INTERNOS-serie inspirada en el internado. Serie completa y terminada.

Jerónimo al escuchar eso volvió a salir al bosque, ahora estaba seguro que a Carlota le había pasado algo grave, recordó el momento en que se dieron su primer beso, como ella había estado a punto de caerse a la cascada, como él la había salvado y lo que se habían dicho. "me has encontrado" recordaba que le había dicho ella entonces, "sí, y te encontraré siempre", recordaba haberle contestado él, y tenía que encontrarla, como fuese.
Jerónimo caminó durante horas y horas por el bosque, subió a lo alto de las rocas de la cascada y se asomó tanto al vacío, que resbaló y cayó al agua, pero... afortunadamente Jerónimo era muy buen nadador, por eso al caer al agua él nadó, y nadó, y de repente, algo frío vino flotando hacia él, el cuerpo de una persona, él nadó en círculos intentando acercarse más para verle la cara, hasta que para su desgracia, le vio el rostro y reconoció a... al cuerpo de su novia Carlota sin vida.
Jerónimo muy asustado salió del arroyo, y volvió al internado empapado.
Varias horas después... Jerónimo estaba sentado en una mesa de la biblioteca, cuando sus otros dos amigos llegaron y se sentaron al lado de él.
Joaquín: eh Jerónimo alegra esa cara! qué te pasa?
Jacobo: sí, estás muy pálido, ni que hubieras visto a un muerto.
Jerónimo: he encontrado a Carlota.
Joaquín: de verdad? dónde estaba? has hablado con ella?
Jerónimo: no creo que esté precisamente ahora en condiciones de hablar con alguien.
Jacobo: qué pasa? es que habéis discutido?
Jerónimo: no habido tiempo para ello, ella... ella está muerta, recordé que habíamos quedado al borde la cascada de la virgen y fui a buscarla, y me he encontrado su cuerpo flotando en el arroyo.
Joaquín: qué clase de broma es esa?
Jerónimo: ya me gustaría a mí que fuese una broma, de verdad creéis que yo sería capaz de bromear con algo así?
Jacobo: crees que ha sido un accidente? no sé, igual Carlota fue al bosque para buscarte a ti y ella se dio un golpe en las rocas de la cascada o algo...
Jerónimo: no, no ha sido un accidente, ha sido un asesinato y la directora tiene algo que ver, y no sé si su hija también.
Joaquín: por qué dices eso?
Jacobo: sí, por qué?
Jerónimo: porque le pregunté a la directora por Carlota, y me dijo que se había fugado del colegio con un chico que había venido a buscarla en moto, y que ella había visto con sus propios ojos como se iban.
Joaquín: esto es muy extraño, mi padrastro es policía, si la cosa se pone más fea podíamos llamarle.
En ese instante una chica pasó por delante de ellos tres mirándoles raro. Jacobo que se dio cuenta del detalle se dirigió hacia ella.
Jacobo alzó la voz al hablar con ella tan fuerte, que todos los demás alumnos del internado que se encontraban en ese momento en la biblioteca les escucharon.
Jacobo: estoy harto ya! estáis todo el día observándonos y cuchicheando entre vosotros, como si fuéramos conejillos de indias de algún experimento! se puede saber qué pasa!
chica: perdonar, yo no pretendía molestar, es solo que como se comenta en el internado que ya no sois amigos entre vosotros, pues me extraña veros juntos, pero nada más, es solo eso.
Y así la chica sin decir nada más se apartó de ellos y se sentó en una mesa, acompañada de otros alumnos.
Jacobo se sentó al lado de sus amigos.
Jacobo: ese rumor que circula sobre que nosotros hemos dejado de ser amigos ya me está empezando a cabrear, ya es la segunda vez que lo escuchamos en el día de hoy, aquí pasa algo, y ya estoy harto de quedarme con los brazos cruzados sin hacer nada.
Las horas seguían pasando... lentas... muy lentas...
Los chicos estaban en otra clase, presenciando unas diapositivas con la luz apagada, cuando Eugenia se acercó a Joaquín y le susurró por detrás.
Eugenia: Joaquín, tengo algo que decirte.
Joaquín: no me hablo contigo, olvídame ya.
Eugenia: es importante, es sobre Jerónimo y Jacobo, por favor, si te preocupa en algo la vida de tus amigos, ven a mi habitación al terminarse las clases, te juro que es importante.
Joaquín: algo sobre Jerónimo y Jacobo? está bien, iré. Pero como sea mentira algo de lo que me estás contando, te juro que me lo tendrás que pagar de alguna forma.
La clase se terminó. Joaquín, Jerónimo y Jacobo salieron los tres juntos, pero Joaquín sin que los otros dos se diesen cuenta, miró de reojo a Eugenia, que dobló la esquina contraria a ellos tres y desapareció caminando por el pasillo.

Tras pasar unos cuantos minutos más... Joaquín se presentó delante de la puerta de la habitación de Eugenia.
Antes de que él tuviera tiempo de golpear, la puerta se abrió, era Eugenia.
Eugenia: pasa, sabía que vendrías.
Joaquín: estás sola?
Eugenia: sí.
Joaquín: pues si no te importa prefiero quedarme en la puerta, dime lo que tengas que decirme rápido que tengo prisa.
Eugenia: insisto en que tendrías que entrar, dentro podemos hablar más cómodos.
Joaquín: no, aquí afuera estoy muy bien, gracias.
Eugenia: qué pasa Joaquín? no va a pasar nada que ninguno de los dos quiera que pasé, de qué tienes miedo?
Joaquín entró dentro del dormitorio de Eugenia. Y Eugenia cerró la puerta tras él.
Eugenia: lo siento mucho.
Joaquín: él que sientes?
Eugenia: que tus amigos y tú os hayáis peleado, a veces es muy difícil mantener una amistad.
Joaquín: perdona, no sé que habrás oído por ahí, pero todo marcha fenomenal entre Jacobo, Jerónimo y yo.
Eugenia: claro, es que tú no lo sabes.
Joaquín: qué es lo que no sé?
Eugenia: lo que Jerónimo y Jacobo andan diciendo por ahí de ti... es muy duro... yo lo sé Joaquín... a mí me ha pasado más de una vez, es muy duro ser el blanco de los rumores de todos los compañeros de tu clase, por eso quería que hablaras conmigo, sé que en estos momentos necesitaras a alguien en quien apoyarte, y quería que supieras que puedes encontrar consuelo en mí.
Eugenia se acercó a Joaquín y le puso una mano encima de uno de sus hombros.
Joaquín dudó por un instante, pero... él levantó su mano en dirección a la de Eugenia y retirándosela de su hombro, le dijo muy serio.
Joaquín: yo no necesito consuelo de nadie, porque es mentira que mis amigos me hayan traicionado y hayan hablado mal de mí, y en caso de que lo necesitara, ten por seguro que no recurriría a ti.
Joaquín se dirigió hacia la puerta del dormitorio, la abrió y dijo.
Joaquín: no tengo ni idea de lo que pasa aquí, desde que Jerónimo, Jacobo y yo hemos llegado a este internado, que te has acercado a nosotros con intenciones más que sospechosas, al principio creía que eran imaginaciones mías, pero ahora... no sé, por qué tienes tanto interés en que Jacobo, Jerónimo y yo, nos llevemos mal? es como si quisieras que trabajáramos cada uno por nuestra cuenta para así poder estar indefensos a los ataques.
Eugenia: que tonterías estás diciendo! qué ataques Joaquín?
Joaquín: no lo sé, eso dímelo tú Eugenia, ya que tú pareces saberlo mejor que yo, yo lo único que tengo que decirte, es que no me importa lo que pasé de ahora en adelante, porque confío en la amistad de Jacobo y Jerónimo y óyeme bien, porque hoy y siempre te repetiré que nadie va a separarnos.
Y sin decir nada más, Joaquín se fue de la habitación de Eugenia.
Al salir Joaquín, se cruzó con una chica que entraba en la habitación de Eugenia en ese mismo instante, la chica cerró la puerta tras ella y dijo.
chica: Ese era Joaquín? que raro que estuviera en esta habitación contigo Eugenia, me extraña mucho que te haya perdonado que tú hayas estado con su amigo Jacobo y él, en una misma noche.
Eugenia: cómo sabes tú eso?
chica: lo leí en tu diario-dijo ella sacándolo de debajo de su almohada y abriéndolo-hay historias muy suculentas aquí, tienes una vida de lo más ajetreada...
Eugenia al verlo, se lo arrebató enseguida de las manos y salió corriendo de la habitación.
chica: eh!! devuélvemelo!! todavía no he terminado de leerlo!!-dijo ella persiguiéndole corriendo por todo el internado.
Eugenia corrió, y corrió.
La chica le persiguió hasta el bosque, Eugenia corrió, hasta que se detuvo en un claro, se arrodilló, cavó un pequeño hueco en la tierra con sus manos, y enterró el diario allí.
Eugenia se alejó caminando volviendo al internado.
La chica esperó tras un árbol a que ella se alejara, después fue ella hasta el hueco cavado, volvió a abrir el agujero en la tierra con sus manos y encontró el diario, pero cuando lo abrió, descubrió para su sorpresa, que sus páginas estaban vacías, Eugenia había enterrado allí en el bosque un diario igual al anterior falso para despistar, y se había llevado con ella el verdadero, la chica al darse cuenta de ese detalle, tiró el diario falso al suelo y chilló muy enfadada:
chica: maldita sea!!
Así, Eugenia se encontraba de nuevo en el interior del despacho de su madre, para entregarle el diario verdadero.
Eugenia: toma mamá, aquella chica lo encontró y lo leyó, por suerte no descubrió nada importante, yo pude reaccionar rápido y quitárselo de las manos, pero solo por las moscas, es mejor que te lo quedes contigo.
La directora cogió el diario de las manos de su hija.
directora: supongo que a mí no me prohibirás leerlo, tus secretos también me incumben a mí, has tenido una imprudencia muy grande al escribirlos en un diario y dejarlos a la vista de los demás.
Eugenia: lo siento, necesitaba desahogarme, pero ahora ya está todo solucionado.
directora: por suerte Antonio me ayudo mucho a deshacerme de Carlota, no tendrás ningún remordimiento de conciencia por la muerte de ella, verdad?
Eugenia: no, por supuesto que no mamá, ninguno.

FINAL DE LA PRIMERA TEMPORADA


Así llega a su fin la primera temporada de esta miniserie INTERNOS.
Espero que tengáis ganas de saber como continua la segunda temporada.
Personajes nuevos aparecerán y nuevas aventuras les esperan a los que ya conocemos.
no os lo perdáis, porque seguro que os sorprenderá.

