**|Mi relato de El Internado|**~~- 3ªT - Capitulo 2!!!*[ouch]!¿Encontrarán a Martín?*..queda1semana!*

Capitulo 26

Segunda parte
MARCOS
Pensativo, sin hablar, sin hacer nada, totalemente quieto y concentrado en mis pensamientos. Asi me hallaba en este momento. Ya habiamos salido de clase.
-¡Marcos! Eh, Marcos ¿Estás en este mundo?-una voz femenina me despejó de mis pensamientos
-¡Eh!-exclamé sin haberme enterado de nada
-¿Verdad que sí?-preguntó Julia
-Sí, claro-contesté, aun sin saber el qué sí...
-¿Sí qué?-chasqueó los dedos delante de mi cara
-Pues...-no sabia que decir
-Pues nada ¿No me oyes verdad? En que estarás pensando...-dijo indirectamente
-No, en nada, el examen de historia es muy difícil ¿No?-cambié de tema
-Marcos, ¿en que piensas?-preguntó
-Julia...-me vino a la cabeza aquel suceso...
FLASHBACK-1h30 ANTES
MARCOS
En el desván me vinieron demasiados recuerdos de ella... de la chica más hermosa... a la que yo más queria como a nadie en este mundo...
-Hijo de puta-murmuraba al recordar a enano traidor
Entonces... un ruido asomo en la puerta. Me acerqué y no vi nada. Tampoco había nadie intentando subir. Y la habitación estaba vacía. Lucas en la enfermería, Martín... ahora que lo pienso ¿Y Martín? No se sabe nada de él. Rebeca preparando clases, o no se dónde, pero no en esta habitación. Así que, no comprendí cómo se produjo ese ruido. Me di la vuelta, y observé algo: algo que antes no estaba. Era el nombre de ella, sí, escrito a tiza blanca, en una de las paredes del desván. Su nombre: Carol. Me acerqué. Vi el nombre perfectamente. Lo intenté tocar, ni si quiera se borraba, pero si manchaba. Allí, tirada, estaba la tiza, en el suelo. Todo esto era muy extraño. El nombre de Carol no estaba antes, nunca ha estado. Tampoco habia nadie allí dentro. ¿O sí?
FIN DE FLASHBACK
-Marcos, cuentamelo, puedes confiar en mí ¿Qué piensas?-preguntó haciendo que volviera a tierra
-Julia... creo que el fantasma de Carol me ha seguido... hasta el desván-ella se quedó petrificada
-¿Cómo?-preguntó ‘aterrorizada’
-Sí-asentí-Lo he visto con mis propios ojos. Su nombre. Estaba allí, escrito, en tiza, lo ví antes de ir a clase, en el desván, te juro que es verdad. Si quieres te lo enseño. Al principio oí un ruido, no habia nadie. Me di la vuelta... y allí, en tiza blanca estaba su nombre: Carol.-expliqué todo un poco asustado, pues me dolia pensar aún en aquel día...
-Enseñamelo-dijo abriendo la puerta-A lo mejor nos quiere decir algo... y el desván está relacionado-asentí con la cabeza...
Salimos al desván. Pero antes, llamamos a Vicky y a Iván. Luego, fuimos al desván.

Explico: este trozo también es la SEGUNDA PARTE del CAPITULO 26 (esque no me dejaba ponerlo junto)

