**|Mi relato de El Internado|**~~- 3ªT - Capitulo 2!!!*[ouch]!¿Encontrarán a Martín?*..queda1semana!*
#0

04/09/2010 16:53
Hola a tod@s!!!
bueno esta pasando el verano
...y ya viene el internado
asique he pensado hacer un relato...se que un poco tarde pero esque no sabia
que temas tratar...por ahora tratara despues del ultimo capi "El Ultimo Deseo"[/u], y dejo aqui un trocito, espero que os guste...por ahora no es mucho, pero por algo se empieza jeeje
Espero que os guste
Besoos!
Julia
Nos quedamos sin medicinas, ibamos a morir...en 48 horas...alli abajo todo fue impresionante...viki, lucia, garrido, yo...y las medicinas...rotas...pero...que hacia alli garrido?
-Chicas, no os preocupeis...se...segu...seguro...que ya no las...ibamos a necesitar...la maquina está en camino...¿verdad lucia?-Dijo viki muy nerviosa, pero muy segura...
-Si...eso nos dijo el coronel Araujo...pero tardará en llegar...las medicinas...eran imprescindibles...para la gente que empieza a tener sintomas...van a empezar a morir...-Contestó Lucia, preocupada...todos estabamos infectados, incluida ella...
¿Significaba eso que el final de nuestras vidas ya empezaba a merodear por aqui?
No sabiamos que hacer...estuvimos rebuscando...a ver si quedaba alguna sin romper...pero estaban todas destrozadas
-¡¡Esto es un desastre!!-Grite.-vamos a morir todos, esto es una mierda...si no hubiera sido por Ivan me hubiera ido sin pensarlo...y por todos vosotros-Le dije a viki
-Calma, tenemos q subir y avisar, necesitamos la máquina cuanto antes-aconsejo Lucia
Cuando subimos, encontramos a todos los enfermos fuera...me daba igual, ya que estaba infectada...iba a morir...y ya no me importaba
Capitulo 1~~>mensaje principal
Capitulo 2~~>Pág. 1
Capitulo 3~~>Pág. 1
Capitulo 4~~>Pág. 2
Capitulo 5~~>Pág. 2
Capitulo 6~~>Pág. 3
Capitulo 7~~>Pág. 3
Capitulo 8~~>Pág. 4
Capitulo 9~~>Pág. 5
Capitulo 10~~>Pág. 5
Capítulo 11~~>Pág. 6
Capitulo 12~~>Pág. 6
Capitulo 13~~>Pág. 7
Capitulo 14~~>Pág. 7
Capitulo 15~~>Pág. 8
Capitulo 16~~>Pág. 8
Capitulo 17~~>Pág. 8
Capitulo 18~~>Pág. 9
Capitulo 19~~>Pág. 9
Capitulo 20~~>Pág. 9
Capitulo 21~~>Pág. 9
Capitulo 22~~>Pág. 10
Capitulo 23~~>Pág. 10
Capitulo 24~~>Pág. 10
Capitulo 25~~>Pág. 10
Capitulo 26~~>Pág. 10(primera parte)
-Capitulo 26~~>Pág. 11 (segunda parte)
Capitulo 27~~>Pág. 11(primera parte)
-Capitulo 27~~>Pág. 11(segunda parte)
-Capitulo 27~~>Pág. 11(Tercera parte)
Capitulo 1~~>Pág. 12
Capitulo 2~~>Pág. 12
Capitulo 3~~>Pág. 13
Capitulo 4~~>Pág. 13
Capitulo 5~~>Pág. 14
Capitulo 6~~>Pág. 14
Capitulo 7~~>Pág. 14
Capitulo 8~~>Pág. 14
Capitulo 9~~>Pág. 15
Capitulo 10~~>Pág. 15
Capítulo 11~~>Pág. 15
Capitulo 12~~>Pág. 15
Capitulo 13~~>Pág. 15
Capitulo 1~~>Pág. 16
Capitulo 2~~>Pág. 16
Capitulo 3~~>Pág.
Capitulo 4~~>Pág.
.........................................
El internado


asique he pensado hacer un relato...se que un poco tarde pero esque no sabia
que temas tratar...por ahora tratara despues del ultimo capi "El Ultimo Deseo"[/u], y dejo aqui un trocito, espero que os guste...por ahora no es mucho, pero por algo se empieza jeeje

Espero que os guste


Julia
Nos quedamos sin medicinas, ibamos a morir...en 48 horas...alli abajo todo fue impresionante...viki, lucia, garrido, yo...y las medicinas...rotas...pero...que hacia alli garrido?
-Chicas, no os preocupeis...se...segu...seguro...que ya no las...ibamos a necesitar...la maquina está en camino...¿verdad lucia?-Dijo viki muy nerviosa, pero muy segura...
-Si...eso nos dijo el coronel Araujo...pero tardará en llegar...las medicinas...eran imprescindibles...para la gente que empieza a tener sintomas...van a empezar a morir...-Contestó Lucia, preocupada...todos estabamos infectados, incluida ella...
¿Significaba eso que el final de nuestras vidas ya empezaba a merodear por aqui?
No sabiamos que hacer...estuvimos rebuscando...a ver si quedaba alguna sin romper...pero estaban todas destrozadas
-¡¡Esto es un desastre!!-Grite.-vamos a morir todos, esto es una mierda...si no hubiera sido por Ivan me hubiera ido sin pensarlo...y por todos vosotros-Le dije a viki
-Calma, tenemos q subir y avisar, necesitamos la máquina cuanto antes-aconsejo Lucia
Cuando subimos, encontramos a todos los enfermos fuera...me daba igual, ya que estaba infectada...iba a morir...y ya no me importaba
Primera temporada
Capitulo 1~~>mensaje principal
Capitulo 2~~>Pág. 1
Capitulo 3~~>Pág. 1
Capitulo 4~~>Pág. 2
Capitulo 5~~>Pág. 2
Capitulo 6~~>Pág. 3
Capitulo 7~~>Pág. 3
Capitulo 8~~>Pág. 4
Capitulo 9~~>Pág. 5
Capitulo 10~~>Pág. 5
Capítulo 11~~>Pág. 6
Capitulo 12~~>Pág. 6
Capitulo 13~~>Pág. 7
Capitulo 14~~>Pág. 7
Capitulo 15~~>Pág. 8
Capitulo 16~~>Pág. 8
Capitulo 17~~>Pág. 8
Capitulo 18~~>Pág. 9
Capitulo 19~~>Pág. 9
Capitulo 20~~>Pág. 9
Capitulo 21~~>Pág. 9
Capitulo 22~~>Pág. 10
Capitulo 23~~>Pág. 10
Capitulo 24~~>Pág. 10
Capitulo 25~~>Pág. 10
Capitulo 26~~>Pág. 10(primera parte)
-Capitulo 26~~>Pág. 11 (segunda parte)
Capitulo 27~~>Pág. 11(primera parte)
-Capitulo 27~~>Pág. 11(segunda parte)
-Capitulo 27~~>Pág. 11(Tercera parte)
¡FIN!
Segunda temporada
Capitulo 1~~>Pág. 12
Capitulo 2~~>Pág. 12
Capitulo 3~~>Pág. 13
Capitulo 4~~>Pág. 13
Capitulo 5~~>Pág. 14
Capitulo 6~~>Pág. 14
Capitulo 7~~>Pág. 14
Capitulo 8~~>Pág. 14
Capitulo 9~~>Pág. 15
Capitulo 10~~>Pág. 15
Capítulo 11~~>Pág. 15
Capitulo 12~~>Pág. 15
Capitulo 13~~>Pág. 15
¡FIN!
Tercera temporada
Capitulo 1~~>Pág. 16
Capitulo 2~~>Pág. 16
Capitulo 3~~>Pág.
Capitulo 4~~>Pág.
.........................................
El internado

Vídeos FormulaTV
#281

28/03/2011 20:21
Capitulo 9
LUCIA
Le estaba haciendo un reconocimiento médico a María:
–Al parecer todo marcha bien –dije –. Pero tienes que dejar el carrito hasta que nazca el bebé, e incluso después tambien. ¿Cómo te sientes? ¿Lo llevas bien? ¿Has notado algo raro?
–Bueno... a los trece años lo llevaba peor –las dos sonreímos.
–¡Lucía, Lucía! –entraban gritando por la puerta.
–¡Pero Evelyn! ¿Qué pasa? ¿Por qué gritas?
–Es mi novio –señaló a la puerta. Entraban Paula y Lucas.
–¡Y dale! ¡que no soy tu novio! –se quejaba él.
–Pero Lucas, ya no podemos esconder lo nuestro –insistió ella.
María me miró y no pudimos evitar reirnos.
–A ver chicos... –les calmé –. ¿Qué ha pasado?
–Javier Holgado me ha dado con un tirachinas –explicó Lucas.
–¡Pero que brutos! –exclamé –. A ver eso que te lo curo –dije cogiendo a Lucas de la mano para que se acercara a sentarse en la camilla.
–¡Madre mía! Para haberle sacado un ojo –dijo María.
–¿Y tu por qué estás aquí? –le preguntó Evelyn.
–Bueno... pues... eh... voy a tener un bebé.
–¿Te has dado un beso con lengua con Fermín y por eso estás embarazada? –preguntó Paula muy inocente.
–¡Ya está! –interrumpí aquella conversación –. Ale, Lucas ya está curado, venga, para clase, y Lucas, ten cuidado, ¿vale?
–Si, no te preocupes, yo le cuidaré –me dijo Evelyn.
Salieron por la puerta a regañadientes.
–Niños... –le dije a María. Y nos reímos.
‘’pum, pum’’. Golpearon la puerta. Abrí.
–¡Iván! –gritó María al ver a su hijo entrar –. ¿Qué ha pasado? –se acercó a él.
Traía una chica en brazos
–Estabamos hablando y de repente se desmayó –dijo entrando por la puerta.
–Ven, corre, tumbala en la camilla –le dije, y así hizo.
Fue entonces cuando la reconocí. Pero fingí como si nada.
–¡Vaya! ¿Quién es? No la había visto antes por aquí... –me hice la tonta cuando en realidad pensaba: “Se ha metido en la boca del lobo...”
–Sí, bueno, esque es una nueva alumna, ha venido hace unas horas... esta mañana. No sé como ni por qué...
Me estaba empezando a asustar, pues estaba al tanto de la relación que mantenía con Hugo...
–¿Cómo estás? –le oí decir a Iván por detrás.
–Bien. Estoy bien –contestó Maria.
–Bueno... –me di la vuelta hacia ellos –. Parece que ha sido un desmayo sin importancia. Dejémosla descansar. María, ve tú también a descansar, ¿si? Iván, vuelve a clase, gracias, y... no ha sido nada. Cuando despierte le doy un calmante y listo. Pero... dime una cosa... ¿Le habéis dichi algo... o le han dado una mala noticia...? –esperaba una respuesta de él que me dejara claro lo sucedido, pero evidentemente nada me dijo, sino que se limitó a responder:
–No, que yo sepa no. En clase todo ha marchado con normalidad...
–De acuerdo. Bueno, pues ya podeis marchar –abrí la puerta. María bajó de la camilla –. Si te mareas o algo me avisas, ¿si? –le dije a Maria cuando ya estaba en la puerta –. A lo mejor sientes mareos porque acabamos de finalizar una etapa dura... con el virus y tal... pero por lo demás no tienes que preocuparte. Deja de trabajar, ¿si?
–Puf... –resopló ella.
–¡Anda...no resoples! Iván... –le miré.
–Si. Yo estaré pendiente de ella –captó mi indirecta.
–Pues bien... –intenté echarlos para quedarme a solas con Estela –. Si necesitais algo ya sabeis donde estoy.
–Gracias. Hasta luego, Lucía –dijo María.
–Eh... ¿Puedes decirla que me busque cuando se recupere? –me preguntó Iván señalando a Estela.
–Si, claro. Hasta luego –salieron y cerré la puerta –. ¿Pero qué has hecho? –murmuraba mirando a Estela y muy preocupada...
#282