SEGUNDA TEMPORADA

1. UN NUEVO AMOR
2. LAS PRUEBAS MÉDICAS
3. LA CASCADA
4. LA VERDAD
5. LA PRIMERA VEZ JUNTOS

PRIMER CAPITULO DE LA SEGUNDA TEMPORADA

UN NUEVO AMOR

Dentro del internado nuestra señora sagrada de la cruz, los días parecían pasar aburridos y sin emociones, pero todo el mundo debería saber ya que por lo general las apariencias siempre suelen engañar.
Eugenia, estaba una vez más dentro del despacho de su madre, ellas dos no estaban solas, había con ellas una chica de 16 años, con el pelo lacio, largo y castaño, con los ojos color miel avellana, ésta chica se llamaba Esther, era una nueva alumna del internado, que ocupaba el sitio de Carlota en la escuela.
Mientras Esther se dedicaba a curiosear en silencio por el despacho las estatuillas de innombrable valor, Eugenia y su madre, hablaban.
Eugenia: ya le he comentado a Esther, mi nueva compañera de cuarto, la gran mayor parte de la que se compone nuestro plan, es mejor que esté enterada desde el principio de la operación, así nos evitaremos problemas posteriores como ocurrió en el caso de Carlota.
directora: estás segura que podemos confiar en ella?
Eugenia: le he prometido una sustanciosa cantidad de dinero por su silencio, no es necesario que colabore con nosotros, me conformo con que se quede callada.
directora: no sé, tú fuiste la que decidiste meter a la nueva en esto, pero... y si abre su bocaza y lo va soltando todo por ahí... es muy arriesgado.
Eugenia: más arriesgado es tener que actuar y acercarnos a los chicos escondiendo a los demás nuestras verdaderas intenciones, y si a eso añades el hecho de tener a alguien constantemente haciéndote preguntas puede ser aterrador... si Esther habla, prometo hacerme responsable de todo.
directora: de todas maneras ahora ya está hecho, además en toda mi vida nadie ha podido derrotarme y no va a conseguirlo una insignificante niñita de 16 años.
Entre tanto... en la habitación de los tres chicos Jerónimo, Jacobo y Joaquín.
Jacobo y Joaquín habían empezado a desperezarse para levantarse y empezar el día.
Jacobo y Joaquín se frotaron los ojos, se destaparon de las sábanas de las camas, se pusieron los pantalones del uniforme y las sudaderas y se ataron los cordones de los zapatos casi al mismo tiempo, miraron hacia la cama de Jerónimo, pero ésta estaba vacía e intacta, entonces dirigieron sus miradas hacia el pupitre y vieron a Jerónimo sentado en la silla, con la cabeza apoyada sobre sus brazos con las manos entrelazadas, sobre la mesa, Jerónimo tenía los ojos cerrados y descansaba sobre un bloc de dibujo.
Jacobo se acercó hacia su amigo, y con mucho cuidado de que no se despertara, le quitó las hojas del bloc de dibujo.
Jacobo: al parecer Jerónimo ha pasado otra noche en vela dibujando a Carlota, será mejor que vayamos a clase sin él esta mañana, debe estar muy cansado.
Joaquín: sí, pobre, me pregunto cuanto tiempo necesitara para aceptar que Carlota ya no está entre nosotros-dijo él poniendo una de sus manos sobre el hombro de Jerónimo-descansa amigo.
Joaquín cogió su mochila, Jacobo metió los libros dentro de la suya y los dos salieron de su habitación, cerrando la puerta muy despacio para no despertar a Jerónimo.
La clase aquella mañana estaba muy escandalosa, cuando Jacobo y Joaquín ocuparon sus sitios el barullo entre los alumnos pareció aumentar, ellos dos sacaron sus cuadernos y los abrieron sobre la mesa, a la clase entraron en ese instante Eugenia acompañada de la nueva alumna, Esther.
Esther y Eugenia se sentaron, Eugenia bostezó, una alumna se levantó para cerrar la ventana. Cuando en ese instante entró por la puerta la directora seguida muy de cerca por una mujer que nadie conocía.
directora dando palmas: ir tomando vuestros asientos por favor? la clase va a comenzar, como sabéis esta es la clase de ingles, yo hasta ahora era la maestra pero eso era hasta que pudiera venir alguien con el nivel adecuado para sustituirme, que por fin ha llegado, os presento a la nueva profesora, ha pasado la mayor parte estudiando en nueva york así que posee un gran conocimiento del idioma.
La directora se dirigió hacia la mujer desconocida.
directora: Margarita, la clase es toda tuya.
Así la directora abandono el aula.
En cuanto la directora salio y Margarita ocupó su puesto como profesora en la clase, Jacobo y Joaquín se fijaron en ella de inmediato, era la única mujer en la que se interesaban después de lo sucedido con Eugenia.
Jacobo se acercó a Joaquín y le susurró.
Jacobo: te has fijado que belleza de mujer? que ojos, que sonrisa, es que lo tiene todo, ni que los reyes magos se hubiesen adelantado a mi pedido.
Joaquín: tú cállate que yo la he visto antes.
Jacobo: sí, pero yo voy a ser quien se lleve el premio.
Joaquín: eso será si yo te dejo el camino libre, cosa que no voy a hacer.
Jacobo: ni falta que me hace, yo siempre cojo los atajos en todas mis conquistas.
Joaquín: ah sí? en serio? pues a ver como consigues llevártela a tu habitación antes de que suene la campana, si lo logras igual te ofrezco alguna ventaja con ella.
Jacobo: de acuerdo, es un trato.
Jacobo levantó la mano para llamar la atención de la profesora.
Margarita: sí? alguna duda?
Jacobo: muchas-dijo él bajando la mano- soy muy torpe para el ingles.
Margarita: voy a poner unas frases en la pizarra para que las traduzcáis, podéis utilizar el diccionario como ayuda, yo iré pasando por las mesas para corregir las traducciones.
Margarita anotó las frases escritas en ingles en la pizarra.
Todos empezaron a escribirlas en sus cuadernos.
La profesora cuando terminó pasó por las mesas para ver lo que iban escribiendo sus alumnos, ella llegó a la mesa de Jacobo.
Margarita: qué? te vas aclarando o necesitas ayuda?
Jacobo: la verdad es que con ayuda sería mejor, estas frases son muy complicadas de traducir.
Margarita: voy a hacer una excepción contigo, repásate y léete las lecciones 4 y 5 del libro, deja las traducciones para después, para cuando vaya a tu cuarto a la tarde.
Jacobo: a mi cuarto?
Margarita: sí, para estudiar en un ambiente más cómodo, te parece bien?
Jacobo: sí, sí, todo sea por aprobar el curso.
Jacobo abrió el libro por la lección 4 y comenzó a leer. Margarita se volvió a acercar a su mesa de profesora y se sentó delante de toda la clase a observarla.
Jacobo se acercó a Joaquín y le susurró.
Jacobo: te lo digo para que no se te olvide, Margarita se acaba de auto invitar a mi habitación, qué dices a eso, eh?
Joaquín: no te hagas ilusiones, ha dicho que solo era para estudiar.
Jacobo: lo sé, pero por algo se empieza...
Lejos de las clases de los alumnos... en otras zonas del internado...
En la cocina... estaba Gloria ordenando las estanterías y los armarios, con otra compañera que estaba secando con un trapo los cubiertos y los vasos. Cuando entró a la cocina el marido de Gloria, Antonio, el conserje del lugar.
Antonio al entrar cogió por detrás por la cintura a su mujer y le dio un beso en la mejilla.
Antonio: Gloria cada día que pasa estás más guapa, a veces me parece increíble que estés casada conmigo.

Gloria: esta mañana te has levantado de muy buen humor.
Antonio: contigo al lado todas las mañanas son extraordinarias.
Gloria dejó por un momento de ordenar al oír aquello, y se acercó a su marido para besarle, agradeciéndole el piropo.
La otra doncella empezó a toser para que los otros dos se separaran e interrumpieran su largo beso.
Gloria se separó de su marido y siguió trabajando.
Antonio: mi amor, he pensado que podíamos irnos este fin de semana a un hotel los dos juntos y a solas, te parece bien?
Gloria: no sé, tengo mucho trabajo aquí, el fin de semana estaré molida y necesitare dormir muchas horas seguidas.
Antonio: vamos mujer trabajamos mucho durante toda la semana, necesitamos un descanso.
Gloria: déjame pensarlo, ya te diré algo.
Antonio: de acuerdo, te dejó el panfleto de publicidad del hotel luna creciente, tú míralo, ya veras que vistas.
Y así Antonio salio de la cocina.
La doncella, compañera de trabajo de Gloria, dejó de secar los cubiertos y los vasos, y se acercó a ella, ella cogió el panfleto de publicidad del hotel.
doncella: este hotel es de cinco estrellas, vais a ir tu marido y tú?
Gloria: no lo sé, tengo muchas cosas que hacer.
doncella: ya, como por ejemplo... perseguir a ese alumno tan joven y guapo que te hace perder la cabeza?
Gloria: deja ya el tema de Jacobo, él es inalcanzable para mí, además a mí él ya no me importa. Yo estoy muy enamorada de mi marido.
doncella: si tan enamorada estás porque dudas en irte a pasar el fin de semana con él al hotel de cinco estrellas?
Gloria: ya te lo he dicho, porque estoy cansada, este internado es muy grande y cuesta mucho mantenerlo limpio.
doncella: seguro que es por eso y no es por Jacobo?
Gloria: seguro.
doncella: de acuerdo, si insistes en negarlo.
Y así la doncella compañera de trabajo de Gloria, dejó el panfleto del hotel y volvió a su trabajo con los vasos y los cubiertos.
Mientras Jacobo y Joaquín habían dado por finalizada su clase de ingles esa mañana, ellos regresando a su habitación, entraron por la puerta en ese preciso instante...
Jacobo: reconócelo Joaquín, tengo mejor mano con las mujeres que tú.
Joaquín: quieres callarte ya? mira que estás pesado con el tema, eh? solo te ha dicho que vendría a ayudarte con las traducciones, tampoco es para tanto...
Jacobo: tú estás celoso porque yo voy a poder estar a solas con Margarita y tú no.
Joaquín: ya me he hartado de tu prepotencia! quieres pelea?
Jacobo: donde quieras y cuando quieras.
Joaquín: ahora mismo, vamos al patio trasero a boxear, quien gane se queda con Margarita.
Jacobo: ves tú delante, yo te sigo.
Los chicos alzaron sus voces tan fuerte al discutir que despertaron a Jerónimo, que todavía seguía durmiendo con su cabeza apoyada sobre la mesa del pupitre de la habitación. Jerónimo se despertó bostezando.
Jerónimo: chicos!!, que son esos gritos? cuál es el escándalo?
Joaquín: Jerónimo tío, te hemos despertado? lo siento, ha sido sin querer.
Jerónimo: no importa. qué hora es? ya han empezado las clases?
Jacobo: sí, deberías haber estado en la clase de ingles de hoy, ha venido una profesora nueva que está como un tren, se llama Margarita.
Jerónimo: en serio? de verdad está tan buena esa profesora?
Joaquín: Margarita parece sacada de una revista de moda, sus ojos son tan azules, tanto, que cuando los miras te pierdes en ellos...
Jerónimo: oh no!! tú también Joaquín? no me digáis que los dos os habéis fijado en la nueva profesora de ingles, en serio me estáis empezando a preocupar, no sé como os lo montáis siempre para fijaros en la misma chica, el mes pasado fue Eugenia, y este mes Margarita, al mes que viene a quien le va a tocar, a Loli la cocinera?
Jacobo: no te lo tomes a broma Jerónimo, lo de Margarita va en serio.
Joaquín: sí, ahora mismo Jacobo y yo íbamos a salir a boxear al patio trasero para disputarnos el amor de Margarita.
Jerónimo: chicos, dejaros de tonterías, de verdad todo esto vale la pena solo por Margarita?
Jacobo y Joaquín se miraron a los ojos con rabia.
Jacobo: tú haces de arbitró Jerónimo.
Y así Jacobo y Joaquín salieron de la habitación.
Jerónimo: chicos esperar!! esperarme!!-dijo Jerónimo yendo tras ellos.
Una vez llegaron los tres al patio trasero, Jacobo y Joaquín comenzaron a darse puñetazos y Jerónimo se sentó encima del muro a obsérvalos.
En ese instante pasó por ahí Eugenia.
Ella observó la pelea entre Joaquín y Jacobo, y se sentó en el muro al lado de Jerónimo.
Eugenia: a estos dos qué les pasa?
Jerónimo: Margarita es lo que les pasa.
Eugenia: Margarita? hablas de la nueva profesora de ingles? no me digas que Jacobo y Joaquín están interesados en esa profesora repipi que viene de nueva york?
Jerónimo: te noto un poco celosa.
Eugenia: celosa yo? por qué?
Jerónimo: no sé, porque hace un mes que te acostaste con Jacobo y Joaquín en la misma noche y desde entones ellos no te han vuelto ni a mirar?
Eugenia: solo es temporal, un día u otro conseguiré que Joaquín me vuelva a mirar de la misma forma que lo hacía el primer día que llegó a este internado y me conoció.
Jerónimo: con esa nueva profesora de ingles andando por aquí cerca? permíteme que lo dudé.
Eugenia furiosa se alejó de ellos tres.
Jerónimo siguió observando el combate de sus dos amigos, hasta que se hartó y fue a separarles.
Jerónimo: chicos, vale, basta ya, ya está bien por hoy!! podéis hacerme un favor?
Jacobo: cuál?
Joaquín: por ti lo que sea.
Jerónimo: vale pues... si queréis pelearos por Margarita adelante, pero... que no sea delante de mí, de acuerdo?
Jacobo: por mí vale.
Joaquín: por mí también.
Jerónimo: menos mal! y ahora daros la mano, el combate se ha acabado.
Joaquín y Jacobo se dieron la mano ante la mirada vigilante de su amigo Jerónimo.
En aquellos momentos Gloria se encontraba en el segundo piso del internado empujando su carrito de la limpieza, limpiando cada uno de los dormitorios.
Gloria limpió dos habitaciones que estaban vacías. Llegó a la tercera, y se disponía a entrar a ella, pero al abrir la puerta se dio cuenta que en esta habitación, estaba una persona, Margarita, la nueva profesora de ingles.
Gloria: lo siento.
Margarita: no, no importa, yo ya me iba. Puedes pasar a limpiar.
Gloria: seguro? puedo volver después.

