SERIENUEVA-ALMAS ASESINAS/rondaba el año 2038.../serie de 5 temporadas

Tiene buena pinta Carolina, me pasaré a leerlo ^^

CAPITULO 1

JUSTICIA

En el interior de una mansión muy elegante, irrumpieron aquella mañana como 10 o 15 hombres con metralletas vestidos con uniformes de camuflaje verde, como si fueran soldados.
Entraron en la mansión y acribillaron al jardinero y al mayordomo que les impedían la entrada a la casa.
Mientras en la mansión... el hombre de la casa estaba en su despacho mientras la sirvienta de la casa regaba las plantas y sacaba el polvo con un plumero, él se le acercó por detrás le tocó el trasero e intentó besarla.
La sirvienta apartándose de él, le riñó diciéndole:
Jessica Marremo:¿Qué haces? tu mujer podía entrar y vernos.
-por favor Jessica, no aguanto ni un minuto más teniéndote delante sin besarte, anda, dime que tú sientes lo mismo por mí-dijo él abrazándola.
Jessica le sonrió y le besó en los labios.
Jessica Marremo: por supuesto que sí, tontorrón, pero... no querrás que tu mujer se enteré de lo nuestro ¿verdad?
-No, claro que no, mi mujer sabe como desenvolverse en mi mundo, yo ya no estoy enamorado de ella, pero... no puedo arrastrarte a ti a mi forma de vida Jessica, por eso debemos mantener lo nuestro en secreto.
Jessica Marremo: me encanta cuando te pones así de misterioso, supongo que lo dices porque tu mujer maneja la mayoría de tus negocios, y podías llegar a perder hasta la casa si peligrará vuestro matrimonio.
-si es algo parecido a eso, lo mejor es que no sepas nada de mi verdadera vida.
Jessica Marremo: tu vida soy yo, a que si?
-eso desde luego.
Jessica volvió al besar al hombre de la casa.
Después de besarle, Jessica se puso seria por un instante, le miró a los ojos y tocándose la barriga le dijo.
Jessica Marremo: tengo algo que decirte, es muy importante para mí y espero que también lo sea para ti.
-Qué es?
Jessica Marremo: pues veras... yo...
En ese momento sonó el teléfono, el hombre se separó de Jessica para atenderlo.
-Sí, muy bien, gracias por avisarme.
El hombre colgó el teléfono.
Él encendió la pantalla de su ordenador y mandó un e-mail.

los miembros de la organización secreta de la justicia han entrado en mi casa,
necesito refuerzos.

El hombre de la casa salió enseguida del despacho.
Jessica Marremo: qué es lo que pasa? a donde vas?
Mientras en un cuarto están tres hombres vestidos de camuflaje junto al cadáver de una mujer tirada al suelo, al lado de una cuna. Una chica de unos 17 años abraza al bebé, mientras llora mirando al cadáver del suelo y susurra:
-Mamá!! mamá!!
La chica abraza al niño y mirando a los soldados que amenazan con metralletas murmuró.
-No me hagáis daño!! alejaros!!
De pronto la chica recibe un tiro de pistola a sus espaldas, ella cae hacia el suelo irremediablemente, la mujer vestida de soldado que le había disparado coge al bebé al vuelo, y mientras el cadáver de la mujer y de la chica descansan sobre el suelo, la chica soldado calmando el llanto del bebé mira a sus tres compañeros soldados y les dice:
-saludar al nuevo miembro de la organización secreta de la justicia.
Los soldados le sonríen al bebé, mientras éste se chupa el dedo de la mano mientas duerme.
Entre tanto, el hombre de la casa que había salido del despacho seguido por la sirvienta, entró al salón donde vio a una mujer anciana tirada al suelo, con el pecho acribillado a balas y a otro hombre también anciano a su lado, cogiéndole de la mano.
El hombre corrió hacia ellos.
-Mamá!! papá!! no, no!!
A ellos se acercó una niña de unos 8 años abrazada a una muñeca de trapo.
niña: papá, qué le ha pasado a los abuelos?
El padre abraza muy fuerte a su hija, cuando cinco soldados se le acercan, rodeándole.
El padre asustado suelta a la niña.
-Alejaros de mí!! marcharos!! antes de que vengan los demás!! he pedido ayuda, no tardaran en llegar!!
Pero los soldados en silencio le dispararon. La niña al verlo se escapó corriendo con su muñeca.
Uno de los soldados la siguió, se acercó a ella, le abrió la mano y le enseñó un caramelo.
La niña se acercó indecisa, pero aún así no se atrevía a confiar en aquella persona, sin soltar a su muñeca retrocedió hacia atrás, estaba muy cerca del balcón de la terraza.
El soldado se acercó hacia la niña.
-Espera, no quiero hacerte daño.
La niña siguió retrocediendo, apoyándose en la barandilla, ésta se desplomó rompiéndose, y accidentalmente, la niña cayó al vacío sobre el trozo de metal oxidado.
El soldado miró el cadáver de la niña desde arriba apenado, otro soldado que lo había presenciado todo desde lejos se acercó a él.
-El director de la organización dijo que teníamos que eliminar a los habitantes de la casa sin herir a los niños, si pide informes sobre la misión, tú hablarás con él. A ver como eres capaz de explicarle la muerte de la niña.
Mientras Jessica, la sirvienta, presenciaba el ataque de los soldados a todos los habitantes de la casa, escondida tras el piano de cola del salón.
Dentro del despacho del hombre de la casa tres soldados rebuscaron en los cajones.
Uno de ellos dijo:
-Rápido, hay que recoger todos los documentos, el director necesita información sobre la organización del crimen.
Uno de los soldados vio el e-mail escrito en la pantalla pidiendo ayuda, y montado en cólera cogió el ordenador y lo estampó contra la pared.
-hay que irse de aquí, antes de que venga alguien de la organización secreta del crimen.
Todos los soldados se reunieron en el salón. los soldados hablando entre ellos.
-La casa está vacía, ya no queda nadie más, verdad?
-No, he revisado todas las habitaciones.
-Bien, misión concluida, vayámonos de aquí.
Los soldados marchan de la casa, uno de ellos lleva al bebé en brazos, único superviviente del ataque.
Cuando los soldados están muy alejados de la casa.
Jessica la sirvienta sale de detrás del piano, donde había permanecido todo ese tiempo escondida.
Jessica Marremo:¿Qué es lo que ha pasado aquí? tengo que salir de esta casa ahora mismo.
Jessica subió a su cuarto por las escaleras, hizo su equipaje y se largó, estuvo caminando por la calle desorientada sin saber a donde ir, hasta que anocheció, entró a un pueblo, al pueblo llamado el valle seco, siguió caminando bajo la luna, sufrió un repentino mareo, y antes de desmayarse tocó la puerta de un edificio que estaba frente a ella.
Había un escudo de una águila roja atravesada con dos espadas en forma de equis, y rezaba el nombre de: el internado valle seco.
Al rato la puerta se abrió, salió a la calle a ayudar a la mujer, un hombre maduro en bata y ropa de dormir, era el director del internado, él cogió a la mujer en brazos y se la llevó consigo dentro. La mujer con los ojos cerrados deliraba, y pasándose la mano por encima de la barriga, murmuraba.
Jessica Marremo: mi hijo, mi hijo, salvar a mi hijo, salvarlo.
Al cerrarse la puerta del internado, una corriente de aire hizo caerse y descolgarse al escudo del internado hacia el suelo, dejando un emblema pintado en la pared de ladrillo donde ponía.

OSC -organización secreta del crimen.

16 años después...

La vida seguía transcurriendo en el internado valle seco. Jessica se había quedado a trabajar en el internado desde esa noche que se desmayó frente a su puerta, así con su trabajo pagaba la estancia de la enseñanza y educación de su hijo en ese colegio, ya que ella se había escapado de la antigua casa donde trabajaba como sirvienta, embarazada del dueño.
En ese internado ella había dado a luz y había tenido a un niño, a quién le había puesto de nombre Diego y había pasado toda su infancia viviendo en las cuatro paredes de ese internado.
Ya habían pasado 16 años desde entonces, y Diego se había convertido en un chico apuesto, inteligente y muy aplicado en cada una de las materias de clase, tenía muchos amigos y Jessica después del día en que había visto morir a todos los habitantes de la antigua casa en donde trabajaba, a manos de 15 soldados armados con metralletas, parecía que había encontrado un lugar donde ser feliz, y darle la mejor educación a su hijo.
Pero ese internado guardaba un oscuro secreto, y ella no sabía que en realidad estaba metida de lleno en la mismísima boca del lobo.
Aquella mañana Jessica estaba dentro de una de las aulas del internado, limpiando la pizarra y vaciando las papeleras, cuando los alumnos entraron a ella, alegremente hablando entre ellos, llevando sus carpetas y mochilas. Ellos llevaban puesto el uniforme del internado, que era de color verde combinándolo con el pistacho, la parte de arriba verde fuerte y la de abajo de pistacho, todos tenían en sus jerseys el escudo del águila roja atravesada con dos espadas en forma de equis.
Detrás de los alumnos entró al aula una profesora, acompañándoles, esa profesora se llamaba Azucena Terrón.
Todos los alumnos tomaron su asiento en los pupitres, la profesora se colocó frente a la pizarra, ella miró a la sirvienta, la sirvienta antes de irse se acercó a su hijo y le dio un beso en la mejilla, Diego se limpió el beso con la mano mirando alrededor, sus compañeros se rieron tapándose la boca y señalándole.
Diego: Mamá, delante de mis compañeros no!!
Jessica: lo siento-dijo Jessica yéndose cabizbaja de clase.
Diego miró a su alrededor como sus compañeros le seguían haciendo burla.
-Diego, el otro día encontré en el contenedor de la basura un chupete, está un poco estropeado pero creo que todavía se puede usar, quieres que te lo guarde para tu mamá?-le susurró uno de los chicos.
Diego: piérdete, quieres? -le contestó él de mala uva.
En cuanto la limpiadora hubo abandonado la clase, la profesora se acercó a la puerta, miró a ambos lados, se aseguró que ella no estuviera cerca y volviendo al aula dijo a los demás alumnos.
Azucena: muy bien, no hay moros en la costa, podéis cambiaros de uniforme.
Todos los alumnos, tanto chicos como chicas, se levantaron y se giraron los jerseys poniéndoselos de nuevo al revés, e hicieron lo mismo con las faldas y los pantalones, mientras Azucena miraba un cronómetro controlando el tiempo que tardaban en desvestirse.
Todos los alumnos, al darle la vuelta a sus prendas, vistieron uniformes negros a tonalidades grises, con un emblema rojo en sus jerseys tridimensional, donde figuraban tres letras mayúsculas girando continuamente, OSC (organización secreta del crimen)
Azucena se dirigió hacia la pizarra, paró el cronómetro y dijo.
Azucena: 2 minutos y 65 segundos, se puede mejorar pero no está mal.
Azucena dejó el cronómetro sobre la mesa, le dio a un interruptor que estaba al lado de la pizarra y ésta se dio la vuelta cambiándola por una pizarra más grande, sobre ella estaba colocado el mismo emblema de los nuevos uniformes negros que ahora vestía el resto de la clase, OSC en letras mayúsculas y en pequeñas letras se podía leer: organización secreta del crimen.
Frente a la pizarra había una mesa con los siguientes accesorios.
un látigo, unas esposas, una bola de hierro con pinchos y varias pistolas de diferentes tamaños, ordenadas de mayor a menor.
Azucena: muy bien, ahora que estamos solos, vamos a empezar las clases de verdad.
Azucena bajo con una anilla un mural en donde figuraba el horario escolar, allí se podían ver todas las asignaturas que impartía la organización secreta del crimen.
Azucena después de echarle un vistazo volvió a estirar de la anilla para que el mural se enrollara.
Azucena: según el horario toca clase de seducción, el profesor que normalmente soléis tener se encuentra en los laboratorios de los pasadizos secretos subterráneos de este colegio, sometiéndose a experimentos bajo el científico del internado, Segismundo Amadeo, todos lo conocéis por ser el profesor de creación de inventos. Así que sintiéndolo mucho yo lo sustituiré momentáneamente, sé que yo en realidad soy profesora de artes marciales pero también soy una mujer, así que creo que sé algo sobre seducción.
Uno de los alumnos saltó en cuanto lo oyó.