02/04/2011 16:11
Ivan estaba bien era Estela nos has engañado!!
Los niños monisimos, esta Evelyn jajaja
Y que fuerte Lucia conoce a Estela..hay hay algo turbio!!
sigue prontoooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo
Los niños monisimos, esta Evelyn jajaja
Y que fuerte Lucia conoce a Estela..hay hay algo turbio!!
sigue prontoooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo

#283

22/04/2011 18:45
:O Lucia conoce a Estela!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Yo también puedo empezar eh! xD
Besosss!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Siguelooooooooooo!
Yo también puedo empezar eh! xD
Besosss!
#284

24/04/2011 21:58
JAJA^^Si, esta Evelyn
Muchas gracias chicas!!
JAJA^^Laus... no me copieees!!
Aqui otro(Perdon por la espera
):
ESTELA
No sé que me pasó, pero cuando abrí los ojos estaba en la enfermería tumbada en la camilla...
–¿qué...? –me intenté incorporar.
Abrí los ojos mas profundamente.
–¡¡Lucia!! –grité al verla y me levanté para abrazarla.
–¡Sh! Tumbate, anda –me dijo.
Me volví a tumbar.
–Pensé que te alegrarías de verme... –dije riendo.
–Pues aquí no, precisamente –dijo muy seria.
–¿Pero que te pasa?
–Te dejé bien claro que no queria verte aquí –dijo sin más rodeos.
–¡Ah! Es por eso...
–Tienes que irte –se acercó para tomarme el pulso.
–¡No me voy a ir! Y lo sabes, sabes muy bien para que he venido, y también sabes muy bien que mientras sea posible que Samuel esté vivo no voy a dejar que Marcos sufra,¿vale? Lo sabias desde el principio. Ahora no te extrañes.
–¡Las posibilidades de que el tio de Marcos esté vivo son el 10%! –gritó –Tienes que alejarte de Hugo, ¿es que todavía no te has dado cuenta?
–Dime que no,Lucia... –me estaba imaginando lo peor –Por favor, dime que no...
Lucia suspiro y me miró contradiciéndome.
–¡¡Lucia!! –grité –Por favor –una lágrima resbaló por mi cara –Dime que no son nazis... Lucia...
–Lo siento. Tenias que haberlo esperado, es evidente.
–No, no, no, no –lloraba.
–Por eso tienes que irte.
–¡¡¡No!!! ¿Esque no lo entiendes? ¡No me voy a ir! Llevo toda la vida engañada, ¡¿Y sabes qué es lo peor?!
–¿Qué?
–Que me he enamorado de Hugo, ¡que le amo, joder!
–Pero... –no la dejé hablar.
–No lo entiendes... –me sequé la cara –Me he enamorado de Hugo... y soy capaz de hacer cualquier cosa por él...
ELSA
Estaba oyendo gritos. Venían de la enfermería.
–¿¡Pero qué pasa aquí!? –entré.
–¡Elsa! –Lucía vino hacia mi.
–Perdón, esque me he puesto un poco nerviosa –se disculpó Estela.
–¿Estás enferma? –la pregunté.
–¡Una bajada de tensión! –dijo rápidamente Lucia.
–De acuerdo. Si necesitais algo...
–Gracias –dijeron las dos.
Salí. Me dirigí al despacho donde seguiría trabajando. Pero de repente al pasar por la puerta algo llamó totalmente mi atención: el patio. Salí para comprobar lo que mis ojos veían desde dentro del internado. ¡Efectivamente! El bosque estaba como el primer día... ¡ningún militar rodeando! ¡nadie vigilando! ¡¡¡Nadie!!! Eso significaba... ¡¡que éramos libres!!
FERMIN
En el hospital...
–¿Fermín?
–Si, yo.
–Venga conmigo porfavor.
Estaba en la sala de espera hasta que el médico que atendió a Rebe me llamó.
–Pase.
Entramos en la secretaria del hospital.
–Doctor...
–¿Me va a preguntar cómo está, verdad?
–¿Está grave? Por favor, doctor, sálvela...
–Hemos conseguido sacarle la bala –sonreí ante tal contestación –El que si está muy grave... es el joven.
–¿Rubén? ¿Cómo está?
–¿Es su hijo?
–¡No, por dios! –reí –Que cosas tiene, ¿me ve tan viejo o qué? –el doctor me miró serio –Es el sobrino de la chica –contesté sin más cachondeo.
–Pues... no sabremos si se curará. Pero haremos todo lo posible. ¿Quiere pasar ahora a verla?
–¡Si, claro! Gracias.
El doctor me llevó hasta la habitación 128, donde se encontraba ingresada Rebeca. Cuando llegamos abrió la puerta.
–No haga que despierte. Es mejor que descanse –me dijo antes de que se fuese.
Me acerqué a Rebeca. La acaricié el pelo. Por poco se va para el otro barrio. Y eso no me lo hubiera perdonado nunca. Estuve con ella una hora o así. Entonces abrió los ojos muy despacio.
–Fer...Fermín –dijo casi susurrando.
–¡Rebe! –la acaricié la cara –Sh, no hables tranquila, descansa...
–Pero... –miró alrededor –¿Qué ha pasado?

Muchas gracias chicas!!
JAJA^^Laus... no me copieees!!

Aqui otro(Perdon por la espera

Capitulo 10
ESTELA
No sé que me pasó, pero cuando abrí los ojos estaba en la enfermería tumbada en la camilla...
–¿qué...? –me intenté incorporar.
Abrí los ojos mas profundamente.
–¡¡Lucia!! –grité al verla y me levanté para abrazarla.
–¡Sh! Tumbate, anda –me dijo.
Me volví a tumbar.
–Pensé que te alegrarías de verme... –dije riendo.
–Pues aquí no, precisamente –dijo muy seria.
–¿Pero que te pasa?
–Te dejé bien claro que no queria verte aquí –dijo sin más rodeos.
–¡Ah! Es por eso...
–Tienes que irte –se acercó para tomarme el pulso.
–¡No me voy a ir! Y lo sabes, sabes muy bien para que he venido, y también sabes muy bien que mientras sea posible que Samuel esté vivo no voy a dejar que Marcos sufra,¿vale? Lo sabias desde el principio. Ahora no te extrañes.
–¡Las posibilidades de que el tio de Marcos esté vivo son el 10%! –gritó –Tienes que alejarte de Hugo, ¿es que todavía no te has dado cuenta?
–Dime que no,Lucia... –me estaba imaginando lo peor –Por favor, dime que no...
Lucia suspiro y me miró contradiciéndome.
–¡¡Lucia!! –grité –Por favor –una lágrima resbaló por mi cara –Dime que no son nazis... Lucia...
–Lo siento. Tenias que haberlo esperado, es evidente.
–No, no, no, no –lloraba.
–Por eso tienes que irte.
–¡¡¡No!!! ¿Esque no lo entiendes? ¡No me voy a ir! Llevo toda la vida engañada, ¡¿Y sabes qué es lo peor?!
–¿Qué?
–Que me he enamorado de Hugo, ¡que le amo, joder!
–Pero... –no la dejé hablar.
–No lo entiendes... –me sequé la cara –Me he enamorado de Hugo... y soy capaz de hacer cualquier cosa por él...
ELSA
Estaba oyendo gritos. Venían de la enfermería.
–¿¡Pero qué pasa aquí!? –entré.
–¡Elsa! –Lucía vino hacia mi.
–Perdón, esque me he puesto un poco nerviosa –se disculpó Estela.
–¿Estás enferma? –la pregunté.
–¡Una bajada de tensión! –dijo rápidamente Lucia.
–De acuerdo. Si necesitais algo...
–Gracias –dijeron las dos.
Salí. Me dirigí al despacho donde seguiría trabajando. Pero de repente al pasar por la puerta algo llamó totalmente mi atención: el patio. Salí para comprobar lo que mis ojos veían desde dentro del internado. ¡Efectivamente! El bosque estaba como el primer día... ¡ningún militar rodeando! ¡nadie vigilando! ¡¡¡Nadie!!! Eso significaba... ¡¡que éramos libres!!
FERMIN
En el hospital...
–¿Fermín?
–Si, yo.
–Venga conmigo porfavor.
Estaba en la sala de espera hasta que el médico que atendió a Rebe me llamó.
–Pase.
Entramos en la secretaria del hospital.
–Doctor...
–¿Me va a preguntar cómo está, verdad?
–¿Está grave? Por favor, doctor, sálvela...
–Hemos conseguido sacarle la bala –sonreí ante tal contestación –El que si está muy grave... es el joven.
–¿Rubén? ¿Cómo está?
–¿Es su hijo?
–¡No, por dios! –reí –Que cosas tiene, ¿me ve tan viejo o qué? –el doctor me miró serio –Es el sobrino de la chica –contesté sin más cachondeo.
–Pues... no sabremos si se curará. Pero haremos todo lo posible. ¿Quiere pasar ahora a verla?
–¡Si, claro! Gracias.
El doctor me llevó hasta la habitación 128, donde se encontraba ingresada Rebeca. Cuando llegamos abrió la puerta.
–No haga que despierte. Es mejor que descanse –me dijo antes de que se fuese.
Me acerqué a Rebeca. La acaricié el pelo. Por poco se va para el otro barrio. Y eso no me lo hubiera perdonado nunca. Estuve con ella una hora o así. Entonces abrió los ojos muy despacio.
–Fer...Fermín –dijo casi susurrando.
–¡Rebe! –la acaricié la cara –Sh, no hables tranquila, descansa...
–Pero... –miró alrededor –¿Qué ha pasado?
#285

