Foro Bandolera
HISTORIA PARALELA de SarayMiguel/Fandemi
#0
01/05/2011 21:21
Por petición, de que os liáis he copiado la historia aquí. Espero de que os guste.
1. Medio pueblo ha pasado por la habitación de Sara y ahora le toca al Chato.
Chato abrió lo ojos y vio que estaba acostado en la cama de Sara ella no se encontraba allí y lo único que el recordaba era que el Galeno le había extraído la bala que el civil le había disparado en el estómago.
Después de acomodarlo sobre la cama Sara y Marcial se habían ido de allí dejándolo a el solo durmiendo.
Sentía un dolor punzante en la herida la cual la tenia liada con vendas y cosida, no podía levantarse ya que ese dolor se acentuaba cada vez que el se movía. Se había despertado por culpa de esos pinchazos y maldecía por no tener una botella cerca para aliviar el dolor.
Se sentía en deuda con ambos por su ayuda.
-Cuanto tardara la señoritinga en regresar- pensó para él. No podía chillar aunque lo estaba deseando ya que sino lo descubrirían.
De pronto oyó pasos que se acercaban hacia la habitación y se mantuvo callado y poniendo la oreja era Sara pero venia acompañada de alguien, ambos se pararon en el umbral de la puerta.
Miguel había ido a buscar a Sara a la imprenta y ambos habían dado un paseo y habían comido en la taberna.
-Miguel gracias por acompañarme no tenias que haberte molestado.
Miguel cogió las manos de Sara y las besó. Sara respondió al gesto con una sonrisa radiante.
-Sabes que no es ninguna molestia, me encanta acompañarte.
Mientras ellos hablaban el Chato estaba pendiente notó como gotas de sudor le caían por la frente no sabia si eso se debía a que la herida le había producido fiebre o por saber que el teniente de la guardia civil estaba al otro lado de la puerta y si lo descubría estando convaleciente no podría ni enfrentarse a el ni huir.
-Miguel creó que deberías irte ya es tarde.
-Tan pocas ganas tienes de verme. Dijo en tono irónico.
-No es eso y lo sabes es porque no quiero que tengas problemas con Olmedo.
-No te preocupes hasta dentro de dos horas no tengo que volver al cuartel. Tenemos tiempo.
Miguel la agarró por la cintura y la besó. Sara derritiéndose y dejándose besar, busco en su bolsillo la llave para que pudieran entrar a su dormitorio pero al rozar con los dedos la llave volvió a la realidad no podía dejarlo entrar y no saco la llave del bolsillo.
Miguel acercó sus labios al oído de Sara y con un susurró le preguntó a Sara.
-¿Entramos?
Al notar sus labios cerca se erizó pero no podía.
Así que le cogió la cara con las manos para mirarlo a los ojos y que el no la atontara con sus besos pero le costó concentrarse ya que lo miraba a los ojos, esos ojos azules y tiernos que tanto le gustaban.
-Miguel estoy un poco cansada y mareada parece que la comida no me a sentado bien y tengo nauseas.
Estaba cansada pero lo otro no era del todo verdad pero no le quedaba mas remedio si quería alejarlo de su cuarto.
Miguel al oírla, se separó un poco.
-¿Necesitas algo?
Preguntó preocupado.
-Solo descansar y dormir un par de horas.
-Luego cuando terminé vengo haber como te encuentras por si necesitas algo más.
-Esta bien, gracias.
-Te quiero, cuídate.
Miguel besó la frente de Sara y se marchó mientras esta sacaba la llave y entraba en la habitación.
2. Se queda con la banda.
Sara entró en la habitación y al oír que entraba el Chato se hizo el dormido.
Esta intentó no hacer ruido, se sentó en la silla saco su diario del escritorio y empezó a escribir.
El Chato pensó que era mejor que Sara no se enterara que había escuchado su conversación pero no se podía aguantar más la herida le ardía y tenía que pedirle algo para beber.