Dos días después
Fermín
Me levanté por la mañana. Ya habian pasado esos dos días. Hoy tenía que emprender mi viaje con Rebeca. Ya estaba todo planeado: sabíamos el camino que teníamos que coger, maletas preparadas, y también la típica escusa de que estamos enfermos para los putos nazis, aunque, sinceramente, no creo que se atrevan a entrar, les contagiaríamos. Yo puedo salir perfectamente, no contagiaria a nadie, mi virus no se contagia por el aire... y Rebeca... no está infectada...
-Fermín-María entraba por la puerta
-Hola preciosa-la saludé besándola
-Toma-me extendio una caja con las medicinas que necesitaba para esos días
-Gracias, cariño, ¿Qué te pasa? Tienes mala cara-la hice entrar
-No, nada, solo que... te echaré de menos ¿Sabes? Pero bueno, te estaré esperando...-nos abrazamos
-Claro que sí, por que volveré-la besé
-¡Ah!-se quejó de algo
-Maria ¿Qué te pasa?-la ayudé a que se sentara en un silla
-Nada... que estoy un poco mareada-explicó
-¿Seguro que estás bien?-pregunté preocupado
-Sí, es solo el virus este, que me marea-dijo
-Vamos a la enfermería mejor ¿si?-la cogí de la mano y salimos
-¡No! ¡No!-gritaba-¡No hace falta!-se paró-Que estoy bien, en serio-la volví a coger de la mano
-Maria, no soy tonto, vamos a que te den la medicina y a que Lucia te revise, venga-caminamos hacia la enfermeria
Al llegar:
-Buenos días Lucia-saludé
-Hola-saludó Maria
-Buenos días. Hoy era cuando te ibas ¿no?-se dirigió a mi
-Sí. Después de la comida. Oye... ¿puedes darle su medicina?-me referí a María
-Claro, aunque no hace falta todavía, es después de la comida-aclaró
-Ya pero es que se ha mareado-expliqué
-De acuerdo-Le dio la medicina-Oye... ¿nos dejas solas?-pidió
-Claro-salí
Me encontré con Rebeca, le di los buenos días, y ha hacer desayunos. Iba a ser la última vez hasta que regresara. Así que lo hice tan contento.
LUCIA
-Bien... ¿Qué te ha pasado?-la pregunté a María después de que Fermín se fuera
-No, nada... solo que me ha dado un mareo y me dolia un poco la cabeza, pero ya que me has dado la medicina estoy mejor.-intentó engañarme, pero la policia no es tonta
-Maria, los síntomas del virus no empiezan hasta que estás 24 horas sin tomar la medicina-expliqué algo que ella ya sabía
Me miró con cara rara. Se estaba dando cuenta de que no soy tonta.
-Bueno... a veces...-la interrumpí
-Voy ha hacerte unas pruebas ¿si? Tumbate en la camilla por favor-se negó
-No.-fue rotundo
-Pues... dime la verdad. A ver María, que soy médica. No tonta. Y yo noto cuando eso pasa. Porque soy una mujer. Y...-le iba a contar que yo tenia un hijo... pero sólo Noiret lo sabía... y... Rebeca-Y... yo ya estuve embarazada-no le dije la verdad del todo
-¿En serio?-preguntó asombrada
-Sí, pero no cambies el tema-
-Vale... creo que sí, estoy embarazada... pero... ni una palabra a Fermín porfavor...-me pidió al fin contándome la verdad
-¿Qué te ha pasado con él?-quise saber
-Nada-sin explicaciones
-Entonces... no creo que tengas ningún inconveniente en decirselo... cuando estuve embarazada no se lo conté al padre ¿sabes? Y después, me arrepentí.-expliqué
-Si que tengo inconvenientes. Si se lo digo podria quedarse cuidándome. Eso no debería pasar-no dio detalles, pero se los pedí
-¿Por qué no?-dije sentándome en mi mesa donde tengo todos los informes.
Ella estaba sentada en la camilla con las manos apolladas en sus piernas. Hizo una pausa, posiblemente no me quiso contestar a esa pregunta. Suspiró. Me puse las gafas y examiné las fichas de unos alumnos. Más tarde la mire por encima de las lentes. Ella esquivó mi mirada. Era un momento algo tenso. Al final me respondió:
-No se lo quiero decir a Fermín por miedo a que se quede aquí conmigo y no vaya a ayudar a Rebeca con el tema de Martín... ya sabes, lo que explicaron en la reunión.-me miró a los ojos
-Es cierto-pensé en lo lógico-Pero aún así pienso que Fermín deberia saberlo, es el padre. A ver, dime tú, ¿Qué harias si él ha tenido un niño con otra y no te lo cuenta?-me puse a su lado
-Pues la verdad... me enfadaría... o me entristeceria...-me senté en la camilla con ella
-Ya. Pues no creo que a Fermín le haga mucha gracia saber que le has ocultado que será padre. Porque además creo que es el primer niño. ¿No?-intenté hacerla cambiar de opinión
-Sé que tienes razón. Se lo contaré. Pero no hasta que no haya vuelto.-le hice un gesto para que se tumbara
Se tumbó en la camilla que quedaba libre. En la otra estaba Lucas descansando. Pero las camillas estaban separadas. Digamos que era como dos salas. En medio habia una puerta. Y Lucas se hallaba ahí descansando. Ajeno a todo lo ocurrido después. Me levanté. Cogí el termómetro y otros utensilios.
-Bien... voy a ver cómo vas, te mediré la temperatura, y te haré unos análisis. Solo será un momento. Nada malo-a continuación le puse el termómetro
Todo estaba bien. No le habia subido la fiebre y marchaba bien. Estaba exactamente de dos meses y algunos días. Dentro de poco se le notará. Seguía pensando que lo mejor era contárselo al padre. En todo caso no era asunto mío.
-Bien. Ya está. Va todo bien-la confirmé
-Gracias-dijo suspirando
-Puedes irte ya si quieres. Oye, es mejor que no trabajes durante el periodo ¿si?-la advertí
-Pero... las cosas no están como para no trabajar. Si ya me lo dijo Jacinta pero...-la enseñé un informe
-Toma. Para que veas lo que debes hacer en este tiempo. No te estreses. Tampoco te esfuerces mucho en cosas ‘’fuertes’’ como trabajar. Cuidate bien ¿si? Lo de Fermín no es asunto mio. Solo hago mi trabajo. No te deseo nada malo. Te aconsejo que se lo digas. Pero tú sabrás lo que haces. Que pases un buen día-salió por la puerta
-Muchas gracias Lucia, de verdad.-dijo al salir

Disfrutarlo

Espero que os guste.