30/04/2011 18:53
Estela no sabia que eran nazis?¿ Seguro!!
Lucia sabe mucho ummmm
Dios!! ¿Como que has intentado matar a Rebeca? Menos mal que está estable!!!! Y Martñin algún día aparecerá vivo o muerto?¿ ¬¬
Rubén em da igual
Siguelo prontooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo esta super triple genial el fic!!!! ^^
Lucia sabe mucho ummmm
Dios!! ¿Como que has intentado matar a Rebeca? Menos mal que está estable!!!! Y Martñin algún día aparecerá vivo o muerto?¿ ¬¬
Rubén em da igual

Siguelo prontooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo esta super triple genial el fic!!!! ^^
#286

02/05/2011 19:13
JAJA, Gracias Silvia!^^Exageras demasiado,eh!
Rubén te da igual? A mi también! JAJA
ELSA
Mandé llamar a Alicia y Lucía a mi despacho. Tocaron la puerta.
–¿Se puede? –dijo Alicia entreabriéndola.
–Pasa, porfavor –la dije.
–Me he encontrado con Lucia en la enfermería. Ha dicho que en nada está aquí.
–Gracias. Siéntate –ella se sentó –. No sé si habreis notado algo raro ahí fuera... –comencé a explicarle a Alicia.
–¿Algo raro? –negó con la cabeza –. ¿Qué pasa?
–Perdón por el retraso–Lucía llamó a la puerta y la hice pasar. Se sentó al lado de Alicia–. ¿Pasa algo?
–Sí. Pero nada malo. No os preocupeis.
–¿Entonces? –Alicia fue la primera en preguntar.
–Somos libres –dije sin poder contenerme a sonreír de felicidad –. No hay militares, no sé cómo ni porqué, pero ¡somos libres!
Alicia y Lucía sonrieron. Era en realidad una noticia increíblemente buena.
–¡No puede ser!
–Si, Alicia–la saqué de dudas –. Y quería que lo supierais porque... mañana mismo voy a cerrar este centro, ¡mañana mismo estaremos viviendo en paz!
–Tendriamos que avisar a los alumnos –aclaró Lucía.
–Si. Por eso en nada los he citado en la biblioteca.
–Nos vemos allí entonces –Lucía se levantó.
Alicia le siguió el gesto.
–Sabíamos que esto pasaría –dijo.
–Ir preparando las maletas –sonreí.
Las dos salieron. Me preparé para la reunión.
ESTELA
Salí de la enfermería para caminar un rato. Allí dentro me aburría. Y además Lucía habia desaparecido hace un buen rato. Fui a ver a Hugo. Me costará mirarlo a la cara después... de saberlo todo. Pero es que... no puedo hacer como si no existiera... Llamé a su puerta.
–¿Quién es?
Abrí sin contestar.
–¡Hola!
–Perdón por venir así...
–No tienes que disculparte. Aunque me disponía a ir al gimnasio. ¿Querias algo?
–¡Ah! ¿Ahora tengo que buscar una escusa para verte, o qué?
–No... –se acercó a mí.
Me intentó besar. Pero no pude y salí corriendo.
–¡¡Estela!! –me gritó una voz detrás.
Me giré. Era Lucía.
–No sé qué estás haciendo aquí. No te he dado permiso para salir de la enfermería, pero ha pasado algo, y creo que solo tú puedes solucionarlo...
–¿Qué ha pasado? –dije preocupada.
–Ni Araujo ni ningún otro militar siguen ahí fuera.
–¿Qué? Pues me da demasiado igual, la verdad...
–¡No lo entiendes!
–Pues no. ¿Por qué te pones así?
–Elsa va a cerrar mañana mismo el centro.
–¡¡¿Qué?!! No puede hacer eso.
–¡Si que puede! Porque piensa que nadie se lo impedirá...
–¿Y...?
–¡Y Garrido y Hugo se lo impedirán haciendo vete tú a saber qué!
–¿Y que puedo hacer yo...?
–Hablar con Elsa... tú puedes controlar a Hugo, ¿no?
–¿Quieres que le mienta? Sabes que no puedo. No sé mentir a Hugo...
–Si se entera de que el proyecto géminis está perdido, y de que Elsa quiere cerrar el internado, será peor. Lo sabes.
–Pero... –no me dejó hablar.
–Tienes que hablar con ella. ¡Es la única forma de salvarnos todos! Eres fuerte, Estela, sé qué harás lo correcto. Y lo correcto es... mandar a Hugo a la cárcel... Lo sabes, ¡Estela! No hay otra...
Empecé a llorar. Lucía me abrazó. Sabía que Hugo era nazi, que era capaz de retenerlos e incluso de matar a alguien para que el internado no se cerrase. Sabía que Elsa no tenía ni idea de las personas que eran Hugo y el teniente. Y si no les ayudo... puede que todos mueran. Pero me era muy difícil traicionar a Hugo.
–Y ahora tengo que irme a la biblioteca –me dijo Lucía –. Espero verte allí, para ayudarnos, confió en ti.
Se fue. Sus palabras resonaban en mi cabeza: <<Confío en ti>>. <<Harás lo correcto>>. <<Eres fuerte, Estela...>>. ¿Y si... en el último momento me vuelvo débil... y los traiciono? Como le dije a Lucía: soy capaz de hacer cualquier cosa por Hugo. Pero... no viviría tranquila sabiendo que no se ha hecho justicia. Queria ayudarlos. Intentaré no traicionarlos.
REBECA
–Tranquila, Rebeca, estás bien... –me dijo Fermín al despertar.
–Pero... –aún no me acordaba muy bien de lo ocurrido.
Empecé a pensar en lo último que me pasó: estaba secuestrada, sí, me secuestró mi propio padre por ir a ver a la doctora que se encargó de Martín. Sí. Por eso estaba secuestrada. Luego Fermín vino a buscarme. Claro, por eso está aquí. Sí. Y Rubén... ¡Rubén no puedo aguantar, y se chivó! Claro. Después... Fermín quiso disparar a León... y... ¡todo salió mal! Oh. No. ¡Rubén! Rubén intentó matar a Fermín para que no... matara a León. Y entonces, ¡todo volvió a salir mal! Porque el disparo de Rubén... me le llevé yo... ¿Y él?
–Fermín, ¿estás bien?
–Si, Rebeca, aunque eso lo debería preguntar yo. Por mi culpa estás aquí.
–¡No, Fermín! No es tu culpa. Fue un error.
–No debiste ponerte delate mía...
–¿Y dejar que te disparase Rubén...? Aún no me creo lo que intentó... es un chaval, ¡no un asesino! ¿Por qué te disparó?
–Estaba nervioso, nada más...
–Ya... ¿Cómo está él? –pregunté preocupándome un poco.
–Pues me parece que se llevó la peor parte: después de que me disparase y tú te pusieras frente a mi, y te diera la bala, él intentó matarse...
–¿Y...? ¿Se va a recuperar, verdad?
–Si... no... no sé... –no estaba nada seguro.
–Fermín...
–Tiene una gran herida en el estómago, donde le dio la bala. Los médicos están hacendo todo lo posible. Pero me han dicho que... será bastante difícil...
Negué con la cabeza. ¡No me lo podía creer! Es sólo un chaval...
–Pero ahora no te preocupes, se pondrá bien. Descansa.
–Fermín... no sabes lo que pasó cuando fui a ver a la doctora Matilde, la que se ocupó de Martin...
–¿Qué pasó?
–No estaba...
–Tendremos que seguir buscándola, no te preocupes por eso, yo te ayudaré, siempre estaré contigo.
–No,Fermín. No me podrás ayudar a buscar a la doctora porque... porque está muerta...
–¡¿Qué?! –no se lo podía creer.
–Si, y estoy segura de que la ha matado León. ¡Ha tenido que ser él! Cuando me secuestró me dijo que me estara quietecita, y que no buscara a Martín...
–¡Será...! –me miró –. Rebeca, vamos a encontrarlo, lo sé. Porque no pararé hasta dar con él y hasta que os vea felices, ¿sí? Siempre seremos amigos “caza-nazis” –reímos –.Descansa, ¿vale? Voy a la cafetería a tomar un café. ¿Quieres que te traiga algo?
–Un vaso de agua está bien, gracias –le dije.
Abrió la puerta para salir. Le seguí con la mirada. Se volvió para mirarme y decirme algo:
–¡Por cierto: la policía ya se ha encargado de los militares! Por fin se ha hecho justicia. Ayer mismo los llamé –me guiñó un ojo y salió por la puerta.

