volverse descubren al psicólogo - Hola Felix - Saluda mirandole momentaneamente , pues luego vuelve la cabeza a la pareja de puertas metálicas que limitaban el paso - Que , te unes a nosotros en la travesía para entrar en... el lugar donde residen los psicópatas maaaas peligrosos...? - Anuncia poniendo una voz macabra en la parte final de la frase - Al... al fin y al cabo nos has seguido para eso , no? - Exclama dejando por los suelos los esfuerzos de Felix por aparentar que su encuentro había sido pura casualidad - En fin... , lo que haremos es sencillo , esperar a que las puerta se ab... - En ese momento una campana procedente del ascensor resuena al lado de ellos , el numero 3 se ilumina en rojo y las puerta se abren , al otro lado un celador está apoyado en la pared del ascensor , Aitor no se lo piensa dos veces y al instante arremete contra el hombre llevando su brazo al cuello del individuo y apretando para evitar que grite - Venga , venga coño , no os quedeis ahí plantados , entrar! - Exige el agente sin dejar de asfixiar al celador - Mariano , pillale la llave , estará en su cinturón , la necesitamos para ir al sector 5 - Informa señalando con la cabeza la fila de números que reposaban en una chapa del ascensor , todos estaban provistos de botones normales , salvo el 5 , cual poseía una hendidura metálica...
#1097
27/06/2010 18:20
Cuando se disponen a entrar ya por fin en el ascensor, y después de dejar atrás a los pacientes asustados, guardo el arma de nuevo y se puso al lado de Aitor
Mariano:
-Joer tio... esto no puede seguir así eh... yo... yo si salgo de esta te juro que me meto a monje de clausura... madre mia...
De repente aparece Félix aparentando que llega de casualidad y les saluda, este le devuelve el saludo asustado... ya que no se sorprendió al no verle atado y con Don Lorenzo... pero actos eguido vió que sus intenciones eran otras... tras el comentario de Aitor, y cuando estaba apunto de decir un plan... que ni el mismo conocia... la puerta del ascensor se abre y aitor ni corto ni perezoso le agarra del cuello sujetandole con fuerza para que este ni se moviera ni gritara... tras la insinuación de este a que buscara la llave, se puso nervioso
-¿YO!?... jo... joder me cago en la leche pero como me metes en estos lios... que hoy no es mi dia joooder... que lo estoy diciendooo y no me haceisss caaaso....
ante la insistencia de aitor este sacó las manos hacia el celador y se puso a buscar
-Bueno bueno... a ver... en el cinturón no esta joder!!!... ahh ahhh... a ver... en la bata blanca dentro!!!.... NADA!.... maldición!!! en los bolsillos.... pe... pero hombre de dios que tienes hay dentro!!!!!
Saco su mano rápidamente del bolsillo tras notar algo duro y sin ser metalico
-Me cago en la puta Aitor que a este le esta poniendo el temita de que le aprietes el cuello... que esta como el caballo de bonanza coño!!!!!! Ensimismao perdioooo!!!... jodeeer.... jodeeeer ¡Pues... pues yo no meto más la mano hay coño ya!!!... ¡Qué lo aga Félix!
Se alejó de el y acercó a Félix a empujones hacia el celador que cada vez estaba más rojo sin aguantar la respiración
Mariano:
-Joer tio... esto no puede seguir así eh... yo... yo si salgo de esta te juro que me meto a monje de clausura... madre mia...
De repente aparece Félix aparentando que llega de casualidad y les saluda, este le devuelve el saludo asustado... ya que no se sorprendió al no verle atado y con Don Lorenzo... pero actos eguido vió que sus intenciones eran otras... tras el comentario de Aitor, y cuando estaba apunto de decir un plan... que ni el mismo conocia... la puerta del ascensor se abre y aitor ni corto ni perezoso le agarra del cuello sujetandole con fuerza para que este ni se moviera ni gritara... tras la insinuación de este a que buscara la llave, se puso nervioso
-¿YO!?... jo... joder me cago en la leche pero como me metes en estos lios... que hoy no es mi dia joooder... que lo estoy diciendooo y no me haceisss caaaso....
ante la insistencia de aitor este sacó las manos hacia el celador y se puso a buscar
-Bueno bueno... a ver... en el cinturón no esta joder!!!... ahh ahhh... a ver... en la bata blanca dentro!!!.... NADA!.... maldición!!! en los bolsillos.... pe... pero hombre de dios que tienes hay dentro!!!!!