-algo? fuera de este internado eres una prostituta de lujo, lo sé porque antes de venir a estudiar aquí visité varias veces tu casa de masajes. Personalmente prefiero hacer estas clases contigo que con el profesor de siempre, así las prácticas no parecerán tan ridículas y estarán más chupadas.
Azucena cruzando los brazos: o eso crees? fuiste a verme a mi casa de masajes y piensas que es fácil seducirme?
- contigo aprobar esta clase será pan comido.
Azucena: muy bien, pensaba empezar con algo facilito ya que es la primera vez que hago de sustituta de alguien, pero... ya que os ponéis en este plan, vamos a empezar en serio. A ver si de verdad sois tan machitos como os creéis. Además está práctica puede ser muy divertida para las alumnas presentes. Está bien, preparados para la clase práctica?
Los alumnos sonrieron y se arremangaron las mangas de sus jerseys.
Azucena también sonrió y siguió hablando.
Azucena: voy a desnudarme, pero no va a ser un desnudo parcial no, va a ser completo, y cada uno de vosotros va a ponerse delante de mí e intentar mantener una conversación coherente e inteligente, sin poneros nerviosos, y procurando no mirar a sitios indiscretos y no tener las manos demasiado largas, de acuerdo?
Azucena tras decir eso empezó a desabrocharse los botones de la blusa, los chicos empezaron a murmurar entre ellos, a pronunciar silbidos, a chocarse las manos y a susurrar entre ellos.
-La clase va a estar animada hoy.

Todos parecían estar contentos con la proposición de la profesora menos uno, Diego Marremo, el hijo de la limpiadora, Jessica, que mientras Azucena se iba desnudando poco a poco, él supernervioso y colorado, le empezó a preguntar a sus compañeros en forma de susurros.
Diego: lo de que se va a quedar desnuda delante de nosotros será una broma, verdad? seguramente se detendrá en el último momento, o llevara un traje de baño bajo la ropa...
Pero... Azucena siguió desnudándose y quitándose la ropa, hasta que se quedó desnuda por completo.
Azucena miró a sus alumnos, en cueros y dijo:
Azucena: muy bien, quién va a ser el primero?
Pero a nadie le dio tiempo de levantar la mano y ofrecerse voluntario, ya que nada más quedarse Azucena totalmente desnuda, a Diego se le puso la cara blanca, se levantó de la silla y se desmayó, cayéndose redondo hacia el suelo.
Azucena se acercó a él preocupada.
Azucena: Diego, despierta!!
Una de las alumnas estaba muy alarmada con el repentino desmayo de Diego, se llamaba Esmeralda Amadeo.
Azucena se dirigió hacia el resto de los alumnos de la clase, al ver que Diego no reaccionaba, y gritó.
Azucena: abrir todas las ventanas de la clase, rápido!!
Azucena siguió hablando, ésta vez dirigiéndose hacia Esmeralda.
Azucena: Esmeralda, tráeme mi ropa, volveré a vestirme, creo que la impresión ha sido demasiado fuerte para Diego, igual me he pasado un poco con la clase práctica.
Esmeralda: y te das cuenta ahora tía? no sé porque siempre el abuelo tiene que usar en la mayoría de sus experimentos en el profesor de seducción, como sino hubiera más gente en todo el internado, cuando mamá se enteré de esto, va a poner el grito en el cielo.
Azucena: Esmeralda, no te preocupes, yo hablaré con mi hermana, ahora tráeme la ropa por favor.
Esmeralda: sí tía.
Esmeralda le trajo la ropa a Azucena y mientras ésta se vestía, se dirigió hacia la melliza de su sobrina, Rubí, que seguía sentada en sus pupitre sin moverse.
Azucena: Rubí por favor, Diego parece que no reacciona, ves a avisar al director.
Rubí: estás segura? pero tía...
Azucena: que vayas avisar al director he dicho!!
Rubí: claro tía, enseguida vuelvo.
Rubí salió de la clase.
Diego seguía desmayado.
Azucena se giró hacia el resto de la clase que empezaba a alborotarse y gritó.
Azucena: volver a vuestros pupitres, aquí no ha pasado nada, ya!!
Al cabo de un rato, Azucena estaba en el despacho del director del internado.
Sobre su mesa había una plaquita plateada con su nombre, Jorge Puertas.
Jorge: en que estabas pensando Azucena? quedarte desnuda frente a más de 20 chicos de 16 años, te recuerdo que la clase es de seducción, no de sexo.
Azucena: lo siento, de verdad, no volverá a ocurrir, es que es la primera vez que hago de sustituta y... algunos alumnos se empezaron a cachondear de mí, pero... no debí hacerlo, sí, de ahora en adelante se acabaron los desnudos en mi clase.
Jorge: eso espero, no me gustaría tener que expulsarte de la organización.
Azucena: vamos, tampoco ha sido tan grave, todos los alumnos han reaccionado bien, todos menos Diego, pero por un alumno no vamos a condenar al resto de la clase.
Jorge: Diego no es un alumno cualquiera, sabes como llegó Diego a este internado, verdad?
Azucena: sí, sé que es el hijo de Jessica, la limpiadora.
Jorge: es algo mucho más que eso, hace 16 años, hubo un atentado en una de las mansiones de uno de los directivos más importantes de la organización secreta del crimen, fueron atacados por 15 soldados de la organización secreta de la justicia, institución dirigida por mi hermano mayor, Germán, antiguo director de este centro.
Toda su familia murió en ese atentado, su hija de 8 años, su hija de 17, su mujer y los suegros de ésta, al bebe suponemos que lo reclutaron para la organización. Recibimos un e-mail ese mismo día anunciándonos del atentado, pero nuestros ordenadores tenían un virus y no pudimos conectarnos a Internet hasta muchas semanas después. A la noche de ese mismo día, llegó Jessica a las puertas de este internado, estaba embarazada, y había huido de una casa donde 15 soldados habían matado a todos sus habitantes, ella nos dio la dirección de esa casa y supimos de quien se trataba, aunque ese dato Jessica lo desconoce.
Azucena: quieres decir que?
Jorge: sí, Jessica debió mantener relaciones con el dueño de la casa en el tiempo que trabajó de sirvienta, y Diego es el hijo de un hombre que fue un gran agente para esta organización, así que no es cualquier alumno, él no sabe quién es en realidad su padre, nadie de esta organización pudo salvarle de la muerte por culpa del maldito virus informático, y ahora debemos cuidar de su hijo.
Azucena: perdona, yo no sabía toda la historia entera.
Jorge: no pasa nada, lo comprendo, Diego además es uno de nuestros alumnos más brillantes, tiene una media de excelentes en todas las asignaturas, menos en seducción que tiene notable alto y en mentira y engaño, que tiene matricula de honor. Es evidente que ha heredado los genes de su padre.
Azucena: notable alto en seducción? y se desmaya solo de ver a una mujer desnuda? voy a tener que hablar seriamente con el profesor de seducción...

