FormulaTV Foros

Foro El secreto de Puente Viejo

Creemos nuestro propio Puente Viejo. ¡TODOS JUNTOS!

Anterior 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 [...] 142 143 144 145 Siguiente
#0
Ruthlovetristan
Ruthlovetristan
07/03/2012 15:08
Fann3 me ha dado la idea de hacer esto, consiste en elaborar nuestra propia historia de Puente Viejo todos juntos. Cada forer@ va a ser un personaje de Puente Viejo.

Espero que os guste esta idea, me parece que lo podemos pasar muy bien.Si teneis alguna duda me lo deciis, y antes que nada si os parece bien, decidme que personaje quereis cada unos y yo los iré poniendo antes de empezar a elaborar la historia. Yo me pido Pepa si no os parece mal, si alguien quiereel personaje de Pepa yo me cojo otro y no pasa nada. Muchas gracias.


creemosnuestropropiopuenteviejotodosjuntos

creemosnuestropropiopuenteviejotodosjuntos

creemosnuestropropiopuenteviejotodosjuntos


PERSONAJES PARA LA HISTORIA:

miri1309- Raimundo
Ruthlovetristan-Pepa
musicintheair13-Emilia
emshdopv-Soledad
Mariaesdpv-Tristán
Fann3-Alfonso
CristinaESDPV- Gregoria Casas
Franrai-Francisca
Triestrellasara-Mariana
Jessicavalido-Rosario
Laury93-Salvador Castro
Nhgsa- Sebastian Ulloa
Esdpvluna- D.Anselmo




¡PODEIS SEGUIR UNIENDOOS AUNQUE YA HAYAMOS EMPEZADO!

Aviso!! Por favor si os comprometeis a hacer un personaje, intentad escribir regularmente para darle continuidad a la historia y no quedar estancados. Muchas Gracias.

Y si quereis participar , informadnos con antelación, sino esto se desmadra y sería un caos. GRACIAS.
#141
Ruthlovetristan
Ruthlovetristan
24/03/2012 10:23
De nuevo me contó su triste historia, esa sensación de pena volvía a mi. Salvador solo era una pobre alma sedienta de venganza. Me dijo que yo era hija de un monstruo y que no le tenia porque curar. Sabía que tenía que hacerlo, nunca había dejado morir a nadie y no iba a empezar ahora, aunque fuera el mismisimo Salvador Castro.

-Tranquilo, eso ya lo tengo asumido- conteste a su pregunta del monstruo, con ironía y esbozando una pequeña sonrisa.

-Aguanta que esto te va a doler, tengo que coser y cerrar la herida- dije segura
#142
Franrai
Franrai
24/03/2012 12:28
"Tristán y Pepa volverán pronto con noticias de Raimundo" El mundo se cayó a mis pies al escuchar a Rosario. No podía ser. Aquello no había sido una pesadilla. Salvador estaba vivo. Y Raimundo... ¿Cómo estaba Raimundo? ¿Qué le había pasado? La angustia me consumía. Y la vulnerabilidad se apoderó de mí al oír de nuevo el disparo con el que acababa mi sueño. Negué con la cabeza. Raimundo no... No podía...

Sumida en mis temores como estaba, Rosario me dijo que subiría el desayuno. Y antes de que pudiese pararla para preguntarle por lo ocurrido, ésta desapareció por la puerta.

Tras unos eternos minutos en los que me puse en lo peor, decidí vestirme presto y acercarme yo misma al consultorio, pues si algo le había pasado a Raimundo allí estaría.

Cogí la primera prenda que encontré, el vestido marrón, y cepillé brevemente mi cabello suelto. No podía perder más tiempo. No podría soportar más la angustia que me acechaba.

Bajé las escaleras casi de puntillas. Sin hacer ruido. Abrí la puerta igual de cuidadosa y la dejé encajada para que el sonido del pestillo no alentase a nadie. Una vez fuera suspiré tranquila, pues nadie me había visto.