Rubén te da igual? A mi también! JAJA

Capitulo 11
ELSA
Mandé llamar a Alicia y Lucía a mi despacho. Tocaron la puerta.
–¿Se puede? –dijo Alicia entreabriéndola.
–Pasa, porfavor –la dije.
–Me he encontrado con Lucia en la enfermería. Ha dicho que en nada está aquí.
–Gracias. Siéntate –ella se sentó –. No sé si habreis notado algo raro ahí fuera... –comencé a explicarle a Alicia.
–¿Algo raro? –negó con la cabeza –. ¿Qué pasa?
–Perdón por el retraso–Lucía llamó a la puerta y la hice pasar. Se sentó al lado de Alicia–. ¿Pasa algo?
–Sí. Pero nada malo. No os preocupeis.
–¿Entonces? –Alicia fue la primera en preguntar.
–Somos libres –dije sin poder contenerme a sonreír de felicidad –. No hay militares, no sé cómo ni porqué, pero ¡somos libres!
Alicia y Lucía sonrieron. Era en realidad una noticia increíblemente buena.
–¡No puede ser!
–Si, Alicia–la saqué de dudas –. Y quería que lo supierais porque... mañana mismo voy a cerrar este centro, ¡mañana mismo estaremos viviendo en paz!
–Tendriamos que avisar a los alumnos –aclaró Lucía.
–Si. Por eso en nada los he citado en la biblioteca.
–Nos vemos allí entonces –Lucía se levantó.
Alicia le siguió el gesto.
–Sabíamos que esto pasaría –dijo.
–Ir preparando las maletas –sonreí.
Las dos salieron. Me preparé para la reunión.
ESTELA
Salí de la enfermería para caminar un rato. Allí dentro me aburría. Y además Lucía habia desaparecido hace un buen rato. Fui a ver a Hugo. Me costará mirarlo a la cara después... de saberlo todo. Pero es que... no puedo hacer como si no existiera... Llamé a su puerta.
–¿Quién es?
Abrí sin contestar.
–¡Hola!
–Perdón por venir así...
–No tienes que disculparte. Aunque me disponía a ir al gimnasio. ¿Querias algo?
–¡Ah! ¿Ahora tengo que buscar una escusa para verte, o qué?
–No... –se acercó a mí.
Me intentó besar. Pero no pude y salí corriendo.
–¡¡Estela!! –me gritó una voz detrás.
Me giré. Era Lucía.
–No sé qué estás haciendo aquí. No te he dado permiso para salir de la enfermería, pero ha pasado algo, y creo que solo tú puedes solucionarlo...
–¿Qué ha pasado? –dije preocupada.
–Ni Araujo ni ningún otro militar siguen ahí fuera.
–¿Qué? Pues me da demasiado igual, la verdad...
–¡No lo entiendes!
–Pues no. ¿Por qué te pones así?
–Elsa va a cerrar mañana mismo el centro.
–¡¡¿Qué?!! No puede hacer eso.
–¡Si que puede! Porque piensa que nadie se lo impedirá...
–¿Y...?
–¡Y Garrido y Hugo se lo impedirán haciendo vete tú a saber qué!
–¿Y que puedo hacer yo...?
–Hablar con Elsa... tú puedes controlar a Hugo, ¿no?
–¿Quieres que le mienta? Sabes que no puedo. No sé mentir a Hugo...
–Si se entera de que el proyecto géminis está perdido, y de que Elsa quiere cerrar el internado, será peor. Lo sabes.
–Pero... –no me dejó hablar.
–Tienes que hablar con ella. ¡Es la única forma de salvarnos todos! Eres fuerte, Estela, sé qué harás lo correcto. Y lo correcto es... mandar a Hugo a la cárcel... Lo sabes, ¡Estela! No hay otra...
Empecé a llorar. Lucía me abrazó. Sabía que Hugo era nazi, que era capaz de retenerlos e incluso de matar a alguien para que el internado no se cerrase. Sabía que Elsa no tenía ni idea de las personas que eran Hugo y el teniente. Y si no les ayudo... puede que todos mueran. Pero me era muy difícil traicionar a Hugo.
–Y ahora tengo que irme a la biblioteca –me dijo Lucía –. Espero verte allí, para ayudarnos, confió en ti.
Se fue. Sus palabras resonaban en mi cabeza: <<Confío en ti>>. <<Harás lo correcto>>. <<Eres fuerte, Estela...>>. ¿Y si... en el último momento me vuelvo débil... y los traiciono? Como le dije a Lucía: soy capaz de hacer cualquier cosa por Hugo. Pero... no viviría tranquila sabiendo que no se ha hecho justicia. Queria ayudarlos. Intentaré no traicionarlos.
REBECA
–Tranquila, Rebeca, estás bien... –me dijo Fermín al despertar.
–Pero... –aún no me acordaba muy bien de lo ocurrido.
Empecé a pensar en lo último que me pasó: estaba secuestrada, sí, me secuestró mi propio padre por ir a ver a la doctora que se encargó de Martín. Sí. Por eso estaba secuestrada. Luego Fermín vino a buscarme. Claro, por eso está aquí. Sí. Y Rubén... ¡Rubén no puedo aguantar, y se chivó! Claro. Después... Fermín quiso disparar a León... y... ¡todo salió mal! Oh. No. ¡Rubén! Rubén intentó matar a Fermín para que no... matara a León. Y entonces, ¡todo volvió a salir mal! Porque el disparo de Rubén... me le llevé yo... ¿Y él?
–Fermín, ¿estás bien?
–Si, Rebeca, aunque eso lo debería preguntar yo. Por mi culpa estás aquí.
–¡No, Fermín! No es tu culpa. Fue un error.
–No debiste ponerte delate mía...
–¿Y dejar que te disparase Rubén...? Aún no me creo lo que intentó... es un chaval, ¡no un asesino! ¿Por qué te disparó?
–Estaba nervioso, nada más...
–Ya... ¿Cómo está él? –pregunté preocupándome un poco.
–Pues me parece que se llevó la peor parte: después de que me disparase y tú te pusieras frente a mi, y te diera la bala, él intentó matarse...
–¿Y...? ¿Se va a recuperar, verdad?
–Si... no... no sé... –no estaba nada seguro.
–Fermín...
–Tiene una gran herida en el estómago, donde le dio la bala. Los médicos están hacendo todo lo posible. Pero me han dicho que... será bastante difícil...
Negué con la cabeza. ¡No me lo podía creer! Es sólo un chaval...
–Pero ahora no te preocupes, se pondrá bien. Descansa.
–Fermín... no sabes lo que pasó cuando fui a ver a la doctora Matilde, la que se ocupó de Martin...
–¿Qué pasó?
–No estaba...
–Tendremos que seguir buscándola, no te preocupes por eso, yo te ayudaré, siempre estaré contigo.
–No,Fermín. No me podrás ayudar a buscar a la doctora porque... porque está muerta...
–¡¿Qué?! –no se lo podía creer.
–Si, y estoy segura de que la ha matado León. ¡Ha tenido que ser él! Cuando me secuestró me dijo que me estara quietecita, y que no buscara a Martín...
–¡Será...! –me miró –. Rebeca, vamos a encontrarlo, lo sé. Porque no pararé hasta dar con él y hasta que os vea felices, ¿sí? Siempre seremos amigos “caza-nazis” –reímos –.Descansa, ¿vale? Voy a la cafetería a tomar un café. ¿Quieres que te traiga algo?
–Un vaso de agua está bien, gracias –le dije.
Abrió la puerta para salir. Le seguí con la mirada. Se volvió para mirarme y decirme algo:
–¡Por cierto: la policía ya se ha encargado de los militares! Por fin se ha hecho justicia. Ayer mismo los llamé –me guiñó un ojo y salió por la puerta.
#287

03/05/2011 19:42
hola shay!!
no me suelo pasar por el foro del internado, pero he visto tu relato y he pensado: A LEERLO!! xD
me gusta mucho!
no me suelo pasar por el foro del internado, pero he visto tu relato y he pensado: A LEERLO!! xD
me gusta mucho!
#288

05/05/2011 17:51
Irati!
^^
Graciaaaas!!
;DD
En serio,jeje,muchas gracias por leerlo!!^^

Graciaaaas!!
;DD
En serio,jeje,muchas gracias por leerlo!!^^
#289

05/05/2011 20:17
de nada mujer, si me encanta

#290

07/05/2011 18:15
Muy bien el capitulo!
Pero esto esta muy raro se han ido como que and aporque vino la policia... y hugo y Garrido solos que van a hacer a todo el colegio?¿ nada ellos no tienen contactom con Araujo y demás?¿
Rubén el pobre se arrepintio e intento suicidarse, es el sobri de Rebe salvale! ;)
Lo de Martín fuera de que sea rebemartinista y quiera que les juntes ya, se te esta yendo de las manos, porque no nos avanzas nada ni por parte los malos si le tienen secuestrado ni avanzas con al investigacion de Rebeca y Martín, espero que tengas una buena excusa para toda esta trama detrás y la plasmes bien, te lo digo dede el respeto y el cariño Shay como crítica constructiva
sigue pronto guapa! me encantaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
Pero esto esta muy raro se han ido como que and aporque vino la policia... y hugo y Garrido solos que van a hacer a todo el colegio?¿ nada ellos no tienen contactom con Araujo y demás?¿
Rubén el pobre se arrepintio e intento suicidarse, es el sobri de Rebe salvale! ;)
Lo de Martín fuera de que sea rebemartinista y quiera que les juntes ya, se te esta yendo de las manos, porque no nos avanzas nada ni por parte los malos si le tienen secuestrado ni avanzas con al investigacion de Rebeca y Martín, espero que tengas una buena excusa para toda esta trama detrás y la plasmes bien, te lo digo dede el respeto y el cariño Shay como crítica constructiva

sigue pronto guapa! me encantaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
#291

08/05/2011 17:25
que chulo! es muy entretenido! seguidlo por favor

#292

09/05/2011 16:11
Ais! que se nos arrepintio Ruben!
Una cosa, aclarame....ivan y julia? Ande estan? xD
Una cosa, aclarame....ivan y julia? Ande estan? xD
#293

04/07/2011 20:56
SIGUELO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!11 Plis Shay!!!!!




























































#294

13/07/2011 02:33
Aveeeeeer!
Es la primera vez en unos cuantos meses que me paso por aqui

SORRY!! Gracias a todos, Gracais Silvia por la crítica. Que me ha venido bien
Os diré que pronto terminará, y que en uno o dos días os pondré otro capi.
Laus... ahora mismo no sabría responderte eso!
Yo estoy igual que tú. JAJAJA

Es la primera vez en unos cuantos meses que me paso por aqui


SORRY!! Gracias a todos, Gracais Silvia por la crítica. Que me ha venido bien

Os diré que pronto terminará, y que en uno o dos días os pondré otro capi.
Laus... ahora mismo no sabría responderte eso!