Jorge: no se ha desmayado por ver a una mujer desnuda, se ha desmayado por verte a ti desnuda, yo también me desmayaría si te tuviera delante completamente desnuda, y tengo algo más de 16 años.
Azucena: me has tenido frente a ti completamente desnuda, y no te has desmayado.
Jorge: no durante el acto. por cierto, aún estoy esperando a que haya segunda parte de lo nuestro.
Azucena: no creo en segundas partes, lo nuestro solo fue una vez, y no va a haber repeticiones.
Jorge: ni pagándote mucho dinero?
Azucena: no, ni por todo el oro del mundo.
Jorge: está bien, tú te lo pierdes. Esta semana no estás teniendo muchos clientes en la casa de masajes, verdad?
Azucena: pues no, pero en todos los trabajos hay temporadas malas, no es nada grave, me recuperaré.
Jorge: no importa, me viene bien por el momento que no estés ocupada, así puedes satisfacer a los directivos de la organización, te he buscado a clientes, espero que les mantengas contentos y como siempre, me des la mitad de tu sueldo.
Azucena: claro, a que hora son las citas?
Jorge: veamos-dijo él mirando una pequeña agenda que tenía-son todas por la noche, la primera es a las 9, la otra a las 9: 15, la otra a las 9: 30, la otra a las 9: 45, la siguiente a las 9: 58...
Azucena: eh?-le interrumpió Azucena- qué es esto? citas para mantener relaciones sexuales con hombres a cambio de dinero o un maratón a favor de la paz y el hambre? no puedo estar con cada hombre 5 o 10min. solo...
Jorge: tienes tiempo de sobra, las casas están todas en la misma avenida, y he contratado a un taxi para que te espere en la puerta, a las 9 es la única hora libre que tienen, las citas tienen que ser entre las 9 y las 10 a la fuerza.
Azucena: genial, entonces en menos de una hora, me habré acostado con más de 5 hombres, no está mal, va a ser una noche movidita.
Jorge: todos tenemos que hacer sacrificios para la organización secreta del crimen, además no sé a que viene este tonillo, hasta ahora nunca te habías quejado de los clientes que yo te buscaba.
Azucena: claro, supongo que comienzo a estar harta de levantarme cada mañana en una cama distinta de la que me acosté anoche.
Jorge: podías acostarte todas las noches en la misma cama que te levantas, si aceptaras la proposición de casarte conmigo, y lo sabes.
Azucena: no gracias, prefiero seguir como hasta ahora.
Jorge cerró la pequeña agenda donde tenía apuntados a los clientes de Azucena.
Jorge: estarás lista para las citas, entonces?
Azucena: sí, y pídeles a tus clientes que te paguen el doble de lo pactado, necesito renovar mi fondo de armario.
Jorge: el doble? eso es un dineral, son gente con pasta, pero aún así es demasiado dinero, no aceptaran el trato.
Azucena: confía en mí, después de conocerme a mí, lo aceptaran.
Jorge descolgó el teléfono de su despacho y llamó a alguien.
Jorge: esta noche a las 9 asistirá la meretriz de la que te hablé a tu casa, te importaría pagarme por ella el doble de lo pactado?
Mientras Jorge efectuaba las llamadas adecuadas con sus clientes, Azucena abandonó el despacho.
Tras un rato, Azucena se encontraba en el gimnasio del internado, entrenándose, haciendo flexiones, abdominales y pegando patadas al aire.
Cuando entró su hermana mayor, Manuela, la profesora de manejo de armas.
Manuela: qué Azucena? entrenando como siempre?
Azucena: me conoces demasiado bien Manuela, tengo que mantenerme en forma para la próxima clase.
Manuela: mis hijas Esmeralda y Rubí ya me han contado lo sucedido con Diego Marremo durante tu sustitución en la clase de seducción, se puede saber en que estabas pensando?, tienes 16 años!! te recuerdo que la clase es de seducción, no de sexo.
Azucena: tiene gracia, el director me ha dicho exactamente lo mismo cuando he hablado con él.
Manuela: Diego Marremo es el único alumno que tengo en mi clase de manejo de armas, capaz de montar un rifle con los ojos vendados en menos de 20 segundos.
Azucena: caray con Diego!!-dijo Azucena pronunciando un silbido de exclamación-está visto que ese Diego es el protegido de esta escuela.
Manuela: pues sí, y además tu sobrina Esmeralda está colada por él, aunque es un sentimiento que mantiene en secreto, pero una madre sabe esas cosas.
Azucena: vale, lo admito, fue un error desnudarme en clase, no volverá a pasar.
Manuela: lo sé, a diferencia de mucha gente en este internado, yo sé que se puede confiar en ti.
Azucena: tengo entendido que Diego tiene excelente en todas las asignaturas, menos en seducción que tiene notable alto y matricula de honor, en mentira y engaño. Pero...
Manuela: que pasa Azucena?
Azucena: pasa que no sé si Diego se merece ese excelente en mi clase, yo estoy muy ocupada con los clientes que me busca Jorge, y con los míos propios de mi casa de masajes, y dando mis clases de artes marciales está siempre un profesor distinto, de ahora en adelante me ocuparé más de mis clases.
Manuela: está bien, mientras no te olvides de ir a hacerte las revisiones diarias con mi suegro a los laboratorios de los pasadizos secretos, como siempre, no hay ningún problema.
Azucena: no te preocupes, yo soy la primera interesada en mi salud, después del entrenamiento iré a reunirme con tu suegro, a ver cuales son los resultados de mi último análisis.
Mientras en los laboratorios de los pasadizos secretos, dos niños de 6 años, a cargo de Segismundo Amadeo, estaban reventando piedras con sus propias manos, mientras éste tomaba notas en su cuaderno.
Los niños eran Alberto Lomo y su hermano gemelo Aníbal Lomo, hijos de Álvaro Lomo, el profesor de creación de venenos.
Azucena estaba entre tanto, con un bañador rojo, cerca de la piscina que había en la parte trasera del internado, al aire libre, a 7 Km. más o menos del bosque.
Ella se puso un gorro de natación y se zambulló en el agua, buceó hasta el fondo de la piscina que era de una profundidad más de un 1 metro, y abrió una trampilla que había al fondo, por ella siguió nadando hasta salir a la superficie de un lago en una cueva subterránea, allí había un armario y cajas de cartón con toallas y ropa para cambiarse, Azucena se secó, se quitó el bañador y se cambió de ropa y caminó hasta una puerta la cual abrió. Tras ella estaba Segismundo con Alberto y Aníbal.
Azucena: se puede?
Segismundo: claro pasa, como voy a decirle que no a mi paciente favorita?
Azucena entró y cerró la puerta tras ella.

Segismundo dirigiéndose a Alberto y Aníbal: Alberto, Aníbal, podéis volver a vuestro cuarto, por hoy ya hemos terminado.
Alberto y Aníbal hicieron un saludo en tono militar con sus manos llevándoselas a la frente y salieron de los laboratorios.
Azucena: siento si estabas haciendo algo importante, pero estaba un poco preocupada por mis análisis y...
Segismundo: no importa, solo estaba tomando notas sobre los resultados de los experimentos en los hijos de Álvaro Lomo, ya sabes, el profesor de creación de venenos.
Azucena se sentó sobre la camilla. Mientras Segismundo le examinaba en los ojos con una pequeña linterna.
Azucena: están correctos mis últimos análisis?
Segismundo: sí, todo está en orden. Como bien sabes a todos los niños de esta organización de 2 años les inyectamos anabolizantes para que sean superhombres, añadiéndole una formula secreta inventada por mí, pero los resultados de la superfuerza no son permanentes, a los 13 años, las personas pierden toda su fuerza y vuelven a ser personas totalmente normales, y durante el tiempo de los 2 años a 13, tienen efectos secundarios tales como insomnio, falta de apetito, dolores de cabeza, vómitos, y pérdida de cabello, estos síntomas varían según la estructura genética de cada persona.
Con todos los niños llevamos un control desde la aparición de la superfuerza en su organismo, hasta la desaparición de ésta. Hasta ahora no hemos conseguido que los resultados de la formula sean permanentes una vez pasados los 13 años. No lo hemos conseguido con nadie menos contigo. Cuando te inyectaron los anabolizantes yo estaba fuera dando una conferencia con directivos de la organización, y te lo inyectó un estudiante a cargo de mi puesto en el internado, él era un principiante y te inyectó una doble dosis de la recomendada por error, por ello, tú has seguido teniendo superfuerza tras cumplir los 13 años hasta ahora, que pasados los 33 sigues conservando los efectos de la formula secreta en ti intactos. Pero eres un caso único, no solo no has tenido ninguno de los síntomas secundarios en tu infancia, al igual que el resto, sino que además te has mantenido con vida pasados los 13 años. Es un poco duro para mí decirte esto pero...
Azucena: qué sucede?
Segismundo: hemos hecho pruebas, hemos añadido a niños una doble dosis de la formula, para ver como reaccionaban, pero tras estudiarlos...
Azucena: qué, que pasa?
Segismundo: todos los niños con los que hemos experimentado con doble dosis, la misma cantidad expuesta en tu organismo por error, han conseguido mantener sus poderes pasando la barrera de los 13 años, pero...
Azucena: pero qué?
Segismundo: pero han muerto a las 16 horas después, hace años que tú deberías estar muerta, de hecho no existe ninguna explicación médica para que aún sigas viva y con superfuerza teniendo más de veinte años.
Azucena: pero... mi vida no corre peligro, verdad?
Segismundo: no, sorprendentemente no.
Azucena: puede ser que algún día pierda mi superfuerza?
Segismundo: no se sabe, hay que seguir haciéndote pruebas.
Azucena se levantó de la camilla y nerviosa caminando, dijo.
Azucena: estoy harta de tantas pruebas, quiero una explicación de lo que me pasa, y la quiero ya!!
Segismundo: Azucena, sabes que yo te quiero casi como a una hija, si supiera lo que te pasa te lo diría, pero no lo sé. Por el momento debemos agradecerle a Dios, que todavía estés viva.
Azucena se abrazó llorando a Segismundo, mientras éste intentaba consolarla.
Pasados unos minutos Azucena estaba en bañador rojo, remojándose los pies en el lago de la cueva subterránea, llorando, pensando en sus cosas, cuando un hombre se acercó a ella bajando por unas escaleras de piedra.
Fabián: ah! hola Azucena, sabía que estarías aquí, mi mujer me ha dicho que has hablado con ella en el gimnasio, y que te tocaba revisión médica con mi padre, cómo ha ido?
Azucena: hola Fabián! has usado el pasadizo secreto del armario de tu habitación para llegar hasta aquí?
Fabián: sí, ya sabes que en todos los armarios de todos los cuartos de este internado hay un pasadizo que conduce a los laboratorios, lo que pasa es que a ti siempre te gusta utilizar el camino de la piscina, con lo fácil que sería haber llegado por el armario de tu habitación.
Azucena: nadar me relaja.
Fabián: y bien? no me has contestado, que tal ha ido la revisión con mi padre?
Azucena encogiéndose de hombros: supongo que bien, siguen sin saber porque sigo teniendo superfuerza una vez haber pasado los 13 años.
Fabián: tranquila, no te pongas nerviosa, si vas a ver en realidad tener superfuerza no es nada grave, muchas personas querrían estar en tu situación.
Azucena: puede ser que algún día llegué a perderla, lo sabes? y no sé ni siquiera cuando va a pasar eso, ni si va a llegar a suceder... esta incertidumbre me está volviendo loca...
Fabián: sabes que siempre que necesites hablar con alguien, puedes contar conmigo.
Azucena: gracias, la verdad es que no me vendría nada mal la ayuda de un psicólogo en estos momentos, por cierto, estaba pensando, Diego Marremo tiene excelente en tu clase de psicología e hipnosis, no es así?
Fabián: efectivamente, Diego es capaz de sumir en el más profundo de los sueños a toda la clase sin ni siquiera llegar a pestañear.
Azucena: vaya, llevo todo el día que solo escucho maravillas sobre Diego.
Fabián: me he enterado de lo ocurrido en clase de seducción con Diego, no se lo tengas en cuenta, después de todo solo tiene 16 años.
Azucena: la verdad es que el director me ha recriminado muy duramente que me haya desnudado por completo en clase, voy a sustituir al profesor de seducción más veces durante el curso, así que voy a tener mucho cuidado a partir de ahora, haré mis clases más suaves.
Azucena se zambulló en el agua del lago.
Azucena: hace una carrera hasta la piscina del colegio?
Fabián: no gracias, prefiero usar las escaleras.
Azucena le salpicó agua, y despidiéndose de su cuñado, el marido de su hermana Manuela, buceó y nadó hasta perderse en las profundidades de aquel lago, llegar a la trampilla oculta bajo el agua, y pasar a la piscina de la parte trasera del internado.
Un poco más tarde, Azucena se encontraba en ropa deportiva haciendo footing por el bosque del internado. Cuando se encontró a Diego sentado sobre una gran roca. Llevaba puesto el uniforme negro de la organización secreta del crimen.
Azucena se acercó a Diego.
Azucena: hola Diego, estaba buscándote, ya te encuentras mejor?
Diego: sí, gracias por preguntar, pero en realidad no ha sido nada grave. Pq me buscabas?
Azucena: para pedirte disculpas.
Diego: a mí? por qué?