Llegué a la plaza casi sin resuello. Dirigí mi mirada hacia el consultorio, dispuesta a encaminarme hacia allí. Pero las voces de Tristán y Sebastián me sacaron de mi error. Me di la vuelta y vi como ambos se encaminaban hacia la Posada.

-Esperad.- pronuncié. Los jóvenes se volvieron hacia mí. Y pude ver sus sorprendidos rostros al verme allí frente a ellos. -¿Cómo está? ¿Qué le ha pasado?- pregunté aún sin aliento. Ellos me miraron buscando las palabras adecuadas para informarme. Pero sus expresiones hablaron por ellos y a riesgo de derrumbarme en aquel justo momentos, continúe. –Dejadme pasar, necesito verle.- les pedí. Ellos se apartaron sin decirme nada. Compadeciéndose de mi sufrimiento.

Tomé el pomo de la puerta con miedo a lo que me iba a encontrar al otro lado de la habitación. Y el mundo se vino a mis pies al verlo allí. Tumbado en la cama.

Nadie me había dicho como se encontraba. Cuál era su situación. Pero el verlo respirar me hizo a mí también hacerlo.

-Raimundo.- pronunciaron mis labios dulcemente. Acercándome a él. Me senté en la cama vencida por el cansancio y la situación. -¿Qué te ha pasado, mi amor?- ¡¡Francisca!! su grito justo antes de desplomarme al suelo resonó en mis oído haciéndome comprenderlo todo. -¿Por qué lo hiciste? No te das cuenta de que hubiera preferido morir mil veces antes que tú.- acaricié con la yema de mis dedos la venda de su abdomen. Siendo esto lo único que cubría su pecho. -No te das cuenta de que mi vida no tiene sentido sin ti.- de nuevo me veía confesándole inconsciente mi amor por él. -Ya me salvaste una vez de la muerte. Y aun así seguimos en nuestras respectivas poses orgullosas. Maldito orgullo.- maldije. -Maldito orgullo que me impide decirte te amo con toda mi alma. Que me impide tocarte y besarte. Maldito también el destino por separarme de ti. Por tenerte ahora aquí, entre la vida y la muerte.- una lágrima se deslizó por mi mejilla sin ánimo de ser enjugada. –Todo por hacerte el héroe, Ulloa.- aferré su mano. –Mi vida no tiene sentido sin la tuya, Raimundo. A pesar de los años, a pesar de mi boda con Salvador, de la tuya con Natalia, a pesar de nuestros insultos, de nuestras malas jugadas te sigo amando como el primer día.- cerré los ojos. Dejando que un par de lágrimas más rodasen por mi rostro. Notando como su mano ejercía cierta presión sobre la mia.
#143
Nhgsa
Nhgsa
24/03/2012 12:45
Cuando Tristán me contó lo ocurrido no me lo podía creer. Un sentimiento de rabia e impotencia creció en mi interior. ¡Si hubiera llegado antes nada de esto hubiera pasado! Tristán intentó consolarme diciéndome que a lo mejor el inconsciente hubiera sido yo o que a lo mejor hubiera acabado muerto.
Después decidimos velar frente a la habitación de la posada toda la noche. Salvador estaba herido de gravedad así que no andaría lejos. Tendría que curarse si quería seguir y según lo que me contó Tristán no podría aguantar hasta el siguiente pueblo sin que la pierna corriera el peligro de gangrenarse.

A la mañana siguiente vimos como Francisca entraba con el alma en vilo en la plaza buscando a mi padre. Nos pidió que le dijéramos cómo estaba pero no supimos contestarle. Antes de poder decir nada Francisca nos dejó y entró en la habitación de la posada.

Después de unos minutos en los que estuvimos a solas Tristán dijo que entraría en la habitación de Pepa para ver cómo se encontraba mi padre y Francisca.

- Ve amigo. Ve tranquilo. Yo me quedaré aquí.

