El Rincón de Francisca y Raimundo:ESTE AMOR SE MERECE UN YACIMIENTO (TUNDA TUNDA) Gracias María y Ramon

Os dejo otro trozito de mi relato.

Francisca se encontraba en el despacho. Mauricio acababa de marchar después de informarla de todas las noticias de la finca y la conservera. Casi todas malas. “Inútiles” pensó. Porque siempre debía de ser ella la que resolviese todos los desaguisados. Meneo la cabeza. Intento concentrarse en una de las múltiples cuentas que debía de hacer. Pero nada le cuadraba. Llevaba horas intentando que todo encajase pero no lo hacía. Cuanto más segura estaba de que lo resolvería mayor era su error. Llevaba horas sentada frente al papel. Eso era estaba sentada pero no se concentraba. No atendía a lo que escribía. Solo podía pensar en él. “4 días” pensó “4 días sin verlo”. La noche en la que se despidieron no se equivocó. Aquella noche soñó con él. Bueno, aquella noche y todas las siguientes. Ya no solo soñaba por la noche. Soñaba por el día. Soñaba despierta. Sonrió. No verlo la estaba matando por dentro pero su recuerdo hacia que cada día se levantase con una sonrisa entre los labios. “Concéntrate Francisca” se reprendió. Miro al papel. Comenzó a escribir. Lentamente. Intentando no equivocarse. “Ya está” pensó. Reviso las cuentas y de nuevo no cuadraban. Se enfadó. Consigo misma. Con la finca. Con las cuentas. Con el papel. Lo arrugo entre sus manos. Y lo lanzó hacia delante. Hacia la puerta. Justo en ese momento estas se abrieron. La bola de papel chocó con el cuerpo del joven que despreocupado había abierto las puertas.
Francisca abrió los ojos como platos. Había arrojado un papel en un deje de ira. Nada de malo había en eso. Pero su hijo había aparecido de la nada justo en ese instante. Reprimió una risa. Ver la cara del muchacho en ese momento no tenía precio. Meneo la cabeza. Debía estar avergonzada. Lo estaba. A fin de cuentas una señora como ella no andaba arrojando papeles aquí y allá.
Tristán frunció el ceño. ¿Qué diantres…? Bajo la mirada. Un papel arrugado se encontraba junto a sus pies. El mismo papel que al abrir la puerta le había dado justo en el pecho. Miro a su madre. Estaba sentada. Con el semblante entre avergonzado y divertido. Ella lo había arrojado. ¿Porque motivo?

- Lo siento hijo – se disculpó.- esas malditas cuentas…- meneo la cabeza. Frustrada.

- No se preocupe madre –dijo el joven tranquilo- a todos alguna vez nos da por arrojar cosas en un momento de enfado.-Hizo una leve pausa.- Aunque no siempre se tiene la suerte de darle a otro con el objeto lanzado.- termino entre divertido y reflexivo. Una hermosa sonrisa asomo por sus labios. Meneo la cabeza. Sin perder la sonrisa.- ¿Y qué es lo que ocurre con las cuentas?-preguntó. Recogió el papel que se encontraba en el suelo. Lo estiro. Intentando plancharlo con la ayuda de la mesa. Se sentó. Cogió una pluma. Lo miro. Examinando los datos que allí estaban plasmados. –hay algo que no va bien.- dijo en voz baja. Hablando consigo mismo. Pensativo.

- Eso ya lo sé yo sin ayuda de nadie.- dijo Francisca levemente alterada. –llevo horas buscando el error pero es…- no pudo terminar Tristán la interrumpió.

-Aquí esta. No debió mirar muy bien. El error esta en las cantidades. Lo ve.- dijo el joven enseñándole la hoja a su madre. Espero a que ella lo observara y después comenzó a resolver aquel desaguisado.

Claro que lo veía. Pero porque ahora. Era un error que con solo dedicar unos minutos a buscarlo lo habría encontrado. “Es que no te concentras Francisca” se dijo a sí misma. Meneo la cabeza. Por supuesto que no se concentraba. Como iba a hacerlo si él ocupaba sus pensamiento. Sonrió. Miro a su hijo. Estaba concentrado terminando de solucionar los problemas que ella no había conseguido ver.
El muchacho levanto la mirada del papel. Se lo tendió a su madre. – Si tiene un poco de tiempo le aconsejaría que lo pasase a otra hoja, como ve este papel no es muy presentable que digamos.- dijo mientras sonreía divertido.

