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El ciudadano paga por los errores de gobiernos, banca y empresa

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JPC_59es
JPC_59es
02/04/2011 13:36
Sube la gasolina, el gas natural, la electricidad, el Euribor… ahora se pretende que los sueldos vayan en consonancia con el beneficio de la empresa; osea, el trabajador tiene dos opciones, o se le reduce el sueldo, o le mandan a paseo. “Dicen que es una medida importada de Alemania”. Pero, digo yo; ¿Cómo puede el obrero estar seguro de que la empresa no maquilla los beneficios para justificar sueldos precarios, o la reducción de salarios? Además, con esta política, el empleo y los salarios van a depender de la buena o de la nefasta gestión de la empresa. Si el negocio va mal, reducen la plantilla o el sueldo del obrero, Y si la empresa al cabo del año diera súper habit, ¿esto supondría una subida de sueldo? Desde luego que no.
Miren cuan semejantes son las consecuencias de una gestión nefasta de una empresa, de la banca, o del gobierno, Cuando un gobierno pasa por situaciones precarias, ¿a quién le piden sacrificios? Al ciudadano. Cuando una empresa no puede o no sabe cómo desarrollar una gestión que genere beneficios, y la empresa se ve en dificultades, la decisión es el despido o la reducción de sueldo. La banca, nos castiga subiendo los intereses o a través del Euribor. “siempre pagan los que menos culpa tienen”.
Durante muchos años se ha producido un desorbitado desarrollo del sector inmobiliario; urbanizaciones por todas partes, hasta en la costas, una oferta muy por encima de las posibilidades del ciudadano. A parte de la proliferación de los chanchullos entre constructores y ayuntamientos, los bancos debieron de ver un negocio suculento y se lanzaron a ofrecer préstamos… “ a la carta”, contando solo con la buena voluntad y disposición de los clientes. Pero… Compramos un piso, con el tiempo no lo podemos pagar y tenemos que devolverlo, abonar los intereses y seguir pagando por culpa de un préstamo muy superior al valor del inmueble, ¿es así? El banco a la hora de conceder un préstamo se fija en la nómina del cliente. Pero a lo mejor no se molesta en solicitar una tasación del precio real del inmueble y ajustar el préstamo al precio real del mismo. De esta manera es evidente que al devolver el piso, el banco recuperó el valor prestado, más el interés satisfecho hasta su devolución.
Es mi opinión pues, que el origen de la crisis mundial es debida a la ineficacia de gobiernos, la banca y la empresa. O bien por ineficacia, por desconocimiento o por afanes de ambiciosos.
“Los ciudadanos no podemos pasarnos la vida pagando por los errores, ineptitudes o fraudes millonarios de una recua de encorvatados. Ni tampoco se puede utilizar la palabra “crisis” para justificar despidos, o bajadas de sueldos, “En todo caso había que despedir a los directivos y administradores que no han sabido realizar su tarea con eficacia”
Solo con controlar y recuperar los botines de los fraudes, las estafas, las economías sumergidas, los sueldos desorbitados… Recuperar fortunas en paraísos fiscales…. Con todo esto se beneficiaría las arcas del estado, sin castigar tanto al ciudadano, como si se tratasen de mulos de carga o comodines para usar a convenientemente en situaciones precarias. A Bruselas le interesa que se cuadren los números, pone metas, no le importa cómo o a qué precio. Pero todos los países no partimos en igualdad de condiciones cuando entramos en el Mercado Común. No podemos imitar a Alemania, Sr Zapatero como iguales, porque ni el empleo ni los sueldos ni los precios son semejantes.

Y a parte de los fraudes, estafas y economías sumergidas, no quiero despedirme sin pedir por enésima vez la creación de una oficina de control de precios al consumo; El gobierno no debe permitir que el sacrificado marinero, ganadero o campesino perciba una miseria por el fruto de su trabajo, y esta mercancía llegue a los mercados a precios de oro. Se trataría de realizar un seguimiento econónomico de la mercancía desde su origen hasta el mercado para evaluar su coste real y nadie pise el sacrificio del trabajador, ni abuse de la economía de los consumidores