Foro El internado: Laguna negra
¿Solo Julia puede vernos? Nuevos espíritus en el internado
#0

02/01/2009 19:28
Como quien no quiere la cosa el post se ha quedado vacío. Dado q veo que va a haber fantasmas de nuevo lo subo y que la gente que quiera lo use para opinar sobre el tema y así no haya tantos sobre lo mismo.









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#1821

14/01/2009 14:00
Bequi!! Estoy flipando!!
Hay un tio ligando conmigo en el tuenti!!!
Hay un tio ligando conmigo en el tuenti!!!

#1822

14/01/2009 14:03
sii o k??? y quien es?? cuenta cuenta!!
ya he terminado la historia, luego cuando la repase la subo!^^
ya he terminado la historia, luego cuando la repase la subo!^^
#1823

14/01/2009 14:07
Pues ni idea de quien es!! jajajajaja
De repente he visto que tenia un privado de desconocido, y cuando lo abro leo algo asi "si te ces yo te recojo pero huye, huye de el" Y yo flipando!! (es que en lo del estado tengo puesto "¿Y si me caigo huyendo de ti?"
una coña con una amiga jajajja)
Le he contestado en plan "jejeje gracias, que mono" o algo asi he puesto
y me pone "lo que haga falta bella, no quiero que llegues a tocar suelo ni que te hagas daño"
Normal que este flipando, no? jajajajajaja
Y no le conozco de nada
De repente he visto que tenia un privado de desconocido, y cuando lo abro leo algo asi "si te ces yo te recojo pero huye, huye de el" Y yo flipando!! (es que en lo del estado tengo puesto "¿Y si me caigo huyendo de ti?"

Le he contestado en plan "jejeje gracias, que mono" o algo asi he puesto

Normal que este flipando, no? jajajajajaja
Y no le conozco de nada

#1824

14/01/2009 14:15
jajajajaj agregale como amigo!! xD
voy a ver si subo ahora la historia! que ya la he repasado y todo, aunque los demas no esten!
voy a ver si subo ahora la historia! que ya la he repasado y todo, aunque los demas no esten!
#1825