Ambos se quedaron en silencio. Francisca guardaba el folio en una de las carpetas de la finca. Tristán la observaba. Suspiro. La sonrisa se le borro del rostro dejando paso a la tristeza y el anhelo. Él quería a su madre. Ella le había dado la vida. Nunca dudo de ese sentimiento hacia ella pero a veces llegaba a ser insoportable. Tenía un carácter duro. Sabía que su madre no era una mala persona pero… tampoco sabía el porqué de sus prontos. No sabía porque se comportaba así. Desde niños ella los había protegido. Los había cuidado. Pero no tenía muestras afectivas hacia ellos. Nunca los había achuchado. Nunca les había dado un beso porque sí, porque le apeteciese. Si debían de llorar los faldones de su madre no era el sitio más apropiado. Pero cuando necesitaban un consejo ella los escuchaba, y siempre les daba la respuesta más acertada. A veces ni siquiera necesitaba pedírselo. Siempre estaba hay. En la sombra. Vigilando que nadie les hiciese daño. Alegrándose de sus victorias. Llorando sus derrotas. Pero siempre en silencio. En la sombra. Recordó su última discusión. Aun no le había pedido perdón. Ni ella ni él habían tenido tiempo suficiente para hablar. Ahora lo tenían.
-Madre- dijo Tristán suavemente.- yo… lo siento mucho. Siento como le hable hace unos días. No fue mi intención pero usted…

Francisca lo interrumpió. – No pasa nada Tristán.- dijo tiernamente.- No debí de haber dicho lo que te dige. Y mucho menos en aquel momento. Se lo que estás pasando con… Martin- su rostro cambio al recordar el paradero de su nieto.- Aunque no puedes negar que tengo parte de razón.- terminó sin perder ese orgullo característico de los Montenegro.

Tristán la miro incrédulo. Hasta cuando se disculpaba debía de salir ganando. Pero el hecho de que se hubiese disculpado ya era un gran paso. Sonrió. – Usted nunca cambiara madre.- dijo el muchacho sonriente.

-Francisca se levantó de la silla. Y salió de detrás del escritorio. – acaso quieres que lo haga.- pregunto con una sonrisa ladeada.

-No.- contesto el muchacho levantándose. Quedando frente a ella. Su madre.

- Sabes hijo- dijo Francisca reflexiva.- a veces alguien te empuja para que hagas algo que no quieres. Creyendo que es lo mejor para ti. Te dicen que todo cambiara y que serás feliz. Cuando te das cuenta de que ellos se han equivocado. Cuando tu vida se convierte en un callejón sin salida. En un pozo oscuro. Ya es demasiado tarde para pedirle explicaciones. Para reprocharles que tu vida se volviese una pesadilla. Para hacerles ver que todos te odian por su culpa. Ya es demasiado tarde para volver atrás. Pero nunca es demasiado tarde para avanzar. Olvídate de todos y de todo al tomar una decisión. Después no podrás reprocharle nada a nadie. Pero si te equivocas. Si hierras. No te quedes parado. Sigue hacia delante. Consigue lo que quieres sin que nadie te diga lo que debes de hacer.

- Madre ¿A qué viene esto ahora?- preguntó.

-Un día lo entenderás.- contestó Francisca. Acaricio suavemente el rostro de su hijo. Sonrió. Un día lo entendería. Estaba segura. Miro el reloj que estaba sobre la chimenea. Las 10.30.- He de irme. Tenía pensado llegar a la plaza aprovechando el paseo que la doctora me aconsejo.

Tristán que aún no había entendido nada contestó.-Vaya. Yo me quedare aquí tengo que revisar unos documentos de la conservera.

Francisca lo beso tierna en la frente. Sonrió. Se giró. Caminando hacia la puerta. Retomando su característica pose orgullosa.
“¿Qué habrá querido decir con eso?” se preguntó Tristán. Confiaría en su madre. Algún día lo entendería. Se giró en dirección al escritorio. Se sentó. Cogió una de las carpetas. La abrió y se perdió entre los papeles. Estudiando cada uno de los datos que estaban impresos en ellos.