Frunciendo el entrecejo el Chato le dijo.
-No sabía que tu relación con el teniente era tan estrecha.
Sara no se sobresalto, guardo el diario en el cajón y giro la silla para sentarse mirando en dirección a la cama.
-Y yo no sabia que eras como una vieja cotilla que escucha detrás de las puertas.
-Y no lo soy solo que no puedes…
Sara lo calló de golpe.
-No me digas lo que tengo que hacer Chato lo se muy bien.
En vez de responder de mala manera y ponerse tensó se relajó entre los cojines nunca había dormido en algo tan cómodo.
Sara se dio cuenta que había sido un poco brusca pero estaba harta que los bandoleros le dijeran lo mismo ella amaba a Miguel y tenía la situación controlada así que no quería que nadie más se lo echara en cara.
-¿Como te encuentras?
Preguntó con tono amable.
-Estoy de cojones con una herida en el estómago pero de cojones.
Sonrió el Chato.
-No mientas Chato, Galeno dijo que te dolería es lo normal.
-No tienes alguna botellita para pasar el mal trago.
-Botella no, pero el Galeno dejó algo para ti.
Sara se levantó cogió un vaso lo lleno de agua y de un bote pequeño que tenia en el cajón saco una pastilla.
-Tomate esto para la fiebre y el dolor.
Al verlo el Chato puso cara de asco.
-Joder, yo prefería una botella.
-Chato esto es mejor y tómatelo.
-¡Si jefa!
Dijo con retintín.
-Gracias, por impedir que el teniente entrara.
-No me lo tienes que agradecer, Miguel y la banda son dos cosas diferentes.
-Ya veo que tenías razón y todo esta controlado. Y nunca más te voy a repetir que no puedes que estar con el.
-¿Nunca más?
-Si es que me gustaría seguir a tu disposición y quedarme en la banda, estoy en deuda contigo y con Galeno.
Sara sonrió al ver que el Chato se estaba dando cuenta que no podía hacer las cosas sin contar con la opinión de otros y guiarse solo por arrebatos.
-Claro que puedes quedarte, pero por favor no te guies por más arrebatos.
-Lo que tú digas jefa y tranquila que mañana a primera hora me iré a la cueva y no saldré a ningún robo si tu no estas al frente del grupo.
Y con una sonrisa pícara el Chato cerró los ojos y se durmió ya que le estaba haciendo efectos los calmantes. Mientras Sara se arregló para ir a la imprenta, salió y cerró la puerta con llave.
1. Medio pueblo ha pasado por la habitación de Sara y ahora le toca al Chato.
Chato abrió lo ojos y vio que estaba acostado en la cama de Sara ella no se encontraba allí y lo único que el recordaba era que el Galeno le había extraído la bala que el civil le había disparado en el estómago.
Después de acomodarlo sobre la cama Sara y Marcial se habían ido de allí dejándolo a el solo durmiendo.
Sentía un dolor punzante en la herida la cual la tenia liada con vendas y cosida, no podía levantarse ya que ese dolor se acentuaba cada vez que el se movía. Se había despertado por culpa de esos pinchazos y maldecía por no tener una botella cerca para aliviar el dolor.
Se sentía en deuda con ambos por su ayuda.
-Cuanto tardara la señoritinga en regresar- pensó para él. No podía chillar aunque lo estaba deseando ya que sino lo descubrirían.
De pronto oyó pasos que se acercaban hacia la habitación y se mantuvo callado y poniendo la oreja era Sara pero venia acompañada de alguien, ambos se pararon en el umbral de la puerta.
Miguel había ido a buscar a Sara a la imprenta y ambos habían dado un paseo y habían comido en la taberna.
-Miguel gracias por acompañarme no tenias que haberte molestado.
Miguel cogió las manos de Sara y las besó. Sara respondió al gesto con una sonrisa radiante.