14/01/2009 14:27
bueno.... ahora no hay ni dios por aqui xD pero subo la siguiente parte de la historia, haber que os parece!!! :)
PARTE 12:
Inquietante, esa seria la palabra que definiría el estado se Julia en esos momentos. Aturdida y confusa seguía corriendo entre los árboles, sintiendo a cada paso como se acercaban cada vez más a ella. Sintiendo como la acortaban el camino y como poco a poco iban a cazarla.
La chica llego sin aliento hasta un claro en el bosque y se paro en seco. Intentando escucharles, intentando averiguar si andaban cerca. Y así era…
-no por favor, no por favor – pedía Julia.
Sus miradas en la oscuridad, sus ojos clavados en ella… y silencio.
Julia solo oía su propia respiración y el fuerte latido de su corazón. Incluso la lluvia había cesado… todo estaba callado. Y eso era lo que más la estremecía. Poco a poco fue andando, despacio. Se fijo en que estaba completamente mojada y chorreando por la lluvia y en como el frío había hecho que temblara sin casi darse cuenta.
Poso su mirada en cada uno de los sitios donde le alcanzaba la vista, intentando mantenerse alerta y segura… “Necesito ayuda” volvió a pensar. Y si…
Se armo de valor.
-¿hola?
Pero no hubo respuesta.
-¿estáis… estáis por aquí? – volvió a decir. En ese momento se sintió estupida, estaba hablando sola, una perdida de tiempo se dijo.
Cuando iba a irse volvió a escuchar las risas dicharacheras de los niños. Y esta vez no corrió como lo hizo las anteriores, se mantuvo firme e intacta, esperando verles.
Tardaron… al principio les notaba lejanos, pero sabia que no apartaban sus ojos de ella y poco a poco oyó sus susurros en medio del silencio que reinaba el bosque, acercándose a ella. Julia sentía que no debía moverse, debía esperar a que ellos vinieran, pero el temblor de su cuerpo ya no era por el frío, también por el miedo.
Noto como alguien le tiraba de la manga del pijama, por detrás. Y ante un momento de duda se dio la vuelta despacio, esperando encontrarse algo horrible…
-hola – dijo el niño tímidamente.
Y no era nada horrible, era un niño de unos nueve o diez años cálculo. Tenía el pelo negro y rizado y una carita que en absoluto asustaba. Pero ese aspecto angelical no terminaba por tranquilizar a Julia.
- hola – respondió ella, ¿sabrían que estaban muertos? Pensó.
- ¿quieres jugar?
Julia dirigió la mirada detrás del niño, intentando atisbar a los demás, pero estos se movían inquietos entre los árboles, esperándola. Quizá ellos eran su as en la manga, quizá ellos serian su ayuda, pensó la chica.
-¿a que? – dijo ella inquieta.
-A perseguir luciérnagas…
Al oír esas palabras Julia dio un paso atrás y el murmullo de los árboles aumento, uno a uno los niños fueron saliendo detrás de sus escondites. Desde luego que no parecían estar muertos. Justo en ese instante el alba apareció entre las copas altas de los árboles, irguiéndose con sus tonos grises y aclarando las sombras que impregnaban el bosque, acariciando las caras pálidas de los niños que se acercaban a ella.
¿Cuándo tiempo llevaba en ese bosque? Estaba amaneciendo, no había calculado el tiempo que había pasado en el coche de su padrastro ni tampoco el que había transcurrido con ella en el bosque. Pero los pequeños haces de luz hicieron que ella se tranquilizara, al menos por el momento. Ya no podían perseguir luciérnagas.
-esta amaneciendo – dijo ella, intentando así que los niños cambiaran de juego.
Ellos no dijeron nada, el niño que estaba frente a ella era el único dispuesto a hablarla, los demás se acercaban despacio, mirando y riendo.
-tengo… tengo que volver a mi colegio.
-Nosotros también tenemos que ir – dijo el niño tristemente – pero nos hemos perdido.
-Pero seguro que recordáis como se va, solo que estáis desorientados ¿no? – dijo Julia esperanzada.
-¡Podemos jugar al escondite! – dijo el niño dirigiendo la mirada a sus compañeros, los cuales por los saltos de júbilo parecían estar dispuestos a jugar.
Perfecto, pensó Julia, ahora si que estaba perdida.
-cierra los ojos y cuenta hasta diez – dijo el niño.
No tendría otra opción y aunque pondría parecer mentira tenía miedo a esos crios, había algo en ellos que la estremecía.
Cerró los ojos y contó despacio hasta diez, notaba el viento fresco del invierno en su piel, acariciándola y provocando un suave escalofrío. Tenía que seguir las risas, de esa manera encontraría el camino, algo en ella le decía que debía hacerlo.
Abrió los ojos y se quedo inmóvil, alerta, esperando cualquier sonido, cualquier pista. Empezó a andar despacio, en línea recta, agradeciendo que Pedro la hubiera dejado tranquila, al menos por el momento. Pronto comenzó a escucharles.
-por aquí
-si
-no, hay no
-seguirme
-nos va ha pillar
Risas, oía a los niños corretear y reírse entre ellos, inocentes, creyendo que estaban en la mejor época de su vida, pensando que nada ni nadie podría hacerles daño… y que equivocados que estaban.