Margarita: sí seguro, he quedado con un alumno su cuarto para estudiar. Y más vale que vaya ya para ya porque luego no voy a tener tiempo para nada. He estado revisando el historial de este alumno, la verdad es que no tiene muy buenas notas, los demás profesores no hablan muy bien de él, casi todos ellos dicen que Jacobo Mesón se distrae demasiado en las clases.
Gloria al oír ese nombre se quedo perpleja. No sabía porque, pero por alguna extraña razón, no le hacia demasiada gracia que Jacobo estuviera en su habitación a solas con esa profesora.
Margarita caminó por el pasillo y fue directa a la habitación de Jacobo.
Al rato llegó Jacobo con el ojo un poco hinchado de la pelea que había tenido con Joaquín.
Margarita: Jacobo? qué te ha pasado?
Jacobo: nada, un resbalón tonto, empezamos a estudiar?
Margarita: sí claro.
Jacobo se sentó en su pupitre y sacó sus libros de ingles.
Jacobo y Margarita escribieron anotaciones en el cuaderno.
Jacobo: y... aparte de dar clases de ingles? qué haces en tu tiempo libre Margarita?
Margarita: oh!!me encanta la fotografía, aquí cerca hay una cascada increíble, sería un placer ir a sacarle un día de éstos algunas fotos.
Jacobo: yo podía acompañarte si no te molesta.
Margarita: creo que será mejor para ti que te dediques un poco más a tus estudios.
Jacobo: sí claro, a estudiar, después de todo, para eso estamos aquí.
En ese instante entró con el carrito de la limpieza Gloria, al cuarto de Jacobo.
Jacobo extrañado al verla entrar se giró hacia ella.
Jacobo: Gloria, estamos estudiando.
Margarita: no estabas ahora mismo limpiando mi cuarto? tan rápido has terminado?
Gloria: no, solo es que acabo de recordar que primero tengo que limpiar el ala oeste, luego el ala sur, el ala norte y ya por último los cuartos del ala este. Y su cuarto, está en el ala este, así que es el último que me toca por limpiar, Lo que pasa es que me he equivocado en el orden y he puesto el último cuarto en primer lugar, pero este cuarto es él que tengo que limpiar antes que el suyo-dijo ella contestándole a Margarita.
Margarita: ah! de acuerdo si tú lo dices, pero... no podías volver después? más tarde cuando acabemos la clase?
Gloria: no, tengo que limpiar este cuarto exactamente a las 10: 47-dijo ella mirándose el reloj de pulsera que tenía puesto en su muñeca-si lo limpio a otra hora puede ocurrir una catástrofe.
Margarita: ah! de acuerdo, pues hágalo sin armar ruido, Jacobo y yo intentamos estudiar.
Gloria: claro.
Mientras Jacobo y Margarita seguían haciendo los deberes de ingles y Margarita se inclinaba hacia Jacobo acercándose más a él, Gloria fue limpiando las estanterías para disimular, mientras miraba de reojo a Jacobo.
Gloria sacó los libros de las estanterías, pero en vez de hacerlo con cuidado, fue cogiéndolos uno a uno tirándolos como proyectiles sobre las cabezas de Jacobo y Margarita.
Jacobo y Margarita agacharon las cabezas.
Jacobo: eh!! se puede saber qué haces?
Jacobo cogió los libros del suelo y se los dios a Gloria.
Jacobo: si sigues así nos podías sacar un ojo! es que no sabes limpiar tratando mejor los libros?
Gloria: sí.
Jacobo: pues hazlo!!
Gloria siguió limpiando las estanterías, pero ésta vez de forma correcta y Jacobo siguió estudiando con Margarita.
Gloria tuvo otra idea para molestarles.
Gloria cogió la cama y empezó a moverla de sitio arrastrándola.
Jacobo: Silencio! sé puede saber qué haces?
Gloria: cambiar los muebles de sitio, es para que la habitación tenga mejor energía positiva-dijo Gloria alejándose de la cama-Jacobo, si te puedes levantar de la silla, por favor?
Jacobo se levantó de la silla muy extrañado y Gloria arrastró la mesa, Margarita un poco sorprendida le ayudó.
Gloria: gracias. Y ahora Jacobo si me ayudaras a mover el armario me sería más fácil seguir con mi trabajo.
Jacobo: qué? estás loca?
Margarita se cruzó de brazos y sin darse cuenta miró la hora de su reloj de pulsera.
Margarita: dios mío! que tarde es ya! tengo que irme, de verdad Jacobo que me gustaría ayudarte, pero no puedo quedarme más tiempo...
Margarita se fue de la habitación.
Jacobo: Margarita espera, espera, si todavía no hemos terminado, vuelve.
Pero Margarita se acabo alejando.
Y Gloria se quedo a solas con Jacobo en la habitación.
Gloria: yo... creo que ya he terminado. que te aproveche el estudio.
Jacobo: Gloria espera, y los muebles qué has movido qué? te vas a ir así sin más, dejándolo todo patas arriba?
Gloria: pues... sí.
Y Gloria empujando su carrito de la limpieza salió de la habitación.
Gloria bajó las escaleras hacia el primer piso a toda prisa.
Gloria entró en la cocina donde estaba la doncella, compañera suya de trabajo.
Gloria: que ridículo madre mía! que ridículo acabo de hacer!
doncella: Gloria, qué ha pasado? de qué estás hablando?
Gloria: estaba limpiando las habitaciones de arriba, cuando he entrado en el cuarto de la nueva profesora de ingles, nos hemos puesto a hablar un rato y ella ha dicho que se iba a pasar por el cuarto de Jacobo para ayudarle a subir las notas del curso...
doncella: y?
Gloria: que no sé que me ha pasado, pero no quería que Jacobo estuviera a solas en su habitación con esa profesora, por eso he ido al cuarto de Jacobo y he hecho ver que limpiaba la habitación para poder tener una excusa y así poder quedarme presente, mientras la nueva profesora y él estaban dentro.

doncella: no me lo puedo creer.
Gloria: pues créetelo porque es verdad, pero como Jacobo estaba de lo más encantando mirando a los ojos de Margarita pues yo he tenido que hacer algo para hacerme notar.
doncella: y qué has hecho?
Gloria: cambiar de sitio todos los muebles de la habitación.
doncella: no!
Gloria: sí, y me he largado dejándolo todo tal cuál, sin volverlo a poner en su sitio.
doncella: Y Jacobo qué ha dicho?
Gloria: nada, se ha quedado mirándome, pobre chico, no sé lo que estará pensando ahora mismo de mí.
doncella: qué estás loca por él, si después de todo el show que dices que has montado en su habitación no se ha dado cuenta de nada, es que es tonto de remate.
Gloria: no sé porque lo he hecho, se supone que yo soy una mujer casada, mi matrimonio con Antonio va bien, por qué hago estas cosas?
doncella: hombre, hay que reconocer que el chico se lo merece, porque tiene un cuerpazo...
Gloria: tengo que olvidarme de Jacobo, tengo que quitármelo de la cabeza como sea, como sea...
En ese instante Gloria y la doncella vieron como Jacobo bajaba por las escaleras y se dirigía directamente a la cocina, él entró a ella sin titubear ni un solo segundo.
Gloria: eh que haces? habíamos quedado en que si yo estaba dentro de la cocina, tú te tenías que quedar afuera, para marcar distancias entre los dos, no te acuerdas?
Jacobo: pues he decidido que me voy a saltar la regla esa de no entrar a la cocina cuando tú estés dentro, porque tú allí arriba en mi habitación te has saltado todas las reglas entre nosotros. Se puede saber a que ha venido tal espectáculo? qué es eso de que tenías que limpiar mi habitación exactamente a las 10:47 porque sino iba a ocurrir no sé que catástrofe? Conozco a una mujer interesante, consigo estar con ella unos minutos a solas en mi cuarto y tú te presentas por sorpresa y me lo arruinas todo, por qué lo has hecho?
Gloria: será mejor que te vayas Jacobo-dijo ella bajando la cabeza e intentando alejarse de él.
Jacobo: Gloria espera!
Jacobo se dirigió hacia Gloria y colocando su mano sobre la pared de la cocina, la acorraló sin dejarla salir, él se acercó a su oído y le susurró.
Jacobo: no hace falta que me expliques porque has actuado de esa forma en mi habitación porque yo ya sé porque lo has hecho Gloria. Deja de disimular que estabas celosa de Margarita, no tienes porque esconderte ante mí. deja de preocuparte por si alguien se acerca a mí, porque tú a mí me interesas más, que cualquier otra que conozca o pueda llegar a conocer. Te espero en cinco minutos en mi habitación.
Jacobo le dio un beso en la mejilla, se apartó de ella y salió de la cocina, pero antes de irse la miró una última vez, guiñándole un ojo. Así Gloria se quedó en la cocina a solas con su compañera de trabajo, quién lo había presenciado todo y dijo en tono de comentario sarcástico.
doncella: Jacobo es inalcanzable para mí-dijo ella imitando la voz de Gloria-pues... yo no sé tú, pero yo no lo veo tan inalcanzable eh?
Gloria: qué hago? qué hago? dios mío!
doncella: subir a la habitación de Jacobo? ha dicho que te espera en cinco minutos, no?
Gloria: sí, crees que debería cambiarme de ropa antes? no! pero que estoy diciendo! no tengo que ir a ninguna parte! si mi marido se entera de esto! voy a quedarme aquí y a olvidarme de lo que acaba de pasar...
doncella: no creo que sea una buena idea, si tardas mucho en subir Jacobo podía impacientarse y bajar a buscarte...
Gloria: no creo que haga eso...tengo mucho trabajo que hacer en la cocina, ahora mismo me sería imposible ir a ninguna parte.
Mientras... en la habitación Jacobo... estaba esperando a Gloria... cuando llegó su amigo Jerónimo y entró.
Jerónimo: hola Jacobo, qué, ya se ha acabado la cita con Margarita?
Jacobo: qué cita? no era ninguna cita, solo habíamos quedado para estudiar.
Jerónimo: qué? no habías dicho que la profesora de ingles estaba como un tren?
Jacobo: da igual, ahora eso ya no me importa, puedes irte, estoy esperando a alguien.
Jerónimo: a quién?
Jacobo: a alguien que no va a venir.
Y Jacobo salio de la habitación.
Jerónimo: espera Jacobo, a donde vas?
Pero Jacobo no le escuchó. Jacobo volvió a bajar a la cocina a buscar a Gloria.
Gloria: Jacobo, qué haces aquí otra vez? vete por favor.
Jacobo: creía que habíamos quedado en vernos en mi habitación, por qué no has venido?
Gloria: Jacobo, no puedo subir a tu habitación.
Jacobo: por qué no?
Gloria: porque... porque... bueno en realidad es porque no quiero, no quiero ir contigo a tu habitación Jacobo.
Jacobo: qué, cómo qué no quieres? a ti esto te parece bonito? por qué me haces creer que quieres algo que no quieres?
Gloria: lo siento.
Jacobo: qué lo sientes? solo se te ocurre decir eso? Gloria, ésta es la última, la última vez que me voy a permitir pensar en ti. Olvídate de mí, igual como yo ya lo he hecho de ti.
Y Jacobo salió de la cocina.
Gloria: él tiene razón, tengo que olvidarlo.
Gloria se dio media vuelta hacia donde estaba su compañera de trabajo.
Gloria: dame el panfleto de publicidad del hotel luna creciente que me ha dado mi marido antes.
La compañera de trabajo se lo dio en mano.
Gloria mirando el panfleto.
Gloria: un fin de semana lejos de aquí con mi marido es lo que necesito, está decidido, me voy al hotel luna creciente.
Entre tanto... afuera del internado... en los alrededores del bosque...
Joaquín estaba al lado de la cascada tirando piedrecillas al arroyo.
Cuando vio de casualidad que Margarita la profesora de ingles estaba por esos parajes haciendo fotografías.
A Joaquín se le ocurrió entonces una idea para llamar su atención... él se zambulló en el arroyó fingiendo que se había caído y que no sabía nadar... cuando Margarita se acercó, se asustó, tiró la cámara sobre la hierba y se lanzó a rescatarle.
Una vez le había sacado del agua, estaban los dos empapados mirándose, estirados sobre la hierba del bosque.