Azucena: porque lo que te ha pasado en clase de seducción ha sido solo un error mío, no debí desnudarme en clase, lo siento, me equivoqué, el director ha hablado personalmente conmigo y me ha ordenado que a partir de ahora no se vuelva a repetir nada parecido en las clases, así que por mi parte se acabaron los desnudos.
Diego: ah!! pues en una lástima.
Azucena le miró sorprendida por su contestación. Y Diego dándose cuenta del detalle rectificó de inmediato.
Diego: una lástima para el resto de la clase que ya se habían hecho ilusiones por supuesto, porque a mí no me importa nada el hecho de que te desnudes o no delante mío.
Azucena: no claro, fíjate tú si te importara poco que te has desmayado nada más verme desnuda frente a mis propias narices.
Diego: no me he desmayado en clase por la impresión de verte desnuda.
Azucena: ah no?
Diego: no, simplemente es que esta noche no he dormido bien y no había desayunado, lo de tu desnudo en clase ha sido una simple coincidencia, si me he desmayado ha sido porque estaba bajo en defensas.
Azucena: claro, ahora os toca clase de artes marciales, verdad?
Diego: sí.
Azucena: según tengo entendido tienes excelente en artes marciales, no es así?
Diego: sí, pero... esa nota me la puso el último profesor sustituto que tuvimos, como tú casi nunca ejerces de profesora...
Azucena: ya bueno, es que tengo otras cosas que hacer...
Diego: lo sé, como por ejemplo... trabajar en la casa esa de masajes que dicen que tienes?
Azucena: por ejemplo... pero las cosas van a cambiar a partir de hoy, he decidido encargarme personalmente de mis clases de artes marciales, y comprobaré por mí misma si de verdad te mereces el excelente, sino es que te desmayas antes de empezar el combate...
Azucena se alejó de Diego siguiendo haciendo footing, por el camino de arena del bosque.
Un tiempo después, Azucena volvía a estar en el gimnasio, pero ahora acompañada por sus alumnos. Todos los alumnos estaban vestidos con el chándal del colegio, los pantalones eran grises, y las sudaderas con capucha plateadas, con el emblema tridimensional de OSC. Todos menos Diego que con la capucha puesta tenía una chaqueta marrón claro, con el escudo del águila roja atravesada con las dos espadas en forma de equis, el escudo oficial del internado valle seco.
Azucena al ver a Diego con la chaqueta equivocada le llamó la atención.
Azucena: perdona Diego, pero... ves a algún policía alrededor tuyo?
Diego observando el gimnasio sin moverse del sitio.
Diego: no.
Azucena: entonces qué haces vestido con el chándal falso?
Diego: perdón, ha sido un despiste mío.
Diego se quitó la chaqueta, la giró del revés y se la volvió a poner sin abrochar, por la parte correcta.
Azucena: bien, voy a presentarme, ya que creo que en esta clase la mayoría de veces solo tenéis a sustitutos ya que yo normalmente estoy demasiado ocupada, supongo que todos ya sabéis que mi nombre es Azucena Terrón y soy la profesora de artes marciales. Quiero deciros que no importa las calificaciones que hayas tenido en mi asignatura con los demás profesores, ya que eran sustitutos, y si yo compruebo que no tenían razón, voy a cambiarlas. Quiero avisaros antes de empezar, que como la mayoría de los aquí presentes, no todos, solo los que se han criado desde niños en este internado sufrieron experimentos a cargo de Segismundo Amadeo para aumentar su fuerza física, esos experimentos dieron como resultado una fuerza sobrehumana que no sé si por desgracia o fortuna desaparece al cumplir los 13 años, para que la superfuerza sea permanente o dure una vez cumplidos los 13 años, se tiene que administrar una doble dosis de la formula, que es lo que hicieron conmigo por error, pero todos los niños que han recibido una doble dosis se han muerto 13 años y 16 horas después. Yo no, por qué? no hay explicación médica. Así que mientras a vosotros os desapreció la superfuerza hace 3 años, yo la sigo manteniendo intacta. Así que, empezamos los combates?
Azucena peleó con tres de los alumnos de la clase y los gano casi sin ninguna dificultad.
Azucena: quién va a ser el siguiente?
Diego se levantó y se puso en posición de ataque, pero Azucena sin intentar defenderse dijo muy seriamente.
Azucena: Diego siéntate, no voy a pelear contigo.
Diego: y eso por qué?
Azucena: el último profesor sustituto te puso un excelente en artes marciales, te quiero todas las tardes a las 7 en el gimnasio, para comprobar en privado si de verdad te mereces ese excelente, mientras, en clase con el resto de tus compañeros, solo estás para observar, nada de pelear, quiero que reserves tus fuerzas para las 7 de la tarde. está claro?
Diego: clarísimo-dijo Diego tomando asiento en el suelo con sus demás compañeros.
Uno de ellos se le acercó a Diego y le susurró:
-debes estar contento eh? vas a tener a Azucena todas las tardes a las 7 para ti solo!
Diego: sí, estoy que no quepo en mí de la alegría-le contestó.
Tras la clase de artes marciales, horas después, Carlos, uno de los alumnos del internado estaba andando por el pasillo, cuando él pasó cerca del despacho del director y Jorge salió de él viéndole.
Jorge: Carlos, hijo mío, entra, tenemos información nueva de tu tío, ya sabes el traidor de la familia que fundó la organización secreta de la justicia.
Carlos entró al despacho con su padre.
Jorge le enseñó unos folios sacados de su impresora.
Jorge: el día en que me casé con tu madre, hace más de 20 años, tu tío Germán abandonó esta organización y creó la organización secreta de la justicia, yo sabía que su desaparición de este lugar traería problemas por eso le instalé un microchip informático en su cerebro con la ayuda de mi amigo Segismundo Amadeo, el científico, para así estar al tanto de todos sus movimientos.
Más tarde instalé copias de ese mismo chip en las cabezas de Julia Almo, la madre de tu compañero de clase Manuel Lomo y de Nuria Destino, la antigua cocinera de este centro. Así fue como supe que la idea de mi hermano de crear una organización secreta de la justicia se había hecho realidad. El microchip está diseñado para que siempre que alguna de esas tres personas piense en mí se active, y mandé información secreta a mi ordenador y redacte todas sus acciones y pensamientos, mientras sigan teniendo el microchip en sus cabezas yo sabré todo lo que están haciendo, los tres fundadores de la organización secreta de la justicia.
Carlos: y qué dice ésta vez en los folios papá?

Jorge: que han reclutado a muchísima gente, entre ellos están todos los familiares de las victimas que hemos estafado, robado o matado desde que se creó la organización del crimen en manos de mi tatarabuelo, ya son muchos reclutas en la organización, más de 300. Y...
Carlos: y qué?
Jorge: pues que hasta ahora les entrenaban en un almacén subterráneo, muy pequeño y con muy poca luz, pero finalmente lo han conseguido, tu tío Germán ha hablado con el marido de la rehén que retuvo tu madre en el banco, ya sabes el atraco en el cuál murió, y ha resultado ser que ese hombre es el dueño de una constructora que ha contratado albañiles para diseñar y construir...
Carlos: él qué papá?
Jorge: un internado, el internado aureola, para seguir entrenando a todos los de la organización secreta de la justicia, con un plan de estudios muy parecido al que tenemos aquí. Tu tío fue director en valle seco antes que yo, así que es perfectamente capaz de abrir un colegio y empezar con él desde cero.
Carlos: y donde se encuentra ese internado papá?
Jorge: bajo el puente "el postre de la luna"
Muy lejos de allí, el edifico de un internado con el escudo de un águila negra sujetando la copa con una estrella blanca se alza majestuoso, los albañiles junto con el jefe de obras, Alfonso Metro, miran satisfechos su obra terminada.
Alfonso: perfecto, ya está construido el internado aureola, y es mucho mejor de lo que me había imaginado.
Germán: ya podemos traer a todos los alumnos del almacén subterráneo para que sigan con sus clases a plena luz del día, pronto seremos tantos como para combatir a la organización de mi hermano Jorge.
Alfonso: y yo podré vengar la muerte de mi mujer.
Germán: no te preocupes Julia, todo está en marcha, conseguiremos que tus tres hijos se unan a nosotros, Manuel, Alberto y Aníbal, abandonaran la organización del crimen.
Julia: el internado ha quedado precioso, y me gusta el nombre que le hemos puesto, internado aureola. Ojala mi hijo Manuel se dé cuenta de la maldad de su padre, sepa que está en el lugar equivocado, recapacite y huya del internado valle seco, para siempre, como hice yo en su día.
Nuria: conseguirás tener a tus hijos contigo, tienes mucha suerte de tenerlos, yo nunca he tenido una familia, y no sé lo que es eso.
Germán: ahora tienes una familia de la que cuidar Nuria, la organización secreta de la justicia es tu familia, y estoy seguro que adoraran tus suculentos guisos.
Nuria sonrió.
Alfonso, Germán, Julia y Nuria, los cuatro sonrieron, ante el edificio del internado aureola, seguros de que ahora nadie les iba a poder detener.