Julia empezó a andar más deprisa, siguiendo cada ruido que provenía de esas voces alegres. Poco a poco se interno en una zona boscosa, pero sabia que les seguía de cerca, ellos la estaban marcando el camino, estaba segura.
Caminar era complicado, la zona estaba llena de arbustos y rocas, pero debía seguirles el ritmo, las risas iban por delante de ella. Julia comenzó a mirar detrás de los árboles o de rocas, siguiéndoles el juego a los niños, jugando inocentemente como ellos, esperando así que cuanto antes la llevaran al colegio.
El bosque fue perdiendo densidad a medida que avanzaba, y ella les seguía, sin parar a pensar en todo lo que tenía encima, pero con un poco de suerte esa pesadilla acabaría pronto.
Formaciones de rocas cubiertas con musgo aparecían por el camino que ella iba siguiendo. Levanto la vista, los árboles encorvados con el fuerte viento que estaba comenzando a soplar hicieron que fuera más deprisa, estaba helada de frío. El camino que seguía pronto dio a un pequeño sendero de tierra, ya estaba cerca, ese camino lo había recorrido la última vez que se había internado al bosque.
Los niños seguían riendo y jugando, aunque ella ya no les necesitaba. Ando deprisa todo el trecho que quedaba hasta el Internado, temerosa que en cualquier momento la furgoneta de su padrastro apareciera por el bosque, aunque ella sabía que con la gran herida que le había causado no estaba en condiciones de conducir.
Cruzo los brazos, intentando guarecerse del frío, la bolsa que llevaba consigo no la había soltado en ningún momento, debía averiguar que había escrito en el informe. Empezó a pensar en todo lo que debía hacer, en que debía contarle a Héctor para que la creyera cuando los altos muros y la verja del internado aparecieron ante ella. Y aunque fuera extraño para Julia, se sintió en su hogar, en el único sitio donde podría estar tranquila, y aunque le costara creerlo, donde se sentía a salvo con sus compañeros.
Dio un rápido vistazo a su alrededor, para ver si los niños andaban cerca antes de abrir la verja metálica, pero estos parecían que ya se habían ido.
Abrió el candado lo más deprisa que pudo y cuando cerro la verja tras de si, se encontró al niño al otro lado, mirándola atento con sus pequeños ojos.
Julia le sonrío, dándole así las gracias. Y el niño bajo la mirada, para cuando volvió de nuevo a mirarla a los ojos ya no parecía el mismo niño inocente, carismático y alegre que se encontró en el bosque. Julia retrocedió.
-dile a Samuel que venga a jugar con nosotros.
Continuara…
PARTE 12:
Inquietante, esa seria la palabra que definiría el estado se Julia en esos momentos. Aturdida y confusa seguía corriendo entre los árboles, sintiendo a cada paso como se acercaban cada vez más a ella. Sintiendo como la acortaban el camino y como poco a poco iban a cazarla.
La chica llego sin aliento hasta un claro en el bosque y se paro en seco. Intentando escucharles, intentando averiguar si andaban cerca. Y así era…
-no por favor, no por favor – pedía Julia.
Sus miradas en la oscuridad, sus ojos clavados en ella… y silencio.
Julia solo oía su propia respiración y el fuerte latido de su corazón. Incluso la lluvia había cesado… todo estaba callado. Y eso era lo que más la estremecía. Poco a poco fue andando, despacio. Se fijo en que estaba completamente mojada y chorreando por la lluvia y en como el frío había hecho que temblara sin casi darse cuenta.
Poso su mirada en cada uno de los sitios donde le alcanzaba la vista, intentando mantenerse alerta y segura… “Necesito ayuda” volvió a pensar. Y si…
Se armo de valor.
-¿hola?
Pero no hubo respuesta.
-¿estáis… estáis por aquí? – volvió a decir. En ese momento se sintió estupida, estaba hablando sola, una perdida de tiempo se dijo.
Cuando iba a irse volvió a escuchar las risas dicharacheras de los niños. Y esta vez no corrió como lo hizo las anteriores, se mantuvo firme e intacta, esperando verles.
Tardaron… al principio les notaba lejanos, pero sabia que no apartaban sus ojos de ella y poco a poco oyó sus susurros en medio del silencio que reinaba el bosque, acercándose a ella. Julia sentía que no debía moverse, debía esperar a que ellos vinieran, pero el temblor de su cuerpo ya no era por el frío, también por el miedo.
Noto como alguien le tiraba de la manga del pijama, por detrás. Y ante un momento de duda se dio la vuelta despacio, esperando encontrarse algo horrible…
-hola – dijo el niño tímidamente.
Y no era nada horrible, era un niño de unos nueve o diez años cálculo. Tenía el pelo negro y rizado y una carita que en absoluto asustaba. Pero ese aspecto angelical no terminaba por tranquilizar a Julia.
- hola – respondió ella, ¿sabrían que estaban muertos? Pensó.
- ¿quieres jugar?
Julia dirigió la mirada detrás del niño, intentando atisbar a los demás, pero estos se movían inquietos entre los árboles, esperándola. Quizá ellos eran su as en la manga, quizá ellos serian su ayuda, pensó la chica.