Margarita: Joaquín, estás bien?-le preguntó ella.
Joaquín: sí, mejor que nunca.
Y antes de que a Margarita le diera tiempo a reaccionar, Joaquín se acercó a ella y la besó en los labios. En esos momentos, alguien más estaba en el bosque, Jacobo había recordado que a Margarita le gustaba la fotografía y que quería sacarle fotos a la cascada, así que se dirigió al bosque en su búsqueda. Pero... cuando Jacobo llegó al lugar, allí estaban Joaquín y Margarita, besándose delante de sus propios ojos.
Jacobo se quedó escondido detrás de unos arbustos mientras los espiaba, para que ninguno de ellos dos se diesen cuenta que él estaba allí.
Llegó la noche al internado nuestra señora sagrada de la cruz.
En la habitación de los chicos, Joaquín y Jacobo estaban durmiendo en sus camas.
Mientras Jerónimo estaba despierto, sentado en su pupitre, dibujando a Carlota en su bloc de dibujo, con una pequeña luz encendida para verse. Pasaron las horas, y Jerónimo volvió a quedarse dormido sobre el bloc de dibujo, se hizo de día, entró una corriente de aire de la ventana, una de las hojas del bloc se cayó de encima de la mesa y fue arrastrada hasta por la ranura de debajo de la puerta de la habitación, hacia el pasillo.
Jerónimo cuando notó el golpe de aire en su cara, se despertó, se dio cuenta que faltaba uno de sus dibujos, se puso de pie y caminó hacia la puerta, la abrió y respiró aliviado al ver el dibujo en el suelo del pasillo, se agachó a recogerlo. En ese momento, Margarita salió de su habitación, ella al ver a Jerónimo le dijo.
Margarita: buenos días-y se fue sin más.
Jerónimo al verla pasar, con el dibujo de Carlota en las manos, se fijó en el broche dorado que tenía puesto en su blusa de un ángel y recordó entonces algo.

comienzo de flash-back.

Jerónimo entró en la habitación de Carlota. Ella estaba en su pupitre escribiendo una carta.
Jerónimo se dirigió hacia ella y la besó en los labios.
Jerónimo: hola, qué haces mi amor?
Carlota: estaba escribiendo una carta para mi hermana mayor, desde que estoy estudiando en este internado que le mandó una carta todas las semanas, ella está estudiando en nueva york. Hoy es su cumpleaños, le mandó este broche de un ángel, porque eso es lo que ha sido ella para mí durante toda mi vida, mi ángel de la guarda.
Jerónimo: seguro que le gusta-le dijo Jerónimo sonriéndole.

fin del flash-back.

Al rato... en el hall del internado...Gloria y su marido Antonio se iban con el equipaje por la puerta del internado, mientras la directora y su hija Eugenia les observaban desde lejos.
Eugenia: que raro, Antonio se va de fin de semana a un hotel con su mujer...?
directora: es solo para guardar las apariencias con su esposa, cuando nuestro plan de resultados Antonio la dejara plantada y se quedara conmigo.
Eugenia: sí tú lo dices mamá.

FINAL DEL PRIMER CAPITULO DE LA SEGUNDA TEMPORADA

próximamente el segundo capitulo.

LAS PRUEBAS MÉDICAS

la segunda temporada de INTERNOS ya ha comenzado. Un nuevo personaje ha venido al internado, se trata de Margarita, una nueva profesora de ingles que se ha pasado toda su vida estudiando en Nueva york. Margarita viene al internado con unos objetivos muy claros y con un oscuro secreto sobre su pasado que nadie en el internado parece conocer. quién será esta misteriosa profesora? todo esto y mucho más en el próximo capitulo.

Vete mas lento k no lo esta leyendo ni dios, yo empeze, pero tu rapidez me desengancho

Pues yo si que lo estoy leyendo, me gusta mucho la historia Carolina :)

NUEVO CAPITULO

LAS PRUEBAS MÉDICAS

Los pasillos del internado nuestra señora sagrada de la cruz seguían llenos de gente y de historias por contar.
Ese día, la doncella, una trabajadora más del internado, estaba en la cocina escuchando las noticias en la radio, cuando Gloria entró por la puerta.
Gloria: qué, algo interesante que escuchar?
doncella: pues sí, bastante interesante, han dicho por la radio que un fiero león se ha escapado del zoológico esta mañana, y que lo están buscando para volverlo a encerrar.
Gloria: y?
doncella: te imaginas lo que sucedería si ese león viniera a parar aquí?
Gloria: vamos no tengas tanta imaginación, se escapa un león del zoológico y va a venir a molestar justo a este internado?, como sino hubiera más sitios... anda! que tienes la cabeza llena de pájaros...
En ese instante se vio una imagen del bosque del internado, de los árboles que lo rodeaban, y de toda su extensión, se oyó un rugido a lo lejos y un rabo peludo meneándose, y las zarpas de un león piso las ramitas que estaban expandidas por encima de la hierba del bosque...
Mientras eso sucedía en el exterior del internado, en su interior, en una habitación de una profesora, concretamente en la habitación de la nueva profesora de ingles Margarita, ella estaba mirándose ante el espejo, abrió los cajones de su mesita y se colocó el broche del ángel dorado sobre su blusa verde.
En el mismo cajón del cuál había extraído el broche, había unas cuantas fotos sueltas de niñas pequeñas, ella cogió una foto en donde salía una mujer mayor, acompañada de una niña y una adolescente.
Ella giró el dorso de la foto y vio que ponían en letras grandes.

MARGARITA -16 AÑOS
CARLOTA-6 AÑOS

Se volvió a ver el fondo de esa foto y una imagen borrosa se fue volviendo nítida tras las dos caras de las pequeñas que aparecían en la foto junto a la mujer mayor.

comienzo del flash-back

En el salón de una casa, un hombre con una maleta bajaba por las escaleras, la mujer le seguía en bata y en camisón, llorando y rogándole que no se marchara.
mujer: por favor no te vayas, por favor, por favor, haré lo que sea pero no te vayas...
marido: ya hemos hablado de esto miles de veces, ya no estoy enamorado de ti, no quiero seguir atado a esta familia, esta no es mi vida, aquí me ahogo y necesito marcharme a un lugar donde todo sea diferente.
mujer: me dejas por la pelandusca de tu secretaria! te has dejado seducir por un voluminoso pecho y a tu mujer y a tus hijas que les parta un rayo, verdad?
marido: déjame en paz! tú cada día te cuidas menos y estás más gruñona y menos atractiva, no puedo seguir toda la vida al lado de una mujer como tú!
El hombre salió a la calle y se subió al coche.
mujer: no puedes abandonarme! soy tu mujer, tienes dos hijas, tienes una familia de la que responsabilizarte!-dijo ella llorando.
En ese instante la hija mayor de 16 años (Margarita) bajaba en pijama por la escalera.
Margarita: mamá, qué pasa? a donde se va papá?-dijo ella mirando por la ventana como él se alejaba en su coche.
La mujer cerró la puerta, se sentó apoyada en el suelo a llorar. Su hija mayor se le acercó.
Margarita: mamá, qué te pasa eh? qué te pasa?
mujer: nada hija, nada, ves a despertar a tu hermana pequeña Carlota para ir al colegio.
Margarita subió por las escaleras. Mientras la mujer seguía llorando apoyada a la puerta, ella se metió la mano en el bolsillo de su bata, sacó un pote de pastillas, lo abrió, y se llevó un buen puñado de ellas a la boca, mientras sus lágrimas no dejaban de mojar la suave tela de su camisón.

fin del flash-back

Al rato, un aula estaba a rebosar de gente.
El profesor alzó su voz para hacer callar a los alumnos.
profesor: a ver!! supongo que ya todos tendréis pareja para el trabajo a entregar de la próxima semana! hay alguien que no esté emparejado?
En ese instante, dos alumnos levantaron la mano, ellos dos se miraron entre ellos, maldiciendo a las casualidades, ya que los únicos alumnos que quedaban libres sin pareja para el trabajo, no eran otros, que Joaquín Llarqué y Eugenia Soler.
Así, pasado un rato Eugenia fue al cuarto de Joaquín, ella golpeó a la puerta y mientras esperaba a que Joaquín la abriera, se arregló un poco el pelo.
Joaquín le abrió la puerta.
Joaquín: pasa, estaba buscando información en Internet.
Eugenia entró cerrando la puerta tras ella y Joaquín se sentó delante de su ordenador portátil que tenía sobre el pupitre de su habitación.
Eugenia tocándole el brazo a Joaquín, y disimulando mientras fingía mirar la pantalla del ordenador: sabes? me alegro de que nos haya tocado a nosotros dos hacer el trabajo de clase, juntos. Es como si hubiese sido cosa del destino.
Joaquín: estoy saliendo con alguien.
Eugenia al oír aquello le soltó del brazo decepcionada.
Eugenia: con quién? con Margarita, la profesora nueva de ingles?
Joaquín: eso a ti no te incumbe.
Eugenia: vamos Joaquín, Margarita es una mujer adulta con los pies en la tierra, no esperaras que me crea que una mujer como ella, se ha fijado en alguien como tú...
Joaquín: pues no te lo creas.
Eugenia se cruzó de brazos muy malhumorada y siguió mirando las fotografías e imágenes que Joaquín pasaba delante de la pantalla del ordenador, tecleando el botón del ratón.

En esos segundos se alcanzaba a distinguir a una figura de un animal, un león salvaje, que bajaba tranquilamente deslizando sus pezuñas, por los peldaños de las escaleras centrales del internado.

Minutos después... en el interior de la cocina del internado...
La doncella estaba dentro limpiando la encimera, cuando Antonio, el conserje entró dentro y le sorprendió a ella por detrás.
doncella: uf!! Antonio que susto me has dado.
Antonio: en serio? pues no es lo que pretendía, asustándote solo conseguiría hacerte huir muy lejos de mí, y eso es algo que nunca querría conseguir un hombre de una mujer tan atractiva como tú-dijo Antonio acercándose a ella y cogiéndola por las caderas.
doncella: Antonio qué haces? déjame en paz! déjame!
La doncella al notar que Antonio cada vez pegaba más su cuerpo al de ella, y la respiración de él en su nuca, arrastró sus manos por la encimera de la cocina hasta que consiguió coger un gran cuchillo, girarse hacia él y decirle.
doncella: apártate de mí ahora mismo- señalándole con el filo del cuchillo en mano.
Antonio ni se inmutó, le cogió de la muñeca y se la apretó muy fuerte hasta que perdió todas las fuerzas y el cuchillo cayó al suelo, donde Antonio lo apartó de su alcance con el zapato.
Antonio apretó la cara de la mujer que tenía en frente, juntándole los mofletes y la besó a la fuerza, la doncella le empujó librándose de él y escupiéndole en la cara, Antonio se limpio el escupitajo con su mano y sonriendo cínicamente se alejó de ella.
La doncella se quedó sujetándose a la encimera, respirando entrecortadamente, y sin poder resistir la presión del momento, ella se desmayó hacia el suelo.
En ese momento Antonio se cruzó con su mujer Gloria al salir de la cocina, al verla la cogió de la cintura y quiso besarla, pero Gloria le giro la cara.
Antonio extrañado: qué te pasa?
Gloria se lo pensó mejor y le dio un suave beso en la boca.
Gloria: nada, solo que estoy un poco cansada, tengo mucho trabajo-dijo ella intentando librarse del abrazo de su marido.
Antonio: tienes que intentar relajarte más, no te lo pasaste bien este fin de semana conmigo en el hotel luna creciente?
Gloria: sí muy bien-sonriendo falsamente-pero ahora ya hemos vuelto a la realidad, y tenemos que adoptar una actitud más seria, no todo va a ser fiesta y diversión.
Gloria se alejó de su marido y entró en la cocina, donde encontró el cuerpo de su compañera tirado al suelo sin conocimiento.
Gloria se agachó hacia ella intentando reanimarla.
Mientras tanto... entrando por la puerta a un aula de aquel internado apartado de la ciudad... se podía ver que el aula en esos instantes estaba vacía.
Margarita, mientras esperaba que la clase se llenara de alumnos cuando fuera la hora, se encontraba sentada en su mesa, con los ojos llorosos, con una hoja de papel, donde se escuchó la voz en off leyendo una de las cartas que le había mandado su hermana Carlota en vida.