¡Un capi para el fin de la 1ªT!

^^

a la Carol persigue a Marcos?¿ que tendrá que decir... al principio pensé que lso ruidos o eso era Martín que por algo estaba escondido ahi pero no mala!! Como María se decida acontarselo por ser noble Rebe se queda sin compañero para ir a buscar a Martín porque con eso dle virus sin saber cuanto les queda no va adejar sola a María :( a ver que pasa en el ultimo capi, estoy ansiosa!! :D sigue está genial!!!!!!!!!

Gracias Silvia! Pues lo que Carol tenga que contarle a los chicos será algo de cuestión vidaomuerte. Si, es cierto, si Maria se lo cuenta a Fermín, éste se quedará con ella. Puede que Maria no cuente nada... es más te digo que Maria no cuenta nadaAlgo que a Fermín le va a "joder" un poco... pero habrá por hay un 'bocazas' que se chive... Cuando pueda subo el ultimo capi. Y ya hasta después de navidades

Me encanbta los sabes]
y espero ese super final que se que nos dejaras con la bvoca abierta[si :D UNBESO TE QUIEROO!!

Gracias LauriYo si que tequiero!

Me parece a mi que el final os va a abrir mas dudas que otra cosa! jaja

Os dejo la primera parte del último capítulo. Aún no tengo la segunda terminada, asique os pongo la primera. Mañana, si puedo, pondré la segunda. Disfrutarlo. Besos.