Francisca miró a un lado y a otro. Se cercioró de que no había nadie mirándola. La gente pasaba a su lado y no se percataban de que pasaban al lado de la gran Francisca Montenegro… se había hecho pequeña. Ese condenado tabernero la había desarmado. La había dejado sin palabras y sobre todo…¡la había besado! Que mezcla de sentimientos tenia..¡le odiaba! ¡le quería!¡le odiaba!¡le deseaba! Da igual….se vengaría! Un Ulloa jamás podía quedar por encima de una Montenegro!
Salió de su escondite y se recompuso un poco…. Se coloco su precioso vestido de encaje negro y se atusó el sombrero. El muy idiota! La había besado y ni siquiera había reparado en su aspecto…venganza y venganza!! Eso era lo que tenía que hacer…


Salió del pueblo camino a la casona… iba aturdida…30 años de enemistad y en una tarde se había ido al garete y menos mal que no estaba Pedro…uf si los llega a ver…ahora todo el pueblo sabría que ella, una Montenegro y el tabernero se habrían besado.
En medio de estos pensamientos el Francisca dió un traspiés y cuando estuvo a punto de caer al suelo unos brazos la sujetaron por la cintura.

-Cuidado Francisca, no creo que una distinguida señora quede bien rodando por el suelo.
Francisca se dio la vuelta pero aun seguía cogida por la cintura. No pudo evitar ruborizarse.

-Tu otra vez. Raimundo Ulloa…quítame las manos de encima…. Grito altiva.

-Vaya, eso no decías cuando agarrabas mis cuello mientras me besabas….sonrió Raimundo.


Hubo un instante de silencio en el que Francisca creía morirse. Finalmente carraspeó y se zafó de los brazos de Raimundo.

-¿ qué quieres Raimundo? Me estas siguiendo? Preguntó Francisca.


Raimundo la miraba y sorprendido vio como Francisca había cambiado. Ya no se mostraba altiva y orgullosa sino dulce y expectante…Dios, seguía estando tan guapa…tenía ganas de besarla pero no…no podía tentar de nuevo a la suerte…con un beso de la Montenegro ese día ya había suficiente…se barruntaba que si de nuevo la besaba Francisca se lo tomaría mal y nunca podrían arreglar sus cuitas.

-Solo quiero darte tu abanico. Te lo dejaste en el colmado y también estos dulces para Martin-. Raimundo levantó sonriente una bolsa con dulces y caramelos. – No creo que a Martin le haga gracia que no le lleves sus regalos.

Estaba tan dulce….se había acordado de los dulces y de su abanico.

Quería volver a besarlo, a abrazarlo y a sentir su cuerpo pegado al suyo….pero no,..había jurado vengarse y así lo haría…no sabía cómo pero así lo haría.


-Se te agradece el gesto…pero ya puedes marcharte…no tienes nada más que hacer aquí…no vaya a ser que vuelvas a perder la compostura y vuelvas a besarme…dijo Francisca..

-Aaah Francisca Montenegro….eres imposible..!!! ni siguiera un beso con todo el amor del mundo puede bajarte de tu orgullo..eres altanera y distante- grito desesperado Raimundo.
-Yo nunca quise que me besaras Raimundo Ulloa, no lo deseaba, no me gustó…. Le respondió Francisca.

-Ah sii?...pues te juro Francisca Montenegro que nunca, escúchame bien, nunca jamás volveré a besarte, a mirarte ni a pensarte….y esta es mi última palabra…dijo Raimundo dando media vuelta y caminando hacia el pueblo.



Francisca sonrió hacia sus adentros y vio alejarse a Raimundo…Corrió hacia él y le agarró del brazo…Raimundo dio media vuelta y sin esperárselo Francisca besó sus labios. Un beso fuerte que le arranco las entrañas….con pasión y con amor…con el amor de siempre…el que no muere nunca. Se quedaron mirandose a los ojos...y dejaron ver una tímida sonrisa.


Francisca se separó de él, dejando a Raimundo sin palabras.