Margarita, aquí estoy una vez más intentando hablar contigo, como te van los estudios? espero que llegues a labrarte una carrera con futuro.
Llevo ya dos semanas estudiando en el internado, gracias por pagarme una educación con el sudor de tu frente, gracias por haber estado siempre a mi lado sin abandonarme ni un solo segundo, gracias por haberme hecho de madre cuando ella faltó...

comienzo de flash-back

Margarita tenía 16 años, estaba en su casa buscando a su hermana pequeña de 6, Carlota.
Margarita: Carlota, Carlota tenemos que irnos, Carlota!
Margarita entró en la cocina y vio a su hermana Carlota al lado de su madre, la madre estaba sentada en una silla frente a una mesa, con los brazos colgándole muertos al lado de su cabeza, con los ojos cerrados, y un pote de pastillas volcado por toda la mesa al lado de su oreja.
Carlota miró a Margarita: Margarita, no sé lo que le pasa a mamá, llevo una hora llamándola y no se despierta...
Carlota sacudiendo el brazo de su madre...
Carlota: mamá! no me oyes? mamá!
Frente a las dos hermanas estaba un hombre.
hombre: menos mal que has venido Margarita, llevo una hora intentando convencerla para que vengáis a vivir conmigo, mi casa está aquí al lado, sé que vuestra madre confiaría en mí para vuestra protección...

La imagen se volvió borrosa, al aclararse poco a poco se vio a Margarita y a Carlota abrazadas las dos debajo de una mesa a oscuras, como el hombre de la otra escena las perseguía con el cinturón en sus manos, y Margarita y Carlota se abrazaban y rezaban bajo la mesa sin separarse... fuera en la calle, una sirena de un coche de policía sonó, Margarita salió de la casa de la mano de Carlota y cruzaron la carretera sin mirar, mientras el vecino les perseguía...
El policía que conducía el coche las vio cruzar sin mirar y paró a tiempo el vehículo, el policía salió del coche y Margarita y Carlota corrieron a abrazarse a él llorando, el vecino se acercó fingiendo normalidad...
vecino: gracias agente por haberlas encontrado! se han escapado de casa, Margarita, Carlota, volver, os he preparado la comida, vamos, dejar de jugar y volver!
Pero las hermanas no se separaban del policía.
Y el policía no llegaba a fiarse de la cara de aquel hombre que le rogaba que le devolviera a las muchachas.

fin del flash-back

En esos momentos Eugenia Corma, la directora y dueña del centro escolar, estaba en su despacho trabajando, cuando por la puerta entreabierta entró un animal rugiendo, la directora al ver al león frente a ella pegó un grito y se subió a la mesa, en ese instante llegaron dos cazadores que con escopetas le dispararon sedantes al león, quién cayó al suelo dormido. Antonio, entró en el despacho preocupado por Eugenia. Eugenia bajó de la mesa y se abrazó a Antonio muerta de miedo, por el susto que se acababa de llevar por el león.
Más tarde... en clase de e.f. dentro del gimnasio, el profesor entro haciendo sonar el silbato mientras todos los alumnos que estaban sentados con las piernas cruzadas en el suelo, se fueron levantando, Jerónimo se levantó poniéndose una mano en la cabeza y con los ojos en blanco. El profesor se acercó hacia él.
Profesor: qué te pasa?
Jerónimo: no me encuentro muy bien, estoy mareado.
Jerónimo se colocó la mano sobre su boca tratando de evitar las ganas de vomitar que sintió.
profesor tocándole la frente al alumno: acompáñame, te llevare a la enfermería. Esperar a que vuelva-dijo él a los demás alumnos mientras salía del gimnasio con Jerónimo.
En la enfermería...la enfermera le extrajo sangre a Jerónimo...
enfermera: y desde cuando tienes estos mareos?
Jerónimo: no sé hace unos días que me estoy notando más cansado de lo normal, pero no creo que sea nada grave...
enfermera: nunca se sabe, es mejor que te lleven al hospital a hacerte unas pruebas en profundidad.

Al rato... la directora acompañó a Jerónimo al hospital... una vez Jerónimo hubo salido de la consulta del médico, éste llamó a la directora para decirle los resultados.
medico: no sé como plantearle realmente esto, pero el alumno que me ha traído tiene una enfermedad muy rara congénita de la cuál solo se puede salvar con una operación...
directora: en serio? qué lástima! es un chico tan joven!
medico: deberíamos comunicárselo a su familia.
directora: yo me encargo de todo, el chico es huérfano, vive con su abuela que es muy mayor, no podemos darle un disgusto a la mujer.
medico: he estado repasando el historial del hospital, es muy raro, pero hay otro paciente que murió hace 10 meses de la misma enfermedad que este alumno, era un hombre mayor, se llamaba Esteban Silva, sabe si tiene alguna relación?
directora: no, debe ser casualidad.
medico: es una operación muy delicada, necesitamos encontrar a alguien compatible, me ha dicho que vive solo con su abuela, seguro que no hay ningún donante disponible?
directora: no, él solo vive con su abuela, no tiene más familiares.
medico: y sus compañeros del internado? seguro que tiene amigos que se preocupan por él, normalmente es más frecuente encontrar compatibilidad entre los miembros de una misma familia, pero hay casos en los que esto no se da, podíamos someter a los demás alumnos a los exámenes médicos, a lo mejor hay alguien que resulta ser compatible.
directora: no sé, son muchos alumnos, no conviene asustarles.
medico: pero Jerónimo podía salvarse si apareciera algún alma caritativa, es un muchacho muy joven, va a dejarle morir sin intentar nada?
Un par de horas después... la directora se encontraba en su despacho muy nerviosa, hablando con Joaquín y Jacobo.
directora: por favor, es muy importante para vuestro amigo Jerónimo, sois los únicos que podéis salvarle.
Joaquín: los únicos? si todavía no sabemos si somos compatibles con él!
directora: lo seréis! o sea, tenéis que serlo! aceptáis?
Jacobo: y por qué tenemos que ser nosotros los donantes?
directora: porque sois sus mejores amigos, vosotros tres siempre estáis juntos, Jerónimo os necesita y no podemos molestar a todos los alumnos para que se hagan las pruebas, sería algo muy enrevesado, es mejor que solo seáis vosotros dos.
Joaquín: y si ni Jacobo y yo somos compatibles?
directora: buscaremos otra solución, pero tenéis que intentarlo, sino Jerónimo morirá.
Jacobo: no es peligroso, verdad?
directora: el medico que os atenderá es un magnifico profesional.
Joaquín: de acuerdo.
Jacobo: vale, yo también estoy de acuerdo.
Horas más tarde... en la sala del hospital...
La enfermera llamó por orden a Jacobo y a Joaquín para hacerse los exámenes médicos.
Mientras Jacobo y Joaquín esperaban los resultados, Joaquín recibió un sms, él lo leyó y sonrió.
Jacobo al darse cuenta de la sonrisa de su amigo, le dijo.
Jacobo: quién es, Margarita?
Joaquín: no, es...
Jacobo: eh!! no tienes que mentirme, sé que estáis juntos, os vi el otro día al lado de la cascada de la virgen, vi como os besabais.
Joaquín: Jacobo yo... sé que ella a ti también te gustaba pero...
Jacobo: no importa.
Joaquín: seguro?
Jacobo: sí, si Margarita quiere estar contigo a mí me parece bien, ya aparecerá otra para mí, no te preocupes por eso.
Joaquín: gracias, tú si que eres un amigo.
Y Jacobo y Joaquín se abrazaron.
Al pasar los minutos... al fin la enfermera salio con las pruebas para dárselas.
enfermera: felicidades, los dos sois compatibles, pero como Joaquín es el mayor de los tres, creemos que es mejor si le hacemos servir a él como donante.
Joaquín: qué?
enfermera: no tienes que tener ningún miedo, todo saldrá bien. En realidad no sé porque teníais tantas dudas, siendo los tres hermanos, era de suponer que las pruebas salieran positivas.
Jacobo: hermanos, cómo que hermanos?
enfermera: oh bueno! tenéis apellidos diferentes pero... supongo que vuestras familias os habrán informado de esto...
Joaquín: sí, ya lo sabíamos.
enfermera: bien, volver al internado, ya os avisaremos para el día de la operación.
La enfermera se fue, Y Jacobo y Joaquín se quedaron solos.
Jacobo: por qué le has mentido diciéndole a la enfermera que ya lo sabíamos?
Joaquín: no te das cuenta? por eso nos enviaron las becas a nosotros, la directora del colegio sabía perfectamente cuando nos lo pidió que seríamos compatibles, ella solo quería tenernos a todos reunidos en un mismo lugar. A los tres hermanos.
Jacobo: eso significa que nuestro padre era el mismo, a mí me crío mi madre sola sin un hombre a su lado, la tuya se casó son tu padrastro cuando tú tenías 6 años y Jerónimo no sabe nada de sus padres y ha sido cuidado por su abuela.
Joaquín: quién será nuestro padre? si solo supiéramos su nombre...

FIN DEL CAPITULO

próximamente el tercer capitulo de la segunda temporada.

LA CASCADA

los tres chicos ya han descubierto el porque les dieron las becas a ellos y no a otros. A partir de ahora en adelante su relación cambiara. Margarita, la nueva profesora de ingles ha empezado una relación amorosa con Joaquín. Y poco a poco se van descubriendo cosas del pasado de esta misteriosa mujer. Gloria está casada con Antonio, el conserje del lugar, aparentemente él es el marido perfecto, siempre la ha tratado muy bien y llevan 4 años juntos, pero a veces la verdadera personalidad de las personas tarda en florecer, y cualquiera puede tener un lado oscuro. todo esto y mucho más en el próximo capitulo.

No, si mola pero va muy rapido

pues he estado casi dos dias sin escribir...

carolina tu imaginacion es inagotable, mujer!

CONTINUACIÓN...