Tristán me sugirió que entrara para curarme la herida de la cabeza. Me habia olvidado completamente de ella.

- No te preocupes amigo. No es nada.

Tristán entró entonces no sin antes decir que vendría con un poco de alcohol para terminar de curarme. Yo me quedé fuera con la rabia recorriendo mi cuerpo. Si volvía a ver a Salvador sería capaz de cualquier cosa.
#144
Jessicavalido
Jessicavalido
24/03/2012 14:04
Sali de la cocina con la bandeja y vi la puerta entornada,la señora se habia marchado, esboze una sonrisa pues estaba segura de a donde la habían llevado sus pasos,solo esperaba que no se hubiera encontrado con salvador por el camino.
#145
Franrai
Franrai
24/03/2012 14:20
Sin abrir aun nos ojos pude escuchar como él me llamaba por aquel apelativo que siempre usaba cuando éramos jóvenes. Cuando aún nos escondíamos tras los muros para besarnos. Cuando un nos escribíamos las más hermosas cartas de amor. Cuando aún éramos felices.

Aun así, podría haberme nombrado con el peor de los insultos y hubiese sido igual de feliz. Estaba vivo. Despierto ahora. Sonreí viendo como él también me sonreía. Dejándome ver a su vez que había escuchado sino toda parte de mi confesión.

Mi corazón se aceleró y un escalofrió recorrió mi espalda.

-No tienes idea del susto que me has dado, tabernero.- dije como una madre que riñe a su hijo. Él levantó su brazo lentamente para acariciar mi rostro. Sentí millones de mariposas revolotear en mi estómago. Y al segundo siguiente me vi abrazándolo con fuerza. Procurando no hacer daño en su herida. Derrumbándome entonces por toda la angustia contenida. -Te quiero, te quiero.- susurré entre sollozos. Sintiéndome liberada al decirlo.
#146
laury93
laury93
24/03/2012 16:41
Ella, mi hija, Pepa seguía dispuesta a curarme, a pesar de todo lo que le había dicho, de todo lo que había hecho. Si yo no era más que un monstruo y yo lo sabía, y ella lo sabía. Y aún así pretendía ayudarme. No sabía qué hacer o sentir. En cualquier otro momento me hubiera reído de su ingenuidad como si salvándome, curándome hubiera logrado salvar su vida, pero estaba demasiado cansado. Estaba cansado de la vida que había llevado del dolor que solo había llevado a más dolor, de la muerte que había causado más muerte, de la venganza…Apenas conseguía que mi cuerpo me respondiese, mis párpados pesaban cada vez más y ni la idea de tener a mi madre tan cerca conseguía despertar mi sed de sangre. ¿Qué sería aquello? ¿Acaso me ablandaba? No podía hacerlo, no podía permitirlo. Me encontraba perdido y confuso, pues pensar ahora que Flora no merecía mi castigo o que no todas las mujeres eran unas rameras significaría aceptar que había desperdiciado mi vida entera en una venganza sinsentido y entonces ¿qué me quedaría? Si solo había sembrado rencor, y lo único que me daba fuerzas para vivir era mi odio… si renunciaba a él qué me quedaba. Nada. No tenía nada. Más que un pasado que quería olvidar, pero que volvía con cada nueva pesadilla, una hija bastarda que quería ayudarme y un gran cansancio.
Una terrible punzada de dolor me traspasó la pierna cuando Pepa introdujo la aguja entre mi piel, traté de soportarlo mas cada nueva punzada era peor que la anterior y cuando estaba a punto de acabar no logré resistirlo más y grité. Grité con todas mis fuerzas notando cómo aquel profundo y desgarrador alarido salía de mi interior queriendo que se llevara con él el dolor de mi cuerpo y mi alma atormentada.