#295

14/07/2011 00:15
A ver si es verdad que antes de que termine la semana hay capitulo eh?¿ TT Lo esperamos!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
#296

17/07/2011 18:54
Un adelanto del que será el próximo capitulo
Decirle a Silvia que ya tengo toda la trama Rebemartinista preparada, y que saldrá en el próximo ;)
IVÁN
Todos los alumnos estábamos reunidos en la biblioteca, para escuchar la supuesta gran noticia que Elsa tenía que darnos. ¿Pero que ‘’gran’’ noticia podríamos esperar?
–Alumnos de este centro –comenzó ha hablar–, han sido tantos años compartidos con vosotros, tantos exámenes y tantas cosas como disgustos, que no sé como daros esta buena noticia... –Elsa seguía hablando, pero solo escuchaba “bla, bla, bla”
Entonces apareció la nueva en la entrada. Me dirigí a ella.
–¡Iván! ¿Dónde vas? –Julia me agarró el brazo.
–Ahora vuelvo. Tengo que hablar un momento con Estela –la cogí la mano –. Otra cosa: id a nuestro cuarto cuando Elsa termine de hablar, tengo que contaros algo –la dí un beso y seguí andando hacia la entrada.
–Eh... –le susurré a Estela cuando llegué a su lado.
–Ah, tú... –se hizo la sorprendida. No me miró.
–Si, yo. ¿Cómo estás?
–Veamos... después de no haberte caído bien, de que hayamos discutido y encima me digas que mi prima Carol ha muerto... ¡Genial! No me puede ir mejor... –seguía sin mirarme.
–Lo siento... y... no me refería a eso...
–Por lo demás no te preocupes –se dio la vuelta y echó a andar.
Intenté seguirla, pero unas palabras de Elsa hicieron que parase y la mirase:
–Por lo que... ¡¡somos libres, y mañana diremos adiós al internado Laguna Negra!!
45 minutos después
Julia y Vicky se habían quedado en el cuarto. Marcos y yo fuimos en busca de Estela, solo faltaba ella. Íbamos a desenmascararla.
–¡¡¡Eh, tú!!! –la grité cuando la vimos salir del aula de Latín.
–¡Iván! –me llamó la atención Marcos.
–Marcos, tío, a esta como no la tratemos así, se nos sube a la chepa.
–¿Se puede saber que quieres ahora? Bueno, más bien, ¿Qué quereis? –dijo acercándose.
–¿Puedes acompañarnos un momento? –le preguntó educadamente Marcos.
–¿adonde?

Decirle a Silvia que ya tengo toda la trama Rebemartinista preparada, y que saldrá en el próximo ;)
Capítulo 12
IVÁN
Todos los alumnos estábamos reunidos en la biblioteca, para escuchar la supuesta gran noticia que Elsa tenía que darnos. ¿Pero que ‘’gran’’ noticia podríamos esperar?
–Alumnos de este centro –comenzó ha hablar–, han sido tantos años compartidos con vosotros, tantos exámenes y tantas cosas como disgustos, que no sé como daros esta buena noticia... –Elsa seguía hablando, pero solo escuchaba “bla, bla, bla”
Entonces apareció la nueva en la entrada. Me dirigí a ella.
–¡Iván! ¿Dónde vas? –Julia me agarró el brazo.
–Ahora vuelvo. Tengo que hablar un momento con Estela –la cogí la mano –. Otra cosa: id a nuestro cuarto cuando Elsa termine de hablar, tengo que contaros algo –la dí un beso y seguí andando hacia la entrada.
–Eh... –le susurré a Estela cuando llegué a su lado.
–Ah, tú... –se hizo la sorprendida. No me miró.
–Si, yo. ¿Cómo estás?
–Veamos... después de no haberte caído bien, de que hayamos discutido y encima me digas que mi prima Carol ha muerto... ¡Genial! No me puede ir mejor... –seguía sin mirarme.
–Lo siento... y... no me refería a eso...
–Por lo demás no te preocupes –se dio la vuelta y echó a andar.
Intenté seguirla, pero unas palabras de Elsa hicieron que parase y la mirase:
–Por lo que... ¡¡somos libres, y mañana diremos adiós al internado Laguna Negra!!
45 minutos después
Julia y Vicky se habían quedado en el cuarto. Marcos y yo fuimos en busca de Estela, solo faltaba ella. Íbamos a desenmascararla.
–¡¡¡Eh, tú!!! –la grité cuando la vimos salir del aula de Latín.
–¡Iván! –me llamó la atención Marcos.
–Marcos, tío, a esta como no la tratemos así, se nos sube a la chepa.
–¿Se puede saber que quieres ahora? Bueno, más bien, ¿Qué quereis? –dijo acercándose.
–¿Puedes acompañarnos un momento? –le preguntó educadamente Marcos.
–¿adonde?
#297

17/07/2011 22:34
Dejo aquí el capitulo entero ;)
IVÁN
Todos los alumnos estábamos reunidos en la biblioteca, para escuchar la supuesta gran noticia que Elsa tenía que darnos. ¿Pero que ‘’gran’’ noticia podríamos esperar?
–Alumnos de este centro –comenzó ha hablar–, han sido tantos años compartidos con vosotros, tantos exámenes y tantas cosas como disgustos, que no sé como daros esta buena noticia... –Elsa seguía hablando, pero solo escuchaba “bla, bla, bla”
Entonces apareció la nueva en la entrada. Me dirigí a ella.
–¡Iván! ¿Dónde vas? –Julia me agarró el brazo.
–Ahora vuelvo. Tengo que hablar un momento con Estela –la cogí la mano –. Otra cosa: id a nuestro cuarto cuando Elsa termine de hablar, tengo que contaros algo –la dí un beso y seguí andando hacia la entrada.
–Eh... –le susurré a Estela cuando llegué a su lado.
–Ah, tú... –se hizo la sorprendida. No me miró.
–Si, yo. ¿Cómo estás?
–Veamos... después de no haberte caído bien, de que hayamos discutido y encima me digas que mi prima Carol ha muerto... ¡Genial! No me puede ir mejor... –seguía sin mirarme.
–Lo siento... y... no me refería a eso...
–Por lo demás no te preocupes –se dio la vuelta y echó a andar.
Intenté seguirla, pero unas palabras de Elsa hicieron que parase y la mirase:
–Por lo que... ¡¡somos libres, y mañana diremos adiós al internado Laguna Negra!!
45 minutos después
Julia y Vicky se habían quedado en el cuarto. Marcos y yo fuimos en busca de Estela, solo faltaba ella. Íbamos a desenmascararla.
–¡¡¡Eh, tú!!! –la grité cuando la vimos salir del aula de Latín.
–¡Iván! –me llamó la atención Marcos.
–Marcos, tío, a esta como no la tratemos así, se nos sube a la chepa.
–¿Se puede saber que quieres ahora? Bueno, más bien, ¿Qué quereis? –dijo acercándose.
–¿Puedes acompañarnos un momento? –le preguntó educadamente Marcos.
–¿adonde?
–¡Eso ya lo sabrás! –la cogí del brazo y la empujé hasta el cuarto.
Entramos.
–¡Estás tonto! Me has hecho daño en el brazo, ¡subnormal!
–¡¡Ehh!! –gritó Julia, que estaba dentro con Vicky –Menos humitos, ¿Vale?
–¿A qué demonios viene todo esto? –nos miró a todos uno a uno.
–Pues viene... –comencé yo –a que vas a confirmar que te pillé esta mañana viendo el portátil de Marcos.
–¿Qué? –Marcos no sabía nada.
–Sí, Marcos. La sorprendí mirando tu portátil.
–Voy a ver que es lo último que se ha visto en el disco duro del portátil –dijo Vicky.
Cogió el portátil de Marcos y lo abrió.
–¿Pero de qué vas? –Marcos se había enfadado.
–Puedo explicarlo.
–¿Y también puedes explicar que te haya visto besándote con Hugo? –continuó Marcos.
–¿Qué dices? –me sorprendí yo.
–¡JODER! Dejad que os cuente, por favor. En serio...
Sin que Estela se pudiera excusar, comenzó a sonar una conversación. Provenia del portátil. Era un video. El último visto. El video que Estela había visto. Todos nos acercamos a Vicky, y supimos cual era.
–¿Seguro que...? –preguntó Marcos.
–Sí, Marcos, este es el último video que se ha visto –confirmó Vicky –. Y no por nosotros.
–Ahora si que la has cagado –me puse histérico.
–Miras videos de mi madre metiendote en mi propio cuarto y en mi propio ordenador, te besas con Hugo...
–¡¡Marcos!! –Estela le interrumpió enseñándole la muñeca derecha por dentro.
–¡No puede ser! ¿Tú?
–¡¡Sí, yo!! –comenzó a llorar.
Vicky y Julia se acercaron. Ninguno de los tres entendíamos nada.
–¿Se puede saber que significa ese tatuaje? –dije mirando la muñeca de Estela, ya que Marcos parecía entender algo.
Sin comerlo ni beberlo, se perdieron en un fuerte abrazo.
–¿Qué está pasando? –gritó Julia.
–Eso digo yo –dijo Vicky.
–Chicos, ella es Estela –dijo Marcos.
–¡Marcos! Ya lo sabemos.
–No, me refiero que ella es la chica de la que tanto os hablaba, Iván.
–¿La amiga que tuviste que dejar por problemas de tu madre? –preguntó rapidamente Vicky.
–Sí. La psicóloga que sale en ese video, con mi madre... es...
–Marcos no lo digas por favor –susurró Estela.
–Es su madre... –lo dijo él.
–Ya de paso contaros que la mataron ellos por ayudar a Irene Espí.
–¿Ellos? –preguntó Julia.
–Sí, ellos. Los que os perseguían a principio de curso. Los que han contagiado a todo el internado. Los del proyecto.
–¿Pero tú que mas sabes? –grité.
–¡¡Iván!! –me regañó Marcos.
–Déjale, Marcos. Os lo contaré todo. Aunque no sé mas que vosotros, porque he vivido toda la vida engañada... por Hugo. Pero antes quiero deciros algo importante. Sé donde está tu tió –miró a Marcos –, y por eso vine a este internado. Voy a ayudarte a encontrarle.
Se volvieron a abrazar.
–Cuanto antes –anunció. –O sea, ¡ya! –abrió la puerta.
–¡Estela, ¿no crees que Marcos debería saber algo?! –le dije antes de que saliera.
–No, ya os he dicho todo...
Comprendí que debia callarme, y no decirle a nadie que Carol era prima suya. Seguimos a Estela. Allí abajo: en los pasadizos.
–¿Pero que hacemos aquí? –Vicky no entendía nada.
–En la sala -2 está Samuel Espí. Tenemos que bajar por este agujero. Abajo tiene que haber otra salida –explicó Estela.
Todos la hicimos caso. Pero yo aún no me fiaba demasiado...
**PD: el próximo será el último de la segunda Tª, que dejará ciertas cosas al aire que se cerrarán en los últimos cuatro capitulos ;D
Capítulo 12
IVÁN
Todos los alumnos estábamos reunidos en la biblioteca, para escuchar la supuesta gran noticia que Elsa tenía que darnos. ¿Pero que ‘’gran’’ noticia podríamos esperar?
–Alumnos de este centro –comenzó ha hablar–, han sido tantos años compartidos con vosotros, tantos exámenes y tantas cosas como disgustos, que no sé como daros esta buena noticia... –Elsa seguía hablando, pero solo escuchaba “bla, bla, bla”
Entonces apareció la nueva en la entrada. Me dirigí a ella.
–¡Iván! ¿Dónde vas? –Julia me agarró el brazo.
–Ahora vuelvo. Tengo que hablar un momento con Estela –la cogí la mano –. Otra cosa: id a nuestro cuarto cuando Elsa termine de hablar, tengo que contaros algo –la dí un beso y seguí andando hacia la entrada.
–Eh... –le susurré a Estela cuando llegué a su lado.
–Ah, tú... –se hizo la sorprendida. No me miró.
–Si, yo. ¿Cómo estás?
–Veamos... después de no haberte caído bien, de que hayamos discutido y encima me digas que mi prima Carol ha muerto... ¡Genial! No me puede ir mejor... –seguía sin mirarme.
–Lo siento... y... no me refería a eso...
–Por lo demás no te preocupes –se dio la vuelta y echó a andar.
Intenté seguirla, pero unas palabras de Elsa hicieron que parase y la mirase:
–Por lo que... ¡¡somos libres, y mañana diremos adiós al internado Laguna Negra!!
45 minutos después
Julia y Vicky se habían quedado en el cuarto. Marcos y yo fuimos en busca de Estela, solo faltaba ella. Íbamos a desenmascararla.
–¡¡¡Eh, tú!!! –la grité cuando la vimos salir del aula de Latín.
–¡Iván! –me llamó la atención Marcos.
–Marcos, tío, a esta como no la tratemos así, se nos sube a la chepa.
–¿Se puede saber que quieres ahora? Bueno, más bien, ¿Qué quereis? –dijo acercándose.
–¿Puedes acompañarnos un momento? –le preguntó educadamente Marcos.
–¿adonde?
–¡Eso ya lo sabrás! –la cogí del brazo y la empujé hasta el cuarto.
Entramos.
–¡Estás tonto! Me has hecho daño en el brazo, ¡subnormal!
–¡¡Ehh!! –gritó Julia, que estaba dentro con Vicky –Menos humitos, ¿Vale?
–¿A qué demonios viene todo esto? –nos miró a todos uno a uno.
–Pues viene... –comencé yo –a que vas a confirmar que te pillé esta mañana viendo el portátil de Marcos.
–¿Qué? –Marcos no sabía nada.
–Sí, Marcos. La sorprendí mirando tu portátil.
–Voy a ver que es lo último que se ha visto en el disco duro del portátil –dijo Vicky.
Cogió el portátil de Marcos y lo abrió.
–¿Pero de qué vas? –Marcos se había enfadado.
–Puedo explicarlo.
–¿Y también puedes explicar que te haya visto besándote con Hugo? –continuó Marcos.
–¿Qué dices? –me sorprendí yo.
–¡JODER! Dejad que os cuente, por favor. En serio...
Sin que Estela se pudiera excusar, comenzó a sonar una conversación. Provenia del portátil. Era un video. El último visto. El video que Estela había visto. Todos nos acercamos a Vicky, y supimos cual era.
–¿Seguro que...? –preguntó Marcos.
–Sí, Marcos, este es el último video que se ha visto –confirmó Vicky –. Y no por nosotros.
–Ahora si que la has cagado –me puse histérico.
–Miras videos de mi madre metiendote en mi propio cuarto y en mi propio ordenador, te besas con Hugo...
–¡¡Marcos!! –Estela le interrumpió enseñándole la muñeca derecha por dentro.
–¡No puede ser! ¿Tú?
–¡¡Sí, yo!! –comenzó a llorar.
Vicky y Julia se acercaron. Ninguno de los tres entendíamos nada.
–¿Se puede saber que significa ese tatuaje? –dije mirando la muñeca de Estela, ya que Marcos parecía entender algo.
Sin comerlo ni beberlo, se perdieron en un fuerte abrazo.
–¿Qué está pasando? –gritó Julia.
–Eso digo yo –dijo Vicky.
–Chicos, ella es Estela –dijo Marcos.
–¡Marcos! Ya lo sabemos.
–No, me refiero que ella es la chica de la que tanto os hablaba, Iván.
–¿La amiga que tuviste que dejar por problemas de tu madre? –preguntó rapidamente Vicky.
–Sí. La psicóloga que sale en ese video, con mi madre... es...
–Marcos no lo digas por favor –susurró Estela.
–Es su madre... –lo dijo él.
–Ya de paso contaros que la mataron ellos por ayudar a Irene Espí.
–¿Ellos? –preguntó Julia.
–Sí, ellos. Los que os perseguían a principio de curso. Los que han contagiado a todo el internado. Los del proyecto.
–¿Pero tú que mas sabes? –grité.
–¡¡Iván!! –me regañó Marcos.
–Déjale, Marcos. Os lo contaré todo. Aunque no sé mas que vosotros, porque he vivido toda la vida engañada... por Hugo. Pero antes quiero deciros algo importante. Sé donde está tu tió –miró a Marcos –, y por eso vine a este internado. Voy a ayudarte a encontrarle.
Se volvieron a abrazar.
–Cuanto antes –anunció. –O sea, ¡ya! –abrió la puerta.
–¡Estela, ¿no crees que Marcos debería saber algo?! –le dije antes de que saliera.
–No, ya os he dicho todo...
Comprendí que debia callarme, y no decirle a nadie que Carol era prima suya. Seguimos a Estela. Allí abajo: en los pasadizos.
–¿Pero que hacemos aquí? –Vicky no entendía nada.
–En la sala -2 está Samuel Espí. Tenemos que bajar por este agujero. Abajo tiene que haber otra salida –explicó Estela.
Todos la hicimos caso. Pero yo aún no me fiaba demasiado...
**PD: el próximo será el último de la segunda Tª, que dejará ciertas cosas al aire que se cerrarán en los últimos cuatro capitulos ;D
#298