-Sabes que no es ninguna molestia, me encanta acompañarte.
Mientras ellos hablaban el Chato estaba pendiente notó como gotas de sudor le caían por la frente no sabia si eso se debía a que la herida le había producido fiebre o por saber que el teniente de la guardia civil estaba al otro lado de la puerta y si lo descubría estando convaleciente no podría ni enfrentarse a el ni huir.
-Miguel creó que deberías irte ya es tarde.
-Tan pocas ganas tienes de verme. Dijo en tono irónico.
-No es eso y lo sabes es porque no quiero que tengas problemas con Olmedo.
-No te preocupes hasta dentro de dos horas no tengo que volver al cuartel. Tenemos tiempo.
Miguel la agarró por la cintura y la besó. Sara derritiéndose y dejándose besar, busco en su bolsillo la llave para que pudieran entrar a su dormitorio pero al rozar con los dedos la llave volvió a la realidad no podía dejarlo entrar y no saco la llave del bolsillo.
Miguel acercó sus labios al oído de Sara y con un susurró le preguntó a Sara.
-¿Entramos?
Al notar sus labios cerca se erizó pero no podía.
Así que le cogió la cara con las manos para mirarlo a los ojos y que el no la atontara con sus besos pero le costó concentrarse ya que lo miraba a los ojos, esos ojos azules y tiernos que tanto le gustaban.
-Miguel estoy un poco cansada y mareada parece que la comida no me a sentado bien y tengo nauseas.
Estaba cansada pero lo otro no era del todo verdad pero no le quedaba mas remedio si quería alejarlo de su cuarto.
Miguel al oírla, se separó un poco.
-¿Necesitas algo?
Preguntó preocupado.
-Solo descansar y dormir un par de horas.
-Luego cuando terminé vengo haber como te encuentras por si necesitas algo más.
-Esta bien, gracias.
-Te quiero, cuídate.
Miguel besó la frente de Sara y se marchó mientras esta sacaba la llave y entraba en la habitación.
2. Se queda con la banda.
Sara entró en la habitación y al oír que entraba el Chato se hizo el dormido.
Esta intentó no hacer ruido, se sentó en la silla saco su diario del escritorio y empezó a escribir.
El Chato pensó que era mejor que Sara no se enterara que había escuchado su conversación pero no se podía aguantar más la herida le ardía y tenía que pedirle algo para beber.
Frunciendo el entrecejo el Chato le dijo.
-No sabía que tu relación con el teniente era tan estrecha.
Sara no se sobresalto, guardo el diario en el cajón y giro la silla para sentarse mirando en dirección a la cama.
-Y yo no sabia que eras como una vieja cotilla que escucha detrás de las puertas.
-Y no lo soy solo que no puedes…
Sara lo calló de golpe.
-No me digas lo que tengo que hacer Chato lo se muy bien.
En vez de responder de mala manera y ponerse tensó se relajó entre los cojines nunca había dormido en algo tan cómodo.
Sara se dio cuenta que había sido un poco brusca pero estaba harta que los bandoleros le dijeran lo mismo ella amaba a Miguel y tenía la situación controlada así que no quería que nadie más se lo echara en cara.
-¿Como te encuentras?
Preguntó con tono amable.
-Estoy de cojones con una herida en el estómago pero de cojones.
Sonrió el Chato.
-No mientas Chato, Galeno dijo que te dolería es lo normal.
-No tienes alguna botellita para pasar el mal trago.
-Botella no, pero el Galeno dejó algo para ti.
Sara se levantó cogió un vaso lo lleno de agua y de un bote pequeño que tenia en el cajón saco una pastilla.
-Tomate esto para la fiebre y el dolor.
Al verlo el Chato puso cara de asco.
-Joder, yo prefería una botella.
-Chato esto es mejor y tómatelo.
-¡Si jefa!
Dijo con retintín.
-Gracias, por impedir que el teniente entrara.