FIN DEL CAPITULO 1

Ya te lo había dicho, pero me encanta, como casi todas tus historias jajaja
La primera escena es la que más me gusta, está emocionante... Y los personajes son buenos, de momento me gusta mucho Azucena, aunque a los demás tampoco los conocemos mucho... Espero seguir leyendo la continuación cuando lo tengas ;)

me alegro que te guste Julia, supongo que ya te habras leido las descripciones de los personajes, aunque si tienes razón poco a poco se iremos conociendolos a todos, de momento en el primer capi igual he hecho muy protagonista a Azucena, en verdad ella es casi la protagonista de la historia, pero eso ya lo iras viendo. Y de Diego que opinas? de todos los personajes cual te gustaria ser? en cuanto tenga listo el proximo capi, te aviso.

Carolina, ya termine de leerlo entero. me gusta mucho :) De donde sacas tanta imaginacion?
Me gusta la relacion de Azucena y Diego :)
Y estoy con Julia, la escena que mas me gusta es la primera, pero tambien cuando se descucbre lo del cso de superfuerza de Azucena xD
Espero la continucion ^^

muchas gracias Carla por leerte la historia, me pone muy contenta saber que hay gente a la que le interesa lo que escribo. que de donde saco tanta imaginación? ni yo misma lo sé... si te ha gustado el primer capitulo ya veras el segundo, poco a poco con el paso de los capitulos se iran desvelando todos los misterios. Azucena y Diego de momento no tienen ninguna relación pero... ya veras, ya, Diego se va a enamorar perdidamente de Azucena y va a ser la envidia de todos sus clientes.

CAPITULO 2

RECUERDOS

Eran las 9 de las noche. Azucena se encontraba en la casa de uno de sus clientes buscados por Jorge Puertas, el director de la organización secreta del crimen. Azucena y el cliente estaban revolcándose en la cama cuando oyeron el sonido de un timbre que les interrumpió, era el sonido del teléfono móvil del cliente.
El cliente se separó de Azucena y le dijo.
cliente: espera aquí, no te muevas, tengo que contestar, solo va a ser un momento.
Azucena: de acuerdo, pero no tardes, el taxi me está esperando en la puerta, tengo otro cliente dentro de 4 minutos.
El cliente salió de la cama en calzoncillos, Azucena se recostó en la cama, el cliente cogió el móvil de la mesilla de noche y salio de la habitación cerrando la puerta tras él.
cliente: qué ocurre? estoy ocupado.
alguien le hablo desde el otro lado del teléfono.
Germán puertas: tú ocupado a las 9 de la noche? no me fastidies! sé perfectamente que el periodo entre las 9 y las 10 lo tienes libre, por eso siempre te llamo a esta hora para que me des información sobre como sigue dirigiendo el internado valle seco mi hermano pequeño, desde que yo lo abandoné.
cliente: ah!! pero aún sigues queriendo que te diga más cosas sobre la organización secreta del crimen?
Germán puertas: por supuesto que sí, la línea de información que tenemos no se puede apagar nunca, la información es poder, te daré todo el dinero que te prometí, pero tienes que seguir haciéndome el favor de contármelo todo sobre la vida que ha transcurrido en estos más de 20 años, de todos y cada uno de los miembros de la organización secreta del crimen.
cliente: de verás? por mí puedes guárdate todo tu dinero. Ya no lo quiero.
Germán Puertas: cómo has dicho?
cliente: Jorge nos ha descubierto, no sé cómo pero nos ha descubierto, creo que él también tiene un informador en tu bando.
Germán Puertas: eso es imposible, todos los de mi bando han sido victimas de la maldad desgarrada de la organización secreta del crimen, no se atreverían a volver ni a colaborar con ella.
cliente: pues no lo sé, pero Jorge está informado de los movimientos que has hecho, sabe lo de la construcción del internado aureola, sabe que te he estado pasando información y también sabe detalles sobre el plan secreto que tú y yo planeamos hace semanas.
Germán Puertas: puedo protegerte, enviare a soldados de la organización secreta de la justicia a tu casa, ellos evitaran que los hombres de la otra organización se acerquen a ti para hacerte daño, tú habla, si tu vida corre peligro no temas por ello, puedo enviarte a mis hombres en cuanto me lo pidas.
cliente: no gracias, Jorge no me va a matar, por el momento no, hemos hecho un trato, me ha pagado con algo para que yo rompa mi trato contigo y deje de ser tu confidente, así que sintiéndolo mucho, nuestras conversaciones se han acabado aquí, vuelvo al bando de tu hermano.
Germán Puertas: dime la cifra, dime la cifra que te ha ofrecido mi hermano y te subo la mía, dímela, puedo conseguir mucho dinero, te lo juro.
cliente: nada de lo me ofrecieras superaría a la oferta de tu hermano.
Germán Puertas: no estoy para bromas, cuanto quieres? 1 millón, 2, la vida de miles de personas están en peligro, tú dime la cifra, yo te la pagare.
cliente: yo no he dicho en ningún momento que tu hermano me haya ofrecido dinero a cambio de mi silencio y fidelidad con él.
Germán Puertas: entonces como te ha pagado? ofreciéndote un alto cargo en la organización?
cliente: no, y ya hemos pasado más de dos minutos hablando, será mejor que te cuelgue o ella se va a ir.
Germán Puertas: ella? espera, no irás a decirme ahora que mi hermano te ha pagado con el cuerpo de una mujer? en serio vas a dejarlo todo solo por pasar una miserable noche con una prostituta?
cliente: sí, y tú también lo dejarías si supieras quién es esa mujer.
Germán Puertas: espera, no estarás hablando de...
cliente: de Azucena Terrón? por supuesto que sí, es que acaso existe otra mujer más bella que ella en la organización secreta del crimen?
Germán Puertas: ella sigue viva? o sea, sé que si hubiera muerto me lo hubieras dicho pero... como está?
cliente: yo la veo muy bien.
Germán Puertas: escúchame esto es serio, Azucena fue victima de niña de los experimentos del científico de la organización, cometieron un error con ella, hace años que debería estar muerta.
cliente: pues no lo está, y está conmigo, así que acéptalo, vale?
Y así el cliente colgó el móvil, y volvió a su habitación, cuando entró a ella vio a Azucena de pie junto a la cama y vestida y arreglada para irse.
cliente: espera, te vas ya?
Azucena: te lo avisé, tengo otros clientes, no puedo estar contigo toda la noche, es demasiado tarde, no puedo quedarme más tiempo.
Azucena se colgó el bolso del hombro, se acercó hacia el cliente y le besó en los labios.
cliente: no quiero que te vayas.
Azucena: si te hace ilusión te dejo acompañarme hasta la puerta.
Azucena volvió a besarle, separándose muy despacio de él, el cliente se puso los pantalones y las zapatillas y acompañó a Azucena hasta la puerta de salida caminando por el pasillo de su casa.
En la puerta... Azucena la abrió.
cliente: volveremos a vernos?
Azucena: habla con Jorge, si él te prepara otra cita conmigo y pagas lo acordado, yo no tengo ninguna objeción, mientras tanto, sueña conmigo.
Azucena le pasó la mano por encima de los párpados cerrándole los ojos y se marchó de la casa. Al llegar a la calle, Azucena subió al taxi que le estaba esperando frente a la puerta, tal y como se lo había dicho Jorge.

Azucena: oye, sé que no estaba planeado pero... necesito despejarme un poco, no puedo tener las citas tan seguidas sin apenas un espacio de tiempo entre la una y la otra, Jorge está loco si piensa que voy a seguir el horario a rajatabla. Podemos dar una vuelta antes de dejarme en la próxima casa?
taxista: no puedo hacer eso, tenemos el tiempo justo para ir de una casa a la otra, por eso Jorge se aseguró personalmente que los clientes vivieran en la misma avenida, para que diese tiempo y no hubiese retrasos en las citas, no puedo desviarme de la ruta.
Azucena: ni siquiera si te lo pido yo?
taxista: si Jorge se entera de esto, me juego mi puesto de trabajo y mi vida, ni siquiera deberíamos estar hablando, los clientes que tienes son hombres muy ocupados, a las 10 de la noche tienen una reunión muy importante, y conferencias, y deudas y negocios que atender, no pueden dejarlo todo y pasarse la noche esperando a que tú te dignes a presentarte en sus casas, y si faltas a las citas, la organización secreta del crimen puede quedarse sin el apoyo de mucha gente para que pueda seguir abierta otros 10 años más por lo menos.
Azucena: la organización secreta del crimen no se va a cerrar, voy a ir a esas citas y conseguiré todo el apoyo que haga falta para que eso no suceda, pero iré a lo larga de la noche que es hasta las 6 de la madrugada y si de verdad quieren estar conmigo, tendrán que faltar a la reunión de las 10 y a todas demás, y esperarme, y lo harán, porque ellos saben que mi tiempo es oro. Y no van a tener otra oportunidad de estar conmigo.
taxista: me debo a mi trabajo, no voy a hacerlo, si pretendes que pasé mi tiempo haciendo turismo contigo así por todo el morro, estás muy equivocada, a mí me han pagado para cumplir unos viajes específicos, y no voy a salirme de la ruta.
Azucena: y si te yo te doy algo a cambio de que lo hagas...?
taxista: Jorge podía matarme si llega a enterarse.
Azucena: conozco esta zona, por aquí cerca hay un callejón oscuro donde nadie nos vería ni nos buscaría, vamos al callejón y te doy todo lo que tú me pidas, gratis.
taxista: estás hablando en serio?
Azucena: espera que hago unas llamadas, tú sigue conduciendo.
Azucena sacó una agenda pequeña y marcó un número con su móvil.
taxista: qué haces? esa es la agenda de Jorge!! cómo se la has cogido?
Azucena: cállate, estoy hablando.
Azucena esperó que le contestaran al teléfono.
Azucena: sí? soy Azucena, teníamos una cita dentro de unos minutos a las 9:15 verdad? sé que tienes una reunión a las 10 pero... no sé a que hora voy a poder pasarme por tu casa, voy a asistir a la cita, pero necesito tiempo, me esperaras en casa sin moverte hasta que llegué? piensa que si me presentó en tu puerta y no estás, jamás, nunca en la vida, volveré a aceptar a tener una cita contigo.
Azucena colgó el teléfono, y marcó el siguiente número, mientras esperaba a que contestaran habló con el taxista.
Azucena: qué haces? por aquí no se va al callejón, no quiero seguir el horario al pie de la letra!!-dijo ella mirando por la ventanilla del coche.
taxista: debes estar loca si piensas que voy a sacrificar mi vida solo por pasar unos minutos en tu compañía.
Azucena: tenemos de tiempo hasta las 6 de la madrugada, va a ser mucho más que unos minutos, y tú vas a ser el loco como dejes escapar una oportunidad como ésta.
taxista: no vas a cumplir el pacto, sé que sabes artes marciales y que tienes superfuerza, cuando lleguemos al callejón, me darás una patada y te largarás.
Azucena: y que gano yo con eso? no quiero que cierren la organización por mi culpa, y sé que no tendrán más remedio si falto a las citas, así que tú decides, o me dejas en la próxima casa y pierdes la oportunidad de estar conmigo, o desafías a las órdenes de Jorge, y me llevas al callejón para que pasemos un rato de intimidad. Qué es lo que quieres hacer de verdad?
El taxista estuvo dudando por unos segundos, pero finalmente le dio un golpe al volante y cambio de dirección, Azucena sonrió.
Azucena: sabía que acabarías eligiendo bien.
Mientras, en el internado aureola, Germán estaba en su despacho de director.
Recordando su conversación telefónica con el primer cliente de Azucena.
Él pensó en ella, 20 años atrás, cuando él formaba parte de la organización secreta del crimen, cuando aún ni existía la organización secreta de la justicia, y cuando él era el director del internado valle seco por ser el hijo mayor, y su hermano pequeño Jorge solo un adjunto.
20 años atrás, Germán tenía 32 años entonces, su hermano Jorge 28 y Azucena Terrón era una alumna del internado de tan solo 15 años. Su hermana Manuela de 24 años, ya era por aquel entonces profesora de manejo de armas y todavía ella y Fabián, el profesor de psicología e hipnosis, no se habían hecho ni novios.
Germán recordó entonces lo sucedido en una noche en la que habló con Azucena.