19/07/2011 02:06
Solo porque se que en el siguiente habrá rebemartinismo que sino..
Ala lso chicos han descubierto que Estela está con ellos y quien es y todo, yyyyy Samuelin etsa abajo y van a ir a por el!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
A ver que pasa!
Al final elsa que contaba?
Siguelo yaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa y no quiero que acabe TT
Ala lso chicos han descubierto que Estela está con ellos y quien es y todo, yyyyy Samuelin etsa abajo y van a ir a por el!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Al final elsa que contaba?

Siguelo yaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa y no quiero que acabe TT
#299

22/07/2011 18:56
^^Gracias por leerlo Silvia Jaja 
JULIA
Seguía sin entender nada. Lo único que me había quedado más o menos claro era que Samuel Espí, el tío de Marcos estaba vivo, y en el piso -2 de los pasadizos. Pero, ¿Qué hacia él allí?
–Elsa ya me avisó que mi tío estaba vivo –dijo Marcos de repente mientras caminábamos por aquellos oscuros túneles que tanto habíamos frecuentado tiempo atrás.
–¿Elsa? –se extrañó Estela.
–Sí, Lucía lo estuvo cuidando, ¿no? –Marcos quiso entablar conversación para entender las cosas mejor.
Agarré la mano a Iván.
–¿Se puede saber dónde está Héctor? –a Vicky no le daba buena espina.
–No te impacientes, Vicky. Tiene que haber una puerta camuflada en alguna parte de este piso.
–Ya, pues me dirás donde –yo también me estaba poniendo nerviosa.
Unos cercanos ruidos resonaban entre las paredes haciendo un eco.
–¡Está claro que ahí hay alguien! –gritó Iván.
–El sonido proviene de allí –dijo Marcos señalando a la izquierda.
–¡¡Corred, vamos!! Cuanto menos tiempo estemos aquí, mejor.
–Tú eres muy rarita –le dije a Estela.
–Piensa lo que quieras... –pasaba de mi comentario.
Los sonidos se hacían cada vez más claros, y se podían percibir con más facilidad al paso que andábamos.
–¿Hola? –grité.
–¿¡¡Hay alguien!!? –gritó Iván.
–¡¡¡¡Eeeeooo!!!!
–¡¡Marcos!! –la voz rebotó en las paredes de la cueva.
–¡¡Es él!! –afirmó Estela –Estoy segura. ¡¡vamos!!
Corrimos hasta donde nos indicaba exactamente la voz. No había duda: era Héctor. Más bien, Samuel.
–¿Héctor?
–¿Hola? ¿Marcos? ¡¡Eres tú!! Ayudame.
–¡¡Vamos a sacarte de aquí!!
La entrada claramente estaba bloqueada por unas rocas que impedían el paso.
–Seguramente esto lo provocó el derrumbe –concluí.
–¿Qué hacemos? –preguntó Marcos un poco agobiado.
–Está claro: tenemos que desbloquear la entrada. No hay más posibilidades.
–Pero ¿Cómo? Nos llevará un tiempo, será difícil, y... –Vicky no dejaba de señalar las rocas.
–Pues como si tardamos tres días. Tenemos que hacerlo, chicos –insistió Estela.
–Tiene razón –la apoyé.
–¿A qué esperamos? –Iván se adelantó y quitó con dificultad una de las rocas.
Todos nos unimos. Y lo nuestro nos costó.
Mientras...
REBECA
–¿Cómo te sientes? –me preguntó Fermín sin apartar la vista del volante.
–Bien. Con sueño –reí.
–Ya, ya. Acabas de despertar.
–¿Falta mucho?
–No, ya casi hemos llegado.
Me habían dado de alta hace hora y media y nos dirigíamos al internado.
–¿Sabes qué? Tengo la esperanza de llegar y encontrarle allí de nuevo. Como si nada hubiese pasado.
Fermín no dijo nada ante mi comentario.
–¿Por qué callas? No crees que le vuelva a encontrar, ¿verdad?
–¡¡No!! Claro que le vamos a encontrar... pero...
–Pero NO en el internado...
–Ya estamos llegando.
Vi que Fermín se sentia incómodo ante la conversación así que decidí callar. Suspiré y eché la cabeza hacia atrás, dando con el asiento.
En unos 8 minutos ya habiamos llegado al bosque. Fermín se aproximó a aparcar en la entrada del internado. Sin militares. Esto me resultaba raro.
Salimos del coche. Me abrazó con el brazo derecho y entramos juntos. Nadie nos recibió en la entrada.
–¿Nadie sabía que volvíamos?
–Más bien... casi nadie sabía que nos fuimos...
Esbocé una leve y simple sonrisa...
–¡¡Fermín!! –María nos había visto.
En seguida corrió hacia nosotros y abrazó a su novio como si fuese el último día de su vida. Como nunca.
–Te prometí que volvería –se besaron.
–¡Rebeca! –luego me abrazó a mi fuertemente –¿Cómo estás?
–Bien, María. Ya te contará Fermín. ¿Y tú? ¿Cómo vas?
–Bien, bien. ¡Cuánto me alegro de verte! –nos abrazamos de nuevo.
–Y yo a ti. ¿Ha ocurrido algo en mi ausencia? –pregunté esperanzada.
–Oye Maria, voy a acompañarla a su cuarto para que descanse –no dejó que contestara.
Comprendí que era mejor no saber la respuesta. Fermín me cogió la mano y echó a andar.
–Ahora mismo te veo –le dijo a Maria.
Me acompañó a mi cuarto.
–Descansa, ¿vale?
–Vale –asentí.
“Toc, toc”. Llamaron a mi puerta.
–¿Quién es? –pregunté desde la cama.
–Espera, voy a abrir –me dijo Fermín.
Abrió despacio la puerta.
–¡Hombre! –exclamó.
–¡Hola Fermín! –se oyó su voz. Tan dulce como siempre –¿Está Rebe?
–Claro, pasa, pero no la entretengas mucho, que debe descansar.
Él entró y Fermín se despidió.
–Os dejo. Hasta luego –salió.
–¡¡Rebe!! –corrió ha abrazarme –Te he echado un montón de menos.
–Y yo –dije riendo mientras me achuchaba –Cuidado que me ahogas.
–Lo siento. ¿Y mi papá?
Momento de tensión. Un silencio turbador. Mi mente en blanco. No sé que decir.
–Verás, Lucas... tu papá no ha podido venir hoy –de nuevo una gran mentira.
–¿y por qué? –la cara que antes tenía de alegría se volvió triste, como una rosa seca y sin espinas sanas.
–Pues porque tenia que hacer mucha tarea para los alumnos del cole en el que está. Pero me ha dicho una cosita. ¿Quieres saberla? –entonces se le iluminó un poco la carita.
–Si, ¿Qué te ha dicho?
–Pues verás –le cogí y le senté en mis piernas –me ha dicho que como tiene tantas ganas de verte, muy pronto va a volver con nosotros. Ya lo verás. En menos de lo que imaginas.
–¿Y volverá a ser tu novio? ¿Y todo será como antes? ¿Y tú seguirás siendo como mi mamá?
–Claro que sí. Todo será como antes. Y yo te cuidaré como si fueses mi hijo. Porque yo te quiero mucho, Lucas –al decir eso, y ante la posibilidad de que lo que he dicho fuese mentira, una lágrima resbaló por mi cara.
–Pero no llores –Lucas me seco los ojos –Yo también te quiero mucho Rebe. Estoy deseando que mi papá vuelva con nosotros.
–Volverá. Claro que sí –me dio un beso.
Le abracé intensa y cariñosamente. Lucas. Le quería tanto... como me dolía mentirle...
En el despacho del director...
LUCÍA
Estaba intentando por todos mis medios que Elsa no cerrara el colegio mañana.
–¿Pero se puede saber porqué, Lucía? ¿Por qué no quieres que cierre mañana el internado? Si este colegio solo trae malos recuerdos... –Elsa se negaba una y otra vez.
–Te lo explicaría con gusto, pero es que ahora no hay tiempo, Elsa, de verdad.
–¡No! –fue un “no” rotundo.
–¡¡Elsa!!
–No voy a dejar que ni uno de mis alumnos siga en este centro ni un día más. Esto ha sido un infierno para ellos. ¿No lo entiendes?
–¡La que no lo entiende eres tú! Elsa, por favor, no puedes cerrarlo mañana. ¡NO PUEDES!
–Si que puedo.
–Bueno, pues tal vez... no debes...
–¿Qué? ¿Pero que estás diciendo?
–No puedo decirte nada más. Solo te lo pido por favor. Por el bien de todos nosotros: no cierres mañana el internado.
–Lucía, tu no seguirás en el proyecto, ¿verdad?
–¡Díos me libre! Elsa, claro que no.
–¿Entonces? ¿A qué tanto empeño? Dame tan solo una buena excusa.