Capitulo 27

Último capitulo de la primera temporada

Primera parte

IVÁN

Estábamos todos boquiabiertos. No podiamos creer aquello. Efectivamente, Carol, más bien, el fantasma de Carol, estaba allí. Pero, ¿Qué queria decirnos con aquello? Era muy raro. Un simple dibujo que no se distinguia.
-Estoy segura de que lo que nos dibujó eran unas cuevas-aclaró Vicky rompiendo el silencio que nos rodeaba desde que llegamos del desván.
-Bueno...-intentó dar Julia su opinión-No es que fueran unas cuevas muy corrientes... pero... podria decirse que sí. ¿Qué pensais vosotros?-nos señaló a Marcos y a mí.
Yo me situaba a su lado. Estábamos en nuestras respectivas camas. Vicky sentada en la cama del enano mirando hacia el suelo. Marcos tumbado en su cama mirando la nada, y creo que sin atender lo que decíamos. Yo agarraba a Julia con mi brazo izquierdo por la cintura, ella estaba a mi lado.
-Marcos-Vicky se dirigió a los pies de la cama de Marcos-Todo esto es muy difícil para todos. Tú conocías a Carol. Yo también. Y... es muy triste, pero... ¿Qué piensas sobre esto?-tenia la cara muy entristecida.
Unas lágrimas derramaron por su cara. Julia también lloró. Yo la besé para calmarla. Entonces recordé lo ocurrido hace unos 20 minutos. En el desván. Los cuatro.
FLASHBACK-20 MIN. ANTES
Julia y Marcos nos avisaron para ir ha hacer una cosa muy importante al desván. Dijeron que algo estaba sucediendo. Pero... no dijeron el qué, salvo que era muy importante que estuviéramos los cuatro juntos, ya que se trataba de nuestra amiga: Carol. Por una vez que me quise poner a estudiar, Vicky intentó ayudarme, lo tuve que dejar. La verdad: me importaba más aquel asunto del que hablaban Julia y Marcos, ya que se trataba sobre nuestra amiga. Por otra parte: ¿Para qué estudiar? Dentro de poco se acabarían las medicinas, no tendríamos la dichosa maquina hecha para curarnos definitivamente, y moriríamos. Pero antes de nada, Carol, nos había seguido.
-Está bien-le dije a Vicky cuando Marcos y Julia vinieron a avisarnos a la biblioteca-Dejémoslo.
Llegamos al desván. Allí no se respiraba aire agradable, al contrario, olía a húmedo y a madera vieja. Había una presencia, si, de la que nosotros no éramos capaces de ver. Julia sí. Marcos nos enseñó el nombre de Carol. Efectivamente, estaba a tiza blanca. En el suelo aún quedaban los restos de la tiza. Toqué el nombre, pero no se borraba.
-¿Qué os parece?-preguntó Marcos sorprendido, a pesar de que ya lo habia visto
-Es muy extraño-agregó Vicky
-No. No tiene por que serlo-dijo Julia contrayéndola en aquella opinión
-¿Cómo que no?-estaba sorprendido, no sabia que decir.
-Pues es evidente Iván-contestó a mi pregunta-Quiere decirnos algo. Por eso ha escrito su nombre.-se acercó a la pared y tocó el nombre-Es cierto, Marcos: no se borra. Pero... si mancha ¿Por qué?-se limpió las manos
-Como podemos saber lo que quiere decirnos. Esta pista no nos lleva a nada-Vicky parecia desesperada
-Yo lo sé-afirmó Julia-Está aquí. Y nos lo va a decir.-nos hizo un gesto para que nos diéramos la vuelta.
Nos dimos la vuelta. La tiza empezaba a levantarse lentamente del suelo. Era obvio lo que estaba sucediendo. Aunque solo Julia pudiera presenciarlo absolutamente todo. Marcos miraba ansioso a lo que sucedia. Yo también me encontraría como él si a Julia le hubiera pasado algo como lo que le pasó a Carol. Yo no habría dejado vivo al hijo de puta del traidor. Pero... no somos unos asesinos. Me quedé observando como se levantó la tiza. A continuación, se movía haciendo un gran dibujo en la pared, al lado del nombre de Carol. Era como una especie de semicírculo. Se podria describir como una “C” mirando para abajo. ¿Qué seria eso? Todos nos preguntábamos lo mismo. Era un misterio por resolver. Lo que teniamos claro, era que tenia que ver algo con lo que ella nos queria comunicar. Todos perplejos, mirando aquel dibujo e intentando adivinar que era. <<Carol nunca ha sido buena en dibujo>> pensé haciendo una pequeña broma. Claro, que no estábamos para eso, así que ni quise decirlo en alto. Lo mismo Marcos me habría partido la cara allí mismo por una tontería. En silencio, y embobados, nos conmovimos cuando vimos que la tiza caía al suelo partiéndose en tres.
-Si. Era ella.-afirmó Julia-Era Carol, y quiere decirnos algo. Algo muy importante, que está dentro de esto-señaló al dibujo.
Un fuerte ruido asomó en la ventana del desván en ese preciso momento. En el momento que Carol ya no estaba. Todos miramos hacia abajo asomándonos por el cristal.
-¡mirad!-gritó Marcos señalando una cruz que se habia dibujado no sé como en el suelo del patio
FIN DEL FLASHBACK[/b]
-¡Oye!-exclamé no muy fuerte al recordar aquello
-¿Qué pasa cariño?-preguntó Julia
-¿Qué hay de aquella cruz en el suelo del patio?
-¿Cómo? ¿La cruz que vimos al asomarnos por la ventana?-Vicky se dio cuenta
-Si. Esa. ¿Qué quiere decir? Eso antes no estaba ahí-expliqué
-Claro...-“cayó” Marcos-Un momento chicos...-se paró a pensar-¿Para qué sirven las cruces en un suelo? ¿Qué demonios querrá decir? ¡Ya está!-se levantó de golpe
-¡Marcos!-exclamó Julia también levantándose-¿Qué pasa?
-Las cruces marcan algo en búsqueda. Como un mapa del “tesoro”. En ese caso indica donde se esconde el gran botín. Creo que en el patio, enterrado, bajo esa cruz, hay algo importante.-explicó haciendo ademán de salir
-Pero... recordemos la especie de dibujo ¿a qué se referia?-esta vez me levanté yo
-No lo sabemos-aclaró él.-Pero por ahora quiero bajar al patio, y escavar.
-¿Sin levantar sospechas?-pregunté
-Si. Es mejor que nadie se entere. Al menos por ahora. No quiero que metan “las narices” en esto. En serio, chicos.-aclaró Marcos
-Será un poco difícil.-comentó Vicky-Pero... estamos juntos. Vamos a estarlo siempre-sonrió un poquito-Lo intentaremos ¿Verdad?
-Claro que sí, Marcos, tio, eres el mejor amigo que alguien pueda imaginar-le di un fuerte abrazo-¡Botafumeiro!-bromeé después
Sonrió. Al menos le saqué una sonrisa. Luego cogimos dos palas de un armario que habia al lado de las cuadras. Nos pusimos a cavar, con la esperanza de encontrar algo, ya no un botín, aunque seria bienvenido, pero algo, una nueva pista. Julia y Vicky se quedaron dentro. Habia un descanso de 1h15 y ellas se quedaron, por si alguien salia. Ahora que lo recordaba: hoy es cuando el “cocinillas” se iba de ‘misión’. No podia irse sin que le dijera algo importante.