LA CASCADA

Amanecía un nuevo día, los rayos del sol eran más brillantes que nunca, el agua de la cascada de la virgen que estaba cerca del internado caía sobre las rocas con un suave tintineo, y los rayos del sol se reflejaban y proyectaban en un cristal a los pies de la virgen, ya que allí, escondida entre las rocas, había una botella de cristal, con una hoja de papel metida en su interior.
Mientras tanto... dentro del despacho de la directora, ella mantenía una conversación a solas con Esther, la nueva alumna del internado, compañera de habitación de su hija, a la que habían confiado su secreto, con la esperanza de que no se entrometiera en sus asuntos escabrosos.
directora: esto es muy importante para mí Esther, en fin para nosotros, tú también saldrás ganando, te lo juro.
Esther: oiga, todo está muy claro, Eugenia ya me lo explicó todo, sé muy bien a lo que me expongo si cuento el secreto y sé que si me callo puedo sacar tajada de esto, así que si cada una se mantiene en su sitio, no creo que habrá ningún problema para nadie.
directora: vaya, tienes más agallas de las que me imaginaba, ojala mi hija fuera un poquito más como tú.
Esther: Eugenia es lista a su manera, pero sabe? prefiero no ser su hija, porque si lo fuera a lo mejor sentiría vergüenza al revelar lo que estoy a punto de decir ahora, pero como no lo soy, puedo hablar con total sinceridad.
directora: qué ocurre Esther?
Esther: ocurre que me he fijado en alguien, sé que el conserje y tú mantenéis una relación secreta a todos, sé que los dos planeáis quedaros con todo lo que saquéis en beneficio cuando consigáis deshaceros de los tres hermanos, pero... las cosas como son, yo me he fijado en Antonio, y él se ha fijado en mí, así que si a ti no te importa, yo sé que Antonio tiene mucho tiempo libre, y si habláramos de esto, estoy segura de que los tres podíamos llegar a un acuerdo.
directora: supongo que esto será una broma, Antonio está casado con la limpiadora de este colegio desde hace 4 años.
Esther: y? lo sé, pero si tú te puedes aprovechar de él, sin tener en cuenta su estatus de hombre casado, no veo porque yo no pueda hacerlo también.
directora: esto es el colmo, tú solo eres una niña, no sé ni como puedes mirarme a los ojos diciéndome semejante atrocidad.
Esther: vamos, ahora vas a hacerme creer que te escandalizas por esta burrada? a saber lo que hacías tú a mi edad, no tengo porque callarme que Antonio me interesa, y si veo que puedo conseguirlo, estate segura que voy a estar con él.
Esther se levantó para irse, mientras ella se dirigía hacia la puerta, la directora furiosa se levantó, cogió el cenicero que estaba sobre la mesa y le dio un golpe por detrás en la cabeza con él, Esther cayó al instante al suelo.
Entonces fue cuando entró Antonio al despacho, y vio a Esther allí tirada y a su amante Eugenia con el cenicero en mano.
Antonio cerró la puerta.
Antonio se agachó y le tomó el pulso a Esther.
Antonio: qué has hecho? por qué crees que habíamos hablado en privado con esta chica? para evitar precisamente esto...
directora: aún no está muerta, verdad?
Antonio: no, pero casi le has abierto la cabeza, las cosas no se hacen así Eugenia, no puedes aparecer un día en medio del internado y disparar a todo el mundo a golpe y siniestro, hay que pensar cada movimiento que hacemos.
directora: lo siento, es que ella iba a hablar, me ha dicho que llamaría a la policía y lo contaría todo.
Antonio: pues haberla dejado ir, no tiene pruebas de nada.
directora: pero una denuncia ahora nos traería muchos problemas, vendrían al internado a registrarlo todo, igual se me ha ido la mano pero ya está hecho...
Antonio: todavía estamos a tiempo de arreglarlo...
Antonio descolgó el teléfono y marcó el número de emergencias.
Antonio: sí? pueden mandar una ambulancia al internado nuestra señora sagrada de la cruz, una alumna acaba de sufrir un accidente y está gravemente herida. Gracias.

Ajenos a todo aquello... Joaquín y Jacobo andaban por el pasillo del internado... Joaquín se encontró con Jacobo al salir de la habitación...
Joaquín: Jacobo estás aquí? te estaba buscando...
Jacobo: a mí? para qué? qué sucede?
Joaquín: no te acuerdas? hoy es el día en que Jerónimo despierta de la operación, tenemos que ir a verle al hospital.
Jacobo: es cierto, ves saliendo tú que ahora voy yo.
Joaquín: te espero en la puerta, no tardes.
Jacobo volvió a la habitación, y cogió de debajo de su almohada un paquete de regalo, y salió de allí.
Jacobo fue caminando por el pasillo, cuando escuchó cantar a alguien, él cambio de dirección al oír esa voz. Gloria estaba andando por otro pasillo del internado, cantando mientras se dirigía hacia su habitación, se desabrochaba el cinturón del uniforme, se quitaba los pendientes, y los zapatos y caminaba descalza hasta llegar a su dormitorio.
Jacobo al oírla cantar la siguió sin que ella lo supiera.
Gloria llegó a su cuarto, se colocó frente al espejo, cerró la puerta tras ella pero Jacobo llegó antes y puso la mano para evitar que se cerrara totalmente, pero Gloria seguía a lo suyo sin reparar en su presencia, ella delante del espejo se quitó el uniforme y se quedó por unos instante en ropa interior, hasta que se puso por encima un vestido de calle.
Gloria se abrochó los botones del vestido y colocó el espejo mejor para poder verse, entonces vio en el reflejo de él, que Jacobo estaba apoyado en el umbral de la puerta, mirándola.
Gloria al verle, se giró hacia él y arremangándose las mangas de su vestido se dirigió hacia donde estaba él.
Gloria: Jacobo, cuanto tiempo hace que llevas aquí?
Jacobo: el suficiente, tienes una voz preciosa-dijo él guiñándole un ojo.
Gloria: vete, vete ahora mismo de aquí!
Pero Jacobo no se movía.
Gloria: he dicho que te vayas! no me has oído?-dijo Gloria dándole un pequeño empujón impulsándole hacia el pasillo.
Jacobo avanzó unos pasos e intentó entrar en el dormitorio, pero Gloria colocó su brazo a modo de barrera para que no pasara.
Gloria: lárgate!!
Jacobo se acercó hacia ella sin tocarla y le susurró al oído.
Jacobo: aún sigues teniendo los ojos más bonitos de todo el internado.
Y Jacobo se marchó sonriéndole a Gloria.
Gloria, en cuanto él se hubo alejado, cerró la puerta, se apoyó en ella, cerró los ojos y respiró agitadamente, recordando la última sonrisa de Jacobo y deseando poder sacársela de la cabeza.
Jacobo, siguió su camino hasta llegar a la puerta del internado, en donde le estaba esperando su amigo Joaquín.
Joaquín: ya era hora de que llegaras, donde has estado?
Jacobo: en el paraíso.
Joaquín: en el paraíso? últimamente estás muy misterioso. Qué llevas allí?-dijo él fijándose en el paquete de regalo que sujetaba en su mano.
Jacobo: nada, es un regalo para Jerónimo.
Joaquín: vámonos ya, que se hace tarde.

Y Joaquín y Jacobo desaparecieron tras la puerta del internado.
Al rato... en el hospital... en la habitación en donde descansaba Jerónimo...
entró una mujer... con el pelo oscuro y los ojos azules... era Margarita.
Ella vio a Jerónimo largo en la cama... y mientras caminaba hacia él en silencio... recordó un episodio de su vida, cuando ella era más joven y tenía 16 años...

comienzo de flash-back

Se vio un cartel al fondo donde ponía en letras grandes:

ORFANATO LA BUENA FE

En su interior una chica de 16 años hablaba con la supervisora del centro.
Margarita: donde está mi hermana? dónde está Carlota?
supervisora: debe estar jugando en el jardín.
Margarita: no, no está, ya he mirado.
supervisora: pues entonces en la habitación con los demás niños.
Margarita: he buscado por todo el orfanato, no hay ni rastro de ella, dónde está Carlota?
supervisora: yo... yo... lo siento, no queríamos que te enteraras de esta forma...
Margarita: qué han hecho con Carlota? qué ha pasado?
supervisora: deberías alegrarte, esto es bueno para tu hermana, ha venido un matrimonio de muy buena posición y la ha adoptado, ella estará bien, son buena gente, en serio.
Margarita le dio un empujón a la supervisora y le quitó el llavero con las llaves del orfanato y se dirigió hacia la puerta, saliendo hacia la calle.
Margarita una vez en la calle, corrió y corrió, sin detenerse para nada y sin darse cuenta cruzó la carretera, un coche venía directo hacia ella, el coche hizo sonar el claxon, pero Margarita no lo escuchó y el coche no pudo esquivarla, y cuando se produjo el accidente, el conductor llamó a la ambulancia...

Margarita viendo en la actualidad el cuerpo de Jerónimo largo en la cama sin despertar, recordó el momento en él que ella después del accidente tras escapar del orfanato en busca de su hermana, se halló acostada sobre la cama de un hospital, donde un médico cerca de ella le decía a una enfermera.
medico: ya se cumplen dos años desde que esta paciente fue atropellada accidentalmente en la calle, su curso vital sigue todavía en marcha, pero a saber cuando despertara del coma.
En ese instante, Margarita de 18 años, en cuanto el médico le cogió la mano, abrió los ojos.
Margarita: donde estoy? y Carlota, donde está Carlota?

Margarita en la actualidad siguió caminando hasta el cuerpo de Jerónimo, recordando...

tras despertar del coma Margarita con 18 años y Carlota con 8.
un hombre trajeado fue a una mansión y habló con los dueños de ésta.
hombre: hola, sabemos que llevan dos años cuidando a una niña que adoptaron en el orfanato "la buena fe", pero... han cambiado las cosas y ha aparecido alguien que quiere reclamar su custodia.
mujer: eso no puede ser! quién?
marido de la mujer: es cierto. quien? la niña estaba sola cuando la acogimos.
hombre: es un familiar directo. está afuera esperando.
El hombre se dirigió hacia la puerta y la abrió, Margarita entró y Carlota que estaba al lado del matrimonio, corrió a abrazarla en cuanto la vio.
Margarita: te lo dije Carlota, te lo dije, te dije que nadie nos separaría.
hombre: la señorita se llama Margarita Ríos, es la hermana mayor de Carlota. Y quiere reclamar su custodia.

fin del flash-back

Margarita en la actualidad, llegó hasta donde estaba Jerónimo, se colocó a su lado, Jerónimo abrió los ojos, la miró y dijo.
Jerónimo: sé quién eres, eres la hermana mayor de Carlota, verdad?
Margarita asintió con la cabeza.
Jerónimo: ella te habló de mí en sus cartas?-le preguntó.
Margarita volvió a asentir.
Y Jerónimo le respondió con una sonrisa.
De vuelta de nuevo al internado... cerca de la cascada de la virgen, andaba un muchacho joven, él vio el reflejo del sol en la botella de cristal, que estaba atorada entre las rocas junto a los pies de la virgen. El muchacho intentó cogerla movido por la curiosidad, pero en ese instante apareció por detrás Antonio, el conserje.
Antonio: chaval, qué haces aquí?, deberías estar en clase, te pueden expulsar por esto...
alumno: yo... solo estaba dando una vuelta...
Antonio: vuelve al internado, rápido!!
El joven echó una última ojeada a la botella de la cascada y se fue sin atreverse a contradecirle a Antonio.
Antonio una vez se hubo quedado a solas, se acercó a la cascada con cuidado y... cogió la botella, le quitó el corcho y sacó la hoja de papel y leyó en ella mentalmente.

TESTAMENTO OFICIAL DE ESTEBAN SILVA.

Antonio volvió a cerrar la botella, la tiró al arroyo vacía y se llevó el papel con él, apartándose de la cascada para siempre.

Una semana después...
El suave murmullo del agua de la cascada, caía sin cesar rozando las pequeñas grietas de las rocas que la rodeaban. El agua se agitaba entre roca y roca, movida ligeramente por la constante brisa del aire que sorteaba con disimulo los altos árboles de aquel bosque. Unas manos se movieron por el fondo del agua del arroyo, en el cuál descendía la cascada. Alguien estaba buceando y remojándose en aquellas aguas.
Eran dos personas, un hombre y una mujer, sus ropas estaban colgadas en la rama de un árbol cerca de la cascada. Y ellos dos desnudos, buceaban y nadaban para frotar sus cuerpos, el uno contra el otro, y unir así sus dos almas en una sola, en un acto de amor.
Ellos dos eran... Joaquín y Margarita, que mientras se besaban bajo la refrescante y agradable ducha del agua de la cascada, alguien los observaba desde las sombras... un tipo con gabardina que apartaba con su mano las ramas de los árboles que le prohibían la visión y oculto él, sacaba varias fotografías del momento.
Entre tanto... dentro de la habitación de los chicos... Jacobo entró a ella... justo en el momento en que Jerónimo se levantaba de la cama para salir.
Jacobo: tío qué haces? para qué te levantas? el médico dijo que tenías que tomar reposo.
Jerónimo: estoy bien, ya me dieron el alta y ya estoy fuera de peligro, deja de preocuparte.
Jacobo: es que no sabes el susto que nos diste a Joaquín y a mí.
Jerónimo: por cierto, quería daros las gracias por ser mis donantes.
Jacobo: no hay de qué, yo estaba un poco asustado pero Joaquín se mantuvo firme en todo momento, y como él es el mayor, pues luego yo me libré por los pelos...
Jerónimo: llevo toda mi vida pensando que era hijo único y ahora descubro que tengo dos hermanos... y casi de mi misma edad...
Jacobo: ya, cuando la enfermera nos lo dijo en el hospital al saberse los resultados del ADN fue toda una sorpresa.
Jerónimo alargó la mano hacia su mesita y cogió una foto en donde aparecían Carlota y él juntos cogidos de la mano.
Jerónimo: gracias por llevar a enmarcar esta foto de Carlota y mía, te quedó muy bien, fue un regalo muy bonito.
Jacobo: de nada, tú te mereces lo mejor.