-No me lo tienes que agradecer, Miguel y la banda son dos cosas diferentes.
-Ya veo que tenías razón y todo esta controlado. Y nunca más te voy a repetir que no puedes que estar con el.
-¿Nunca más?
-Si es que me gustaría seguir a tu disposición y quedarme en la banda, estoy en deuda contigo y con Galeno.
Sara sonrió al ver que el Chato se estaba dando cuenta que no podía hacer las cosas sin contar con la opinión de otros y guiarse solo por arrebatos.
-Claro que puedes quedarte, pero por favor no te guies por más arrebatos.
-Lo que tú digas jefa y tranquila que mañana a primera hora me iré a la cueva y no saldré a ningún robo si tu no estas al frente del grupo.
Y con una sonrisa pícara el Chato cerró los ojos y se durmió ya que le estaba haciendo efectos los calmantes. Mientras Sara se arregló para ir a la imprenta, salió y cerró la puerta con llave.
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#141
11/05/2011 00:09
hay si !!!!!!!! como será¿¿¿ yo creo que la descubre no es asin..???
#142
11/05/2011 00:42
Muy bonito el relato, Fandemi. Que nervios. el golpe con Miguel de jefe de la escolta, espero que no pase nada.
Muchas gracias por tu esfuerzo.
Muchas gracias por tu esfuerzo.
#143
11/05/2011 15:01
tengo buenas noticias para las q os interesa la historia, llevo bien lo que tenia que estudiar( llevo todo el santo dia estudiando y esta tarde tambien voy a estudiar)asiq esta noche lo mas posible es q pueda escribir otro trozo
gracias
gracias
#144
11/05/2011 15:09
Gracias fandemi...y tu estudia..que lo primero es lo primero...y estudiar es muy importante...
Un ciberbeso......MUUUACK
Un ciberbeso......MUUUACK
#145
11/05/2011 21:17
chicas acabo de llegar he estado todo el santo dia estudiando y para colmo he notado el terremoto todavia tengo el susto todo el mundo en murcia capital no habla de otro tema asiq voy a tranquilizarme y dentro de un rato os pongo un trozo haber si escribiendo me relajo un ratito del dia tan feo q llevo
#146
11/05/2011 21:33
fandemi tu haz lo que tengas que hacer...espero que estés bien
#147
11/05/2011 21:50
espero que estes bien tu tambien , rezo para que no suceda nada más , un beso te quiero.
#148
11/05/2011 21:54
muxas gracias xicas a mi y a mi familia gracias a dios no nos ha pasado nada pero me siento mal por la gente que lo ha sufrido yo cuando lo he sentido no sabia que ese terremoto causaria tantos muertos y problemas
ya estoy escribiendo cuando termine la pongo me ayuda escribir porq me relaja
ya estoy escribiendo cuando termine la pongo me ayuda escribir porq me relaja
#149
11/05/2011 21:56
me alegro por ti y tu familia , ahora mismo no pienso en otra cosa que en vosotras , espero que aqui no llege... solo me faltaria eso para mi salud... un besazo de nuevo.
#150
11/05/2011 22:26
aqui otro trocito seguramente luego escribo otro besoss y gracias por la preocupacion
25.
Eran las 6 de la tarde Miguel ya se había ido ya que tenia que ir a recibir el carro con los guardias que lo acompañaban.
Sara se estaba preparando nada podía salir mal en su ultimo atraco.
Sabía que pasarían sobre las 8 en el punto donde habían decidido atacar pero antes debía asegurarse de que todo le había quedado claro a los bandoleros.
Mientras terminaba de ponerse la ropa de bandolero llamaron a la puerta a Sara se le hizo un nudo en el estómago pensando si era Miguel que había vuelto por algún problema pero al oír la voz de la persona que aguardaba la puerta se tranquilizo por completo.
-Sara soy Susana puedo pasar.
-Claro pasa.