-¿a que? – dijo ella inquieta.
-A perseguir luciérnagas…
Al oír esas palabras Julia dio un paso atrás y el murmullo de los árboles aumento, uno a uno los niños fueron saliendo detrás de sus escondites. Desde luego que no parecían estar muertos. Justo en ese instante el alba apareció entre las copas altas de los árboles, irguiéndose con sus tonos grises y aclarando las sombras que impregnaban el bosque, acariciando las caras pálidas de los niños que se acercaban a ella.
¿Cuándo tiempo llevaba en ese bosque? Estaba amaneciendo, no había calculado el tiempo que había pasado en el coche de su padrastro ni tampoco el que había transcurrido con ella en el bosque. Pero los pequeños haces de luz hicieron que ella se tranquilizara, al menos por el momento. Ya no podían perseguir luciérnagas.
-esta amaneciendo – dijo ella, intentando así que los niños cambiaran de juego.
Ellos no dijeron nada, el niño que estaba frente a ella era el único dispuesto a hablarla, los demás se acercaban despacio, mirando y riendo.
-tengo… tengo que volver a mi colegio.
-Nosotros también tenemos que ir – dijo el niño tristemente – pero nos hemos perdido.
-Pero seguro que recordáis como se va, solo que estáis desorientados ¿no? – dijo Julia esperanzada.
-¡Podemos jugar al escondite! – dijo el niño dirigiendo la mirada a sus compañeros, los cuales por los saltos de júbilo parecían estar dispuestos a jugar.
Perfecto, pensó Julia, ahora si que estaba perdida.
-cierra los ojos y cuenta hasta diez – dijo el niño.
No tendría otra opción y aunque pondría parecer mentira tenía miedo a esos crios, había algo en ellos que la estremecía.
Cerró los ojos y contó despacio hasta diez, notaba el viento fresco del invierno en su piel, acariciándola y provocando un suave escalofrío. Tenía que seguir las risas, de esa manera encontraría el camino, algo en ella le decía que debía hacerlo.
Abrió los ojos y se quedo inmóvil, alerta, esperando cualquier sonido, cualquier pista. Empezó a andar despacio, en línea recta, agradeciendo que Pedro la hubiera dejado tranquila, al menos por el momento. Pronto comenzó a escucharles.
-por aquí
-si
-no, hay no
-seguirme
-nos va ha pillar
Risas, oía a los niños corretear y reírse entre ellos, inocentes, creyendo que estaban en la mejor época de su vida, pensando que nada ni nadie podría hacerles daño… y que equivocados que estaban.
Julia empezó a andar más deprisa, siguiendo cada ruido que provenía de esas voces alegres. Poco a poco se interno en una zona boscosa, pero sabia que les seguía de cerca, ellos la estaban marcando el camino, estaba segura.
Caminar era complicado, la zona estaba llena de arbustos y rocas, pero debía seguirles el ritmo, las risas iban por delante de ella. Julia comenzó a mirar detrás de los árboles o de rocas, siguiéndoles el juego a los niños, jugando inocentemente como ellos, esperando así que cuanto antes la llevaran al colegio.
El bosque fue perdiendo densidad a medida que avanzaba, y ella les seguía, sin parar a pensar en todo lo que tenía encima, pero con un poco de suerte esa pesadilla acabaría pronto.
Formaciones de rocas cubiertas con musgo aparecían por el camino que ella iba siguiendo. Levanto la vista, los árboles encorvados con el fuerte viento que estaba comenzando a soplar hicieron que fuera más deprisa, estaba helada de frío. El camino que seguía pronto dio a un pequeño sendero de tierra, ya estaba cerca, ese camino lo había recorrido la última vez que se había internado al bosque.
Los niños seguían riendo y jugando, aunque ella ya no les necesitaba. Ando deprisa todo el trecho que quedaba hasta el Internado, temerosa que en cualquier momento la furgoneta de su padrastro apareciera por el bosque, aunque ella sabía que con la gran herida que le había causado no estaba en condiciones de conducir.
Cruzo los brazos, intentando guarecerse del frío, la bolsa que llevaba consigo no la había soltado en ningún momento, debía averiguar que había escrito en el informe. Empezó a pensar en todo lo que debía hacer, en que debía contarle a Héctor para que la creyera cuando los altos muros y la verja del internado aparecieron ante ella. Y aunque fuera extraño para Julia, se sintió en su hogar, en el único sitio donde podría estar tranquila, y aunque le costara creerlo, donde se sentía a salvo con sus compañeros.
Dio un rápido vistazo a su alrededor, para ver si los niños andaban cerca antes de abrir la verja metálica, pero estos parecían que ya se habían ido.
Abrió el candado lo más deprisa que pudo y cuando cerro la verja tras de si, se encontró al niño al otro lado, mirándola atento con sus pequeños ojos.
Julia le sonrío, dándole así las gracias. Y el niño bajo la mirada, para cuando volvió de nuevo a mirarla a los ojos ya no parecía el mismo niño inocente, carismático y alegre que se encontró en el bosque. Julia retrocedió.
-dile a Samuel que venga a jugar con nosotros.
Continuara…
#1826