Flash-back

Eran casi las 3 de la madrugada, Azucena volvía al internado valle seco del cual era alumna, ella saltaba la verja y entraba, pensando que nadie descubriría que había pasado parte de la noche fuera de la escuela, pero al saltar la verja y caminar por el patio exterior hacia la puerta de entrada, se tropezó con el director que la estaba esperando y parecía estar muy enfadado.
Azucena estaba comiéndose un chupa-chups y llevaba puesto el uniforme con el escudo del águila roja atravesada por dos espadas en forma de equis, de color verde fuerte con la faldita pistacho.
Germán: de donde vienes a estas horas jovencita?
Azucena: que honor? que te parece, si tengo comité de bienvenida y todo?
Germán: deja las bromas aparte y contéstame.
Azucena le metió un billete en el bolsillo de su pantalón, y dijo.
Azucena: si ves al director del colegio guárdame el secreto y no te chives, voy a dormir, estoy muerta de sueño-dijo ella al mismo tiempo que bostezaba y se abanicaba con un fajo de billetes.
Germán le devolvió el billete y dijo muy serio.
Germán: de donde has sacado tanto dinero?
Azucena: me lo han dado.
Germán: quién?
Azucena: hombres aburridos que no sabían en que gastarse su tiempo.
Germán: tienes solo 15 años! donde has estado? qué has hecho?
Azucena: perdona pero... tú eres mi padre o mi marido? no verdad? entonces a ti que te importa?
Germán: con quién has estado?
Azucena: uy!! ahora te vas a poner celoso? me siento halagada, pero... no te parece que eres un poco viejo para mí?
Germán: es que no puedes hablar sin bromear? Sabes perfectamente que estoy prometido con Lilian Lorta, estoy muy enamorado de ella, y tú para mí eres como una hija. Solo estoy preocupado por ti como director eso es todo. Dime una cosa, el dinero te lo han pagado a cambio de sexo, verdad?
Azucena: no quiero que te preocupes por mí, me inyectaron por error cuando tenía 2 años una sobredosis de la formula secreta para adquirir superfuerza, todos mis compañeros perdieron sus superpoderes hace dos años, yo no, y todos me tratan como si fuera un bicho raro y Segismundo Amadeo, el científico del colegio, dice que es muy probable que la formula se vuelva contra mí a lo largo del paso de los años, nadie ha pasado la barrera de los 13 años. No sé que síntomas puedo tener, si me va a seguir durando toda la vida y si... ni siquiera sé si llegare a los 20 años. Así que si me apetece estar con alguien y de paso puedo sacarme algún dinero, pues lo hago y punto, total, mañana mismo me podía morir.
Germán: no me gusta como te comportas, no puedes seguir todas las noches llegando altas horas de la madrugada, y liándote con desconocidos a cambio de dinero. Así nunca llegaras a descubrir lo que es el verdadero amor.
Azucena: sé perfectamente lo que es el verdadero amor, lo sé de sobras como para saber que no está hecho para mí, allá donde voy los hombres me miran con deseo, nunca se fijan en nada más que no sea mi cuerpo, nunca voy a encontrar a nadie que sepa amarme como me merezco. pero sabes qué? no me importa, ya no. Toda mujer tiene un sino, y el mío es ese, ser solo deseada y nunca amada.
Germán: no sabes de lo que hablas, solo tienes 15 años, la vida es muy larga, nunca se sabe a quien vas a conocer, sino fíjate en mí antes de prometerme con Lilian.
Azucena: Lilian te va a dejar, tú puede que estés enamorado de ella, pero ella de ti no, le he visto tontear con tu hermano Jorge, Lilian solo está contigo por interés, en cuanto Jorge le ofrezca algo mejor de lo que tú le das, te dejara.
Germán: eso no es cierto, ella me quiere igual como yo a ella, ella es la única mujer que me importa en este mundo.
Azucena: te he visto hablar con mi hermana Manuela mogollón de veces sobre mí, tú puedes decir que solo es interés de director, y que soy como una hija para ti, pero yo no me trago ese cuento. Puedes decir que no tengo ni idea de la vida, que solo tengo 15 años y que estás superenamoradisimo de Lilian, y seguramente lo estés, pero no me digas que te soy indiferente porque no me lo tragó. Buenas noches director.
Azucena se acercó a Germán, le dio un tierno y delicado beso en la mejilla y entró en el internado para dirigirse a su cuarto a echar una cabezadita.

fin del flash-back.

Germán siguió recordando. Ésta vez se trasladó 20 años atrás, a una charla que tuvo con su hermano en el despacho de director del internado valle seco, en pleno día.

Flash-back

Germán entró al despacho y pilló a su hermano Jorge mirando unos planos que tenía él guardados.
Germán: Jorge que haces en mi despacho?! suelta esos planos?
Jorge: que es esto? que es la organización secreta de la justicia?
Germán: son los planos del diseño del nuevo aspecto de este internado, quiero que se convierta en una nueva organización, no quiero educar nunca más a asesinos, timadores o ladrones, sino gente del bien.
Jorge: no puedo creérmelo, tú estudiaste en este internado, nuestro tatarabuelo lo fundó, has llevado toda una vida de delincuencia, ¿y ahora a los 32 años quieres cambiarlo así porque sí?
Germán: así porque sí no, estoy enamorado de Lilian, quiero casarme con ella y tener hijos, es cierto que mi tatarabuelo fue un delincuente, que mi bisabuelo también lo fue, después mi abuelo, mi padre y finalmente yo, pero no quiero que mis hijos lo sean.
Jorge: vas a romper la tradición familiar así por las buenas?
Germán: te repito que no es por la buenas, siempre he querido hacer un cambio en esta organización, y creo que ahora es el momento de llevarlo a cabo.
Jorge: en esta organización no está solo nuestra familia, hay más gente, más familias, y empresarios muy importantes con negocios ilegales, hay mucho dinero en juego, nadie va a dejar que cierres la organización secreta del crimen, y lo conviertas en la organización secreta de la justicia, nadie.
Germán: es mi sueño, y algún día lo cumpliré, siempre que alguien necesite ayuda, allí estará la organización secreta de la justicia, para ofrecérsela, en este mundo hay mucho criminal suelto, la organización secreta de la justicia será una élite de hombres que llevara a todos esos indeseables tras las rejas.
Jorge: tu prometida Lilian sabe de tu plan? ella también pertenece a la organización, toda su familia, no puedes dejar tus raíces de la noche a la mañana, en cuanto Lilian se entere que quieres hacer desaparecer para siempre la organización secreta del crimen, se opondrá y te dejara.
Germán: no lo hará, y no lo hará porque me quiere y quiere lo mejor para nuestro futuro.
Jorge: vuestro futuro ni siquiera existe. Le he hecho un regalo a Lilian, una cadena de oro robada en una joyería, y sabes que? me ha besado, me ha dicho que te va a dejar.
Germán: mientes, te lo estás inventando todo!!
Jorge: cuando hables con ella y te dejé ya veremos quién tiene razón, Lilian solo ha salido contigo todo este tiempo porque eras el hermano mayor y pensaba que a tu lado podía conseguir fama dentro de la organización, pero me conoció a mí, comparó y eligió, se siente, pero tu ridícula idea de la organización secreta de la justicia y este nuevo internado nunca se hará realidad, y yo voy a ser quién se casé con Lilian, no tú y cuando tengamos un hijo, le pondremos Carlos, es el nombre preferido de ella.
Jorge abandonó el despacho de su hermano y Germán derramó lágrimas, sin creerse todavía que Lilian prefiriera a su hermano antes que a él.

fin del flash-back

Germán miró por la ventana de su despacho, es increíble como había cambiado todo en 20 años, él quería que solo existiera una organización, la organización de la justicia, y ahora existía pero tenía que luchar contra la organización del crimen y matar a todos sus miembros, porque desgraciadamente en ese hecho su hermano Jorge tenía razón, nadie más le iba a apoyar en su idea de cerrar para siempre la organización secreta del crimen, si quería que desapareciera, tenía que dar por muertos a todos sus miembros, pero éstos, eran miles y miles.
Pero lo cierto es que había conseguido mucho desde que se había ido del internado valle seco, había creado la organización secreta de la justicia, y había construido un nuevo internado, le había costado 20 años largos pero lo había hecho, ahora él era el director del internado aureola y la lucha entre el bien y el mal seguía su curso.
Germán siguió recordando. 20 años atrás. Recordó lo mal que se sintió cuando su novia Lilian le dejó por su hermano Jorge, se sintió tan mal, hasta el punto que pensó en suicidarse.