Con la boca abierta como siempre de verdad Shay siempre nos dejas ahi con la intriga jajaja no se como lo haces xD pero me gusta jaja un beso!

bufff que me habia perdido un monton de capis geniales todos!!!!
maria embarazada!!!! me gustaria que se lo dijese pronto a fermin pero entiendo que fermin debe ir cn rebeca
mas cosas lucas le ha llamado mama bueno segunda mama que bonicooooo
a mi me parece que nos vas ha dejar cn los chicos a punto de irse a su mision y cn mil dudas pero bueno al menos van a buscar a martin!!!!!!! espero q consiga seguir lo que le ha dicho a lucas y le traiga de vuelta

Gracias Lauri siempree!! Un besoo!

Graacias Camino!(me dijiste asi ¿No? ) Pues si, Maria embarazada y no se lo quiere decir a Fermín... y no se lo dirá... pero Fermín lo sabrá... no por ella... lo q le "enfadará" Y Rebe... ya se sabrá que pasa con ella, Martín y Lucas... que por cierto: la ha llamado mamá! A ver si hoy o mañana cuelgo ya la última parte... vas encaminado con el final ¡eh! Jeje!

Segunda parte

(Capitulo 27)

VICKY
Estábamos, Julia y yo, “vigilando” que nadie saliera al patio. Faltaban 25 minutos para otra clase: Matemáticas. Y después sería el recreo: un recreo de 15 minutos.
–Ya queda poco para que acabe el descanso. Y estos aún no han vuelto–me susurró Julia
Estábamos en la biblioteca, mirando de vez en cuando a la puerta. Nadie asomó por allí.
–Sí, es verdad–asentí a lo que Julia dijo
–¿Crees que les ha pasado algo? –apagó el ordenador y cerró los libros de encima de la mesa
–No lo sé. No sé qué pensar. Pero no creo que les haya pasado nada. A lo mejor están tardando por... yo que sé. Sinceramente... no creo que encuentren nada–di mi opinión
–Vamos a ver que pasa–se levantó
–¡Pero no podemos! No nos dejan salir hasta el recreo. Y si ellos están allí es porque no los han visto ¿Y si los han pillado y los han castigado con una semana de cuadras? No es lo peor que podría pasar–hice que se volviera a sentar
En ese momento dos chicos asomaron por la puerta de la biblioteca. Quién si no ellos, iban a ser.
–¡Chicos! –exclamé acercándome a ellos
–Bueno... ¿Y qué? –Julia fue directa
–Hemos encontrado algo–dijo Iván acercándose a abrazarme
–Marcos... –me acerqué a él –¿El qué?
–Mira–me enseñó una medalla de colgante que cogí y observé–¿Te suena de algo? –preguntó al instante
–¡Claro que si! Seria incapaz de no reconocerla. Tú... se la regalaste tú, ¿verdad? –le miré a los ojos
–Sí. Yo le regalé este colgante a Carol.
–Marcos–Julia se acercó a él y le acarició el brazo
–Chicos... no puedo dejar de agradecéroslo todo... gracias, por estar ahí siempre–cogió de nuevo el colgante de Carol de mis manos
–No solo eso-añadió Iván –También hemos encontrado otra cosa-sacó algo de su bolsillo del pantalón-Mirad-era una llave
–¿De qué es? –pregunté sorprendida
–No lo sabemos. Pero suponemos que es otra llave de... los pasadizos... –respondió Iván a mi pregunta
–¿Otra... puerta ‘’secreta’’? –preguntó Julia intranquila
–Si –contestó Marcos
–Tenemos que encontrar esa puerta –dije yo
Sonó el timbre. Era la hora de ir a clase de matemáticas.
–Lo haremos–dijo Iván–En cuanto termine la clase
Nos fuimos todos a clase, menos él: Iván.