-Tabernero…en nuestra relación la última palabra la tiene la Montenegro…y ya te dije que me vengaría..
Francisca dio media vuelta y dejo a Raimundo ahí plantado mirándola desde lejos. Mientras ella caminaba hacia la casona, sonriendo…¡había besado dos veces a su amor! A su eterno amor.

tías que bonitoooooooo, Fran la paca despistada, normal, cuatro días sin ver a su amor....yo estaría muerta , me ha encantado la escena con su hijo

Tocaya...ja ja que mala leche tiene Francisca, después de un beso así no hay que irse, hay que consumar y que encanto es Rai llevándole las cosas, es para comérselo

Keraaaaa me descojono contigo, me encanta Francisca en plan loba es genial, pobre Rai, lo va a dejar más seco que un bacalao
Seguiiiiiiiiiiiid

Ina, lo primero es lo primero, pero no te quejes que este foro puede darte mogollón de ideas para tus clases por ejemplo ameba,: hipólito, ejemplo de ADN defectuoso: Juan, ejemplo de parásito: cualquiera de los guionistas

Mariajose que bueno lo del beso en el colmado me ha gustado mucho y la continuación también así que sigue guapa :)

Ruth primero lo de la reconquista de Rai me encanta y lo de la merienda también. Es precioso ver como Francisca aunque no se acuerda de nada siente cosas por él si es que su amor es increíble… y Raimundo controlándose tampoco tiene precio jajaj me encanta. Y lo segundo esa Paca hasta las trancas de morfina y el otro con el pecho al descubierto… jajaja no quiero pensar lo que va a ocurrir hay.

Natalia, sabia que Carmen no lo habia aceptado tan bien. La ODIO. Tienes que hacerla testigo de uno de los besos de Francisca y Raimundo, de esos que quitan el sentido, para que vea lo que ella nunca HA TENIDO ni TENDRÁ entre sus brazos.

Menudas clases de biología que se puede dar mentando a esta serie jaja.

por si de esta me banean...un placer chicas!!!

Continuación

-Fra..Francisca…¿Qué estás haciendo?- Raimundo retrocedía a medida que ella avanzaba hacia él. Una de las vigas le cerró el camino a su espalda.

-Estás atrapado, tabernero- Francisca rió. –Completamente a mi merced- dijo mientras deslizaba lentamente su dedo índice por el pecho de él desde el ombligo hasta que llegó a su cuello.

Raimundo tembló ante el suave contacto. Estaba clavado en el sitio, no podía moverse, ni siquiera respirar. Francisca tenía los ojos enrojecidos y con un brillo travieso. Él estaba…¡sin camisa! Y lo peor de todo…¡ella le estaba tocando! ¿en serio crees que es lo “peor”,Raimundo? Tiemblas como un muchacho.¡Maldita voz interior! Miró de nuevo a Francisca. Algo raro le sucedía, eso estaba claro.

-Francisca…¿de verdad,que tienes?- trató de parecer preocupado, cuando lo que estaba era…ardiendo.

Ella se encogió de hombros y puso un dulce mohín en sus labios, que Raimundo deseó borrar con sus besos. Meneó la cabeza alejando esos pensamientos.

-Nunca me he sentido mejor…Ulloa- dijo esto último a apenas un centímetro de su boca. Se separó de él y comenzó a caminar a su alrededor –El doctor Guerra me dio…- movió su mano en el aire mientras se lo explicaba -…una medicación que me ha dejado como nueva- Se volvió hacia él –tu también estás estupendamente, por lo que veo- le dijo mientras recorría con su mirada todo su pecho y se humedecía lentamente los labios.

Raimundo sintió un latigazo de deseo en una zona peligrosa de su cuerpo. Estaba empezando a ponerse realmente…tenso.

-Francisca, estás bajo los efectos de la medicación. Entiende... no estás bien- tuvo que hacer acopió de toda su fuerza de voluntad, ya que el cerebro estaba dejando de funcionarle con normalidad.

Francisca se colocó justo detrás de él. -¿Así que crees que no estoy bien, Raimundo?- deslizó una mano por su nuca. Él comenzó a respirar con dificultad. -¿Ya…no me deseas?-. Sus palabras y las caricias en su nuca le hicieron perder la razón. Se giró bruscamente atrapando las manos de Francisca y colocándolas detrás de su espalda haciendo que sus cuerpos se tocaran completamente.

-Estás jugando con fuego, Francisca- le miró intensamente.

-Veo que no es necesario que contestes mi pregunta Raimundo- sonrió malvada y traviesa. –Tu cuerpo…- miró hacia abajo -…ha contestado por ti…- De repente se acercó a él y lamió sus labios con la punta de su lengua. -¿Por qué no dejamos de hablar?-

Raimundo creyó morirse. Aún así, buscó un resquicio de voluntad para preguntarle: -Estás a tiempo de salir de aquí Francisca…- su voz sonaba ronca.