Flash-back

Germán estaba al volante de su coche, un coche negro. Él conducía sin rumbo, acababa de discutir con Lilian, finalmente lo que le dijo su hermano Jorge resultó ser cierto, Lilian y Jorge iban a casarse, Lilian ya no sería nunca más su novia.
Germán conducía por la carretera, cuando vio a alguien conocido haciendo auto-stop, era Azucena, con la faldita pistacho y el jersey verde fuerte con el escudo del águila roja con dos espadas en forma de equis atravesándola.
Germán al verla, paró el coche frente a ella y bajó la ventanilla.
Germán: sube, te llevaré de vuelta al internado.
Azucena: volver al internado en el coche del director vista por todos mis compañeros? no gracias.
Germán: tienes suerte de que te haya parado yo y no un loco maniático, sabes lo peligroso que es hacer auto-stop?
Azucena: no soy una jovencita indefensa, tengo superfuerza, estudio en la organización secreta del crimen, creo que sé como defenderme.
Germán: sube, no pretenderás que me vaya sabiendo que te dejó aquí en medio de la carretera completamente sola, verdad?
Azucena: no claro que no, tú nunca abandonarías a una dama en apuros.
Azucena dio la vuelta al coche, abrió la puerta, se sentó en el asiento, se puso el cinturón y dijo.
Azucena: va a que esperas? arranca!
Germán arrancó el coche. Mientras conducía, hablaron.
Germán: estás muy callada, no vas a preguntarme que es lo que hago tan lejos del internado?
Azucena: no, pero si me lo dices tampoco te haré callar.
Germán: Lilian me ha dejado, tenías razón, Jorge le regaló una cadena de oro robada y ella ha roto conmigo, dice que yo no soy ambicioso y Jorge sí, se va a casar con él.
Azucena: lo siento, hacíais buena pareja.
Germán: me siento fatal, yo pensaba que nuestro amor era de verdad, pero ahora sé que yo nunca le he importado a Lilian, por eso... por eso yo...
Azucena: por eso tú qué?
Germán: por eso he cogido mi coche y me he ido, así sin pensármelo, a buscar un sitio donde poder suicidarme en soledad.
Azucena: suicidarte? hablas en serio?
Germán: sí, pero no te preocupes, te llevaré de vuelta al internado, te dejaré allí sana y salva y yo seguiré mi camino solo.
Azucena: no, no me lleves al internado, donde habías pensado suicidarte?
Germán: no sé igual me estrelló con el coche o me tiro por un barranco.
Azucena: nunca he visto a nadie suicidarse, de verdad lo vas a hacer?
Germán: no quiero seguir viviendo si Lilian no me quiere.
Azucena: no sé si creerte, quiero verlo, si me dejas en el internado y sigues tú solo, a lo mejor cuando estés frente al barranco, te arrepientes y no lo haces, si yo te acompañó ya no podrás echarte marcha atrás.
Germán siguió conduciendo. Al poco estaban los dos frente al barranco. El coche estaba aparcado en una carretera solitaria, y Germán miraba al vacío, mientras Azucena estaba de pie, apoyada en el coche.
Germán empezó a correr, tomó carrerilla para saltar, pero cuando estaba a punto de hacerlo, escuchó un grito a sus espaldas.
Azucena: espera, no lo hagas!!
Germán: tienes razón, es demasiado cruel dejarte que lo veas, no te preocupes, nada va a impedir que acabé con mi vida, no me voy a arrepentir, mi vida ya no tiene sentido sin Lilian, te dejaré en el internado, y volveré aquí a acabar lo que he empezado.
Azucena: no, no me has entendido, no voy a dejar que lo hagas, no me preguntes porque, pero, quiero que sigas viviendo.
Germán: Azucena no hay nada que tú puedas hacer para que cambié de idea, Lilian no me quiere, no puedo vivir sin su amor.
Azucena: Lilian no es la única mujer en este mundo, seguro que sino te tiras encuentras otra razón para vivir.
Germán: otra razón para vivir? ojala, pero es que acaso hay otra razón para vivir en mi vida, que no sea Lilian?
Azucena: sí, la hay. Cierra los ojos.
Germán le obedeció, sin saber muy bien lo que pretendía Azucena.
Azucena se acercó a Germán y fuera de todo pronóstico, mientras el aire les acariciaba la piel, le besó en los labios, Germán abrió los ojos sorprendido y sonrió al tiempo que vio que ella le miraba y le sonría a la vez. Germán y Azucena se volvieron a besar, ella le quitó a él la chaqueta tirándola sobre la tierra, le desabrochó los primeros botones de la camisa, se quitó ella el jersey verde fuerte del uniforme del colegio, quedándose con un sujetador rosado, se arremangó la faldita pistacho y se sentó sobre la carrocería del coche, Germán se colocó sobre ella e hicieron el amor, allí mismo.

fin del flash-back.

Germán siguió en su despacho del internado aureola, aquella larga noche, conduciendo a su memoria años atrás, nuevamente retrocedió 20 años, cuando volvió al internado vivito y coleando tras el intento de suicidio, claro que los únicos que sabían lo que había pasado al borde de ese barranco, eran Germán y Azucena.

Flash-back

En el pasillo del internado valle seco, Germán abrió la puerta de su habitación. Azucena salió de ella, se despidieron con un beso en los labios y tras una bonita sonrisa que le dedicó ella, se perdió caminando al final del pasillo. En la esquina de ese pasillo estaba por casualidad Jorge, Azucena no le vio al pasar, pero Jorge a Azucena y a Germán, sí. Jorge cabreado por haber visto a Azucena besarse con su hermano, fue directo hacia el cuarto de él. Cuando llegó picó a la puerta. Germán abrió, sin saber que Jorge le había visto segundos antes besarse con Azucena.
Germán: ah! hola Jorge, qué quieres?
Jorge sin pronunciar palabra le dio un puñetazo a su hermano, derribándole.
Jorge: cómo has podido? he visto a Azucena salir de tu habitación, he visto como la has besado, desde cuando estáis juntos?
Germán se tocó la barbilla dañada por el golpe, y se levantó del suelo recuperándose.
Germán: Azucena pertenece a mi vida privada, no tengo porque explicarte nada sobre nosotros, pero por si te interesa saberlo, no he engañado a Lilian, entre Azucena y yo no había nada hasta hace poco, que mi prometida Lilian decidió abandonarme por ti.
Jorge: Llevo años detrás de Azucena, sin conseguir ni siquiera una mirada tierna de ella, y tú... tú sin embargo... cuántas veces habéis hecho el amor? cuántas?


Germán: esto es el colmo, las veces que hemos tenido ocasión. ¿Tú me pides explicaciones a mí?, ¿tú que te vas a casar con la que era mi prometida?, hermano perdóname si te cierro la puerta en las narices, porque esta conversación de verdad me parece absurda.
Germán quiso cerrar la puerta, pero Jorge apoyó su mano en ella y lo impidió.
Jorge: no lo entiendo, qué es lo que ha visto Azucena en ti, eh? me das asco!! ¡tienes más de 30 años!! como te aprovechas así de una niña de 15?
Germán: cómo has dicho? perdona, pero tú cumples los 30 dentro de 2 años, y llevas detrás de Azucena casi desde que ella cumplió los 13, no me parece que seas la mejor persona como para avergonzarte de mi relación con Azucena. ¿Sabes lo que te pasa? que es la rabia la que habla en boca de ti, te reconcome la envidia por dentro, porque Azucena está conmigo y tú sabes que nunca podrás llegar a tenerla.
Jorge no pudo soportarlo más y le dio otro puñetazo, y mientras Germán estaba tirado en el suelo, los dos hermanos se miraron con rabia.
Jorge: vete de aquí! no quiero volverte a ver en la vida! vete del internado valle seco y la organización secreta del crimen! crea la organización secreta de la justicia como tú querías, pero lejos de aquí! y prepárate para la lucha porque la guerra entre las dos organizaciones va a ser terrible!!
Jorge se perdió pasillo abajo.

fin del flash-back.

Germán siguió recordando, Germán fue hasta su mesa de director, dio un puñetazo sobre ella, la plaquita con su nombre retumbó con el golpe, Germán dijo pensando en voz alta.
Germán: conseguiré que regreses a mi lado Azucena, no sé como pero encontrare la forma de convencerte que abandones la organización secreta del crimen y encontraré para ti un lugar en el internado aureola, volveremos a estar juntos, aunque sea la última cosa que haga en esta vida, tú serás para mí Azucena, por mucho que te resistas, algún día regresaras a mi lado.

Flash-back

20 años atrás. En la habitación de Germán en el internado valle seco. Días después tras la discusión de Jorge y Germán por culpa de Azucena.
Azucena y Germán estaban en el cuarto de él, los dos desnudos y abrazados en la cama, se estaban besando, cuando de repente, Germán se separó de Azucena, y la miró con ojos tristes.
Azucena: qué te sucede?
Germán: he discutido con mi hermano Jorge.
Azucena: menuda novedad! Jorge y tú nunca os habéis llevado bien, te recuerdo que él se va a casar con la que era tu prometida, ya deberías estar acostumbrado a vuestras broncas, son prácticamente una rutina.
Germán: lo sé pero, ésta vez ha sido diferente, porque ésta vez la pelea ha sido por ti.
Azucena: por mí?
Germán: sí, Jorge sabe lo nuestro, nos vio besándonos el otro día, me dijo que le daba asco y que no quería volverme a ver en la vida, que me largará fuera de la organización y del internado valle seco para siempre.