Saco su mano rápidamente del bolsillo tras notar algo duro y sin ser metalico
-Me cago en la puta Aitor que a este le esta poniendo el temita de que le aprietes el cuello... que esta como el caballo de bonanza coño!!!!!! Ensimismao perdioooo!!!... jodeeer.... jodeeeer ¡Pues... pues yo no meto más la mano hay coño ya!!!... ¡Qué lo aga Félix!
Se alejó de el y acercó a Félix a empujones hacia el celador que cada vez estaba más rojo sin aguantar la respiración
#1098
27/06/2010 18:21
FÉLIX:
Perplejo, el psicólogo brincó hacia el interior del ascensor cuando Aitor agredió a su único tripulante. Una vez dentro, mientras el agente reducía al celador y Mariano rebuscaba en los bolsillos de éste en busca de la llave, Félix se apoyó en una esquina y se cruzó de brazos.
-Carrasco... ¿qué... intenta decir con eso de que les... estaba siguiendo? -preguntó, enarcando el ceño. Después, desvió la mirada hacia Mariano y se preguntó cuál sería el momento más oportuno para proceder con sus planes. En ese momento, el subinspector le agarró en un desesperado intento de ser sustituido en su tarea y Félix se zafó bruscamente, retrocediendo cuidadosamente para no pisar al celador contra el que Aitor forcejeaba, y agitó las palmas de las manos para adoptar una posición defensiva- ¡No me... ponga las manos encima, psicópata!
Perplejo, el psicólogo brincó hacia el interior del ascensor cuando Aitor agredió a su único tripulante. Una vez dentro, mientras el agente reducía al celador y Mariano rebuscaba en los bolsillos de éste en busca de la llave, Félix se apoyó en una esquina y se cruzó de brazos.
-Carrasco... ¿qué... intenta decir con eso de que les... estaba siguiendo? -preguntó, enarcando el ceño. Después, desvió la mirada hacia Mariano y se preguntó cuál sería el momento más oportuno para proceder con sus planes. En ese momento, el subinspector le agarró en un desesperado intento de ser sustituido en su tarea y Félix se zafó bruscamente, retrocediendo cuidadosamente para no pisar al celador contra el que Aitor forcejeaba, y agitó las palmas de las manos para adoptar una posición defensiva- ¡No me... ponga las manos encima, psicópata!
#1099
27/06/2010 18:39
Aitor Carrasco:
Escucha las palabras de Mariano y al mismo tiempo la pregunta de Felix , el barullo dentro del aparato era estruendoso - Me cago en la puta quereis callaros joder , que al final nos pillan! - Exclama en alto , dado una patada al botón que marcaba el sector 1 , las puertas del ascensor se cierran y el artilugio comienza a descender - A ver Mariano , dejate de gilipolleces y cogele la llave , la tiene que tener encima por cojones , asique venga!! - Exclama con dificultades pues el celador comenzaba a forcejear con el , intentando librarse: - Para!! , que pares!! - Exige el agente sin resultado , por lo que decide optar por la via rápida , con difultades consigue llevarse una mano a la parte trasera de la cintura y sacar la Magnum , seguidamente busca la ocasión y arremete contra la nuca del individuo con un culatazo , dejando a este inconsciente - Ala... solucionado el problema , ahora , todos buscar... - Anuncia guardandose la Magnum nuevamente.