FINAL DEL CAPITULO

próximamente el cuarto capitulo de la segunda temporada.

LA VERDAD

finalmente todo acabo bien para los tres chicos. Ellos tres siguen vivos y siguen compartiendo habitación en ese misterioso internado. Ya se sabe más cosas sobre el pasado de Margarita, el cuál está atado a Carlota (la novia de Jerónimo que murió en la primera temporada) Margarita y Joaquín cada vez se acercan más el uno hacia el otro, al igual que Jacobo y Gloria, la cuál sigue sin saber nada de la alianza secreta que existe entre la directora del internado y su marido el conserje, descubrirá ella alguna vez algo sobre lo que esconden? todo esto y mucho más en el próximo capitulo.

CONTINUACIÓN...

LA VERDAD

Ese día había amanecido muy soleado, hacia una calor terrible y una mujer mayor andaba por las cercanías del internado, ella andaba un poco desorientada, sin saber muy bien a donde dirigirse. En esos instantes Gloria se encontraba en el bosque, remojándose la nuca, su cabellera y refrescándose la cara bajo la cascada de la virgen. Ella se escurrió el pelo y se alejó de la cascada a pasos lentos, al empezar a andar hacia la puerta hubo algo que le impidió volver a entrar al internado, ella vio a lo lejos como se acercaba una figura humana, de una mujer mayor, Gloria vio a lo lejos como la mujer se desmayaba y rápidamente acudió en su ayuda. Gloria le ayudo a levantarse, y haciendo que la anciana se apoyara en su hombro para poder caminar, entraron las dos juntas en el internado.
Ya dentro del centro escolar... en el interior de la cocina...
Gloria le había preparado una infusión a la anciana, la anciana estaba bebiéndose la infusión, mientras hablaba con ella.
anciana: muchísimas gracias por ayudarme y atenderme, no sé que hubiera hecho sino llegas a estar tú cerca.
Gloria: no hay de que, yo antes nunca la había visto por aquí, ha venido a ver a alguien? qué hace por aquí sola a estas horas?
anciana: es cierto, es la primera vez que ando por estos parajes, he venido desde muy lejos a visitar a mi nieto, es un alumno de este internado, hace mucho que no le veo, se llama Jerónimo Vivo, le conoces?
Gloria: sí y muy bien, es un estupendo chico, tiene muchos amigos aquí dentro.
anciana: lo suponía, mi nieto tiene un don mágico para que todo el mundo que se acerque a él le coja cariño enseguida. Siempre ha sido así, desde muy pequeño...
En ese momento entró Antonio a la cocina, quien al ver a su mujer fue directo y sin pensárselo a sorprenderla con un beso. Pero Gloria al verle le apartó el brazo y le dijo.
Gloria: ahora no Antonio, hay gente delante-refiriéndose a la anciana que estaba sentada frente a ellos.
Antonio: se puede saber que te pasa últimamente conmigo?-dijo Antonio muy enfadado.
Gloria: nada, por qué tiene que pasarme algo? me pones enferma!
Ellos dos empezaron a discutir, y mientras la discusión seguía la anciana se sintió molesta y se levantó de la silla sin que Gloria se diera cuenta, y dejando el vaso de la infusión medio lleno, volvió a salir al exterior.
Mientras en la cocina seguía la discusión entre el matrimonio de la limpiadora y el conserje...
Antonio: Gloria tú dices que no, pero últimamente estás muy rara conmigo, es que ya no me quieres?
Gloria: no digas tonterías, eres mi marido, me casé contigo porque estaba enamorada de ti, claro que te quiero bobo.
Antonio: vale, vale te creo pero... no me lo digas así.
Gloria: así cómo? no te entiendo, de qué forma te lo he dicho?
Antonio: con conformismo, como sino tuvieras más remedio que estar conmigo.
Antonio se volvió a acercar a su mujer para besarla pero Gloria se volvió a apartar de él y entonces miró por un momento a su alrededor y se dio cuenta que la anciana se había marchado y molesta le dijo a su marido...
Gloria: ves lo que has conseguido con tus gritos? la pobre mujer se ha ido asustada, ves a buscarla!!
Antonio: qué? si la primera en empezar a gritar has sido tú...!
Gloria: no me discutas y ves a buscarla!
Antonio: cuando estás de mal humor, no hay quién te aguante...
Y Antonio salió afuera a buscar a la anciana, tal y como le había ordenado que hiciese su mujer...
Cuando Antonio llegó al patio trasero del internado, vio aparcar a un coche negro y a una mujer saliendo de él. Era la directora que acababa de llegar al centro escolar. Antonio al verla se olvidó por un momento de la anciana y fue a saludarla. En cuanto Eugenia salió del coche y se vieron, se besaron. Pero en cuanto Eugenia se separó de su amante, le dijo.
directora: Antonio, quién es esa anciana mujer que nos está mirando?
Antonio se giró hacia atrás... y vio a la anciana que minutos antes había estado con Gloria y él en la cocina, corriendo hacia el internado...
Antonio: yo la mató! como le cuente algo a Gloria... la mató!
Por otro lado del patio trasero del internado, se acercaba en ese momento Jerónimo, Jerónimo al ver a su abuela, la llamó desde lejos.
Jerónimo: abuela! abuela! a donde irá tan deprisa?
La abuela a causa del cansancio fue aminorando la marcha, a medida que se acercaba al internado. Ella no se había dado cuenta de que su nieto la había visto y la estaba siguiendo.
De repente, de entre los matorrales la sorprendió un encapuchado con un pasamontañas negro, la abuela al verlo se desmayó del susto y el encapuchado la arrastró por los pies hasta dentro de los matorrales ante los ojos incrédulos de su nieto Jerónimo.
Jerónimo se acercó a un árbol que estaba por ahí cerca, y escaló por él para poder ver lo que pasaba detrás de los matorrales y lo vio, él vio como aquel misterioso encapuchado acuchillaba con una navaja pequeña varias veces repetidas, la tripa de su abuela. Mientras él estaba en la rama del árbol viéndolo todo, sintiéndose impotente ante la situación.
Mientras tanto... en el interior del internado... concretamente dentro de la cocina... Gloria estaba secando los platos, cuando entró la doncella.
doncella: hola Gloria, hoy hace una calor tremenda, parece mentira que estando en el mes que estamos haga esta calor. Gloria, me estás escuchando? Gloria!!!
Gloria estaba como mirando las musarañas, cuando escuchó hablar a su compañera de trabajo se despertó y se le cayó el plato al suelo, rompiéndose en mil pedazos.
Gloria: que susto me has dado, mira lo que has conseguido, es el segundo plato que rompo en esta mañana.
Gloria cogió la escoba y barrio los pedazos tirándolos a la papelera.
Gloria siguió secando los platos.

doncella: vaya!! últimamente como que estás con la cabeza en otra parte no?
Gloria: eh?? no sé que insinúas.
doncella: sigues pensando en Jacobo?
Gloria: no, bueno puede que un poquito, pero solo un poco, o sea... vale no puedo sacármelo de la cabeza, pero esto es imposible, y es un disparate, entre Jacobo y yo no puede pasar nada de nada.
doncella: claro, y qué piensas hacer? lo que sientes por él no va a desaparecer solo porque tú quieras, desde que le conoces que no puedes concentrarte en el trabajo ni en nada más, no puedes seguir así, si tanto te gusta Jacobo por qué no te enrollas con él y así al menos le das una alegría a tu cuerpo?
Gloria: qué? no digas tonterías! tú todo lo ves muy fácil, Jacobo tiene 16 años y yo soy una mujer adulta y casada!
doncella: ya estamos, ya tenías que sacar otra vez en la conversación al imbécil de tu marido...
Gloria: qué?
doncella: mira, yo solo digo que si yo fuera tú, intentaría pensar un poco más en mí y menos en mi marido. Él no te merece Gloria.
Gloria: tú por qué hablas así de Antonio? es que tienes que contarme algo de él que yo no sepa?
doncella: no, nada... -dijo ella gimoteando y saliendo de la cocina.
En cuanto Gloria se quedó sola siguió secando los platos, y en un momento en él que se miró su brazo se dio cuenta en que le faltaba su pulsera.
Gloria: y mi pulsera? se me debe caído en alguna parte! donde estará?
Gloria salió de la cocina y caminó sobre sus pasos por el pasillo del internado intentando encontrarla, pero no había manera, entonces cayó en la cuenta de algo...
Gloria: Jacobo... seguro que me la ha cogido él...
En la habitación de los tres chicos... acababan de entrar en ese instante Joaquín y Jacobo, Joaquín se sentó en el pupitre a hacer los deberes, mientras que Jacobo se disponía a sentarse sobre la cama, cuando... Gloria irrumpió en el cuarto e insultando a Jacobo le dijo.
Gloria: dónde está? devuélveme mi pulsera ahora mismo cretino!
Jacobo: qué? qué pulsera, no sé de qué hablas?
Gloria: de mi pulsera! no me has oído? se me ha perdido, estoy segura que me la has cogido tú!
Jacobo: qué? tú sabes lo ocupada que he tenido yo esta mañana? como para encontrar tiempo en ir a tu cuarto y cogerte la pulsera no sé coño ni para qué...? por qué iba a hacer yo eso?
Gloria: porque la última vez que se me desapareció algo mío, tú fuiste el responsable y cuando yo vine a tu cuarto siguiendo el camino de la lejía de color, me pediste un beso a cambio.
Jacobo: y dale con eso, que hace más de un mes de eso Gloria, y además que fueron mis amigos quienes te cogieron las botellas del carrito, que yo no tuve nada que ver...
Gloria: da igual, en alguna parte tiene que estar la pulsera.
Jacobo: yo no he ido a tu cuarto en toda la mañana Gloria, no te la he podido coger.
Gloria: no hacia falta que fueras a mi cuarto, la pulsera siempre la llevo puesta conmigo, casi nunca me la quito, a lo mejor se me ha caído por el pasillo y tú... la has encontrado y te la has quedado.
Jacobo: qué? y por qué iba a hacer yo eso? ah sí, ya lo sé, para pedirte un beso no? pues mira, aunque así fuera no lo hubiera podido hacer, porque si me la llego a encontrar por el pasillo como tú dices, como iba a saber que era tuya?
Gloria: porque tiene mi nombre grabado con mi fecha de nacimiento idiota.
Jacobo: ah!! que tiene tu nombre grabado, entonces ya cambia la cosa...
Joaquín que había estado durante todo el tiempo callado se giró hacia ellos y dijo.
Joaquín: oye si vais a seguir con la discusión, salir afuera, que estoy intentando estudiar.
Gloria: claro, yo en cuanto aparezca mi pulsera, me voy.
Joaquín: has limpiado antes los cuartos, verdad?
Gloria: claro, como todos los días.
Joaquín: pues a lo mejor la has perdido en alguno de ellos, no sé haciendo las camas se me ocurre...
Gloria pensó en aquella posibilidad, miró a las camas de los tres chicos del cuarto y se fijó que había algo brillante en la cama de Jacobo, Gloria cogió la pulsera se la puso, miró a Jacobo y le dijo...
Gloria: con qué no la habías cogido tú, eh? mentiroso!!
Jacobo: y no la he cogido Gloria, se te debe haber caído a ti al hacerme la cama como bien ha dicho Joaquín, yo ahora mismo la acabo de ver al igual que tú, esas cosas pasan...
Gloria: vale, de acuerdo, quizás tengas razón y ha sido un accidente, perdona, lo siento.
Jacobo: no pasa nada, todo el mundo se equivoca alguna vez.
Gloria: ya, perdóname otra vez.
Gloria se dirigió hacia la puerta.
Joaquín: al fin, a ver si ahora puedo estudiar tranquilo...
Jacobo: claro, a mí no me cuesta nada perdonarte Gloria, pero... es muy extraño que la pulsera haya aparecido justo en mi cama, no te parece?
Gloria se giró hacia él alejándose de la puerta.
Gloria: qué pretendes decirme?
Jacobo: yo nada... solo que... en este cuarto hay tres camas, y la pulsera no estaba ni en la cama de Jerónimo ni en la de Joaquín, sino en la mía.
Gloria: qué estás insinuando?
Jacobo: que a lo mejor la has puesto tú allí apropósito para tener una excusa para verme.
Gloria: qué? no sé como tienes la cara dura de decirme eso...
Jacobo: ya, ahora me vas a decir que no tengo razón, cuando llevas desde el primer día en que nos conocimos persiguiéndome...
Gloria: que yo qué? esto es el colmo, ya es lo último que me faltaba por oír...
Jacobo: Gloria, sabes que tengo razón, tú no has venido a este cuarto buscando la pulsera, tú has venido hasta aquí buscando otra cosa.
Gloria: ah sí?
Jacobo: sí.
Gloria: y según tú que he venido yo a buscar a tu cuarto?
Jacobo: esto.
Y Jacobo cogió a Gloria por la cintura, y atrayéndola hacia él, la besó en los labios.
Al finalizar el beso Gloria se fue de la habitación casi tropezándose con todo lo que encontraba a su paso, sin dejar de mirar de los ojos de Jacobo.
Cuando se quedaron Joaquín y Jacobo a solas en la habitación...
Joaquín: no has debido besarla.
Jacobo: tú no estabas estudiando?
Joaquín: vale, pero sigo pensando lo mismo, no tenías que haber besado a Gloria.
Jacobo: da igual ahora ya está hecho, además si Gloria lleva buscándome desde el primer día, pues ya me ha encontrado, a ver si así se tranquiliza un poco y me deja en paz.
Joaquín: Jacobo no te engañes, tú no quieres que Gloria te dejé en paz.
Entre tanto... Gloria había bajado por las escaleras hasta la cocina y había entrado a ella, encontrándose de nuevo a la doncella, que en cuanto la vio se limpio las lágrimas, disimulando, para que Gloria no notara que había estado llorando.
doncella: Gloria, de donde vienes tú ahora?
Gloria: de la habitación de Jacobo. Me ha besado, él me ha besado.
doncella: qué? en serio?
Gloria: en serio.
doncella: y qué piensas hacer ahora?
Gloria: nada, que es lo que tenía que haber hecho desde el principio-dijo ella retomando su labor en acabar de secar los platos.
Regresando de nuevo a la habitación de los chicos, Jerónimo acababa de atravesar la puerta cabizbajo.
Joaquín: Jerónimo, dile a Jacobo que no tendría que haber besado a Gloria.
Jerónimo: qué? que Jacobo ha besado a quién?
Joaquín: a Gloria, si te lo acabo de decir... Jerónimo, te pasa algo?
Jerónimo asintió con la cabeza.
Jerónimo: acabo de ver como mataban a mi abuela, allí afuera, entre los matorrales del bosque.
Jacobo: tu abuela? cómo que tu abuela? qué hacia ella aquí?
Jerónimo: supongo que había venido a verme, ni siquiera he tenido tiempo de hablar con ella, había un hombre con un pasamontañas negro puesto en la cabeza, la ha atacado y la acuchillado varias veces con una navaja pequeña, delante de mis propios ojos, aunque... creo que él no me ha visto a mí.
Joaquín: crees que el agresor sabía que era tu abuela?
Jerónimo: no tengo ni idea, esto es increíble, primero a Carlota y ahora a mi abuela, los próximos podríamos ser...
Jacobo: nosotros?-dijo él terminando la frase de su amigo y hermano pequeño.