Azucena: que estupidez! tú eres el director, él a ti no puede echarte. Y si sabe que tú y yo estamos juntos, pues me lo alegro de que lo sepa, a ver si así me deja de mirar con esa cara de loco vicioso, ¡es un baboso! me da pavor cada vez que me lo encuentro por los pasillos.
Germán: tienes razón, él no puede echarme, pero... soy yo él que quiero irme Azucena, irme muy lejos de aquí.
Azucena: irte? que quieres irte? y yo? qué pasa con nosotros? vas a irte y dejarme a mí aquí sin importarte nada?
Germán: no, tú te vienes conmigo, Azucena tú eres lo único bueno que hay en esta organización llena de porquería y basura, quiero que huyamos juntos, tú y yo.
Azucena: huir juntos tú y yo?
Germán: sí, tengo unos planos de un nuevo internado, aún no sé que nombre ponerle, pero será el nuevo cuartel general de la organización secreta de la justicia, ya basta de educar a asesinos, ladrones y timadores, educaremos a gente del bien, vente conmigo y prometo cuidar de ti.
Azucena: la organización secreta de la justicia? cuando se te ocurrió la idea de crear esa organización?
Germán: cuando conocí a Lilian y me enamoré de ella, pensaba fundarla junto a ella, ya que iba a ser mi mujer, pero después de todo lo que ha pasado ya no me importa lo que haga Lilian ni con quién, ahora solo quiero estar contigo. Te quiero.
Azucena: qué me quieres? por el amor de dios Germán, yo solo tengo 15 años, he crecido toda mi vida en la organización secreta del crimen, sabes muy bien que no puedo irme de aquí, necesito seguir mis revisiones diarias con Segismundo, si me voy y dejan de examinarme cualquiera sabe los efectos que podía tener en mi cuerpo la formula secreta de la superfuerza.
Germán: tengo contactos, Segismundo no es el único científico que existe, él fue quien creó la formula sí, pero ha tenido ayudantes que le han ayudado a desarrollarla, si vienes conmigo te prometo que encontraré a alguien que te curé.
Azucena: no, aquí está toda mi vida, está mi hermana Manuela, si me voy ¿Cómo se lo explicaría a ella?
Germán: ella es tu hermana y solo quiere lo mejor para ti, si yo hablo con ella seguro que lo comprende, con el tiempo cuando la organización de la justicia sea imparable, Manuela también puede acompañarnos, por favor no me digas que no. Te quiero. No sería capaz de seguir sin ti.
Azucena: pues lo siento mucho Germán, pero vas a tener que hacerlo, porque yo no te quiero a ti.
Germán: mientes!!
Azucena: por qué no puedes quedarte? todo estaba yendo de perlas!! ¿por qué has decidido marcharte?
Germán: no quiero seguir llevando una vida de delincuencia, huyendo de la policía, mintiendo a todo el mundo, quiero ayudar a la gente, quiero cambiar de vida, y tú puedes venirte conmigo.
Azucena: hay un problema Germán, yo no quiero irme contigo, a mí me gusta como funcionan las cosas en esta organización, no me pidas que cambié mi vida por ti porque no lo voy a hacer, ni por ti ni por ningún hombre.
Azucena se envolvió su cuerpo desnudo con la sábana de la cama, y se puso de pie junto a ella.



Germán: espera, donde vas? qué haces? no quiero dejarte, quiero dejar de pertenecer a esta organización, quiero que la organización secreta de la justicia, sea una realidad, tengo que irme por mucho que me duela, y todo sería más fácil si te vinieras conmigo, de verdad que te quiero, te lo digo muy en serio.
Azucena: si de verdad me quisieras tanto como dices, aceptarías mi forma de vida y te quedarías, mi vida está en esta organización, y sino eres capaz de aceptarlo, es que no me quieres lo suficiente.
Azucena caminó envuelta en la sábana, abrió la puerta del baño y se encerró dentro de él. Apoyando su espalda contra la puerta. Germán en calzoncillos se levantó de la cama y se acercó a la puerta, golpeó a ella, con golpes muy fuertes, con el puño cerrado desesperado.
Germán: Azucena, sal de ahí!! sal de ahí por favor!! podemos hablarlo!! abre la puerta por favor!! ábrela!! ábreme!!
Pero dentro Azucena permanecía quieta en la misma posición, sus ojos se pusieron rojos, se sentó en el suelo del baño apoyando su cabeza sobre sus rodillas, y lloró mientras Germán seguía aporreando la puerta desde afuera.

Fin del flash-back.

Germán siguió sumido en sus recuerdos. 20 años atrás. Cuando dejó atrás a su gran amor. él se sentó en su butaca giratoria, se recostó en ella y dio vueltas y vueltas, recordando, dejando que los recuerdos llenaran su cabeza.

Flash-back

Todos, alumnos, profesores y empleados del servicio estaban vestidos de gala dentro de la iglesia que había dentro del internado. Un sacerdote estaba casando a Jorge con Lilian, cuando ellos se dieron el sí quiero, mientras se besaban, Germán que estaba al final de la iglesia empezó a caminar y salió de ella.
Azucena estaba sentada en un banco al lado de su hermana mayor Manuela, ella llevaba puesto un vestido de seda de color azul celeste, con purpurina de plata. y Azucena llevaba puesto un vestido a retazos blanco y negro, con la falda cuadriculada igual que un tablero de ajedrez y el corsé adornado de rosas blancas y negras.
Azucena vio salir a Germán, Azucena abandonó su sitio en el banco y le persiguió, Manuela le cogió del brazo a su hermana pequeña y le susurró.
Manuela: no vayas, no cometas una locura.
Azucena se deshizo de la mano de su hermana, y siguió a Germán.
Azucena: Germán espera! Germán espérate!
Germán detuvo su marcha y se giró hacia ella. Azucena se le acercó.
Azucena: no vas a quedarte hasta el final de la ceremonia?
Germán: no puedo quedarme más tiempo, ya te dije que iba a marcharme del internado.
Azucena: ya lo tienes todo decidido? no vas a cambiar de opinión diga lo que yo diga, verdad?
Germán: no puedo, mi sueño es crear la organización secreta de la justicia, tengo que irme.
Azucena: ¿te quedarías si te hago una promesa de amor eterno?
Germán: qué?
Azucena: si abandonas la idea de la organización secreta de la justicia y te quedas a mi lado, te prometo que de ahora en adelante serás el único hombre en mi vida, te lo prometo.
Germán: no voy a quedarme ni aunque me prometas eso, debo pensar en lo que necesita el mundo, no solo en mí, no voy a quedarme Azucena.
Azucena: muy bien, y que se supone que tengo que hacer yo entonces?
Germán: lo sabes perfectamente, vente conmigo, la oferta de que me acompañes sigue en pie.
Germán se acercó a Azucena y la besó en los labios, ella en un primer momento le correspondió al beso, pero después reaccionó y le empujó apartándola de ella.
Azucena: no, esto no puede ser. vete! quiero que te vayas!
Germán: qué?
Azucena: ya me has oído, aléjate de mí, no vuelvas a acercarte ni a tocarme nunca más en tu vida, te odio, ojala te mueras y te pudras en el infierno. Vete!!
Germán: pero Azucena yo...!
Azucena: cállate! lárgate! lárgate y no vuelvas nunca más!
Azucena levantó su brazo y señaló con su dedo índice la salida de la puerta de la iglesia.
Germán antes de irse le susurró.
Germán: te quiero, no voy a olvidarte nunca, ¿me oyes? nunca.
Germán se dio media vuelta y se fue.
A la otra punta de la iglesia, Jorge se tomaba fotos con todos los invitados, el sacerdote había salido de la iglesia por la puerta trasera. Jorge había visto desde lejos la discusión entre su hermano Germán y Azucena, él dejó un momento a sus invitados y a su esposa, se acercó a Azucena y le dijo.
Jorge: estás bien?
Azucena limpiándose las lágrimas.
Azucena: estoy fenomenal, ¿por qué tendría que estar mal?
Jorge: qué sientes por Germán? estás enamorada de él?
Azucena: no, le odio, es un indeseable, le he pedido mil veces que se quedé conmigo y me ha ignorado por completo, ojala pudiera vengarme de él de alguna forma.
Jorge: hay una forma, ¿quieres ayudarme?
Azucena: haré lo que sea.
Jorge: sé que Germán va a crear la organización secreta de la justicia, y nosotros tenemos que luchar contra ella, he creado un microchip, quiero que me ayudes a detenerlo minutos antes de que se vaya del internado, hay que trasladarlo a los laboratorios de los pasadizos, solo va ser unos segundos, el microchip estará instalado en su cabeza y él no recordara nada.
Jorge le tendió la mano a Azucena y ella se la estrechó para cerrar el pacto entre los dos.
Germán siguió caminando, sin saber nada de la emboscada que le tenían preparada Jorge y Azucena.
Mientras en la cocina, Nuria Destino, la cocinera, estaba preparando los platos del banquete de boda de Jorge y Lilian. Cuando un niño estudiante de unos 6 años, vestido con un pequeño smoking, entró a la cocina, él llevaba una pistola en la mano y apuntó con ella a la cocinera.
niño: en nombre de la organización secreta del crimen.
Nuria: niño, qué haces? deja de jugar! que es? una pistola de agua?
niño: muérete!
Y el niño disparó, dejando a Nuria herida y huyendo de la cocina con su pistola.
Germán que pasaba por ahí cerca, oyó el disparo, vio salir al niño armado de la cocina, y entró a ella encontrándose a Nuria agonizando.
Germán: dios mío! Nuria, háblame, háblame!
Nuria: el niño! ese maldito crío me ha disparado! ha hablado no sé de que una organización secreta del crimen... qué es esa organización? de qué hablaba?
Germán: tranquila, vas a vivir, me oyes? te llevaré conmigo, tú serás mi aliada en la organización secreta de la justicia.
Germán la cogió en brazos y salió con ella del internado.
Germán la colocó en el asiento trasero del coche larga, él se puso en el asiento del conductor, y arrancó el coche, pero... éste no se movía...había algo que lo detenía, fuera, Azucena usaba su superfuerza para agarrar el coche por el parachoques, e impedir que éste se largara, Azucena levantó el coche por los aires, lo hizo rodar y lo tiró lejos muy lejos, como si se tratara de un balón de futbol, consiguiendo que Germán perdiera el conocimiento delante del volante.
Tras el accidente de coche provocado por Azucena, ella y Jorge se encontraban en los laboratorios, vestidos con mascarillas, gorro y bata verde, listos para operar, sobre dos camillas estaban Nuria y Germán.

FIN DEL CAPITULO 2