Mientras tanto el ascensor seguía descendiendo y la campana marcaba que habían llegado al destino , pero antes de que las puertas se abriesen el Agente vuelve a presionar otro botón , el sector 4 , por lo que el ascensor vuelve a ponerse en marcha - En cuanto a lo de seguirnos... , pues que usted ya tiene unos añitos me comprende y que bueno , todavia está jadeando , quiero decir que ha venido a la carrera hacia nosotros... Felix - Aclara rebuscando en los bajos del pantalon - Haz algo util... , nose , cuando llegemos al piso , vuelve a presionar el botón y repite la acción hasta que encontremos la llave , no podemos dejar que nadie entre aquí , y mucho menos que las puertas se abran
Escucha las palabras de Mariano y al mismo tiempo la pregunta de Felix , el barullo dentro del aparato era estruendoso - Me cago en la puta quereis callaros joder , que al final nos pillan! - Exclama en alto , dado una patada al botón que marcaba el sector 1 , las puertas del ascensor se cierran y el artilugio comienza a descender - A ver Mariano , dejate de gilipolleces y cogele la llave , la tiene que tener encima por cojones , asique venga!! - Exclama con dificultades pues el celador comenzaba a forcejear con el , intentando librarse: - Para!! , que pares!! - Exige el agente sin resultado , por lo que decide optar por la via rápida , con difultades consigue llevarse una mano a la parte trasera de la cintura y sacar la Magnum , seguidamente busca la ocasión y arremete contra la nuca del individuo con un culatazo , dejando a este inconsciente - Ala... solucionado el problema , ahora , todos buscar... - Anuncia guardandose la Magnum nuevamente.
Mientras tanto el ascensor seguía descendiendo y la campana marcaba que habían llegado al destino , pero antes de que las puertas se abriesen el Agente vuelve a presionar otro botón , el sector 4 , por lo que el ascensor vuelve a ponerse en marcha - En cuanto a lo de seguirnos... , pues que usted ya tiene unos añitos me comprende y que bueno , todavia está jadeando , quiero decir que ha venido a la carrera hacia nosotros... Felix - Aclara rebuscando en los bajos del pantalon - Haz algo util... , nose , cuando llegemos al piso , vuelve a presionar el botón y repite la acción hasta que encontremos la llave , no podemos dejar que nadie entre aquí , y mucho menos que las puertas se abran
#1100
27/06/2010 19:00
FÉLIX:
Malhumorado, el psicólogo suspiró y, contorsionándose para no tocar a Mariano, atravesó el ascensor y se dirigió a la esquina opuesta, donde se localizaban los botones con los que se dirigía al ascensor a una u otra planta. Una vez allí, se cruzó de brazos de nuevo, frunció el ceño, apretó los labios y apartó la mirada. Después, alargó una mano y, deseoso de demostrar su valía, presionó violenta y consecutivamente los cinco botones, aunque el quinto, que en realidad era una ranura, no se inmutó. Debido a esto, Félix se enfadó y comenzó a respirar virulentamente. Asimismo, se avergonzó, preguntándose qué pensarían Aitor y Mariano al descubrir que sólo era capaz de presionar cuatro botones y no cinco.
-¡Nadie me... humilla y... vive para... contarlo! ¡Di adiós, perfecto botón! -exclamó el psicólogo, que deliberadamente había desenfundado la 9milímetros y apuntaba con ella a la ranura en la que debían introducir la llave que portaba el celador.
Félix cerró los ojos con fuerza, y se dispuso a disparar...
Malhumorado, el psicólogo suspiró y, contorsionándose para no tocar a Mariano, atravesó el ascensor y se dirigió a la esquina opuesta, donde se localizaban los botones con los que se dirigía al ascensor a una u otra planta. Una vez allí, se cruzó de brazos de nuevo, frunció el ceño, apretó los labios y apartó la mirada. Después, alargó una mano y, deseoso de demostrar su valía, presionó violenta y consecutivamente los cinco botones, aunque el quinto, que en realidad era una ranura, no se inmutó. Debido a esto, Félix se enfadó y comenzó a respirar virulentamente. Asimismo, se avergonzó, preguntándose qué pensarían Aitor y Mariano al descubrir que sólo era capaz de presionar cuatro botones y no cinco.
-¡Nadie me... humilla y... vive para... contarlo! ¡Di adiós, perfecto botón! -exclamó el psicólogo, que deliberadamente había desenfundado la 9milímetros y apuntaba con ella a la ranura en la que debían introducir la llave que portaba el celador.
Félix cerró los ojos con fuerza, y se dispuso a disparar...