–Garrido no es quien crees que es –dije al fin.
–¿Cómo?...
–No puedo decirte nada más. Lo siento.
–Está bien. No cerraré mañana el internado. Tan solo una semana. ¿De acuerdo? ¡solo una semana, y esto no se volverá a ver!
–Si... –asentí con la cabeza –Tengo que irme.
–Pero...
La dejé con la palabra en la boca. Rápidamente le mandé un sms a Estela.

Capitulo 13
JULIA
Seguía sin entender nada. Lo único que me había quedado más o menos claro era que Samuel Espí, el tío de Marcos estaba vivo, y en el piso -2 de los pasadizos. Pero, ¿Qué hacia él allí?
–Elsa ya me avisó que mi tío estaba vivo –dijo Marcos de repente mientras caminábamos por aquellos oscuros túneles que tanto habíamos frecuentado tiempo atrás.
–¿Elsa? –se extrañó Estela.
–Sí, Lucía lo estuvo cuidando, ¿no? –Marcos quiso entablar conversación para entender las cosas mejor.
Agarré la mano a Iván.
–¿Se puede saber dónde está Héctor? –a Vicky no le daba buena espina.
–No te impacientes, Vicky. Tiene que haber una puerta camuflada en alguna parte de este piso.
–Ya, pues me dirás donde –yo también me estaba poniendo nerviosa.
Unos cercanos ruidos resonaban entre las paredes haciendo un eco.
–¡Está claro que ahí hay alguien! –gritó Iván.
–El sonido proviene de allí –dijo Marcos señalando a la izquierda.
–¡¡Corred, vamos!! Cuanto menos tiempo estemos aquí, mejor.
–Tú eres muy rarita –le dije a Estela.
–Piensa lo que quieras... –pasaba de mi comentario.
Los sonidos se hacían cada vez más claros, y se podían percibir con más facilidad al paso que andábamos.
–¿Hola? –grité.
–¿¡¡Hay alguien!!? –gritó Iván.
–¡¡¡¡Eeeeooo!!!!
–¡¡Marcos!! –la voz rebotó en las paredes de la cueva.
–¡¡Es él!! –afirmó Estela –Estoy segura. ¡¡vamos!!
Corrimos hasta donde nos indicaba exactamente la voz. No había duda: era Héctor. Más bien, Samuel.
–¿Héctor?
–¿Hola? ¿Marcos? ¡¡Eres tú!! Ayudame.
–¡¡Vamos a sacarte de aquí!!
La entrada claramente estaba bloqueada por unas rocas que impedían el paso.
–Seguramente esto lo provocó el derrumbe –concluí.
–¿Qué hacemos? –preguntó Marcos un poco agobiado.
–Está claro: tenemos que desbloquear la entrada. No hay más posibilidades.
–Pero ¿Cómo? Nos llevará un tiempo, será difícil, y... –Vicky no dejaba de señalar las rocas.
–Pues como si tardamos tres días. Tenemos que hacerlo, chicos –insistió Estela.
–Tiene razón –la apoyé.
–¿A qué esperamos? –Iván se adelantó y quitó con dificultad una de las rocas.
Todos nos unimos. Y lo nuestro nos costó.
Mientras...
REBECA
–¿Cómo te sientes? –me preguntó Fermín sin apartar la vista del volante.
–Bien. Con sueño –reí.
–Ya, ya. Acabas de despertar.
–¿Falta mucho?
–No, ya casi hemos llegado.
Me habían dado de alta hace hora y media y nos dirigíamos al internado.
–¿Sabes qué? Tengo la esperanza de llegar y encontrarle allí de nuevo. Como si nada hubiese pasado.
Fermín no dijo nada ante mi comentario.
–¿Por qué callas? No crees que le vuelva a encontrar, ¿verdad?
–¡¡No!! Claro que le vamos a encontrar... pero...
–Pero NO en el internado...
–Ya estamos llegando.
Vi que Fermín se sentia incómodo ante la conversación así que decidí callar. Suspiré y eché la cabeza hacia atrás, dando con el asiento.
En unos 8 minutos ya habiamos llegado al bosque. Fermín se aproximó a aparcar en la entrada del internado. Sin militares. Esto me resultaba raro.
Salimos del coche. Me abrazó con el brazo derecho y entramos juntos. Nadie nos recibió en la entrada.
–¿Nadie sabía que volvíamos?
–Más bien... casi nadie sabía que nos fuimos...
Esbocé una leve y simple sonrisa...
–¡¡Fermín!! –María nos había visto.
En seguida corrió hacia nosotros y abrazó a su novio como si fuese el último día de su vida. Como nunca.
–Te prometí que volvería –se besaron.
–¡Rebeca! –luego me abrazó a mi fuertemente –¿Cómo estás?
–Bien, María. Ya te contará Fermín. ¿Y tú? ¿Cómo vas?
–Bien, bien. ¡Cuánto me alegro de verte! –nos abrazamos de nuevo.
–Y yo a ti. ¿Ha ocurrido algo en mi ausencia? –pregunté esperanzada.
–Oye Maria, voy a acompañarla a su cuarto para que descanse –no dejó que contestara.
Comprendí que era mejor no saber la respuesta. Fermín me cogió la mano y echó a andar.
–Ahora mismo te veo –le dijo a Maria.
Me acompañó a mi cuarto.
–Descansa, ¿vale?
–Vale –asentí.
“Toc, toc”. Llamaron a mi puerta.
–¿Quién es? –pregunté desde la cama.
–Espera, voy a abrir –me dijo Fermín.
Abrió despacio la puerta.
–¡Hombre! –exclamó.
–¡Hola Fermín! –se oyó su voz. Tan dulce como siempre –¿Está Rebe?
–Claro, pasa, pero no la entretengas mucho, que debe descansar.
Él entró y Fermín se despidió.
–Os dejo. Hasta luego –salió.
–¡¡Rebe!! –corrió ha abrazarme –Te he echado un montón de menos.
–Y yo –dije riendo mientras me achuchaba –Cuidado que me ahogas.
–Lo siento. ¿Y mi papá?
Momento de tensión. Un silencio turbador. Mi mente en blanco. No sé que decir.
–Verás, Lucas... tu papá no ha podido venir hoy –de nuevo una gran mentira.
–¿y por qué? –la cara que antes tenía de alegría se volvió triste, como una rosa seca y sin espinas sanas.
–Pues porque tenia que hacer mucha tarea para los alumnos del cole en el que está. Pero me ha dicho una cosita. ¿Quieres saberla? –entonces se le iluminó un poco la carita.
–Si, ¿Qué te ha dicho?
–Pues verás –le cogí y le senté en mis piernas –me ha dicho que como tiene tantas ganas de verte, muy pronto va a volver con nosotros. Ya lo verás. En menos de lo que imaginas.
–¿Y volverá a ser tu novio? ¿Y todo será como antes? ¿Y tú seguirás siendo como mi mamá?
–Claro que sí. Todo será como antes. Y yo te cuidaré como si fueses mi hijo. Porque yo te quiero mucho, Lucas –al decir eso, y ante la posibilidad de que lo que he dicho fuese mentira, una lágrima resbaló por mi cara.
–Pero no llores –Lucas me seco los ojos –Yo también te quiero mucho Rebe. Estoy deseando que mi papá vuelva con nosotros.
–Volverá. Claro que sí –me dio un beso.
Le abracé intensa y cariñosamente. Lucas. Le quería tanto... como me dolía mentirle...
En el despacho del director...
LUCÍA
Estaba intentando por todos mis medios que Elsa no cerrara el colegio mañana.
–¿Pero se puede saber porqué, Lucía? ¿Por qué no quieres que cierre mañana el internado? Si este colegio solo trae malos recuerdos... –Elsa se negaba una y otra vez.
–Te lo explicaría con gusto, pero es que ahora no hay tiempo, Elsa, de verdad.
–¡No! –fue un “no” rotundo.
–¡¡Elsa!!
–No voy a dejar que ni uno de mis alumnos siga en este centro ni un día más. Esto ha sido un infierno para ellos. ¿No lo entiendes?
–¡La que no lo entiende eres tú! Elsa, por favor, no puedes cerrarlo mañana. ¡NO PUEDES!
–Si que puedo.
–Bueno, pues tal vez... no debes...
–¿Qué? ¿Pero que estás diciendo?
–No puedo decirte nada más. Solo te lo pido por favor. Por el bien de todos nosotros: no cierres mañana el internado.
–Lucía, tu no seguirás en el proyecto, ¿verdad?
–¡Díos me libre! Elsa, claro que no.
–¿Entonces? ¿A qué tanto empeño? Dame tan solo una buena excusa.
–Garrido no es quien crees que es –dije al fin.
–¿Cómo?...
–No puedo decirte nada más. Lo siento.
–Está bien. No cerraré mañana el internado. Tan solo una semana. ¿De acuerdo? ¡solo una semana, y esto no se volverá a ver!
–Si... –asentí con la cabeza –Tengo que irme.
–Pero...
La dejé con la palabra en la boca. Rápidamente le mandé un sms a Estela.
#300