14/01/2009 14:56
estan los dos relatos fenomenal bequita, muy bien escritos.
#1827

14/01/2009 16:02
Hola gente!!
Gema y Bequita,ya me leeré las historias ;)
esque ahora no tengo ganas... XD
Gema y Bequita,ya me leeré las historias ;)
esque ahora no tengo ganas... XD
#1828

14/01/2009 16:25
hola diccionary! bueno pues cuando la leas, me dices que te parece! ;)
#1829

14/01/2009 16:46
buenas xd!! ya he terminado los deberes

#1830

14/01/2009 16:46
:OOOO
Bequita por dio,me encanta!!
Mer perece que este es el que mejor has escrito,nose como explicartelo,tiene muchos recursos literarios,descripciones chulisimas...nose me encanta *-*
No pares de segir escribiendo,porque tienes talento para eso :)
Me encanta,los niños riendo y jugando,me lo estava imaginando, y me encantaria que pasase de verdad,seria una escena super bonita....
Bequita por dio,me encanta!!
Mer perece que este es el que mejor has escrito,nose como explicartelo,tiene muchos recursos literarios,descripciones chulisimas...nose me encanta *-*
No pares de segir escribiendo,porque tienes talento para eso :)
Me encanta,los niños riendo y jugando,me lo estava imaginando, y me encantaria que pasase de verdad,seria una escena super bonita....
#1831

14/01/2009 16:53
Hola chic@s que tal!! como llevais la tarde que os contais?
#1832

14/01/2009 16:58
Hola martinboy!!!
p.d:si me contestas...no escribas...hola wapa,porqeu no soy chica,te lo recuerdo por si se te ha olvidado
p.d:si me contestas...no escribas...hola wapa,porqeu no soy chica,te lo recuerdo por si se te ha olvidado

#1833

14/01/2009 16:58
Esta chula la historia bequi!! a mi tambie me ha gustado lo de los niños.
#1834

14/01/2009 17:01
gracias chics!!! la verdad esq esta parte me ha salido sola!
me estoy quedando :O con la imaginacion que tengo xDxD
haber como me sale la siguiente, espero no decepcionaros porque no creo que me salga igual que esta XD
hola Martin!!
me estoy quedando :O con la imaginacion que tengo xDxD
haber como me sale la siguiente, espero no decepcionaros porque no creo que me salga igual que esta XD
hola Martin!!
#1835

14/01/2009 17:01
Tranquilo que no se me ha olvidado que heres wapo no wapa
jeje por que me lo dices?? creo que no me he confundido desde que me lo dijiste la ultima vez no???

#1836

14/01/2009 17:04
puff lo que queda todavia para el internado, mas de un dia!! pensando que iba a ser hoy...y ahora hay que esperar un dia massss!! quiero que sea mañana de una vez.
#1837

14/01/2009 17:14
Te lo he dicho solo para recordartelo XD
estas trabajando?
estas trabajando?
#1838

14/01/2009 17:18
si tio estoy currando y hasta las 10:30 de la noche mira si me queda!! y eso no es lo peor, mañana tengo turno de mañana, osea que salgo de aqui a las 10:30 de la noche, mientras llego a casa y ceno y todo cuando me quiero acostar son las 12:00 y a las 5:25 de la madrugada me tengo que levantar para entrar a currar a las 6:00 hasta las 14:30!!!! a si que esta noche poco voy a dormir, menos mal que el viernes es mi día libre, asi que salgo mañana al medio día y ya hasta el sabado por la tarde otra vez, y el domingo por la mañana asi que tendre que hacer lo mismo que hoy!!!!
Tenemos un jaleo de turno!!! increible
Hola Rebeca!!
Tenemos un jaleo de turno!!! increible
Hola Rebeca!!
#1839

14/01/2009 17:21
Joe....la verdad esque el horario es un poco chungo...
pero lo bueno es que mañana podras ver el internado!! :)
pero lo bueno es que mañana podras ver el internado!! :)
#1840

14/01/2009 17:33
Y aun keda mucho!! a mi se me pasa lentisimo el instituto...para rato hay.