Al entrar en el cuarto Susana no pudo evitar asustarse ya que aunque sabia que Sara era bandolera nunca la había visto vestida como tal.
-¿Sara ya te vas?
-Si necesito preparar unas cosas antes del atraco.
Susana extendió los brazos entregándole a Sara tela doblada. Sara la cogio y la desplegó vio que era una capa oscura y larga.
-Te ayudara a ocultar el embarazo la he cosido estos días, desde que me entere de lo que ibas a hacer.
-Muchas gracias, es todo un detalle.
-No ha sido nada.
Sara se la aprobó le estaba perfecta y la cubría entera.
-Necesito pedirte un favor, Susana.
-Dime.
Susana se sentó al lado de Sara.
-Necesito que estés preparada para cuando vuelva, no me va a dar tiempo a cambiarme en la cueva y no me quiero arriesgar necesito que todo este listo y la puerta preparada, por favor todo tiene que estar preparado.
-Y lo estará. Mucha suerte.
-Gracias.
Ambas se abrazaron y Sara se marchó a la cueva, eran las siete cuarenta y cinco y Sara ya había aclarado todas las dudas y se disponían a ir al encuentro.
-Y recodar no quiero nada de sangre, un golpe limpio y a mi marido no le toquéis ni un pelo.
Rió Sara.
-Tranquila jefa será como digas.
Afirmó Juan.
-No lo digo enserió con el todo será más difícil.
Sara se encontraba muy nerviosa y sabia que la banda también lo estaba y eso no era bueno.
25.
Eran las 6 de la tarde Miguel ya se había ido ya que tenia que ir a recibir el carro con los guardias que lo acompañaban.
Sara se estaba preparando nada podía salir mal en su ultimo atraco.
Sabía que pasarían sobre las 8 en el punto donde habían decidido atacar pero antes debía asegurarse de que todo le había quedado claro a los bandoleros.
Mientras terminaba de ponerse la ropa de bandolero llamaron a la puerta a Sara se le hizo un nudo en el estómago pensando si era Miguel que había vuelto por algún problema pero al oír la voz de la persona que aguardaba la puerta se tranquilizo por completo.
-Sara soy Susana puedo pasar.
-Claro pasa.
Al entrar en el cuarto Susana no pudo evitar asustarse ya que aunque sabia que Sara era bandolera nunca la había visto vestida como tal.
-¿Sara ya te vas?
-Si necesito preparar unas cosas antes del atraco.
Susana extendió los brazos entregándole a Sara tela doblada. Sara la cogio y la desplegó vio que era una capa oscura y larga.
-Te ayudara a ocultar el embarazo la he cosido estos días, desde que me entere de lo que ibas a hacer.
-Muchas gracias, es todo un detalle.
-No ha sido nada.
Sara se la aprobó le estaba perfecta y la cubría entera.
-Necesito pedirte un favor, Susana.
-Dime.
Susana se sentó al lado de Sara.
-Necesito que estés preparada para cuando vuelva, no me va a dar tiempo a cambiarme en la cueva y no me quiero arriesgar necesito que todo este listo y la puerta preparada, por favor todo tiene que estar preparado.
-Y lo estará. Mucha suerte.
-Gracias.
Ambas se abrazaron y Sara se marchó a la cueva, eran las siete cuarenta y cinco y Sara ya había aclarado todas las dudas y se disponían a ir al encuentro.
-Y recodar no quiero nada de sangre, un golpe limpio y a mi marido no le toquéis ni un pelo.
Rió Sara.
-Tranquila jefa será como digas.
Afirmó Juan.
-No lo digo enserió con el todo será más difícil.
Sara se encontraba muy nerviosa y sabia que la banda también lo estaba y eso no era bueno.
#151
11/05/2011 22:30
cuando dice mi marido me suena raro raro ,pero me encanta
¿que pasara ahora.....................?
¿que pasara ahora.....................?
#152
11/05/2011 22:31
a mi tambien me suena raro , sigue si te tranquiliza.