-No quiero irme a ningún lado Raimundo- apoyó su frente en la de él. –quiero…quedarme aquí contigo…- susurró mirándole ya a los ojos.

Raimundo insistió. –Puede que mañana te arrepientas de esto. Además…- prosiguió –estás medio drogada por la medicación-

Francisca sonrió. –No estoy tan drogada Raimundo- le besó suave los labios –estoy lo suficientemente consciente para saber lo que estoy haciendo,y recordarlo mañana- le besó de nuevo. –Y ahora, haz el favor de callarte,condenado tabernero- le miró a los ojos. –Hazme tuya de una vez-

Raimundo no necesitó ninguna indicación más. Arrancó de un tirón los botones del vestido de Francisca que enseguida quedó desnuda ante sus ojos. Estaba realmente preciosa. Él casi se cae intentando quitarse los pantalones, lo que hizo que Francisca ahogase una risita por la situación. Pero no pudo evitar sentirse derretida antes la desesperación de Raimundo por ella. La misma desesperación que ella tenía por sentirle. Abrió los brazos y recogió a Raimundo, que se refugió en ellos.Se besaron como dos locos, como dos desesperados que se morían por sentirse de nuevo.

Raimundo apenas tenía ya dolor por su herida. Solo sentía el cuerpo ardiendo de deseo por ella. Como siempre. La levantó a horcajadas sobre él y la llevó hasta una de las mesas de la posada. Allí la embistió una y otra vez, intentando calmar las ansias que tenía de ella.Francisca solo podía jadear ante su ataque. Los dos alcanzaron juntos las estrellas. Cansados y sudorosos se abrazaron intentando calmar sus respiraciones.

-Mañana…- habló Raimundo –recuérdame que le de las gracias al Doctor Guerra- y rió apoyado en el hombro de Francisca.

Ella sonrió -Se las daremos los dos, Raimundo- acarició su rostro. -¿Sabes ya que te amo?-

-No mas que yo a ti,mi pequeña- besó sus labios –No más que yo a ti….-

FIN

que pasion...!joe que bien escribis....me teneis enganchada....

aqui entre expediente y expediente....historia de francisca y raimundo..!! madre mia no me voy a concentrar y tengo que terminaar para mañana!!

gracias por vuestas historias chicas!!

te prometo que como se les ocurra bannearte escribiré en solidaridad el relato más pornográfico que se me ocurra y te aseguro que con 6 horas seguidas de clase que voy a tener mañana, se pueden ocurrir infinidad de ideas.
Que pasada chica, como escribes

gracias por la solidaridad mariajo se agradece...!
me encantaría leer "ese" relato tuyo jajaja

EDITO: Rocio,me encanta tu relato,ya lo sabes.Me parece precioso,tienes mucha dulzura escribiendo.Sigueee!!

mariajose,está muy bien lo que has escrito!! esa Paca vengativa me A-PA-SIO-NA.
espero que sigas escribiendo...

kera tus fans te lo piden, ¡¡Queremos meriendaencuentro light!! ¡¡QUEREMOS MERIENDA ENCUENTRO LIGH!! ¡¡QUEREMOS MERIENDA ENCUENTRO LIGH!!

que sí tía Miri, que un aquí te pillo aquí te mato no me pega, que la Paca en estos instantes no se acuerda de él para nada, además no me parece mal que se quede con calentón, así las ansias serán mayores, je je

¿Porque no me sacan esto en la serie? Con razón disfruto más de este foro que de la serie.. Kerala enhorabuena por dejarme otra vez con la boca abierta

Joee, al fin terminé... Si es que... esto de currar 20 horitas... ¬¬

Chicas, voy a cenar y después... jejejejejejeejeje... mi perversa mente os dejará algún regalito

Ta luegoo..

Por favor,que grandes sois, ASI DA GUSTO VENIR AQUI, dios como adoro este hilo, en unas pocas horas habeis llenado esto de un montón de relatos, por favor, porque no me gustan las mujeres que si no me casaba con cada una de vosotras xDDDDDDDD asi de claro.

Lourdes anda que me encantan tus ejemplos de biología,bien clarito me ha quedado asi,bien clarito jajajaja. Me parto xDDDDD ¿Regalito?¿He leido regalito? SIIIIIIIIIIIIIIII

Mariajose no digas eso!Escribes muy bien,asi que nada de decir lo contrario!!Uy uyyyyyyyyyyyy en el colmado y luego encuentro posterior, me encanta!sigue!!!