Esta también es la segunda parte del capitulo 27


En la otra parte del internado...
FERMÍN
Terminé mi trabajo. << ¡Sí! >> pensé. Ahora solo faltaba servir los platos dentro de una hora, sacar las maletas y... ¡salir! Solo algo me entristecía por dentro: dejar a María. Pero serie solo por unos días. Si todo salía bien, y, según lo previsto, volveríamos en unos 7 días, una semana. Nuestro primer objetivo era la doctora Matilde Fuencarral, así que, no tardaremos en dar con él, porque tenemos sus señas. Estaba listo para un pequeño descanso, antes de que la última clase del día terminara y tuviera que servir la comida. Me dirigí a la puerta de la cocina para salir, e ir a ver a Maria. Pensar en ella me hacía sonreir, también, pensar en que vamos a encontrar a Martín, y el hecho de poder ayudar a Rebeca, me satisface totalmente, estoy seguro que lo encontraremos, y, entonces, ella será feliz con él, y con Lucas.
–¡Eh! ‘’Cocinillas’’ –Iván me paró
–Iván, ¿hay algún problema?
–Sí. Si que lo hay –me hizo entrar de nuevo a la cocina
–¿Qué pasa ahora? –pregunté un poco enfadado –No estoy para tonterías.
–¿Qué te pasa ati “cocinillas”?–dijo con su tono chulito
–¿Qué quieres? Tengo muchas cosas que hacer
–Sí, eso ya lo veo. Una es irte de misión con la polvorosky ¿no? Y dejar a mi madre ¡sola! –gritó
–Iván, no entiendes nada, así que, déjalo ¿sí? –salí de la cocina
Él me siguió. Iba andando por el pasillo. Mi destino era la habitación de Maria: la madre del mismo cabezón que me estaba siguiendo justo ahora.
–¡Para! –su grito hizo que parase
–A ver, ¿Qué quieres? –di mi brazo a torcer
–¿Es que no te das cuenta? Vaya, parece que no estás muy puesto en las mujeres –dijo desde el fondo del pasillo
–Iván, ¿Qué demonios estás diciendo –me acerqué a él, perdí la paciencia
–Definitivamente, no te das cuenta –siguió con el misterio
–¡Ah! No me doy cuenta. ¿De qué? Estoy perdiendo la paciencia
–Mi madre es una gran persona, por eso no te lo ha querido decir. Piensa que si te lo dice tú dejarás tu ‘misión’ con Rebeca. Y no quiere que Rebeca se quede sin su Martín –dijo de nuevo chulo, preocupándose por su madre
–¿Me vas a decir de una vez que pasa?
–¡Claro! Aunque deberías de haberlo sabido. Estás tan centrado en tu papel como héroe, que hasta se te olvida que hay personas importantes a tu lado que te necesitan y te quieren –me dio con su índice en el centro de mi pecho, estaba enfadado
–Te escucho, Iván –estaba empezando a preocuparme
–Voy a tener un hermano ¡Imbécil! Y no te has dado cuenta. Mi madre está embarazada. Espera un hijo. ¡Tuyo! ‘so’ memo –dijo sin pensarlo dos veces
–Iván... ¿Qué estas diciendo? Si fuera verdad... me lo hubiera dicho ¿si? Comete tus palabras
–¡Vaya! Ahora es el héroe el que no se da cuenta de nada. Si mi madre no te lo ha dicho por algo será ¡No quiere que abandones a Rebeca con la ‘misión’ de buscar a Martín para que te vayas a cuidar de ella! Te voy avisando, porque, evidentemente, ella necesita de ti, es que ojo “cocinillas”
–¡Ahora mismo voy a verla! –seguí mi camino, ahora mas decidido que antes
–¡Eh! Espera, una última cosa.
–A ver, ¿Qué?
–Encima ahora no te vayas a enfadar con ella ¡Eh! Tiene razones para ocultártelo.
En ese momento me acordé de lo ocurrido esta misma mañana. Ella se mareó, y no fue por el virus. Era... ¡por su embarazo! Pero... ¿Cómo? ¿Cómo he podido estar tan ciego? Ahora me sentía culpable. También por otra parte, me molestó que fuera Iván, y no ella, quien me lo confirmara. No le hice caso: enfadarme tampoco, pero si que me jodió. Seguí mi camino. Esta vez ya no m seguía. Supuse que no estaría trabajando, pues ella sabia que estaba embarazada y no era bueno mucho esfuerzo. Toqué a la puerta. Ella me abrió sonriente. Pero la sonrisa se le fue, cuando me vio la cara de preocupado.