#153
11/05/2011 22:34
xicas hasta mi me resulta raro escribirlo pero me encanta ponerlo ya que no es raro, es su marido y todos lo saben
#154
11/05/2011 22:34
fandemi animo cariño todas estamos muy preocupadas ha sido un desastre tu escribe si eso te pone mas tranquila y saves que a nosotras nos encanta un besazo muy fuerte
#155
11/05/2011 22:59
jejejejeje, nos lo dejas en lo mejor pillina....
#156
11/05/2011 23:20
Fandemi , me alegro de q. estés bien un beso.
#157
11/05/2011 23:27
Espero que os guste espero los comentarios y si mañana me organizo bien podre escribir otro trocito por la noche.
26.
Llegaron hasta donde tenían que hacer el atraco estaba al lado del río. Todo estaba listo y la diligencia se divisaba a lo lejos. Miguel venia al frente a caballo detrás de el iban dos carros seguidos con dos guardias civiles sentados cada uno junto a los que dirigían el carro y para terminar la escolta otro guardia iba detrás de estas también a caballo.
El Chato salió de los matorrales deteniendo la diligencia y detrás de el aparecieron Rafalin y Juan. Sara estaba oculta en una roca con el Winchester cargado.
-Señores se les a acabado el paseo, tiren los trabucos y pónganse aquí todos.
-¡Pero ya mismo!
Añadió Juan, a los guardias no les quedo más remedio que obedecer.
Todos se juntaron vigilados por el Chato mientras Juan y Rafalin tiraban el cargamento al río.
Sara observaba nerviosa la escena, le temblaba todo el cuerpo.
Uno de los guardias intentó moverse lo que hizo que el Chato le apuntara Miguel se puso delante de su compañero.
-Os estáis quietecitos u os vuelo los sesos.
Rafalin y Juan estaban terminando de tirar la carga.
Sara sentía que se moría, cada vez que miraba al Chato mover el trabuco sentía ganas de gritar.
Los bandoleros ya se iban a retirar era el momento de Sara y pegó un disparo al aire lo que hizo que los guardias miraran al bandolero misterioso.
Miguel al verlo sintió algo inexplicable, era la primera vez que el bandolero misterioso no se acercaba a los guardias.
El Chato al ver la señal les advirtió.
-No intenten hacernos nada mientras nos vamos o nuestro compañero les pegara un tiro.
Los bandoleros se marcharon se marchado sin percances y Miguel vio que el bandolero también se marchaba, no lo dudo más veces y fue tras el pero al llegar hasta donde estaba este ya había montado en su caballo y se alejaba de allí. Miguel volvió con sus compañeros y fueron hacia el cuartel.
Miguel se sentía raro porque no defendía a los bandoleros pero sabia que habían hecho algo maravilloso por los jornaleros, habían hecho justicia no a la manera que a el le habría gustado.
Los bandoleros y Sara se fueron a celebrar el buen golpe dado Sara no quería quedarse mucho tiempo pero como sabia que Miguel tendría que dar una explicación a Olmedo y hacer el inventario de todo para Alvarito.
Así que accedió a quedarse un ratito, todos bebían menos ella, se sentó en un rincón y veía al resto disfrutar.
Vio que se le hacia ya tarde se despidió y volvió a casa allí la esperaba Susana con la puerta del salón abierta para que entrara y al verse se abrazaron.
-¿Como estas? ¿Y la banda?
-Todo ha sido un éxito ya se ha acabado todo.
Sara sonreía feliz.
-Voy a por tu ropa ve a tu cuarto y enseguida te la subo.
Sara estaba en su cuarto estaba feliz ya todo había acabado, ninguna mentira más para su familia. Se quito la capa, el sombrero el pañuelo, estaba agotada.
Llamaron a la puerta.
-Si pasa.
Oyó la puerta abrirse pero no contestaron Sara se dio la vuelta.