Natalia!!!!Ya sabia yo que la Carmencita no era de fiar y la iba a liar ¬¬ por favor que la Paca la vuelva a poner en su sitio GRACIAS, que escena más bonita has escrito por cierto,que bonita, que despertar,que pasión jejeje <3

Ruth cómo adoro tus relatos esponteaneos esos que se te ocurren, todas las variantes de Paca borracha,drograda ME LAS QUEDO jajajajaj porque va cómo una loba a por su Rai y eso me encanta, OMG. Y nada, a ver si pronto merendamos eh?xD

Rocío, es que ya te lo he dicho pero describes con una sensibilidad que da gusto, me ha encantado esa conversación con Tristán, mucho. A ver si haces que se encuentre,que les va a dar algo a los pobres ;) que la pobre ya ni se concentra :P

Alex mil gracias por el video :D

si es que este hilo es el mas divertido jejeje
Silvia,ya sabes...mis idas de olla xD (buscando imágenes para el video,vi a la Paca drogada y al otro sin camisa,y mi mente ató cabos jejeje)

EDITO: ya os subo la merienda mañana jeje

Este hilo y el de Alfonso y Emilia los más creativos, imaginativos, con miles de historias, relatos interesantísimos, y encima con las creaciones de Silvia ¿Eres Naryak no?. Soy un desastre para acordarme de todos vuestros nombres.

Benditas sean tus idas de olla Ruth

Si Third,soy Silvia :) no te has equivocado!¿por cierto tú como te llamas?;)

Dejo un montaje-con minitexto (no me da para más xDU),que hoy estoy que lo tiro con el Photoshop xD me ha vuelto la inspiración ^^

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".....todos estos años.Sin tu encantadora sonrisa, sin tus besos, sin tus caricias, sin sentir el roce de tu piel.

¿Por qué la cosas no fueron diferentes? te pregunto, quizás sea este el momento de enmendar los errores del pasado.

Aquí y ahora te entrego mi corazón y lo pongo es tus manos para que hagas con él lo que te plazca porque desde hace mucho tiempo sabes que te pertenece, que es solo tuyo."[/i]

Bueeno.. vayamos abriendo boca. Es... otra ida de olla de las mías.

Francisca soltó la pluma con la que anotaba en el libro de cuentas de la finca. Retiró la silla y se levantó con brusquedad. Había probado todo para distraer su condenada y rebelde cabeza, pero nada parecía dar resultado. El paseo con Soledad no pudo despejarla, ni tampoco discutir con Tristán acerca de Pepa. Por Dios, si hasta había intentado entablar una conversación despreocupada con la partera, para dar un respiro a sus alocados pensamientos. Pero lo único que había conseguido fue una mirada incrédula de la joven acompañada de un: -”¿Se encuentra usted bien, señora?”

Paseó furiosa por la biblioteca. No, por supuesto que no se encontraba bien. Llevaba casi un condenado mes sin poder comer a gusto, sin poder dormir como Dios manda, sin poder disfrutar de un paseo... y todo por su culpa. Por la maldita culpa del condenado de Raimundo Ulloa. Apretó los dientes, intentando refrenar la cascada de pensamientos, pero como siempre, fracasó. Por enésima vez volvió a ver ante los ojos de su imaginación a Raimundo disparando a Virtudes, a Raimundo mirándola con adoración y tortura mientras estaba agachado al lado de la joven anarquista muerta. Cerró los ojos con fuerza. Era inútil. Las imágenes seguían. -”Lo hubiera dado todo por tí”...; la caricia fugaz, el beso malogrado. De nuevo oyó su voz. -”Lo que debería matar son... los sentimientos que todavía me inspiras”. Francisca se llevó las manos a la cabeza, como si quisiera arrancar esas palabras que no dejaban de resonar. Tenía que salir de allí. Como fuese. Necesitaba huir, correr, gritar... hasta quedarse sin voz, hasta desahogarse, hasta morir. Abrió las puertas correderas de su despacho y salió corriendo como si la Casona se incendiase. Mariana se quedó de piedra al verla y se volvió a su madre. Sorprendentemente, en la sabia y bondadosa faz de Rosario no había sorpresa. Sólo tristeza.

Silvi!!! la reina del photoshop!!! y de los videos!
estás hecha una artista
es precioso,me lo guardo

EDITO: lna,sigueeeee