–¡Mi amor! –me besó y me hizo entrar
–¿Cómo estás? –pregunté sin levantar sospechas
–Bien –sonrió
–¿Seguro? ¿Qué te dijo Lucía? Fue solo un mareo ¿no? –nos sentamos en su cama
–Si, claro. Pero cuando me dio la medicina se me pasó enseguida. Gracias –me volvió a besar
Esta vez yo aparté mi cara. Fue la primera vez que rechacé un beso suyo.
–¿Pasa algo? –preguntó preocupada
–No sé. Dimelo tú, ¿Pasa algo? –ahí se dio cuenta de mi mosqueo
–Si. Estás enfadado ¿verdad? ¿Qué te ha pasado esta vez? ¿Te has quemado haciendo la comida? –dijo bromeando
–No, no me he quemado. Lo sé todo. Lo que tú no me has querido decir –lo desvelé
–¿Qué? ¿De qué hablas? Yo no te ocultaría nada... –la interrumpí
–Si, lo sé. Pero esta vez ha sido diferente. Me lo has ocultado, Maria. Me has ocultado que voy a ser padre, que estás embarazada.
–Joder –murmuró
–Ya... no te lo esperabas ¿verdad? Porque como tú no me lo has dicho... –estábamos hablando seriamente
–Fermín, lo siento. Sé que no es momento para tener niños, ni que tú...
–¡No! Maria, me encantaría ser el padre de tus hijos. Y lo sabes. Pero, ¿Por qué? ¿Por qué no me lo contaste tú misma, Maria? –la cogí las manos
–Yo... lo siento mucho –una lágrima cayó por su mejilla
Ahora si que me sentía culpable. Tal vez ella tenia motivos para ocultármelo, por su amiga Rebeca, y yo habia sido muy duro preguntándole eso.
–¡Eh! –susurré –Tranquila, mi amor. No estoy enfadado –la besé
–Pensé que si te lo decía te ibas a preocupar demasiado por mi, y... dejarias más de lado otras cosas importantes...
–¿Cómo qué? –la acaricié la cara
–Como tu trabajo, no de “cocinillas” –sonrió–Si no, el que empleas ahora: héroe. Y... tu misión con Rebeca
–¿Y tú? ¿Piensas que tú no eres importante? –hice que mirara a los ojos
–... –no dijo nada
–Pues que sepas –sonreí –que eres lo más importante en mi vida.
–Y tú en la mía –me devolvió la sonrisa –Junto a Iván. No sabría vivir sin vosotros
–No vivirás sin mí. Jamás.
–Pero... sigues con tus planes ¿no? –preguntó preocupada
No sabía que hacer. Por una parte sentía la necesidad de quedarme con ella, cuidándola, y cuidando también al bebé. Pero... Rebeca me esperaba entusiasmada, porque la única razón por la que, quizás, se haya levantado esta mañana es nuestro’’viaje-misión’’. No queria traicionarla. Pero Iván tenia razón: estoy tan centrado en mi papel como héroe, que ni si quiera me doy cuenta de las personas queridas que me necesitan. Esto es un gran dilema. ¿Qué hacer? A lo mejor podriamos posponer el viaje. Si se lo cuento a Rebeca... ella lo entendería...
–Maria –fui a contestarle la pregunta –No me obligues a dejarte ¿si?
–¡Lo sabia! Por eso... no queria decírtelo. Tienes que irte, Fermín. Por favor. Yo estaré bien. Rebeca te necesita –empezó a preocuparse demasiado
–Tienes un corazón que no te cabe en el pecho –la besé –Pero no puedo dejarte. No me rechistes, María.
Derramó unas lágrimas. Tuvo que conformarse con lo que había. Ahora sí que no iba a dejarla sola. No podía. Aunque lo sintiera mucho por Rebeca.
–Tengo que hablar con Rebeca –la dije después de un intenso y cariñoso abrazo
–Fermín, por favor –me levanté y abrí la puerta
–No, María. No cambiaré de opinión. Me necesitas, tú, también. No me pidas que te deje. Rebeca lo entenderá. Nos vemos luego –me despedí de ella con un beso
–Si cambias de opinión... avísame. Adiós. Te quiero –me sonrió
–Y yo –salí ha hablar con Rebeca