-Ya tienes mi ropa.
Sara se quedo helada Miguel acababa de llegar y la miraba con la boca abierta la acababa de descubrir.
gracias por leerlo y por supuesto por vuestra preocupación
26.
Llegaron hasta donde tenían que hacer el atraco estaba al lado del río. Todo estaba listo y la diligencia se divisaba a lo lejos. Miguel venia al frente a caballo detrás de el iban dos carros seguidos con dos guardias civiles sentados cada uno junto a los que dirigían el carro y para terminar la escolta otro guardia iba detrás de estas también a caballo.
El Chato salió de los matorrales deteniendo la diligencia y detrás de el aparecieron Rafalin y Juan. Sara estaba oculta en una roca con el Winchester cargado.
-Señores se les a acabado el paseo, tiren los trabucos y pónganse aquí todos.
-¡Pero ya mismo!
Añadió Juan, a los guardias no les quedo más remedio que obedecer.
Todos se juntaron vigilados por el Chato mientras Juan y Rafalin tiraban el cargamento al río.
Sara observaba nerviosa la escena, le temblaba todo el cuerpo.
Uno de los guardias intentó moverse lo que hizo que el Chato le apuntara Miguel se puso delante de su compañero.
-Os estáis quietecitos u os vuelo los sesos.
Rafalin y Juan estaban terminando de tirar la carga.
Sara sentía que se moría, cada vez que miraba al Chato mover el trabuco sentía ganas de gritar.
Los bandoleros ya se iban a retirar era el momento de Sara y pegó un disparo al aire lo que hizo que los guardias miraran al bandolero misterioso.
Miguel al verlo sintió algo inexplicable, era la primera vez que el bandolero misterioso no se acercaba a los guardias.
El Chato al ver la señal les advirtió.
-No intenten hacernos nada mientras nos vamos o nuestro compañero les pegara un tiro.
Los bandoleros se marcharon se marchado sin percances y Miguel vio que el bandolero también se marchaba, no lo dudo más veces y fue tras el pero al llegar hasta donde estaba este ya había montado en su caballo y se alejaba de allí. Miguel volvió con sus compañeros y fueron hacia el cuartel.
Miguel se sentía raro porque no defendía a los bandoleros pero sabia que habían hecho algo maravilloso por los jornaleros, habían hecho justicia no a la manera que a el le habría gustado.
Los bandoleros y Sara se fueron a celebrar el buen golpe dado Sara no quería quedarse mucho tiempo pero como sabia que Miguel tendría que dar una explicación a Olmedo y hacer el inventario de todo para Alvarito.
Así que accedió a quedarse un ratito, todos bebían menos ella, se sentó en un rincón y veía al resto disfrutar.
Vio que se le hacia ya tarde se despidió y volvió a casa allí la esperaba Susana con la puerta del salón abierta para que entrara y al verse se abrazaron.
-¿Como estas? ¿Y la banda?
-Todo ha sido un éxito ya se ha acabado todo.
Sara sonreía feliz.
-Voy a por tu ropa ve a tu cuarto y enseguida te la subo.
Sara estaba en su cuarto estaba feliz ya todo había acabado, ninguna mentira más para su familia. Se quito la capa, el sombrero el pañuelo, estaba agotada.
Llamaron a la puerta.
-Si pasa.
Oyó la puerta abrirse pero no contestaron Sara se dio la vuelta.
-Ya tienes mi ropa.
Sara se quedo helada Miguel acababa de llegar y la miraba con la boca abierta la acababa de descubrir.
gracias por leerlo y por supuesto por vuestra preocupación
#158
11/05/2011 23:31
alaaaaaaaaaaaa pelea
gracias fandemi
gracias fandemi
#159
11/05/2011 23:36
la verdad es que si ahora toca pelea
#160
11/05/2011 23:37
Hay miguelin la tienes q. descubrir precisamente en el último golpe. Espero impaciente la continuación.