Pero tras mi grito escuché unos pasos, más voces, más gritos y supe que había cometido otro error imperdonable…
#147
Ruthlovetristan
Ruthlovetristan
24/03/2012 16:52
Salvador no pudo aguantar el dolor, y gritó. Oí unos pasos que se acercaban.
#148
Nhgsa
Nhgsa
24/03/2012 16:58
Tristán llegó con una botella de alcohol y unas gasas. Me tranquilizó diciéndome que mi padre había despertado y que él y Francisca se estaban reconciliando. Suspiré hondo al imaginármelos.

- Se lo merecen. - dije aliviado.

Tristán me miró extrañado y me preguntó si había algo que él no supiera.

- Es una larga historia Tristán.

Me puse el alcohol y solté un gemido de dolor. Después de un rato limpiándome la herida y la sangre Tristán le echó un vistazo. Parecía que no era grave.

De pronto oímos un grito en el consultorio. Tristán y yo nos miramos extrañados.

- Ese grito no es de una mujer. - le dije extrañado.

Nuestras miradas parecieron responder a la situación. Blandí mi revólver con fuerza a la vez que nos dirigimos al consultorio. Entramos en el consultorio y enseguida encañoné a Salvador.

- ¡¡¡Sabía que te encontraría asquerosa escoria!!! - grité con fuerza.

Pero él fue rápido y al oir nuestros pasos se protegió poniéndose detrás de Pepa.
#149
MariaEsdpv
MariaEsdpv
24/03/2012 17:50
entre con sebastian y observe a Pepa como curaba la herida a Salvador,no me lo podia creer,Salvador no se merecia ningun tipo de atencion,era un hombre sin entrañas. Pero yo sabia que Pepa se apiadaria de hasta el mismo demonio,por su gran y buen corazon.
#150
musicintheair13
musicintheair13
24/03/2012 18:22
-Sebastian!

Abrí la puerta del consultorio desesperada. Allí me encontré con varia gente.

-¿Que haceis aquí?
#151
Nhgsa
Nhgsa
24/03/2012 18:26
- ¡Emilia sal de aquí! ¡Vuelve con Alfonso! ¡vamos! ¡Tristán sácala de aquí! - exclamé poniendo a Emilia detrás de mí.
#152
musicintheair13
musicintheair13
24/03/2012 18:32
-¿Que pasa? ¿QUe ocurre?
#153
Ruthlovetristan
Ruthlovetristan
24/03/2012 18:41
De pronto cuando parecía que Salvador se estaba ablandando, entró Sebastián por la puerta y lo apuntó, seguido de Tristán y por último Emilia. Salvador me puso delante de él y colocó su pistola en mi sien.
#154
MariaEsdpv
MariaEsdpv
24/03/2012 18:46
Cogi a Emilia y la saque del consultorio.
-Emilia porfavor aguarda fuera, esto es peligroso.

Volvi a entrar en el consultorio y el corazon me dio un vuelco cuando vi que Salvador apuntaba a Pepa en la sien con la pistola, puse cara de panico.

-Salvador no,porfavor no lo hagas,te lo suplico...sueltala por lo que mas quieras
#155
musicintheair13
musicintheair13
24/03/2012 18:50
Estaba harta de que me protegieran tanto. ¿Porque Pepa podía estar dentro y yo no?

Oí un disparo, abrí la puerta No podía ser verdad.
#156
Nhgsa
Nhgsa
24/03/2012 18:51
- ¡¡Suéltala malnacido y enfréntate a un hombre!! ¿O acaso eres un cobarde que sólo se atreve con mujeres? - le provoqué sin dejar de apuntarle con el arma
#157
Franrai
Franrai
24/03/2012 19:20
Entre sonrisas y caricias Raimundo respondió a mis palabras de igual modo. Cogió mi rostro con ambas manos, obligándome a mirarlo. Diciéndome entonces que me quería. Que me necesitaba. Una burbuja de felicidad estalló en mi pecho al escuchar sus palabras.

Sentí como, entre caricias, acercaba su rostro al mío. Besando mi mejilla. Dulce, cariñoso.