genial el capi si soy camino pobre rebeca le va a dejar sola yo creo q se ira, sin el pero ella ira
le hzo una promesa a lucas y la tiene que cumplir
queda una parte no???? nos vas a dejar todo en el aire

noooo Iván es tonto! un embarazo no es el fin dle mundo pero si no van a la mision Rebeca se quedará sin Martín paar siempre, y no sabremos que ha sido de él por Lucas, claro que irá aunque sea sola pero y si la pasa algo?¿ AY no lo dejes asi!!!! sigueeeeeee

Gracias!

Pues, yo también he pensado que Iván es tonto, Siliva. Jajaja!

Fermín no irá con Rebeca... veremos como se lo toma ella... y que pasa!

Me da mala espina ¡eh!... jaja a ver si puedo colgar pronto la última parte

va a ser solo de Rebe ^^

ay si solo es de Rebe tengo mas ganas aun de leerlo!!! cuelgalo pronto!

Tercera parte

(Capitulo 27)

REBECA
A las dos y media. En el comedor...
–¡Rebe! –Lucas se dirigió hacia mi mesa
–¿Lucas? ¿Qué haces aquí? ¿Qué tal?–le abracé
–Lucia me ha dicho que hoy podía venir a comer aquí, normal, como todos los días.
–¡Ah! ¿si? ¡que bien! –le di un beso
–Oye... hoy vas a buscar a mi papá ¿verdad?
–¡claro que sí! –le sonreí –Y le voy a encon... ehh... le voy a traer con nosotros –casi meto la pata... Lucas no sabe que está desaparecido
–Gracias Rebe –me abrazó –Eres la mejor –se fue a comer
Seguí comiendo la comida.
–Te deseo mucha suerte –me susurró Elsa que estaba a mi lado
–Muchas gracias Elsa. Mmm, de verdad, ¡que bien cocina Fermín! –dije para alegrar el ambiente
–¡Rebe! –me llamó Fermín desde la mesa donde sirven los platos
–¿si? –me levanté y fui hacia él
–Tengo que decirte algo muy importante –se puso serio
–¿Pasa algo? ¿Algo va mal? –me preocupé
–Si. La verdad es que si. Algo va mal. Y espero que puedas entenderme, Rebeca.
–Cuentamelo. Dime que pasa
–No. Aquí no. Espera que termino de servir a estos alumno –señaló a tres que quedaban –Y te lo cuento.
–¡claro! Por cierto, ¿tienes ya todo preparado? En una hora partimos –estaba entusiasmada
–Si... eh... ahora hablamos de eso... claro –dijo, y me dirigí a mi mesa y terminé de comer.
Salí a mi habitación. Cogí todas las maletas, que eran una y una pequeña bolsa, tampoco queria llevar tanto, y las puse en la entrada de la puerta. No queria que se me olvidara nada, o que, saliésemos tarde por no preparar las cosas con tiempo.
–Rebeca –me di la vuelta. Era Fermín –Ya he terminado, ¿podemos hablar?
–Claro, cuentame.
–Verás, te juro que lo siento. Sé que te dije que estaría siempre ayudándote y apoyándote en todo, sé que te lo dije. Pero... me han surgido cosas... yo voy a ayudarte a buscar a Martín... te lo prometí, y lo voy a cumplir... si pudiera pedirte que pospongamos el viaje... no puedo ir... al menos, no ahora.
–Jeje –me lo estaba tomando como una broma –Siempre he sabido que tenias muy buen sentido del humor
–No, Rebeca. No es broma. Es cierto. María... está embarazada... necesito, porfavor, quedarme con ella. No la puedo dejar sola. Sé... que a ti tampoco debería de abandonarte. Solo te pido que lo dejemos para un poco más tarde... –ahora si que iba en serio
–Es... ¿es en serio? No te puedo creer. ¿Por qué, Fermín? Pensé que... es igual, déjalo. En serio... tranquilo. Te entiendo. Vas a ser padre y... No te preocupes.
–Sabia que lo entenderías. Entonces, ¿Cuándo vamos? A ver... yo...
–¡No! Tú estás feliz con María. Pero yo no lo soy sin Martín. No puedo esperar más. Te entiendo. Te quedas. Pero... ¡yo no! –cogí mis maletas y salí inmediatamente
–¡Espera Rebeca! No vayas sola. ¡No! –él intentó detenerme, pero no pudo
Salí en busca de mi objetivo. Triste, pero decidida, ya no solo lo hacia por mí, si no también por Lucas, se lo prometí. Algunas que otras lágrimas resbalaban por mis mejillas. Pensaba que Fermín me ayudaria... No importa. No debo ser egoísta. Él tenía que quedarse. La mujer que más amaba esperaba un hijo, suyo. Hubo un poco atasco en el camino, pero como tenia las direcciones fue fácil llegar. Cuando llegué me alojé en un local. Nada más dejar las maletas me dirigí a casa de la doctora Matilde Fuencarral. Llamé a la puerta.
–Hola. ¿Qué se le ofrece? –una chica sonriente me abrió la puerta, no era ella
–¿Podría hablar con la señorita Matilde Fuencarral? Me dijeron que se alojaba aquí.
–Claro. Vive aquí –tardó un rato en darme la respuesta
Mientras tanto... (Narrador externo)[/i]
Unos extraños hombre, que no dan muy buena espina, observaban escondidos a lo lejos a Rebeca hablar con aquella chica, en la puerta de la casa de la doctora.
–¿Qué ocurre –le preguntaba uno al que estaba al lado observando con unos preismaticos
–Han venido a ver a la doctorcita
–¿Quién es?
–No lo sé. Pero estoy seguro de que es profesora del internado Laguna Negra. La he visto antes.
–¿Crees que Wulf la conocerá?
–Creo que sí. Y tal vez también León... –dijo pensando en que aquella muchacha se parecía mucho a la hija de León
–Vamos a comunicárselo a ellos.
–Sí –afirmó el de los preismaticos –Mañana hay que impedir que vea a la doctora.
Salieron sin levantar sospechas. Nadie sabia que les observaban a Rebeca y a aquella muchacha. Rebeca quedó en verse con la doctora al día siguiente. Pues ahora no se encontraba disponible. Pero no pensó en el lío en el que se iba a encontrar ese mismo día. Solo por seguir a la doctora...
Continuará...

por favor dime que no e acaba aki!!!!!!
ya sabia yo q rebeca iba a ir sola no podia incumplir la promesa que le ha echo a lucas pero fermin tendra q ayudar a rebeca que se va a meter en un lio seguro!!!
cuand lo seguirasssss

Gracias CaminoPues Rebe se meterá en un lio... Fermín a lo mejor va al rescate! Y... va a ser difícil encontrar a Martín con dos "matones" vigilandote en todo... seguiré despues de navidad! Gracias por leerme y

FELIZ NAVIDAD a todos!