Final regulero para 3 temporadas mediocres

Aviso que voy a soltar la biblia, impresiones definitivas del último capítulo de una serie de 20 años, no es para menos:

BAJA CALIDAD ARGUMENTAL

Teniendo en cuenta el bajón argumental y de dirección de las últimas 3 temporadas, el capítulo, lejos de ser bueno, se deja ver.
Ahora bien, como el final de una serie con una calidad muy superior en el pasado, parece de capitulillo de estudiantes de Técnicas narrativa audiovisual. Y eso peor que decir que ha sido "malo" a secas, es decir que parece que los que lo han escrito y dirigido, no fueran ni profesionales del medio audiovisual.

Una vez más, nos sirven una discusión que no acabo de entender, pues no hay que entenderla, el fin era que diera lugar, no lo que se decía en ella. Y así, poder resolverla, del mismo modo inverosímil hacia el final, y dar ese puntito de entrañabilidad completamente forzada.

MALA DIRECCIÓN

Lo mismo de las conversaciones, que salvo alguna que otra frase buena, resultaban planas. Más con tono de entrevista que de escena de la serie.
Me he emocionado más en otros años de la serie, con situaciones mucho menos trascendentes, que en el discurso final de Herminia o el momento de su propia muerte. Y eso sí que es triste. No "triste" de emotivo, sino de penoso.

Por cierto, las pobres reacciones de los nietos a la noticia de la muerte, sin diálogos, con una musiquita para transicionar el paso... Me han dejado completamente frío.

Mucho plano con el señor y señora del escenario, ganándole tiempo al capítulo, y ya el colmo, Elena Rivera luciéndose frente al micro, que me ha parecido no sólo gratuito, sino directamente inapropiado y hasta de mal gusto.
Una cosa es bailar un paso doble por las últimas voluntades de Herminia, y otra darle foco al pavo de una actriz, que es monísima y canta muy bien, nadie lo discute, pero no era el momento ni aporta nada.

PERSONAJES MAL RESUELTOS

Siento que los ecos de los personajes en general han quedado en reproches dentro y fuera de la pantalla, y que habiendo acabado ya la serie, aún ha quedado pendiente resolverlos:

CARLOS

Por ejemplo, yo no comprendo que Ricardo Gómez no haya participado en TODA la última temporada de la serie que le vio nacer como actor.
Que son sólo 7 episodios, no constaba tanto.

Fruto de ello, tener que recordar en la ficción lo ausente que ha estado, algo inevitable si se fue de la serie y no podían poner al personaje, pero no justificable para no aparecer en el capítulo de la boda de su hermana en esta temporada en la que volvía, y luego estar disponible para su capítulo especial, pasando unos días con la abuela, ignorante de que se fuese a morir ya, lógicamente, por lo que a priori, no era algo más trascendental que acudir a la boda.

INÉS

Luego, tenemos a la "actual" Inés, que me cae tan mal como a la mayoría (e Irene Visedo peor), pero la antigua con Pilar Punzano sí me gustaba, y mucho.
Pero más allá de las extrañas reacciones del actual personaje ante casi todas las situaciones, ya que sacan la mierda pasada de que no le dieron una educación y de que era el patito feo de la familia, se esperaría al menos una resolución emocional hacia esa espinita clavada, porque yo no la vi y no dejaba de ser verdad.

El "eso ocurrió hace mil años, hija" de Mercedes (mi personaje favorito por cierto), no me vale.
El discursito de Herminia que nos venden como momentazo, me parece trasnochado, y dejar a Inés simplemente como una estúpida para luego arreglarlo todo bailando, tampoco me vale.

Sus problemas con Toni ya ni sé cuales eran, pero supongo que de la misma índole de la herencia, trama que me la pela y que no debieron hacer en mi opinión (bastaba con terminar de gestionar a todos los personajes principales y secundarios que directamente se han dejado).

TONI

Toni por su parte, hablando del curro hasta en el entierro de su abuela, me es mucho más cansino. Y a vista general, ya de antes de la mala labor de los nuevos guionistas, su personaje es el que peor me cae y más pereza me da, mucho más de la que vosotros le tenéis a Inés (y veo que es mucha).

No hablemos ya de Antonio y su bodega de los cojones.

PERSONAJES VARIOS

De secundarios ni hablamos, pues si no han podido con los principales, ¿qué se puede esperar?

Valero y su beso gay con Hijodetoni, qué anécdota más marciana, no son capaces de concluir ninguna trama, ni más viejas ni las nuevas que inventan...
Y Paquita ya no tiene hijas, se han evaporado en el aire de Sagrillas.

Los muertos en combate, nada, claro: Pili, Nieves, Arancha, Felipe, Pituca, Françoise, Paco...

CONCLUYENDO

Siento que la serie cierra sin evolución de los personajes, sólo la de Herminia (y un poco discutible para ser sinceros).

Nada que rascar, y con el amargo regusto de fondo de saber todas las supuestas chorradas que aún tienen que pasarle a sus personajes, como Carlos divorciándose y etcétera...

Es un alivio que termine esto ya, para así dejar de sufrir por el declive que en sólo 2 temporadas y 7 capítulos ha sufrido esta serie.

PD. Cuando Carlos aparece en el campo frente a su padre, así sin más, y con la reacción tan tibia de ambos personajes, pensaba que se trataba de un sueño de Antonio y que a Carlos aún se le tendría que complicar la llegada. Muy mal narrado todo y sin emoción.