Tímidamente acercó sus labios a los míos como si de dos principiantes se tratase. Los acarició. Y poco a poco fue adueñándose completamente de ellos mientras lágrimas de felicidad y anhelo surcaban mi rostro. Él las enjugó con una ternura infinita. Besando de nuevo mis labios. Los separé dejando que él atrapase mi labio inferior. Jugueteando con su lengua hasta introducirla en mi boca. Contraataque. Subiendo la intensidad del beso. Perdiéndonos en la boca del otro. Absorbiéndonos. Llevando aquel beso a límites insospechados.

Intentó incorporarse, mas la herida aún era demasiado reciente. Y tras un quejido de él nos separamos. Raimundo terminó por volverse a tumbar. Esbozándome una deliciosa sonrisa. Me acerqué a él devolviéndosela. Con cuidado de no volver a dañarlo tomé de nuevo sus labios.

Besándolo con deseo. Con desenfreno. Con amor. Con todo lo que guardaba para él. Haciéndonos delirar a ambos por el contacto de nuestros labios, de nuestras bocas, de nuestras lenguas enredándose sin control.

Sin aliento me separé de él. Con los labios enrojecidos por el ardiente beso. Con las respiraciones descontroladas, casi asmáticas, nos miramos. Mostrando una leve sonrisa. Satisfechos, aunque no del todo. Pero no quise presionarlo. No en su estado.

Lo acaricié con todo el cariño del mundo. Envolviendonos en miradas cargadas de ternura. De palabras susurradas.

Los minutos corrieron como los segundos, pasando así las horas. El tiempo con él se me hacia efímero. Y en aquel tiempo, pude ver más que nunca, que lo hubiese dado todo por haber pasado estos últimos 30 años con él. Aunque fuese en la más absoluta miseria por él. Solo con pronunciar hermosos te quieros, solo besarlo a cada segundo de mi vida, solo por acariciarlo, hubiese sido la mujer más feliz sobre la faz de la tierra.

-Te amo.- pronunciaron más labios con una sonrisa entre ellos.

Él sonrió.

-Raimundo...- lo llamé. Agachando la mirada tras hacerlo. Raimundo apartó un mechón de pelo que había caído sobre mi rostro. Obligándome después a mirarlo. -¿Que vamos a hacer ahora?- le pregunté con timidez y miedo a su respuesta.
#158
Nhgsa
Nhgsa
24/03/2012 19:34
Salvador, enfurecido, disparó pero a causa de su estado erró el tiro por los pelos. La bala pasó rozándome la cara. Emilia entró en ese momento asustada y su cara se volvió pálida al ver a Pepa amenazada por Salvador.

- Emilia, sal de aquí por favor. - le pedí suplicante.
#159
musicintheair13
musicintheair13
24/03/2012 19:47
-Sebastian.No puedo. Estais en peligro. Voy a ir al cuartel a pedir ayuda.

Justo entonces...
#160
Nhgsa
Nhgsa
24/03/2012 20:12
Antes de que Emilia saliera sentí que algo me fallaba en mi interior. Empecé a toser sintiendo que mi corazón luchaba por respirar ¿qué pasaba? Dejé caer la pistola mientras que sentía que me ahogaba. Me puse una mano al pecho mientras sentía que mi corazón latía más lentamente. Tristán se asustó al verme. Mi cara se volvió roja por el ahogo que sentía y por mi esfuerzo de volver a levantarme.

Emilia se acercó a mi antes de que cayera mientras que Tristán, resignado, hacía lo mismo no sin antes jurarle a Salvador y a Pepa que volverían a verse las caras. Pero no podía forcejear con él. Si lo hacía algún disparo podía escaparse y dañar a Pepa o a alguno de los presentes.

Veía cómo Emilia se abrazaba a mí gritándome que respirara pero mi corazón seguía latiendo lentamente. Me ahogaba.
Anterior 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 [...] 142 143 144 145 Siguiente