22/07/2011 18:57
En los pasadizos...
Marcos
Dos horas después
Tras un largo e intenso esfuerzo quitando rocas conseguimos dar con una puerta desbloqueada. Todos estabamos sofocados.
–¡JODER! Estoy deshidratado –se quejó Iván.
–Todos estamos igual. Necesito agua, y una cama –dijo Vicky.
–Siento que estemos tan cansados –dijo Estela –pero hay que entrar.
–Joder con la nueva –bromeó Iván.
–Venga chicos –dije yo –Ya hemos llegado al fondo de la situación. Y gracias a vosotros.
–Bueno, tio, vamos, abre ya la puerta.
–Sí, que hay que salir cuanto antes –recordó Julia.
Abrí la puerta. Él. Era él. Claro. Estaba sentado en el suelo. ¡Después de tanto tiempo y...!
–¡¡Héctor!! –corrí hacia él.
–¡Marcos! Estás aquí. ¡Estás aquí! Pensé que jamás volvería a verte.
–¡¡Hector!! –le ayudé a levantarse.
Esbocé una sonrisa de oreja a oreja y solté un par de lágrimas. Me acarició el hombro. Rápidamente le abracé.
–¡¡Chicos!! Estáis todos aquí.
–Claro que sí –dijo Julia.
–¡Hemos venido a buscarte! –Vicky no pudo evitar abrazar a mi tío.
Estela que lo presenciaba todo, simplemente sonreía. Y yo le estaría agradecido toda la vida.
–Salgamos –intervino –Seguidme, por aquí tiene que haber otra salida.
En el bosque, de camino al internado, no pude separarme ni un minuto de él.
–Tengo que contaros algo.
–¿qué pasa? –todos alarmados.
–Allí abajo hay alguien más.
–¿Qué? –Julia se puso rápidamente nerviosa.
–Sí. Oía frecuentemente discusiones entre dos hombres. Uno de ellos... era León.
–¡No puede ser! –gritó Iván.
–¿Y el o...otro? –se atrevió a preguntar Julia, recordando lo que tiempo atrás había vivido allí con Martín y León.
–Al otro no le reconocí. Escuchaba constantemente su voz. Pero no la reconozco... Allí hay alguien que nos necesita.
–Héctor, ahora tenemos que ir al internado, ¿vale? –dijo Iván –Necesitas descanso, comida y agua.
–Haremos lo posible por aquel hombre, pero después –dije yo.
Nos dirijimos al internado.
ESTELA
Todos contentos. Una buena noticia. Y yo satisfecha. Conseguí lo que quería.
“¡ring, ring!”. Me llegó un sms al móvil:
“He podido convencer a Elsa para que nos de tiempo antes de cerrar el internado. Una semana. Ahora solo falta que Hugo no se entere de nada. Ni el teniente. Te toca actuar.” Me aceleré, y mis piernas temblaban un poco.
–¿Pasa algo? –me preguntó Marcos al verme leer el móvil.
–No, nada. Publicidad –me inventé.
Me sonrió y seguimos adelante.
–Por cierto: van a cerrar el internado –le dijo Marcos a su tío.
–¿Qué? ¡¡Qué bien!! No sabes cuanto siento todo lo que has sufrido...
–Ahora no te preocupes por eso.
VICKY
Miré hacia atrás en el camino. Iván agarraba cariñosamente la mano de Julia. Esperé a que llegaran a mi paso.
–¿Pasa algo? –pregunté preocupada.
–A Julia sí –respondió Iván.
–Chicos... creo que sé quién es el hombre que dice Héctor que ha escuchado discutiendo con León.
No supimos como reaccionar ante tal situación.
**PD: Hombre, todo tiene que acabar xD no quiero estirar más el chicle.
Siento no poner ahora la parte Rebemartinista, esque la quiero perfeccionar porque es un avance ;)
**PD2: Ah! Otra cosa! Tengo un fic Rebemartinista preparado para ponerlo ;)
Marcos
Dos horas después
Tras un largo e intenso esfuerzo quitando rocas conseguimos dar con una puerta desbloqueada. Todos estabamos sofocados.
–¡JODER! Estoy deshidratado –se quejó Iván.
–Todos estamos igual. Necesito agua, y una cama –dijo Vicky.
–Siento que estemos tan cansados –dijo Estela –pero hay que entrar.
–Joder con la nueva –bromeó Iván.
–Venga chicos –dije yo –Ya hemos llegado al fondo de la situación. Y gracias a vosotros.
–Bueno, tio, vamos, abre ya la puerta.
–Sí, que hay que salir cuanto antes –recordó Julia.
Abrí la puerta. Él. Era él. Claro. Estaba sentado en el suelo. ¡Después de tanto tiempo y...!
–¡¡Héctor!! –corrí hacia él.
–¡Marcos! Estás aquí. ¡Estás aquí! Pensé que jamás volvería a verte.
–¡¡Hector!! –le ayudé a levantarse.
Esbocé una sonrisa de oreja a oreja y solté un par de lágrimas. Me acarició el hombro. Rápidamente le abracé.
–¡¡Chicos!! Estáis todos aquí.
–Claro que sí –dijo Julia.
–¡Hemos venido a buscarte! –Vicky no pudo evitar abrazar a mi tío.
Estela que lo presenciaba todo, simplemente sonreía. Y yo le estaría agradecido toda la vida.
–Salgamos –intervino –Seguidme, por aquí tiene que haber otra salida.
En el bosque, de camino al internado, no pude separarme ni un minuto de él.
–Tengo que contaros algo.
–¿qué pasa? –todos alarmados.
–Allí abajo hay alguien más.
–¿Qué? –Julia se puso rápidamente nerviosa.
–Sí. Oía frecuentemente discusiones entre dos hombres. Uno de ellos... era León.
–¡No puede ser! –gritó Iván.
–¿Y el o...otro? –se atrevió a preguntar Julia, recordando lo que tiempo atrás había vivido allí con Martín y León.
–Al otro no le reconocí. Escuchaba constantemente su voz. Pero no la reconozco... Allí hay alguien que nos necesita.
–Héctor, ahora tenemos que ir al internado, ¿vale? –dijo Iván –Necesitas descanso, comida y agua.
–Haremos lo posible por aquel hombre, pero después –dije yo.
Nos dirijimos al internado.
ESTELA
Todos contentos. Una buena noticia. Y yo satisfecha. Conseguí lo que quería.
“¡ring, ring!”. Me llegó un sms al móvil:
“He podido convencer a Elsa para que nos de tiempo antes de cerrar el internado. Una semana. Ahora solo falta que Hugo no se entere de nada. Ni el teniente. Te toca actuar.” Me aceleré, y mis piernas temblaban un poco.
–¿Pasa algo? –me preguntó Marcos al verme leer el móvil.
–No, nada. Publicidad –me inventé.
Me sonrió y seguimos adelante.
–Por cierto: van a cerrar el internado –le dijo Marcos a su tío.
–¿Qué? ¡¡Qué bien!! No sabes cuanto siento todo lo que has sufrido...
–Ahora no te preocupes por eso.
VICKY
Miré hacia atrás en el camino. Iván agarraba cariñosamente la mano de Julia. Esperé a que llegaran a mi paso.
–¿Pasa algo? –pregunté preocupada.
–A Julia sí –respondió Iván.
–Chicos... creo que sé quién es el hombre que dice Héctor que ha escuchado discutiendo con León.
No supimos como reaccionar ante tal situación.
Continuará…
**PD: Hombre, todo tiene que acabar xD no quiero estirar más el chicle.
Siento no poner ahora la parte Rebemartinista, esque la quiero perfeccionar porque es un avance ;)
**PD2: Ah! Otra cosa! Tengo un fic Rebemartinista preparado para ponerlo ;)