Justo en el momento en que los tres hermanos estaban en aquella habitación, y uno de ellos había recibido el duro golpe de la muerte de un familiar... un cuadro que estaba colgado en la pared se cayó, y los tres hermanos repararon entonces en un trozo de papel que había enganchado en el clavo, Joaquín lo cogió y Jerónimo y Jacobo lo leyeron en voz alta.

mensaje para mis tres hijos: si queréis saber cuales fueron mis últimas palabras antes de morir hacia vosotros, mirar bajo el jarrón de flores que está sobre la columna, en el hall del internado.

rápidamente los tres chicos salieron de la habitación, bajando por las escaleras a toda prisa y saltando los peldaños de dos en dos, llegaron a situarse frente a la columna... apartaron el jarrón y descubrieron otro trozo de papel debajo de él...

mensaje para mis tres hijos: si habéis llegado hasta aquí, quiere decir que queréis seguir buscando, encontrar mis últimas palabras para vosotros antes de morir tras la cuarta estantería de la biblioteca, tras unos libros rojos.

Así ellos tres se miraron a los ojos. Y fueron directos hacia la biblioteca, apartaron los libros y detrás de una pila de ellos, en el mismo estante, encontraron una pequeña caja de zapatos, donde había una foto de un hombre mayor junto a un sobre cerrado.
Jerónimo abrió el sobre.
Y Joaquín y Jacobo leyeron la carta en voz alta.

A mis tres hijos con todo mi amor:.

No sé cuanto tiempo me queda de vida.
Llevo meses enfermo, los médicos no encuentran ninguna cura a mi enfermedad.
He cometido tantos errores en mi vida, y el más grave de todos ellos ha sido
él de ignorar por completo a mis tres hijos.
No escuché a sus madres cuando me dijeron que estaban embarazadas de ellos, las desprecié a las tres sacándolas de mi vida, no supe reaccionar como un verdadero hombre.
Ahora que ya llega el fin de mis días, solo quiero escribir esta carta con la esperanza de que llegue a vosotros, con lo mal que traté a vuestras madres, es muy posible que ellas no os hayan hablado de mí.
La verdad es que no tengo gran cosa que deciros sobre mí, no hay nada bueno que destacar sobre mi persona, solo os diré como me llamo, para que cuando crezcáis, si alguien os pregunta quien era vuestro padre... vosotros le podáis responder... que era Esteban Silva.

con cariño,
para Joaquín Llarqué, Jacobo Mesón y Jerónimo Vivo.

Os quiero.
Esteban Silva, ojala pudiera haberos conocido en vida.

P.D. :junto a esta carta he añadido una foto mía, mirarla bien y conservarla, es un favor personal que os pido.

En ese instante cuando leyeron la carta y estaban volviendo a colocarlo todo dentro de la caja, llegó a la biblioteca alguien que les pilló con ella en las manos, Eugenia, la hija de la directora.
Eugenia se acercó a ellos inocentemente.
Eugenia: qué es esto? cómo lo habéis encontrado? qué hacéis con una foto de mi padrastro?
Joaquín: tú qué Eugenia?
Jerónimo: este hombre era el difunto marido de tu madre?
Jacobo: qué es lo sabes Eugenia?
Eugenia: nada, yo no sé nada, dejarme en paz!!
Y Eugenia salio de la biblioteca.
Joaquín: hay que entrar en el despacho de la directora, es evidente que Eugenia está mintiendo.
Lejos del internado, en la calle, en un barrio de casas de gente con mucho dinero, el coche de la policía estaba haciendo sonar sus sirenas mientras perseguía a un ladrón de joyas que se escapaba saltando por los setos de las casas, con un pasamontañas negro y una gran bolsa en donde llevaba el botín.
El ladrón siguió corriendo, hasta llegar a una casa abandonada, se metió en ella, se descubrió el rostro, y se vio la cara de... Antonio (el conserje del internado nuestra señora sagrada de la cruz) él abrió la cremallera de la bolsa para poder admirar su botín y luego satisfecho con la adquisición, volvió a cerrarle la cremallera a la bolsa.
Otra vez en el internado... los tres chicos con la caja de zapatos en mano... acompañaron a Joaquín hasta la puerta del despacho de la directora, y esperaron a que él saliera con información nueva de él...
Joaquín busco por los armarios y cajones hasta que encontró el álbum de bodas de la directora...él lo abrió y miró sus fotografías y comprobó lo dicho por Eugenia en la biblioteca hace unos minutos, Esteban Silva además de ser el padre de ellos tres, era el mismo hombre que estuvo casado con la madre de Eugenia.
Los tres chicos se encontraban otra vez en su habitación, con la caja de zapatos, y dos fotos, la foto que el padre había dejado junto a la carta y una de las fotos que había cogido Joaquín del álbum de bodas de la directora.
Joaquín: las casualidades de la vida son increíbles.
Jerónimo: quién ha dicho que todo esto sea una casualidad? la directora sabía que nosotros éramos hermanos, quién sabe desde hace cuanto tiempo lo sabe...
Jacobo: y nuestro padre escondió la carta para que nosotros la leyéramos justo en la biblioteca de este internado...
Joaquín: hasta que punto están involucradas la directora y su hija en esto?
Jerónimo: todo esto es muy raro, pero sí de algo podemos estar seguros, es que ahora más que nunca es cuando estamos más cerca de saber la verdad.
Jacobo cogió la caja de zapatos y la guardó en un rincón del armario tras la ropa, junto con las dos fotografías y la carta.
En ese momento, la puerta del dormitorio se abrió... y los tres chicos vieron como Gloria entraba muy despacio dentro de él, y se quedaba quieta mirando a Jacobo.
Jacobo: Gloria, qué haces aquí?
Gloria: podemos hablar un momento de lo que ha pasado antes? ya sabes... del beso?
Jacobo: sí claro, aunque ya sé lo me vas a decir, vas a negarlo todo y a decirme que tú no querías besarme, que yo me he equivocado al pensar que sí que querías y que nunca, jamás de los jamases he debido acercarme a ti para besarte, pero sabes qué? que no me importa lo que me digas, lo que me puedas decir, o cuantas veces me lo repitas, porque yo sé que tengo razón, yo sé que tú querías que ese beso llegara tanto como yo, y es muy posible que me haya precipitado al dártelo pero era algo que no podíamos retrasar más y...
Gloria: Jacobo, vas a dejarme hablar, por favor?
Jacobo: sí, claro, perdona.
Gloria: bien, gracias, ya pensaba que no te ibas a callar. Y estaba a punto de marcharme para no volver a pisar nunca más este cuarto, pero... me ha costado mucho decidirme a venir después de lo ocurrido y... no quisiera que el viaje hasta aquí, no hubiera servido para nada. Jacobo lo que yo quería decirte es que...
Jacobo: qué Gloria? te escucho.
Gloria: bueno, en realidad no es algo que se pueda decir, más bien es algo que se tiene que demostrar...
Gloria se acercó a Jacobo, puso las manos sobre su pecho, y sin que él se lo esperara, le besó en los labios. Jacobo cerró los ojos y la abrazó instintivamente, el rato que duró el beso.
Gloria se separó de él y le dijo.
Gloria: ahora ya estamos en paz.
Y Gloria se fue de la habitación de los chicos. Jacobo no podía salir de su asombro, no podía creerse lo que acababa de pasar.
Jacobo miró hacia sus dos amigos y hermanos que estaban allí con él en la habitación...
Jacobo: y vosotros que miráis?-les gritó.
Y Joaquín y Jerónimo miraron hacia otro lado, disimulando.
Gloria salió de la habitación, bajó las escaleras hasta llegar a la cocina donde estaba la doncella quién le preguntó.
doncella: qué?
Gloria: qué de qué?
doncella: que si lo has hecho, si has besado a Jacobo, aunque no sé ni para que te lo pregunto, porque seguro que te has echado para atrás en cuanto le has visto...
Gloria: pues no lista, si que le he besado, vale?
doncella: en serio?
Gloria: sí, pero ya me estoy arrepintiendo de haberlo hecho.
doncella: eso no es cierto y tú lo sabes.
Gloria: todo esto es una equivocación, es la mayor equivocación que he cometido en toda mi vida.
Gloria se sentó en la silla, frente a la mesa de la cocina, y dejó caer en un ataque de angustia, la cabeza sobre sus brazos en cruz apoyados en ella.